71| El bebé
Alejandro estaba más que feliz cuando le dieron la noticia. Cuanto le llegó la llamada meses después no dudó en tomar un viaje a México. Para cuando llegó ya había sucedido todo lo que estuvo esperando por meses, él más que nadie estaba emocionado y se le notaba en el rostro. Lastimosamente, esto sucedió mientras estaba en el servicio militar, no tuvo mucho tiempo para compartir con su familia en medio de todo aquello.
¿Y qué era esto? Alejandro había tenido un hermano.
Meses después Alejandro amaba viajar a México más seguido que antes para poder ver a su familia. Eso explicaba la fiebre que tenía por tener un bebé. Le gustaba cargar a su hermanito y jugar con él haciéndolo reír, era de las cosas que más disfrutaba en los últimos meses.
"¡Mamááá!" Llamó Alejandro nada más llegar a la casa de sus madres junto a su esposo, como si no tuvieran vecinos. "¡Mamáááá!" Volvía a gritar como niño castroso.
"¡Te escuché!" Le gritaba de regreso Ágata mientras salía para abrir el portón. "Pasa, pasa." Dijo de mala gana.
"Holi." Dijo sonriendo para correr a la puerta con rapidez, ni siquiera esperó a ser saludado.
El chico corrió por toda la casa para llegar a la gran sala donde su otra madre, Adara, estaba sentada con el bebé de once meses en brazos. Al ver a su hermanito chilló y al este ver a su hermano mayor empezó a gritar moviendo sus brazos.
"¡¿Quien es ese gordito?!" Preguntó Alejandro haciendo un tono tonto para acercarse con rapidez.
"¡Ade!" Dijo el bebé para gatear a él con rapidez, poco después fue cargado por el mayor.
"¡Ay, mi niño!" Dijo para darle besos en la mejilla haciéndolo reír.
Alexis entró junto a Ágata para ir a la sala. Al verlos sonrieron, les parecía gracioso como se comportaba el chico cuando veía a su hermanito. Parecía que ambos eran niños pequeños. Aidan y Alejandro parecían padre e hijo más que hermanos, eso demostraba la gran conexión que tenían en tan poco tiempo. El de ojos claros moriría por su hermanito y se notaba. Igual, no era como si sólo fuera así con él, Alexis también jugaba mucho con el pequeño y lo cuidaba cada que tenían que hacerlo. No era tanto como con Alejandro pero sí se ponía de buen humor cuando le veía. Esto era una de las razones por la que Alex quería un bebé, aún así, Alexis le decía que no.
"Aidan bonito." Decía el de ojos claros con un tono chillón mientras apapachaba a su hermano. "Deja que crezcas y te voy a llevar a beber y drogarte."
"¡Alejandro!" Regañó su madre dándole con la palma abierta en su espalda, cosa que hizo que gritara fingiendo llorar. Poco después se escuchó a Aidan reír fuertemente. Alexis lo admitía, era tierno ver a su esposo con un bebé. Pero no era suficiente para hacer que le dieran ganas de tener un hijo propio.
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Si hay faltas de ortografía o un error,por favor déjenme saber.
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