𝐎𝟐𝟒 ┃Mejorar el potencial
:✧。CHAPTER O24🍒
✩。⋆ 💌(𝐇𝐔𝐍𝐓𝐄𝐑) ꏍ !❛Despertar el potencial y dudas...
EL TIEMPO CORRÍA SIN DETENERSE, y el trío de amigos se esforzaba por entender el Nen. Un tema bastante complicado y complejo, pero que era necesario para poder pasear por el piso 200 sin problemas.
― El Nen es un poder que reside dentro de toda persona. Sin embargo, actualmente, solo unos pocos son capaces de usar ese poder. Así, son tratados como genios, líderes, psíquicos, o superhumanos.
― Un poder que reside dentro de todo el mundo... ― Repitió Gon, recibiendo un pequeño asentimiento de cabeza por parte de Wing, quien continuo su explicación.
― Hay dos medios por los cuales se puede despertar ese poder. La manera deliberada y la manera agresiva. ― El maestro señalo a su estudiante menor. ― Zushi se sometió al método deliberado. Fue un buen estudiante y entreno. Así que fue capaz de emplear Ren al poco tiempo.
― ¿Cuánto tiempo le tomo exactamente? ― Pregunto Jisoo, ladeando su cabeza, regalándole una amigable sonrisa a Zushi, quien froto su cabeza tímidamente.
― Al rededor de seis meses.
― Eso es mucho tiempo... ― Susurro Killua preocupado, apretando sus puños con fuerza ― ¡Necesitamos aprender Nen y atravesar la barrera de Hisoka antes de la media noche!
― Entonces tendrán que probar el método agresivo.
― ¿Será lo suficientemente rápido?
―¿Pueden aprender a contener el aura dentro de su cuerpo, antes de que se acabe el tiempo? Esa es la clave. ― Wing levanto su mano, señalando al grupo de jóvenes frente él. ― Ahora dirigiré mi aura hacia ustedes. Esto es llamado Hatsu, el cual demostré antes.
Jisoo frunció su ceño por un momento mientras una gota de sudor bajaba por su frente, desviando su vista a la agrietada pared de su maestro.
― Naturalmente, me contendré, ya que mi objetivo no es destruir sus cuerpos. ― Aclaro luego de notar las miradas nerviosas de los tres chicos ― Sin embargo, esta manera aún es peligrosa. Le daré un choque a sus cuerpos dormidos, para que puedan aprender Ten más fácilmente. Digo que sus cuerpos duermen porque la abertura de sus nudos están cerradas, lo que significa que el flujo de su aura tiene un mal desarrollo. Por eso, enviaré mi aura a sus cuerpos, para abrir sus micropilos.
Según las propias palabras de Wing, bajo circunstancias normales, tardarían mucho tiempo descubriendo y meditando sus auras, lo cual no era para nada bueno en su posición. Incluso Zushi, quien también es muy talentoso, había tardado tres meses.
― Sin embargo, ustedes tres podrían hacerlo en una semana, o incluso antes. ― Los jóvenes abrieron sus labios levemente, escuchando las palabras de su maestro con sorpresa. ―Por lo cual me parece desafortunado que tengamos tan poco tiempo para trabajar.
― En verdad no lo entiendo...―Suspiro el albino, cruzando sus brazos detrás de su cuello. ― Pero rápido y sucio siempre es mejor.
Una vena enojada se marcó en la frente de la ojirosa al escuchar aquello, observando de reojo con su ceño fruncido al albino, ganando la atención de este, quien noto como la joven desviaba su mirada molesta soltando un bajo bufido.
Pero la conclusión de su amigo era cierta, no tenían otra opción si querían continuar en el Coliseo del Cielo.
Aun así, tal vez su molestia se trataba de algo más personas. Jisoo siempre tuvo que esforzarse y escoger los caminos difíciles para lograr, por lo menos, ser notada por su familia. Los caminos sucios y apurados no le gustaban para nada, pues si quería ser reconocida por su familia, tenía que esforzarse siempre.
Al parecer, aquel día tenía que hacer algunas excepciones contra sus principios, pero si aquello ayudaba a no separarse de sus nuevos amigos, no le molestaba del todo.
