🐻FIVE NIGHTS AT FREDDY'S.. 𓆪﹏ᘏ

▀▄▀▄ 𝘤𝘢𝘱𝘪́𝘵𝘶𝘭𝘰 dos: Ecos 𝗱𝗲𝗹
Pasado ☠︎︎☏⚰︎๛ꆜ๑▄▀▄▀▄

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EL SONIDO DE LAS TECLAS RESONABAN EN LA PEQUEÑA OFICINA DE LA COMISARÍA. Louis estaba sentado frente a su escritorio, mirando la pantalla de su computadora mientras revisaba los últimos informes del día. A sus 24 años, su vida había tomado un giro inesperado. Había dejado atrás su infancia, su familia, e incluso los horrores que había vivido en aquella espantosa pizzería. Pero el recuerdo de Felicite, su hermana pequeña, nunca se había ido.

Los años no habían borrado las cicatrices, ni físicas ni emocionales, que había dejado la tragedia. Aunque había logrado seguir adelante, su mente nunca había dejado de atormentarle con la imagen de su hermana, de aquella noche fatídica en la que todo cambió. La policía nunca encontró evidencia de lo que realmente había sucedido en Freddy Fazbear's Pizzeria, y para muchos, el caso había sido cerrado como una desaparición misteriosa.

Pero Louis nunca dejó de buscar respuestas. En los años siguientes, se sumergió en el mundo de la investigación. Decidió convertirse en oficial de policía, en parte para escapar de su pasado, pero también para dar con la verdad detrás de los sucesos oscuros que marcaron su vida. La comisaría donde trabajaba estaba lejos de Nueva Orleans, en un barrio tranquilo donde nadie conocía su historia. Nadie, salvo él.

El jefe de la comisaría, un hombre de rostro serio y canoso llamado Edward, entró en la oficina de Louis sin hacer ruido, interrumpiendo sus pensamientos.

-Louis, tenemos un caso complicado.- Dijo, con una mirada que Louis conocía bien. Era la mirada de un hombre que sabía que algo importante se estaba cocinando, algo que cambiaría las cosas.-Un cuerpo fue encontrado cerca de un viejo edificio abandonado. El informe indica que hay huellas... huellas que no deberían estar allí.

Louis levantó la mirada de la pantalla, su corazón dio un salto en su pecho. Abrió la boca para responder, pero algo en su interior le decía que no debía involucrarse en este caso. No después de todo lo que había pasado. Sin embargo, la curiosidad y una vieja necesidad de respuestas lo empujaron a hablar.

-¿Qué huellas? .- Preguntó, su voz firme pero con una ligera tensión. Edward dejó el archivo sobre la mesa de Louis y se alejó un paso, observando al joven policía con una mezcla de seriedad y una pizca de preocupación.

-Parece que son huellas grandes. No son humanas, eso está claro. Como... ¿como si algo... caminara de manera antinatural? .- Edward no necesitaba decir más. Louis había visto esos mismos informes antes. Había leído sobre casos extraños, muertes inexplicables, y criaturas que se escondían en las sombras de las leyendas urbanas. Sabía lo que significaba.

Louis cerró los ojos por un momento, como si intentara bloquear el recuerdo de lo que había visto años atrás. Era como si la pesadilla nunca hubiera terminado. Pero ahora, su deber como oficial de policía lo llamaba. Tenía que investigar, aunque lo temiera. Quizás esta fuera la oportunidad de obtener respuestas, aunque eso significara enfrentarse a su propio miedo.

-Lo investigaré.- Dijo con voz baja, más para sí mismo que para Edward.

El jefe lo miró, pero no hizo preguntas. Sabía que Louis era un buen oficial, pero también sabía que había algo más en él. Algo que lo empujaba más allá de los límites. Algo que lo conectaba con esa oscuridad del pasado.

Louis dejó el archivo sobre su mesa y se levantó. Sin decir palabra, comenzó a ponerse su chaqueta, ajustándose la placa en el pecho. Estaba a punto de salir cuando una voz lo detuvo.

-Louis...Edward lo miró desde su escritorio, preocupado.- Recuerda... si esto te afecta, puedes pedir ayuda. No tienes que hacerlo solo.

Louis asintió sin mirarlo a los ojos, dándole una sonrisa forzada.

-Lo sé. Pero este es mi trabajo. Y tengo que hacerlo.

Mientras salía de la oficina, la mente de Louis no dejaba de dar vueltas. ¿Qué había detrás de ese caso? ¿Era solo un mal presagio o algo mucho peor estaba ocurriendo?

Con el paso del tiempo, la pizzería Freddy Fazbear's había caído en el olvido para muchos, pero no para él. En lo más profundo de su ser, Louis sabía que nada se olvida por completo. El pasado siempre vuelve, tarde o temprano, y esta vez, las sombras de Freddy Fazbear no lo dejarían en paz.

El viaje hasta el lugar del crimen fue corto, pero al llegar, una sensación de incomodidad invadió su pecho. El edificio abandonado, con sus paredes desmoronadas y ventanas rotas, parecía sacado de una pesadilla. Louis observó con cautela mientras los oficiales que ya estaban en el lugar tomaban fotos y registraban las huellas extrañas que se extendían hacia el interior del edificio. Pero no necesitaba ver más para saber que algo estaba mal. Algo oscuro estaba al acecho.

-¿Encontraron algo?.- Louis preguntó a un oficial cercano, que se giró para mirarlo.

-Nada humano.-Respondió el oficial con voz temblorosa.-Pero las huellas son grandes. Como si algo... estuviera caminando, pero de una forma que no tiene sentido.

Louis no dijo nada. Sabía lo que estaba sucediendo. Era solo cuestión de tiempo antes de que las cosas se complicaran. Y cuando se adentró en el edificio, una horrible sensación lo invadió. En el aire flotaba un olor extraño, algo metálico y podrido. El lugar estaba vacío, pero Louis podía sentir que algo los estaba observando, acechando en las sombras.

El sonido de sus pasos resonaba en el silencio mientras avanzaba hacia una habitación más al fondo. Y fue allí, en esa habitación sombría, donde lo vio. Un objeto oscuro en el suelo. Un... maniquí. Un animatrónico de aspecto rudimentario, cubierto de polvo, con una sonrisa torcida que congeló la sangre de Louis.

El sudor comenzó a recorrer su frente. Era uno de ellos. Freddbear, o algo mucho peor. La pesadilla nunca se fue, solo se escondió.

Un grito lejano lo hizo girarse, y en ese momento, Louis comprendió algo: el pasado nunca lo dejaría ir.