La resistencia que Jungkook tenía hacia los labios de Jimin era nula.

Ambos se encontraban en la biblioteca, en los pasillos más solos y hasta el fondo, ambos besándose como si fuera su última vez. Jungkook disfrutaba de tener el cuerpo de Jimin entre sus brazos. Mientras que el pelirosa disfrutaba de poder estar entre los brazos de Jungkook.

Cortaron el beso cuando el oxígeno les empezó a hacer falta. Se miraron con una sonrisa más que enamorada. Sus cuerpos seguían en la misma posición.

-¿Crees que los chicos nos estén buscando? -Preguntó Jungkook.

-No lo creo. Más bien creo que Tae sospecha algo. -Dijo Jimin. Y es que, al chico no se le escapaba nada.

Y la cercanía que estaban teniendo ya no era de amigos. Sin contar con que Taehyung sabía que a Jimin le gustaba Jungkook.

Jimin sabía que su amigo le diría muchas cosas y le daría los pros y contras. No se molestaría, por que sabía que Taehyung solo quería lo mejor para él. Así como el también quería lo mejor para su amigo.

-Taehyung es muy observador. No tengo problemas en decirles a los chicos lo nuestro, más bien, en que los demás lo sepan. -Jimin lo miro, sorprendido por las palabras de Jungkook.

Y es que, hace tan solo unos meses se había empezado a sentir atraído por un chico, y hace unas semanas se le había confesado ¿como es que podía decir eso?

Él ha conocido a chicos que tardan mucho en salir del closet, o siquiera que la sociedad sepa de sus gustos. Por lo que le sorprendía las palabras de Jungkook. Con sus amigos no había problema, pero con las personas de la Universidad, es decirles a todos que le gustan los chicos y esta con uno. Hay quienes que aún son quisquillosos con esos temas.

-¿Enserio no tienes problemas en que la Universidad lo sepa? -Pregunto Jimin.

Jungkook sonrió, lo atrajo más a su cuerpo y le beso los labios gustoso.

-¿Por que tendría problemas? Más bien estoy orgulloso de tener a un chico tan lindo como tu en mi vida. Que todos sepan lo mucho que me gustas. Lo que siento por ti, no es algo que desee esconder. Mucho menos que tu seas un secreto.

Y si Jimin pensó que Jungkook sería igual que su pasado, se equivoco. Por que Jungkook es diferente, diferente a como luce, por un momento creyó que Jungkook le diría que mantuvieran su "relación" en secreto, ya que, habían muchas cosas que pensar, y quizás no podía ser fácil para el todo el cambio.

Pero no, el chico pelinegro le acababa de decir que no tenía problemas. En que él no sería un secreto, como un día fue.

Entonces, sabía que Jungkook no le haría sufrir, y poco a poco esas inseguridades Jungkook las estaba borrando con sus palabras y con sus hechos. Cada día le sorprendía el chico pelinegro.

No tenía por que tener miedo con contarle su pasado, si él lo hizo, ¿por que el no abrirse a Jungkook de esa manera?. Como su madre dice, la comunicación es algo vital en una relación, y sin ello, entonces no hay futuro.

-Te quiero, Jungkook. -abrazo al mencionado y Jungkook sonrió.

-También te quiero, Jimin.

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Hana miraba a su hermano con los ojos entrecerrados, el pelinegro miraba el teléfono con una sonrisa y tecleaba rápido.

Ella tenía sospechas, pero necesitaba confirmarlo.

Su madre que iba bajando con un vestido rosa con flores y algo despeinada debido a que estuvo trabajando en nuevas esencias miro a su hija, quien no le quitaba la mirada a Jungkook.

-Mami. -Dijo cuando se dio cuenta de la presencia de la mujer. Ella se sentó al lado de su hija.
-¿No crees que Jungkook esta sonriendo mucho al teléfono? -Dijo.

Su madre sonrió y asintió.

-Creo que tu hermano pasa muy pegado a ese aparato.¿Sera qué mi hijo encontró a una linda chica y aún no me la presenta? -Dijo ella fingiendo indignación.

Jungkook quien escuchaba a las dos mujeres de su corazón, sonrió por las palabras de ellas y por la conversación que tenia con Jimin. Este, le estaba diciendo que sus padres viajarían a Ganman para visitar a su abuelo, pero como el tenía exámenes no podia ir.

Y lo más probable era que de quedaría solo en casa, ya que, Nam pasaba más tiempo con su novia y Yoongi encerrado en su habitación, era como estar solo.

Jungkook las miro, su hermana lo miró penetrante, mientras que su dulce madre esperaba la respuesta.

-Si encontré a alguien madre.-su madre sonrió más amplio y fue donde su hijo.

-¿Si?. ¿Como es? ¿Debería prepararle una fragancia? -Dijo ella. Jungkook sonrió por las palabras de su madre.