― Este es un método sombrío y mal visto. ― Explico Wing, acomodando sus lentes con su mano. ― Estarán ignorando el procedimiento correcto. Incluso podrían morir si la persona que usa este método fuese débil o malvada.
― Pero no eres débil ni malvado. ¿Cierto? ― Pregunto Gon, pero Wing soltó un suspiro mientras despeinaba su propio cabello.
― Es por eso que quiero saber... ¿Por qué decidirías enseñarnos el verdadero significado de los cuatro principios del Nen de repente? ― Inquirió el albino.
― Porque no quería desaprovechar esta oportunidad. ― Admitió el hombre. ― Si fuesen a desafiar a los 200 sin nada de este conocimiento, sufrirían enormemente. Allí arriba todos saben cómo manipular el Nen.
El ceño de los tres jóvenes se frunció al escuchar aquello, pues esa declaración cambiaba completamente la manera en la que veían el piso 200. Definitivamente, el Coliseo del Cielo era otro nivel.
― Tienen una bienvenida especial para todo novato ignorante del Nen, un ataque de Nen. En otras palabras, hacen lo que estoy a punto de hacer, pero sin contenerse. ― Explico Wing, frunciendo sus cejas. ― No les importa, incluso si las personas mueren... Solo los que sobreviven tienen permitido pasar. Son los elegidos. Sin embargo, pagan un alto precio. Es por eso que quería que estuvieran preparados.
El maestro levantó su mano, empezando a emitir aura por todo su cuerpo.
―¡Ahora, a pesar de mis intentos por asustarlos! ¡Tengo confianza en que esto despertara su poder! ― Exclamo Wing, cambiando su semblante tranquilo a uno más serio. ― Tienen el potencial. Así como la habilidad. Pongan sus pertenencias en el suelo, quítense la camisa, y denme la espalda.
Rápidamente, los tres jóvenes siguieron sus instrucciones. Las maletas de los tres cayeron sobre uno de los sofás, al igual que sus camisas y chaquetas.
Jisoo tuvo que desabrochar su cinturón amarillo y quitar su larga camisa rosa, quedando en una camiseta café a la cual tuvo que remangar las mangas. Rápidamente, se acercó a sus amigos, quienes ya se encontraban de espaldas contra Wing.
El aura emitida por su maestro que golpeaba sus espaldas era bastante caliente, y podían sentir la presión a pesar de que Wing no los estuviera tocando. La sensación era como algo invisible y viscoso, arrastrándose su por su piel lentamente.
― Comenzaré. ― Les aviso el pelinegro, mientras una gota nerviosa caía de su mejilla. Lo que estaba a punto de hacer era peligroso, pero estaba seguro de que sus nuevos estudiantes lo lograrían.
El aura empezó a extenderse, cubriendo por completo los cuerpos de los menores. Los tres no pudieron contener un grito de dolor, pues el aura que choco contra sus cuerpos era bastante pesada.
La sensación era casi indescriptible e incómoda, provocándoles un fuerte pero leve dolor.
― Ya está. ― La voz de Wing los despertó de su pequeño trance. ― Cada micropilo de su cuerpo se ha abierto.
― E-esto es... ― Susurro Jisoo, observando con sus labios abiertos como su cuerpo empezaba a emitir una suave aura de color blanco.
― Esa es su aura, o energía vital... ― Les explico el hombre de gafas, observando como sus estudiantes examinaban sus cuerpos con sorpresa. ― Ahora pueden verla, porque los micrópilos de sus ojos también fueron abiertos.
― Es como humo, levantándose de la boquilla de una cafetera. ― Exclamo Gon, fijando su vista en sus manos, las cuales estaban cubiertas por una suave aura.
― Está saliendo desde todas las partes de mi cuerpo. No deja de brotar. ― Asintió Killua, también con sus labios levemente abiertos de la sorpresa.
― ¿No es eso peligroso? ― Exclamo Jisoo, al mismo tiempo que el peliverde y el albino dirigían su mirada a ella con preocupación.
