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El corazón de Hyunjin se había llenado de gratitud.

Jinsoul le dedicó una sonrisa, aún ruborizada. Antes de soltar el abrazo, miró hacia la mano de la Omega, tomándola para alzarla frente a su rostro, viendo la piel algo rojiza e hinchada de ésta.

一Te quemaste con el ramen 一dijo, y Hyunjin pareció avergonzarse.

Jinsoul la soltó para abrir uno de los cajones de la cocina, dejando ver algunas cajas de medicamentos y otras más pequeñas con algunas cremas. Leyó algunas cajas hasta encontrar la que buscaba, cerrando el cajón con el pie al pararse.

一Toma, es para quemaduras 一dijo, dándole la cajita a Hyunjin.

Tomó ambos tazones de ramen y los llevó a la mesa y agradeció a Hyunjin por la comida, la Omega respondió con una sonrisa mientras se hacía masajes en la mano con un poco de crema, para que se absorbiera bien.

Comieron en silencio hasta terminar todo lo que tenían servido, Jinsoul volvió a llenar el cuenco con más comida por lo rico que estaba.

Hyunjin esperó en silencio a que Jinsoul terminara su comida, y se levantó con intención de sacar los platos y lavarlos, pero Jinsoul la apartó.

一No hagas nada, Hyunjin, con cocinar fue suficiente 一dijo Jinsoul, pasando lo que habían usado al lavamanos de la cocina, abriendo el grifo.

Hyunjin sólo asintió, y volvió a sentarse en la mesa, viendo a Jinsoul de espaldas a ella.

A la pelinegra le parecía preocupante la actitud que había tomado Hyunjin en tan pocos minutos. El cómo se había puesto sensible y había insistido en irse, cuando días antes casi rogaba por quedarse, su loba interior estaba inquieta, quien también quería saber por el cambio brusco de la Omega.

一Creo que lo mejor será irme en la noche.

Las palabras habían sonado tan distantes, con tan pocas ganas y sentimientos, casi monótonas.

A Jinsoul se le cayó el cuenco que estaba lavando, haciendo un ruido fuerte al chocar contra el metal del lavamanos, y salpicando un poco su ropa.

一¿Unnie? ¿Está bien?

Jinsoul no pudo hablar, su vista se nubló un poco. Apretando los dientes, se giró, acercándose a Hyunjin e inclinándose sobre ella y quedando a pocos centímetros del rostro de la Omega.

一No.

Su voz había salido de lo más profundo de su pecho, en un tono que hacía mucho tiempo no usaba y creía perdido.

Casi pudo ver a la loba de Hyunjin bajar las orejas con algo de miedo ante su voz de Alfa.

Jinsoul negó, despejando su vista. No era la forma correcta de hacerlo, debía hablar de forma civilizada con Hyunjin.

一Mira, Hyunjin... Sé que vas a irte, pero no tiene que ser hoy 一dijo, su voz sonaba calmada, lo que relajó un poco a Hyunjin一, tampoco tiene que ser mañana, en serio, sólo... Quédate un poco más, quizás hasta que termine tu celo. Yo... Tampoco quiero que andes como una Omega en celo por la calle, abandonada por allí, con ese olor tan lindo que tienes nadie podría resistirse, no quiero imaginar qué harían otros... 一sin darse cuenta, había llevado una mano al rostro de Hyunjin, y acariciaba su mejilla con ternura. La Omega se inclinó un poco más al tacto.

Hyunjin asintió.

一Está bien, Jinsoul unnie 一dijo一. Me iré cuando mi celo termine.

A Jinsoul le dolió un poco el corazón ante eso, pero al menos podría tener a Hyunjin unos días más.

Volvió a terminar de lavar las cosas.

一Y dime, Hyunjin, ¿Cómo son tus celos?

Jinsoul sabía que generalmente el celo de los Omegas duraba un par de días, en los cuales su olor se incrementaba considerablemente, sumado a las molestias de sus órganos reproductores; y tendrían una necesidad casi insaciable de sexo, por su instinto de lobo de reproducirse.

Aunque podía ver que Hyunjin controlaba bastante bien el tema del sexo, porque hasta ahora no había notado que la chica pidiera consolarse.

Jinsoul nunca había acompañado a un Omega en celo, pero su madre le había explicado bastante bien las cosas.

Su madre, a pesar de ser una Beta, tenía muchas amigas Omegas y conocía tan bien como ellas mismas el tema de los celos, y no se había molestado cuando Jinsoul le pidió que le dijera cómo eran.

Pero también tenía entendido que el celo podía variar entre Omega y Omega. Para algunos duraba menos días, otros un poco más, algunos sufrían malestares y otros no. Incluso, había Omegas que tenían necesidad de reproducirse toda una semana.

Al no escuchar respuesta, Jinsoul miró sobre su hombro a una ruborizada Hyunjin que jugaba inquieta con sus dedos.

