Habían pasado cuatro meses desde su boda, y ambos estaban felizmente, estaban pensando en comprar una casa y dejar el departamento, querían algo más amplio, y Jimin más que nada también lo desea.

Últimamente ha pensado en proponerle a Jungkook el tener un bebé. Nunca lo han hablado, no desde la Universidad, pero ahora, que ya están casados siente que es momento de formar su propia familia.

Hace dos meses cambió de empresa y ahora trabaja en la misma de Jungkook. Tienen un buen horario lo que les permite pasar tiempo.

Mientras el espera a Jungkook para preparar la cena, el pelinegro se ducha, minutos después llego con su cabello húmedo y vistiendo unos pantalones cómodos.

Llego hasta donde Jimin, le dio un beso a sus labios y entre charla empezaron a preparar la cena. Mientras esperaban a que el guiso de ternera con sus respectivas verduras se cociera, Jimin se sentó en el regazo de Jungkook.

-¿Quieres decirme algo cariño? -le pregunto Jungkook a Jimin.

Y es que, lo conocía tan bien, por que todas esas miradas qué le daba y con esos ojitos que quería decirle mucho.

-Sí. -Dijo trazando caminos imaginarios en el pecho de Jungkook. -Sabes, he estado pensando en que ya es tiempo en formar una familia. No quiero envejecer más.

-Con arrugas siempre te veras hermoso. -le dijo Jungkook. -Respondiendo a lo otro, ¿no somos ya una familia?

-¿No crees que nos hace falta algo, o alguien? -

-¿Un perro? -Jimin negó con una sonrisa. -¿Un gato? -Jimin le dio un pellizco al pezon de Jungkook ante las respuestas.

El pelinegro se quejo con una sonrisa divertida.

-Jungkook, amor, para ser una familia completa nos hace falta un bebé. -le dijo Jimin.

La sonrisa que Jungkook tenía en su rostro, desapareció. No ha pensado en eso, por que realmente es un tema delicado y el cual no le gusta hablar. Y no por el hecho de que, no quiere ser padre, claro que quiere, pero, siempre se pregunta, ¿a costa de que? Si hay posibilidades de perder al amor de su vida, entonces no.

La expresión en el rostro de Jungkook fue tan notoria. El pelinegro se quedó callado.

-Amor... -le llamo Jimin. La idea de tener un bebé con Jungkook le agradaba de sobre manera, desde que se entero de que era un doncel, de que el podía traer a un bebé al mundo, siempre fantaseo con eso.

En como sería, en que se sentiría sentir todo eso.

-¿No estamos bien así? -le dijo Jungkook.

-No. Después del matrimonio vienen los bebés Jungkook. ¿Acaso tu no quieres un bebé? -pregunto temiendo la respuesta.

-Sí quiero. -le respondió, por lo que Jimin se alivio. -Pero, te olvidas de que un embarazo en un doncel es peligroso. Tu mismo lo dijiste. -

-Lo se, se lo que dije. Pero también se que puede ser posible traer un bebé. Yo quiero intentarlo.

-Sí sabes que el intento puedes morir verdad?. -

-Hay muchas probabilidades-

-No. -le corto Jungkook. Quito a Jimin de su regazo y se levantó.
-No te tomes este tema tan a la ligera. Estamos hablando de tu vida.

Jimin le miro. -No lo hago. Solo quiero ser positivo.

Jungkook negó, no había nada positivo en eso. Con el solo hecho de pensar en que podia pasarle algo malo y su corazón dolía.

-Mejor cenemos. -Le dijo Jungkook queriendo olvidar ese tema, y esperaba que Jimin también lo hiciera.

✿

Había pasado una semana, una donde Jimin sacaba el tema de tener un bebé, y Jungkook siempre desviaba el tema.

Y Jimin estaba llegando a su límite, nunca llegaban a algo, ya que Jungkook cortaba todo.

Habían llegado de la empresa, y Jimin tenía pensado volver a intentar tener una platica con Jungkook.

Se quito sus zapatos y los acomodo, Jungkook así lo mismo.

-Jungkookie... -le llamo, el pelinegro estaba en el sofá de la sala.