― Esta es su energía vital, así que si continúan escapándose, se agotará. Si gastan toda su aura, se desmayarán por la fatiga. ― Wing aplaudió, llamando la atención de los más jóvenes. ― Escúchenme. Deben concentrarse en mantener el aura dentro de sus cuerpos. ¡Cierren sus ojos! Usen cualquier postura que les ayuda a concentrarse. Visualicen su aura fluyendo como sangre a través de su cuerpo. Ahora visualicen ese flujo, comenzando a decaer y suspendiendo alrededor de su cuerpo.
Jisoo escuchaba atentamente las palabras de su maestro, cerrando sus ojos y descansando su cuerpo, visualizando todo aquello que escuchaba.
Poco a poco empezó a sentir el calor de su aura más calmada, al mismo tiempo que sus latidos acelerados se estabilizaban. Lograba sentir un aura deslizándose al rededor de su cuerpo lentamente.
Por otro lado, Wing se encontraba sorprendido por el potencial del trío, quienes habían logrado conseguir resultados bastante rápido, en apenas algunos minutos.
Magnífico, pero aterrador. Ese era el pensamiento que tenía el maestro, quien no podía creer el potencial que tenían los tres jóvenes.
― Abran sus ojos lentamente. Sigan manteniendo esas imágenes. Una vez que hayan asimilado, podrán usar Ten mientras duermen.
De repente, el aura de Wing cambio por completo, volviéndose más pesada y peligrosa. Levanto su mano lentamente, alzando su palma frente sus estudiantes.
― ¡Ahora, utilizaré Nen hostil contra ustedes!― El aura cubrió por completo la sala, golpeando los cuerpos de Gon, Jisoo y Killua, quienes sorprendentemente no sintieron dolor. ― Anteriormente, hubiese sido doloroso para ustedes permanecer dentro de esto.
― Sí, ahora comprendo tu analogía de la ventisca. ― Exclamo el albino, asintiendo para el mismo.
― ¡Si pueden rechazar mi Nen, podrán atravesar esa barrera!
Jisoo dejo escapar un quejido de dolor al sentir toda la presión que emitía el aura de su maestro, mientras gotas de sudor bajaban por su frente y su respiración se saturaba. El aura era totalmente diferente a la de algunos minutos antes, y el cambio tan radical no era nada bueno. Rápidamente, recibió una mirada preocupada por parte de Killua, quien noto como las pupilas de su compañera se rasgaban y sus labios se apretaban con dolor.
El aura impactó contra sus cuerpos sin piedad, pero aquello serviría en un futuro para poder vencer el aura que Hisoka, y así lograr pasar al piso 200.
(💌)
Hisoka asomo una sonrisa en sus labios, observando a los tres jóvenes frente él, quienes a diferencia de antes, ahora eran cubiertos por una suave aura. El arlequín no pudo evitar emocionarse al ver el rápido avanzo de los menores. Nuevamente, emitió su fuerte y pesada aura sin piedad, cubriendo por completo aquel pasillo.
Gon, Jisoo y Killua, a diferencia de antes, caminaban sin problemas, acercándose poco a poco al arlequín, quien no quitaba su extraña sonrisa de satisfacción de sus labios.
― Bienvenidos al piso 200. ― Exclamó, aun con algunas cartas de póker en sus manos. ― Parece que no hace falta que me moleste con la bienvenida tradicional. Puedo adivinar porque vinieron al Coliseo del Cielo... Trataban de entrenar antes de desafiarme.
― Sí, pero no esperaba encontrarte aquí. Eso me ahorra tiempo.― Exclamó Gon, frunciendo levemente su ceño, escuchando como Hisoka dejaba escapar una baja risa.
― Deberías evitar confiar demasiado en tu habilidad para usar Ten. ― El pelirrojo levanto sus dos manos, extendiendo su dedo índice, por el cual empezó a emitir aura color rosa, formando un rombo de corazones. ― Hay mucho que aprender acerca del Nen. Para ser honesto, actualmente, no siento ninguna necesidad de luchar contra ustedes.
Hisoka se levantó del suelo, deformando el aura que emitía de su mano, donde anteriormente había una calavera. Los tres jóvenes no dijeron nada, mientras una gota de sudor nerviosa se escurría por sus mejillas.
