🐻FIVE NIGHTS AT FREDDY'S.. 𓆪﹏ᘏ

▀▄▀▄ 𝘤𝘢𝘱𝘪́𝘵𝘶𝘭𝘰 cuatro: La llegada de Mike Schmidt☠︎︎☏⚰︎๛ꆜ๑▄▀▄▀

©2024 ⚊⚊⚊ loui_hmwtf28| Diana

LOUIS HABÍA REGRESADO DE LA MISIÓN EN FREDDY FAZBEAR'S CON MÁS PREGUNTAS QUE RESPUESTAS. El animatrónico, Freddbear, seguía rondando en su mente, esa sombra metálica que parecía inquebrantable, imparable. Algo dentro de él, una sensación visceral, le decía que aquello no había terminado. Pero en cuanto regresó a su rutina diaria, con su trabajo en la comisaría, trató de dejar el tema atrás. Al menos, por ahora.

Sin embargo, la vida no le dio tregua.

Una semana después del extraño incidente en la pizzería, Louis recibió una llamada inesperada. Un nuevo guardia de seguridad había sido contratado en Freddy Fazbear's, y el puesto, como siempre, requería vigilancia nocturna. Mike Schmidt, así era el nombre del nuevo guardia.

Louis no pudo evitar fruncir el ceño al escuchar esa información. Sabía que las cosas no estaban resueltas allí, que la pizzería seguía siendo un lugar peligroso, pero ese guardia no parecía tener ni idea de lo que le esperaba. Como policía, su deber era asegurarse de que nadie se acercara a ese lugar sin estar completamente preparado. Pero había algo en el nombre de "Mike Schmidt" que lo dejó pensativo, casi inquieto. ¿Quién era él?

Esa noche, Louis decidió hacer una visita sorpresa a la pizzería para asegurarse de que Mike estaba al tanto de todo lo que sucedía en ese lugar. Después de todo, si había algo que había aprendido, era que nadie estaba a salvo allí.

Cuando Louis llegó, encontró a Mike en la entrada, encendiendo una cigarrera mientras esperaba que se hiciera de noche para comenzar su turno. El hombre era delgado, de cabello oscuro, y una barba incipiente cubría su rostro. Su actitud parecía relajada, pero sus ojos... sus ojos decían lo contrario. Había algo en su mirada que delataba una cierta tensión, como si estuviera tratando de mantener el control de algo que lo estaba devorando por dentro.

-Eres Mike, ¿verdad?- Louis preguntó con voz firme, aunque no pudo evitar notar cómo su tono sonaba más suave de lo que hubiera querido.

El joven se giró hacia él, y Louis pudo ver la sorpresa en su rostro al encontrar a un oficial de policía allí. Sin embargo, rápidamente se recompuso y le sonrió, como si estuviera acostumbrado a recibir visitas no tan agradables.

-Sí, soy Mike.-Respondió con una voz grave, casi áspera. -¿Tú eres...?

-Louis. Trabajo en la comisaría.- Louis extendió la mano, sin pensar demasiado.-Escuché que eres el nuevo guardia. ¿Cómo te va?

Mike aceptó el apretón de manos, y Louis pudo sentir la firmeza en su gesto, pero también la tensión en su cuerpo. Como si la presencia de Louis le incomodara. Sin embargo, su sonrisa no desapareció.

-Va... bien, supongo. No es un trabajo fácil, pero alguien tiene que hacerlo.-Mike bromeó, aunque su risa sonaba un poco forzada.

Louis lo observó un momento, notando cómo los ojos de Mike se desviaban hacia el interior de la pizzería, como si estuviera buscando algo en la oscuridad.

-No te voy a mentir, Mike. Aquí no se trata solo de vigilar.-Louis dijo en voz baja, como si compartiera un secreto.-Este lugar... tiene su historia. Y no es una historia bonita.

Mike lo miró, claramente curioso pero también desconcertado. Louis podía ver cómo sus cejas se fruncían, pero no parecía asustado, más bien incrédulo.

-¿Historia? ¿De qué estás hablando?-Mike soltó una risa nerviosa.-Solo es una pizzería. He escuchado cosas raras sobre el lugar, pero no creo en supersticiones.

Louis tragó saliva, sintiendo un peso en su pecho. Sabía que Mike no lo entendería si le contaba todo, si le decía que Freddbear, el animatrónico, estaba allí, esperando. Esperando qué, no lo sabía. Pero el lugar estaba maldito, y aunque no podía explicarlo con palabras, Louis sabía que Mike estaría en peligro.

-Te sugiero que tomes este trabajo más en serio, Mike.- Dijo Louis, manteniendo su mirada fija en él.-La noche aquí cambia todo. Y no quiero que te ocurra lo mismo que...

No pudo terminar la frase. Las palabras se atoraron en su garganta, y un sentimiento extraño lo invadió. Era la primera vez en mucho tiempo que se sentía tan... preocupado por alguien. Después de todo, ¿qué iba a hacer si algo le ocurría a Mike?

Mike lo miró un momento, su expresión cambió, y Louis pudo ver cómo se relajaba. Como si hubiera entendido algo en ese intercambio.

-No te preocupes, Louis. He trabajado en sitios peores.-Respondió, aunque Louis notó un destello de incertidumbre en su mirada.-Y si las cosas se ponen feas, sé que hay un par de personas dispuestas a ayudarme.

Louis asintió con un suspiro, sintiendo que la conversación se desvanecía en el aire. Sabía que no podía seguir hablando de eso. No ahora. Mike tendría que enfrentarse a la oscuridad por sí mismo.

Antes de irse, Louis sintió una extraña sensación en el estómago. Miró a Mike, viendo cómo se encendía otro cigarro, y por un momento, sus ojos se encontraron. Algo pasó en ese instante, algo que no se podía explicar. Louis parpadeó, desconcertado, y apartó la mirada.

-Nos vemos mañana, Mike.- Dijo en voz baja, sin saber muy bien qué más decir.

Mike asintió sin dejar de mirar el cigarro entre sus dedos.

-Nos vemos.

Louis se alejó sin decir nada más, pero una sensación extraña lo acompañó durante todo el camino de vuelta a casa. ¿Qué era eso que sentía? ¿Una conexión? ¿Interés? No, no podía ser. Él estaba demasiado atrapado en sus propios demonios.

Sin embargo, esa noche, cuando se acostó, los recuerdos de esa conversación volvieron a su mente, y una parte de él no podía evitar preguntarse si, tal vez, Mike sería su única conexión con un mundo fuera de las sombras de Freddy Fazbear's.