-¿Que pasa amor? -le dijo.

-Quiero hablar contigo.

-Sí es sobre lo mismo, ya sabes que-

-No podemos seguir aplazado esto Jungkook. Ya basta de hacerte el difícil. -le dijo algo exaltado.

Jungkook suspiro.

-Es difícil para mi Jimin, por favor entiende.

-¡Y quien me entiende a mi! -le grito levantándose. Miro a Jungkook algo enojado
-Yo quiero tener una familia, quiero tener un bebé. ¿Por que es tan difícil para ti aceptarlo?

-Jimin...

-No. No Jungkook. Desde que supe que era doncel, soñé tanto con este momento. ¿Sabes la felicidad que sentí al saber que dentro de mi puede crecer una vida?. Lo quiero. Quiero hacerlo. -le dijo al borde de las lágrimas.

-Somos esposos Jimin, no puedes tomar esta decisión tu solo.

-Pero no me estas apoyando. -

-¿Como quieres que lo haga cuando tu mismo te estas poniendo en peligro?. Creeme que te entiendo, el día en que me dijiste que eras doncel, también me imagine un hijo nuestro. También lo desee. Pero al saber que tu vida puede apeligrar, fue diferente. Las esperanzas de desvanecieron cuando mi madre me dijo que ella conoció a un doncel, uno que no sobrevivió al embarazo. Ambos murieron.

-Ese no puede ser mi caso.-Le respondió.

-¡Lo puede ser!.¿ Que no te das cuenta? Tu también ponte en mi lugar. ¿Crees que es fácil para mi pensar que puedes morir?. No deseo perderte. Prefiero seguir así como estamos solo nosotros dos, pero no ponerte en peligro.

-Hay mejores tratamientos Jungkook. -le dijo acercándose a él. -Por favor, podemos lograrlo.

Jungkook negó. -Hay muchas opciones Jimin, podemos adoptar incluso. -Ante eso Jimin dio dos pasos atrás, mirando a Jungkook.

-¿Crees que quiero adoptar cuando se que puedo quedar embarazado?. No quiero adoptar a un niño Jungkook, quiero tener uno mio, uno que lleve nuestra sangre.

-No estoy de acuerdo. -le respondió Jungkook.

Desde esa noche, las discusiones fueron de todos los días, los gritos, la incomodidad. Algo había cambiado.

✿

-¿Que pasa entre tu y Jimi? -pregunto un compañero de Jungkook, San.

El pelinegro miro a su esposo al otro lado de la sala donde estaban. Soltó un suspiro cansado, estaba estresado. Las peleas qué tenía con Jimin cada día eran más y más.

-¿Conoces de los donceles? -le pregunto. San asintió.
-Jimin es doncel.

-¿Y eso no debería ser una buena noticia? -le dijo el chico.

-El problema es que su embarazo puede ser peligroso. O muere él o muere el bebé. O en el peor de los casos, ambos.

Entonces San comprendio. Entendiendo por que Jungkook y Jimin se ignoraban cuando siempre estaban pegados.

-¿Y no te quieres arriesgar? -Jungkook asintió. -Te entiendo amigo.

-¿Lo haces? -Dijo mirándolo. El chico asintió. -Todos parecen estar del lado de Jimin. Pero nadie se pone en mi lugar. El solo hecho de pensar en algo catastrófico, me duele. Aveces me llego a creer que soy egoísta.

-No lo eres Jungkook. Solo tienes miedo de perderlo. Y es entendible. Yo digo que tienen que llegar a un arreglo. Dices que pelean todos los días, solo llevan cuatro meses de casados, y tanta discusión los puede llevar al divorcio.

Y Jungkook lo sabía, tantas discusiones y gritos podía llevarlos a la ruina de su matrimonio. Y no deseaba eso, no quería que su matrimonio con Jimin se acabará.

Y tenía miedo, miedo a ser dejado por Jimin por el simple hecho no querer tener un bebé con él.

✿

La hora de salida en su trabajo les habia llegado, Jungkook fue a la oficina de Jimin, toco y recibió el pase, el pelirosa guardaba sus cosas. Al ver a Jungkook no dijo nada.