― Sin embargo... Sí logran ganar una pelea en los 200, aceptaré su desafío
El arlequín se dio la vuelta, empezando a caminar, alejándose de los menores, quienes no quitaron su mirada del hombre, observando con cautela. Cuando lo perdieron de vista, finalmente decidieron también alejarse, dirigiéndose a la recepcionista.
Sin darse cuenta, unos misteriosos sujetos los observaban desde lejos con sonrisas indescifrables en sus rostros, seguramente planeando divertirse con los recién llegados.
― ¡Bienvenidos al piso 200! Por favor llenen los formularios aquí. ― Exclamó la recepcionista de manera amigable, extendiéndoles tres papeles. ― ¿Les gustaría registrarse para una pelea ahora?
Los tres jóvenes se miraron entre ellos curiosos, escuchando las palabras de la recepcionista de pelo azul y ojos morados.
― En esta clase, hay un sistema de servicio automático, en el cual se les permiten 90 días de preparación. Pueden elegir pelear durante cualquier día durante ese tiempo. Por supuesto, son libres de pelear todos los días. Una vez que hayan participado en una pelea, tienen otros 90 días para prepararse. Sin embargo, si no pelean antes de que acaben esos 90 días, serán descalificados, y sus nombres serán borrados de todos los registros.
― ¿Eso quiere decir que pelearemos en este piso durante múltiples veces? ― Preguntó Gon, recibiendo un asentimiento.
― Necesitan diez victorias para completar este piso. Sin embargo, si pierden cuatro veces antes de las 10 victorias, serán descalificados. ¡Y, si ganan diez veces, tendrán una oportunidad de retar a los Amos del Piso!
Jisoo asintió de arriba a abajo su cabeza, escuchando con curiosidad la explicación de la señorita, recostando sus codos sobre la mesa de la recepcionista.
Los Amos del piso son los 21 luchadores más fuertes del Coliseo de Cielo, quienes tienen su propio piso del 230 al 250. Si derrotan a un Amo del Piso, se convertirían en el nuevo amo de ese piso.
― ¡Si se convierten en un Amo del Piso, ganarán el derecho de participar en la celebración bianual de combate, Batalla Olimpo! ― Los tres jóvenes observaron a la señorita sin ninguna expresión fuera de lo normal, sorprendiendo a la recepcionista, quien se había esforzado por sorprenderlos con su explicación.
― Olvida eso. ¿No hay algo más especial acerca del último piso? ― Preguntó Killua.
― ¡¿Eso es lo que quieres saber?! ¡El campeón de Batalla Olimpia podrá vivir en el último piso! Es un honor increíble, una casa azotea a 1,000 metros sobre el suelo... ¡¿No lo comprenden?!
― Pero la casa de Killua está a 3,700 metros sobre el suelo, ¿no? ― Susurro Gon, al mismo tiempo que Jisoo dejaba escapar una exclamación sorprendida.
― Ahora que lo dices, eso es muy sorprendente... ― Exclamo la ojirosa, notando como la recepcionista caía al suelo desanimado, volviendo a aparecer detrás del cristal en apenas unos segundos con sus cejas agachadas.
― Y-y el campeón siempre recibe un premio de...
― ¿Qué quieren hacer? Ahora que sé el secreto del último piso, ya no me importa. ― Admitió el albino, provocando que la recepcionista volviera a tirarse al suelo con una mueca.
― ¡Solo quiero pelear con Hisoka! ― Respondió el peliverde, asintiendo para el mismo.
― ¡Yo quiero pelear contra personas fuertes y mejorar! ― Respondió Jisoo, alzando su puño decidido con una sonrisa emocionada.
― Bueno, para eso tendrán que ganar una pelea. Pero primero, esperarán un poco, ¿no? ― Inquirió Killua, notando como Gon negaba.
― No... ¡Voy a hacerlo! ― El peliverde bajo su mirada, observando su puño con un brillo decidido. ― Tengo que descubrir que tan fuertes son estos oponentes.
