⌜Hyunjin⌟

Me siento en las nubes ahora mismo y es a causa de que el hermoso rostro de Minho se encuentra completamente sonrojado, pero él insiste en que no le genera ni un poco de sentimientos positivos el regalo que le he dado. Me encanta que sea un chico difícil de conquistar porque no eso me hace esforzarme más para tenerlo a mi lado.

Sin poder evitarlo, estiré mi mano hasta él y apretujé un poco su mejilla izquierda; esto provocó que Minho diera unos cuantos pasos atrás, alejándose por completo de mi tacto.

—¿No te gusta...?

—Nos pueden ver— murmuró. Al menos, no está en desacuerdo con mis caricias.

—¿Te importa lo que otros piensen?

—Eres el príncipe de la universidad, ¿a ti no te importa lo que otros piensen sobre ti?

—No...

—Hwang Hyunjin, te estás enredando con la escoria de la universidad— dijo con tono serio —Somos dos polos completamente opuestos. De hecho, nosotros siempre discutíamos porque nunca ha habido un acuerdo mutuo, ¿ya lo olvidaste también?

—Nunca te odié y mucho menos te considero como una escoria— le aseguré —Y no me importa lo que otros piensen sobre mí. Esas personas tienen ideales en su cabeza, pero eso no significa que debo seguirlos mientras hago un lado lo que en verdad deseo.

—Te puedo asegurar que te arrepentirás...

—Me arrepentiría si no me ganara la oportunidad de enamorarte— dije con tono serio.

Minho rodó los ojos. Seguramente para fingir que odia mis palabras, pero en verdad le agradan, sin embargo, nunca ha sido parte de un núcleo familiar que le haya mostrado lo que es el amor. Yo me encargaré de hacerlo sentir amado, justo como se lo merece.

—Tengo que irme a clases— dijo en un intento de huir.

—Hyung, ¿puedo llevarte a casa después de clases?

—Como sea— murmuró mientras emprendía su camino lejos de mí.

—¡Te queda de maravilla el enamoramiento, Jinnie! — se burló Jeongin tan pronto apareció en mi campo de visión, mostrando una radiante sonrisa.

Hoy por la mañana hablé con ellos sobre lo que dijeron en la fiesta y me quedó muy claro que la apuesta me ayudó a abrir los ojos ante la realidad. Sí, siempre he sentido atracción por Lee Minho, pero la justificaba diciendo que no era nada más que odio.

No pude molestarme con ellos porque no me hicieron daño y tampoco a Minho, sino que, sucedió lo contrario.

—¿Crees que me vaya a aceptar? — no pude evitar preguntarle.

—¡Por supuesto! ¿No viste como se sonrojó por completo? ¡Ya casi lo tienes todito! 

—De casualidad, ¿sabes cuántas novias ha tenido?

Jeongin frunció el ceño al escuchar mi pregunta.

—¿Por qué debería saber eso? Es su vida privada...

—Por dios, ¿tienes el descaro de decir eso después de obligarlo a disfrazarse de mujer solo para asegurarte de que estabas en lo correcto?

—Amigo, ¿no podemos dejar eso atrás?

—No...

—Bien— me interrumpió —Vayamos con Felix. Seguramente él tendrá ese tipo de información porque es más cercano a los amigos de Minho.

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No pude evitar sentirme bastante nervioso mientras caminaba hacia el aula donde se encuentra Lee Minho tomando su última clase. Afortunadamente, nuestros horarios coinciden dos veces por semana, por lo que podremos encontrarnos sin problemas, sin embargo, no siempre será así pues al estar estudiando medicina, son más complicados mis horarios, pero encontraré la manera de encontrarme con él.