-Está noche no iré a casa contigo. Puedes llevarte el auto. -Le dijo Jungkook. Jimin levanto el rostro tras escuchar eso.

Quizo preguntar por que, y Jungkook espero que le preguntara o siquiera le dijera algo. Pero no, Jimin solo asintió.

Jungkook lo miro una última vez antes de salir, no hubo un beso de despedida, nada, y le dolía la indiferencia de Jinin, le dolía qué sus amigos se pusieran al lado de Jimin.

Tomo un taxi y le dio la dirección para ir a un bar, necesitaba un trago fuerte, y por lo menos poder aliviar sus problemas un poco.

Cuando llego, tomo asiento en la barra, rápidamente pidió un trago.
Mientras lo hacía, pensaba en lo que su vida y su matrimonio se estaba volviendo.

Y mientras más pensaba en todo, en querer aceptar la propuesta de Jimin, las ganas de llorar llegaban.

Perdió la cuenta de cuantos tragos bebió, aún así sentía que podia mantenerse. Le pidió otro trato al barman y este algo dudoso le entrego otro.

Cuando creyó que fue suficiente, salió del lugar, se sentía un poco mareado, pero aún así empezó a caminar esperando encontrar un taxi y cuando lo hizo, dio la dirección de su casa.

✿

Ya era demasiado tarde y no habían señales de Jungkook. Jimin miraba la puerta esperando la llegada de Jungkook.

El hecho se que se encontrará enojado con el no quería decir que no se preocuparía.

Empezó a escuchar ruidos y se levantó del sofá cuando un Jungkook algo tambaleante empezó a entrar.

Estaba borracho.

Ambos se miraron a los ojos.

-Creí que estarías dormido. -le dijo Jungkook empezando a adentrarse al lugar, fue a la cocina y busco un vaso para tomar agua.

-Es tarde y me preocupe. -le dijo Jimin mirandolo beber agua.

-Lo siento. Fui a beber un poco.

¿Desde cuando hablaban con una tensión en medio?

-Jungkook, tu no eres así. -le dijo Jimin. Y es que, Jungkook era poco para el alcohol y esa noche se habia excedido.

-Solo estaba un poco estresado. -Le contesto.

-¿Por que?.

-Por todo Jimin, estoy estresado por todo. Por nuestras discusiones, por que tu quieres arriesgar tu vida. -

-Jungkook, ya hemos hablado de eso. Pero tu no me comprendes, tengo el apoyo de todos menos de ti. ¿Por que no te pones en mi lugar?

-Lo hago, carajo, lo hago. Pero tu tampoco me entiendes. Nadie lo hace.

-¿Y que debería entender? ¿Que no quieres formar una familia conmigo?

-¡No!. -le grito mirándolo. -Es que quieres morir Jimin, ¡eso quieres!. Por que es lo más seguro si quedas embarazado. Tu dices que me ponga en tu lugar, pero dime, ¿quien se pone en el mio? ¿Quien me apoya a mi?. ¿Lo has hecho tu? -le dijo mirandolo con sus ojos rojos. Jimin estaba igual, ambos al borde de las lágrimas.
-¡Tengo miedo! ¡Miedo a perderte, pero parece que yo soy el egoísta! ¡¿Crees que no quiero una familia contigo?! -las lágrimas empezaron a deslizarse por las mejillas de Jungkook.
-¡Yo también anhelo un hijo Jimin!.

Jimin también dejo salir sus lagrimas.

-Estoy harto, harto de ver a los chicos verme como si fuera el maldito villano. Dices que soy egoísta, pero tu también lo eres conmigo. Ambos lo somos Jimin.

Jungkook sentía sus lágrimas pesadas, llenas de dolor y resentimiento. Paso al lado de Jimin y tomo su billetera de la sala.

Jimin al verlo que volvía a ponerse su abrigo fue donde él.

-Jungkookie... -

-Dormiré en otro lugar.

-Jungkook...

Pero el pelinegro se fue, entonces Jimin se dejó caer de rodillas sollozando.

Dolía, dolía como el infierno. Lo que creía que sería un buen matrimonio, no lo estaban siendo. Y dolía pensar que lo que tenían se podía acabar.

✿