Killua asintió suavemente, desviando su mirada a Jisoo, quien frotaba su mejilla nerviosa.
― Yo... Creo que no estaría mal intentarlo, también quiero conocer a qué tipo de personas nos enfrentamos.
El albino dejo escapar una exclamación de afirmación, desviando su mirada de la pelinegra, empezando a firmar los formularios que la recepcionista les había entregado antes. Su mirada se apartó de su hoja, notando como a sus espaldas llegaban tres personas desconocidas.
― ¿Quieren algo? ― Inquirió el albino, arqueando su ceja.
― No, en verdad no. ― Respondió uno de ellos, quien se encontraba sentado sobre una silla de ruedas bastante grandes.
― Simplemente, hacemos fila para registrarnos para una pelea. ― Dijo el otro, quien llevaba una larga bata con decoraciones amarillas.
Por otro lado, el último, quien se encontraba completamente tapado por una bata color roja, y sus piernas estaban hechas de lo que parecía ser la parte metálica de un trompo, empezaba a reírse.
Jisoo se dio la vuelta al escucharlos, haciendo una mueca para nada disimulada, frunciendo sus cejas confundida y sorprendida al ver sus apariencias.
― Oh, entiendo. Gon, Jisoo. Estos tipos quieren pelear el mismo día que ustedes. ― Aviso el albino, observando de reojo a sus amigos.
Gon asintió levemente, observando a los recién llegados por un momento, dándose la vuelta, fijando su mirada en la hoja, tachando el cuadro donde marcaba un día en específico.
― Estoy listo para ir cuando sea. ― Respondió Gon decidido.
Esta vez, la atención de todos se dirigió a Jisoo, quien negó suavemente mientras asomaba una pequeña sonrisa en sus labios.
― No gracias. ― Respondió alzándose de hombros, dándose la vuelta y observar su formulario. ― No me interesa pelear contra ustedes, no me llaman la atención. Supongo que tendré que esperar más para combatir contra alguien...
― Allí tienen. ― Aviso Killua, notando como los tres sujetos empezaban a reír disimuladamente.
― Estos chicos tienen muchas agallas... ― Exclamo uno de ellos divertido, provocando que los tres jóvenes fruncieran sus ceños, examinándolos con desconfianza.
― Entonces, Gon-sama estará en la habitación 2207. Killua-sama estará en la habitación 2223. Y Jisoo-sama estará en la habitación 2214.― Aviso la recepcionista, interrumpiendo el incómodo ambiente que se empezaba a formar en la sala. ― Les avisaremos en que día es su pelea.
― ¡Gracias! ― Exclamo Gon, recibiendo las llaves de las habitaciones.
Los tres jóvenes se retiraron, emprendiendo camino a las habitaciones establecidas. Killua observaba de reojo como los extraños sujetos aún los examinaban con la mirada, sin moverse de su lugar.
― Deben haber pasado por esa bienvenida que menciono él cuatro ojos. ― Opino el albino mientras caminaban. ― Si hubiésemos ido a ciegas, podríamos haber acabado como ellos.
Gon freno frente a la puerta con el número de su habitación escrito en dorado, girando el pomo lentamente. Los ojos del peliverde y la ojirosa brillaron al ver tanta elegancia, entrando rápidamente.
― ¡Esta habitación es enorme!
― ¡Muy grande y elegante!
― Hey, ¿Me están escuchando?
― ¡Nunca había visto una cama tan grande!― Escucho la joven como Gon exclamaba, acercándose rápidamente, y sin perder la oportunidad, se lanzó a la cama rebotando en ella.
Su mirada se desvió a la ventana de la habitación, logrando ver al albino con una mirada distraída, observando los edificios de la ciudad. Jisoo logro notar como Killua la observo por unos segundos por el reflejo de la ventana, para luego alejar la mirada.
Un extraño sonido llamó la atención de ambos. Jisoo se sentó correctamente en la cama y observó el televisor, donde aparecía información sobre la primera batalla de Gon en el piso 200.
― ¿Eh? ¡Miren el televisor!
¡¡Su batalla ha sido fijada para el 11 de marzo a las 3 PM!!