一Hyunjin一la omega alzó la vista hacia sus ojosㅡ, no tengas vergüenza. Si se supone que soy tu Alfa, debería conocer tus celos.

Hyunjin sonrió un poco.

一Pues... No son nada muy fuera de lo común. Comienza con mi olor, que se incrementa de a poco los días anteriores al celo, hasta que éste comienza y se mantiene igual de fuerte por unos tres o cuatro días, no sufro de malestares de vientre fuertes pero sí de dolores de cabeza, aunque sólo los primeros dos días. Puedo controlar bastante bien el tema de... Querer reproducirme...

一Follar, Hyunjin 一dijo Jinsoul一, dilo sin vergüenza. Si no te gusta esa palabra tienes otras para lo mismo: sexo, ñiqui ñiqui, hacer el amor... Si es que quieres hacerlo un poco más romántico.

一Unnie, un tronco muerto es más romántico que usted 一dijo la Omega con una sonrisa一. No seré romántica.

>> Pero sí hay algo que deba saber de mis celos... Pues, mis ganas de follar van aumentando conforme los días, y mi loba se hace un tanto incontrolable con ese tema, y exige más atención con el paso de los días.

>> Los primeros días lo voy controlando bien, no parece que esté en celo, menos por mi olor, claro. Por eso es que yo tampoco me doy cuenta muy rápido de que llegó.

Jinsoul asintió, escuchando atentamente.

一Aunque puede que este celo sea algo diferente a los demás 一la voz de Hyunjin sonó más tímida一, considerando que estoy contigo, y que eres mi Alfa, y mi loba está más inquieta que antes y quiere... 一la Omega estaba totalmente ruborizada, se mordió el labio, dejando de hablar.

Jinsoul rió un poco, sintió la ligera vergüenza de la menor, y la miró con una sonrisa amable.

一¿Tienes la necesidad de follar conmigo? 一completó, en tono algo egocéntrico.

Hyunjin frunció un poco el ceño. Jinsoul no se tomaba en serio, o no de la misma manera que hacía Hyunjin, el tema del celo.

一Tú nunca... Pasaste un celo con nadie, ¿verdad? 一la pregunta de Jinsoul sonó bastante tímida.

Hyunjin negó.

一Pasaba la mayoría del tiempo con mi abuelita 一dijo一, ella es la única Omega en la familia a parte de mí. Es mi gran apoyo en temas de Omega, y en temas de la vida en general...

>> Cuando llegaba mi celo me quedaba con ella, tiene una casa detrás de la de mi familia, más acogedora y agradable que en la que "vivo" 一las comillas destacaron el hecho de que Hyunjin no pasaba nada de tiempo en su casa一. Ella me cuidaba todos los días que duraba el celo y para los últimos... Pues ella también guardaba mis juguetes 一se ruborizó mucho más con esa última frase.

Jinsoul esbozó una sonrisa, asintiendo. Secó sus manos en sus pantalones, ya terminada la tarea de lavar.

一Unnie 一la voz de la Omega sonó muy baja, tímida. Jinsoul la miró sin decir nada一... Entiendo que usted pues... No tenga... Cuando yo no pu-pueda... Eh~

Jinsoul alzó una ceja.

一¿Podría-ayudarme-en-mi-celo?

La pregunta sonó apresurada; las palabras que salieron todas amontonadas, y el tono tan inseguro de Hyunjin hicieron a Jinsoul tardar un momento en traducir lo que había dicho.

El calor subió a su rostro y su corazón de aceleró.

Dentro de su pecho, su loba también estaba algo nerviosa, pero a su vez emocionada, y corría en círculos.

Hyunjin alzó un poco la vista, para mirar con timidez a Jinsoul.

一Hy-Hyunjin-

一Está bien, olvídelo 一la Omega sonaba decepcionada, y comenzó a levantarse de la silla.

Jinsoul la tomó por los hombros y volvió a sentarla, recibiendo una mirada confundida por parte de Hyunjin.

一Sí, Hyunjin 一dijo一, te ayudaré.

Hyunjin comenzó a sonreír de a poco, estirando sus labios, abultando sus mejillas y haciendo de sus ojos dos líneas.

Una sonrisa muy linda que la hacía ver más linda.

A Jinsoul se le contagió un poco esa sonrisa.

一No tiene que hacerlo si no quiere, unnie 一Hyunjin ladeó un poco su cabeza, sonriendo一. No quiero que se sienta obligada.

Jinsoul negó.

一No lo digas como si fuera una obligación, como ir a la Universidad o cumplir horario de trabajo, Hyunjin... 一dijo一. Esto es... Diferente. Quiero ayudarte, tal como te ayudo a permanecer escondida, quiero... Ayudarte con eso también.

Hyunjin sólo continuó sonriendo, con las mejillas abultadas y totalmente rojas.

一Prometo ayudarte.

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