Ella estaba feliz de que su Jungkook encontrará alguien después de todo lo que le habia pasado en Busan.

-Es la persona más dulce y hermosa del mundo.-Le respondió.

-Oh, suenas enamorado hijo. -Le dijo ella. Jungkook analizó y pensó en las palabras, quizás lo que sentía por Jimin era más fuerte.
-¿Como se llama la chica?.

-¿Que dijeras si te digo que no es chica? -Pregunto Jungkook. Sabía que sus padres tenían una mente abierta, ya que, cuando Hana les confesó que le gustaban las chicas, ellos la apoyaron sin importar nada.

-¿A que te refieres? -Pregunto sin entender.

-¿Y si en ves de una chica, es un chico? -Volvió a preguntar. Su madre guardo silencio unos momentos. Luego, miro a Jungkook, él pelinegro también miro a su madre intentando comprender la expresión que tenia en su rostro.

-¿Te enamoraste de un chico? -Preguntó cautelosamente.
Jungkook asintió. -No te negare que me sorprende, ya que. Bueno, toda tu vida has dicho que te gustan las chicas. Pero, eres mi hijo Jungkook, y te amo sin importar si te gustan los chicos. -

-Me gusta solo él madre. -

-¿Como se llama? ¿Cuando lo traerás a casa? -Dijo ella.

-Se llama Park Jimin.

-¡Lo Sabía! -grito Hana, quien se había mantenido callada.
-Jungkook, hermano, eres tan obvio, lo miras como si quisieras comertelo. -Dijo ella.

-Jeon Hana. -le reprendio él.

-Es la verdad. Aunque te entiendo. Minie es tan lindo. -Dijo suspirando. Jungkook la miró mal. -Mamá, te juro que te enamoraras de él. Tiene su cabello rosa y luce también hermoso.

-Pareces enamorada tu también m-Le acuso su madre. Hana negó.

-Claro que no. Solo es que Jimin tiene una vibra que te envuelve.

-Bien, espero conocerlo pronto.

Jungkook asintió.

✿

Esa misma noche Jungkook salió de su casa directo a la de Jimin.

Ya que, le iría a hacer compañía, Jimin le dijo que mirarían una película y comerian chucherías.

Cuando llego a la casa de Jimin, antes de la hora, Jimin estaba con una camisa que le llegaba a mediación de sus muslos. Los ojos fueron a sus piernas descubiertas.

-Jungkookie, pasa. -Dijo con las mejillas sonrojadas. Mientras que Jungkook lo hizo, no sin antes besar los labios de Jimin. Toco sus orejas y estaban calientes.

-Creí que vendrías más tarde. -Dijo Jimin mientras subían las escaleras. -Estaba pintándome las uñas. -Le mostró sus manos, las cuales solo una de ellas estaban completas, y su otra mano le hacían falta. Pero se le complicaba un poco.

Taehyung era quien le ayudaba siempre.

Y como el pelirosa dijo, un esmalte color verde estaba en su cama.

-¿Quieres que te ayude? -Dijo de repente Jungkook.

Jimin asintió con una sonrisa. Jungkook se quito la chaqueta quedando en una camisa blanca pegada a su cuerpo.

Se sento junto a él. Jimin estaba sentado en forma de indio, en una de sus piernas puso su mano para que Jungkook le pintaras las uñas restantes.

El pelinegro empezó a hacer su trabajo, por ratos manchando el dedo de Jimin, limpiaba rápido y volvía a su trabajo.

Jungkook estaba demasiado concentrado en lo que hacía. Tanto que no sintió la mirada de Jimin, quien lo miraba con una sonrisa, solo Taehyung o Jin le habían pintando las uñas, ya que Hoseok siempre hacia un desastre.

Pero allí están él. Haciendo algo que nunca imagino hacer.

-Listo. -Dijo Jungkook. Satisfecho con su trabajo tapo el esmalte.

Los labios de Jimin se impactaron contra los de él.

-Es tu pago. -le dijo Jimin con una sonrisa.

Jungkook se acercó más a él -Creo que no fue suficiente. -le dijo cerca de sus labios. -¿No crees que merezco otro más por mi arduo trabajo? -Jimin lamio sus labios bajo la atenta mirada de Jungkook.

Quién ante ese acto se Jimin, no pudo evitar besarlo, metiendo su lengua sin previo aviso. Sus labios se besaron lentamente con sus lenguas chocando entre si.

Jungkook por inercia puso su mano en uno de los muslos de Jimin sintiendo la piel suave del pelirosa. El beso empezó a intensificarse y con ello una necesidad creciendo dentro de ellos.

Jungkook dio un leve apretón al muslo de Jimin antes de separarse. Cuando lo hicieron, se miraron a los ojos con una sonrisa.

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Si no te pinta las uñitas como Jk a Mimi, amiga, ahí no es.