― ¿Qué? ¿Mañana? Eso es rápido... ― Susurro el albino, notando como Gon tomaba una postura diferente, empezando a emitir Nen de su cuerpo.
― Probablemente, no podré ganar mañana. ― Admitió el peliverde, ganando la atención de todos. Sin poder evitarlo, apretó sus puños. ― Pero está bien. Necesito la experiencia. Necesito descubrir lo que soy capaz de hacer con este poder.
Jisoo asomo una sonrisa, ladeando la cabeza mientras asentía. Su amigo tenía toda la razón, necesitaban descubrir más sobre aquel extraño poder. Rápidamente, se levantó de la cómoda cama de su amigo, estirando sus brazos, dejo escapar un bostezo.
― Bien, nos vemos mañana. ― Exclamo la ojirosa ofreciéndole una sonrisa, acercándose lentamente a la puerta mientras hablaba. ― Iré a mi habitación, tengo algo de sueño. ¡Que descansen!
Jisoo se dio la vuelta mirando a sus amigos, despidiéndose una vez más con la mano, escuchando también como ellos se despedían.
Su rosa mirada se desvió al Killua, quien a diferencia de antes, no le devolvió la mirada. Al ver aquello, rápidamente se apresuró por salir de la habitación con una extraña sensación.
No lo negaría, estaba preocupada. Temía que su amigo se hubiera empezado a sentir incómodo con ella, o incluso que no le agradara su actitud con él. Cuando habían ido por primera vez a la casa de Wing, el albino le dejo en claro que había sucedido algo cuando la llevó a la habitación, comportándose de manera un poco extraña con ella desde aquel día.
La joven soltó un suspiro, despeinando su cabello con una mueca cansada. No entendía por qué aquel pensamiento le carcomía tanto la cabeza, y le provocaba una molesta y extraña sensación en el pecho al notar como Killua desviaba su mirada de ella y se alejaba.
¿Por qué le molestaba tanto no tener la atención de aquel joven albino?
― Tu habitación es la 2214, ¿Verdad? ― Jisoo dejo escapar un grito al escuchar la voz de Killua detrás de ella.
― ¡Tonto, me asustaste! ― Exclamo con fuerza, escuchando como el albino reía. La joven negó con la cabeza, aun sintiendo su piel erizada. ― Aún no entiendo como tus pazos no emiten ruido alguno... ¿Qué haces aquí?
― Gon estaba preocupado, temia que te perdieras o te quedaras dormida a mitad del camino. Insistió en que te acompañara. ― Respondió él, alzando sus hombros sin importancia, notando como Jisoo sonreía enternecida por un momento. ― En fin, vamos rápido. Si tengo que volver a cargarte y te pones atrevida, te dejo en el pasillo.
― ¡¿Otra vez con eso?! ¡Dime de una vez porque me dices así!
A pesar de que ya se encontraran fuera de la habitación, Gon lograba escuchar las escandalosas voces de sus amigos. Una gota de sudor bajo por su cien. Aunque no tuvo que esforzarse por hacer que Killua acompaña a su amiga para era hacer que ambos se "reconciliaran" de lo que sea que había pasado, entendió que al parecer no sería tan fácil.
―¡Por favor! Dime... ― Susurro la fémina, bajando la mirada levemente. El albino no demoró en entender que su amiga realmente estaba preocupada, y sin caer en cuenta, una sonrisa apareció en sus labios. ― ¡No quiero que te incomode estar conmigo!
Killua desvío su mirada sonrojado al escuchar aquello, otra vez su amiga decía ese tipo de cosas. En realidad no se sentía incómodo, simplemente no sabía como actuar luego de aquel momento que Jisoo no lograba recordar. Alejándose unos cuantos pasos de la joven frente él, la observo de reojo.
― Nah, es más divertido si tu sola recuerdas lo que sucedió. ― Respondió, caminando rápidamente con las manos en sus bolsillos, escuchando como Jisoo bufaba molesta.
― ¡Dime, dime, dime! ― Continuó insistiendo la ojirosa, jalando la camisa del chico con su seño fruncido, logrando que el albino se volteara molesto y empezara a pellizcar las mejillas de la joven.
