⌜Hyunjin⌟

—¡Hijo! ¿Cómo te fue hoy en la universidad? — me preguntó mi madre tras darme un cálido abrazo que me hizo sentir relajado.

—Bastante bien. Madre, me gustaría hablar contigo sobre un tema que considero de suma importancia— dije con tono serio.

—¿Embarazaste a una chica?

—¿Seré abuelo siendo tan joven? — preguntó mi padre tan pronto entró a la sala de estar.

—¿Qué? ¡No!

—¿Entonces...?

—Mamá y papá, me gusta alguien y estoy tratando de enamorarlo.

—¿Estás enamorado de un chico? — me preguntó mi madre.

—Sí...

—Eso quiere decir que no seré abuelo, ¿cierto?

—¡Obviamente no, cariño! — se rio mi madre. —Hijo, ¿cuándo vas a traerlo a casa? ¡Queremos conocerlo!

—¿No están molestos con...?

—¿Por qué nos molestaríamos? — me interrumpió mi padre —Nosotros vamos a respetar tus decisiones, preferencias y todo lo que quieras hacer, siempre y cuando, no sea algo que pueda atentar contra tu vida. Pero ¿qué hay con el chico? ¿Está dispuesto a aceptarte y darle frente a todos los que podrían estar en contra con su relación?

—A él no le importa lo que otras personas digan sobre sí mismo, pero si le importa lo que opinen y digan acerca de mí.

—¡Que lindo! — exclamó mi madre —Él te quiere proteger, ¿no es todo un caballero?

—Sí, lo es.

Espero que Minho pueda llevarse bien con mi familia porque de esa manera, no tendrá que recurrir a lastimarse y lastimar a otros con el objetivo de atraer la atención de su familia que no lo valora y que tampoco lo ama lo suficiente.

—Esperáramos que puedas traerlo pronto— dijo mi padre.

—Lo invitaré a cenar este fin de semana.

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Según Felix, Minho no ha tenido ninguna novia durante todo el tiempo que ha estado en la universidad y eso me parece extraño pues creía que tendría un historial con el nombre de muchas chicas ya que siempre se muestra como todo un casanova. Una parte de mí se siente bastante feliz al respecto a causa de que he sido el único que lo ha visto sonrojado y gimiendo por placer.

—Eso ha sido todo por hoy— dijo el profesor —No olviden que este viernes tendremos una prueba de suma importancia.

Me siento muy cansado, pero no tanto como para ir en busca de Lee Minho.

Salí del aula y caminé directamente hasta el edificio de arquitectura en busca de cierto chico hermoso que me ha dejado completamente cegado.

Detuve mis pasos abruptamente cuando me encontré con una terrible escena que me hizo sentir molestia pues una chica está coqueteando deliberadamente con mi chico y no puedo permitir eso.

Tras pensarlo bien, retomé mis pasos hacia Minho y no dudé en posar mi brazo sobre sus hombros, lo que hizo que saltara a causa del susto porque no esperaba mi presencia en lo absoluto.

—¿Qué haces, cariño? — le pregunté con tono meloso tras darle un beso mejilla y esto ocasionó que Minho se quedara tieso durante unos instantes.

—Yo... Nosotros... Él...— la chica murmuró.

—Estábamos hablando sobre un proyecto, ¿cierto?

—Sí, ¡eso es correcto!

—Ya te puedes ir. Hablemos luego.

—Bien— murmuró cabizbaja antes de emprender sus pasos hacia el otro lado del pasillo.

Minho se giró hacia a mí. —¿Tanto te gusta tener las miradas sobre ti?

—Pero solo me importa la tuya— le aseguré. —Cariño, esa chica estaba coqueteando contigo, ¿cierto?

—Para nada.

Es bastante evidente que estoy en lo correcto, pero mi querido Minho no dará su brazo a torcer tan fácilmente. Desde ahora, tengo que dejar muy claro que nosotros vamos en serio, de lo contrario, una tercera persona podría arruinar nuestro progreso que mucho trabajo me ha costado.