― ¡Deja de insistir, idiota! ¡Ya te dije que lo recordaras tu sola!
De cierta manera le molestaba que Jisoo no recordara nada de lo que había sucedido aquella noche, pues para él probablemente sería imposible olvidar aquel momento.
Sus mejillas se sonrojaron fuertemente, recordando las palabras que su amiga le ofreció, logrando hacer que su corazón latiera como nunca antes había imaginado por su carismática y torpe amiga.
. . .
― ¡Quédate quieta, teñida, harás que nos caigamos!
― ¡Entonces deja de cargarme como un costal, pelo de trapero! ¡Canoso!
Jisoo movía sus piernas de arriba a abajo, al mismo tiempo que seguía quejándose adormilada, sintiendo como el albino luchaba por hacer que se quedara quieta, pero era casi imposible.
Killua dejo escapar un suspiro cansado, deteniendo sus pasos, al mismo tiempo que la voz de Jisoo desaparecía.
Por un momento considero dejar a aquella chica de ojos rosas a mitad del pasillo, pensando que en realidad solo se estaba haciendo la dormida para molestarlo. Rápidamente, descarto la idea al agacharse y bajarla de su hombro, examinando el rostro cansado de su amiga.
Jisoo dejo escapar un quejido al sentir como esta vez era alzada con más cuidado. Su cabeza quedó a la altura del hombro del albino, siendo sostenida por la cintura y por debajo de sus piernas, totalmente diferente a la anterior vez, donde había sido cargada de cabeza por medio camino.
El ojiazul volvió a empezar a caminar, acercándose a la puerta de la habitación de su amiga y abrir la puerta sin hacer mucho ruido, dejando ver una habitación igual a la de Gon, la única diferencia era que la luz se encontraba apagada, siendo únicamente iluminada por las luces de la ciudad que permitía ver la ventana.
La piel del albino se erizó al sentir como unas pequeñas manos se enredaban entre su pelo, provocando que su ceño se frunciera.
― ¿No qué tienes sueño, ya llegamos, quédate quieta...― Su reclamo fue callado al escuchar las palabras adormiladas de la pelinegra, logrando que sus mejillas se sonrojaran totalmente y sus pasos se detuvieran.
― Tu pelo es realmente bonito... No se parece a un feo trapero canoso, solo digo eso para molestarte cuando tú me dices teñida...― Susurró la ojirosa adormilada, recostando su cabeza sobre el hombro Killua, aun con su mano jugando con su blanca melena. ― Parece más un suave y lindo algodón...
Killua no lo negaría, le gustaba la extraña sensación que le provocaba escuchar aquellos halagos salir de los labios de su amiga, pero al mismo tiempo, de cierta manera lo lograban confundir.
― ¡A-ah! ¿U-n lindo algodón?―Repitió el ojiazul bastante sonrojado, apretando sus labios por unos segundos, retomando su camino, escuchando como la joven dejaba escapar una suave afirmación.―¿¡Cómo puedes decir ese tipo de cosas de manera tan despreocupada!?
― Eres lindo y es verdad.
Escuchar aquello fue mucho para la mente del albino. Rápidamente, dejo a Jisoo sobre la cama sin mirarla a los ojos, apresurándose por salir de aquella habitación. Lograba escuchar fácilmente sus acelerados latidos y sentir sus mejillas ardiendo.
Definitivamente, aquella noche no podría dormir.
"ESPECIAL"
Sip, un especial en agradecimiento a todos por todo el apoyo que recibe Hunter cada día ... ¡Por el Bien de su vista! Si tienen fondo negro les recomiendo que lo cambien al blanco.
Aviso antes de leer: Las hermosas imágenes utilizadas no son mías, lastimosamente no encontré a quien darle los créditos. Si saben a quién pertenecen avísenme!!
Los diálogos si los cree yo :DD ¡Disfruten!
---୭ 🧷 ✧HUNTER ˚. ᵎᵎ 🎀---
...Adelanto del capítulo 25 de HUNTER...
Gracias por leer y perdón los errores de ortografía.
IKIWAII
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro