Advertencia: Lenguaje vulgar.

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Saori tenía le día libre, Keiichi le llamó para verse en el centro, planeaban comprar unas cosas. Pese a que su esposa no tenía ni tres meses de embarazo, y el ya quería buscar todo tipo de prendas.

—Debemos organizarnos si aún falta todo esto— Saori le dió un vistazo a la lista.

—Voy a comprar lo demás y tú puedes buscar el libro de cuidados— Keiichi llevaba dos bolsas.

—Que padre tan moderno.

Saori tomó el dinero de Keiichi, debía apurarse para verse con su hermano en la cafetería frente al centro comercial.

La librería se encontraba frente de un puesto abandonado de videojuegos que estaba grafiteado por todas lados y en mal estado.

~Saori~

—¿Es necesario el libro?— Le dí un sorbo a mi bebida dirigiendo mi vista al mismo.

—Sayuri quiere que este preparado cuando el bebé venga— escuché que soltó un suspiro.

—Es genial que se preocupe tanto por su hijo, pero no debería estar preocupada por ti— Le dí una mirada severa.

—Lo sé, pero si te soy sincero estoy nervioso.

—No tengo hijos, ni sé cómo debe ser la paternidad— suspiré cerrando los ojos —Pero has sido la mejor persona que me pudo haber cuidado, y solo eres mi hermano, supongo que serás incluso mejor con el bebé— los abrí encontrándome con los ojos llorosos de Keiichi.

—Saori-chan— se limpiaba las lágrimas con sus mangas —Eres tan buena con tu tonto hermano.

—Oye, controlate llorón, las personas nos ven— susurré tratando de tranquilizarlo.

—Es que yo te he descuidado y tú mereces más.

—No está tan mal, hasta tengo un amigo nuevo— recordé los preciosos ojos de Hanma.

—¿Amigo?— su expresión cambio de inmediato —Cuentame.

—No, me haces pasar vergüenza.

—Me retracto, eres muy mala conmigo— sorbio sus mocos.

—Solo es un chico, al cual conocí hace poco, pero me agrada.

—¿Es el que te llevó a casa?— sus ojos tenían una chispa, no sabía si era de furia, o curiosidad.

—Ese mismo, es muy amable— llevé la malteada a mi boca.

—Necesito detalles.

—No, porque si te sigo el juego terminarás conociendolo y después te robas a mis amigos— me reí después de ver su cara decepcionada.

—Solo fué una vez, y eso porque Hiromi prefirió ver el partido conmigo que ir contigo— nos quedamos intercambiando miradas.

—Es un buen chico, y también es alguien ¿gentil?— no conozco muy bien a Hanma, y no podía decirle "Es un pandillero que va cuando termina de pelear" así fue lo que atiné a decirle.

—Pues si te acompañó a la casa solo porque era tarde me parece un buen sujeto— Me dió su asentimiento de aprobación —Pero que no se pase de listo, recuérdale que tú hermano es agente de policía.

—Todos temen de mi hermano— negué con la cabeza —Pero mírate, estás moqueando.

Estuvimos conversando un poco más, de como estaba su esposa, el como le dieron la noticia a sus suegros y como quedó noqueado por el padre de Sayuri que también es superior de Keiichi.

Íbamos camino al auto cuando ví entre la multitud los ojos ámbar que tanto me gusta mirar, era Hanma con quién hice contacto visual. Caminaba en dirección opuesta a la mía, vestía una chamarra gris con letras negras y detalles rojos.

Andaba junto a otro chico, más bajo que el y con un arte de cascabel. De inmediato se perdieron entre la multitud, pero pude ver una sonrisa en su cara.

—Saori— escuché la voz de Keiichi —¿Te pasa algo?.

—Nada, solo me pareció ver a un conocido.

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Después del encuentro momentáneo con Saori, Hanma llegó al local de videojuegos abandonado era donde se reuniría Valhalla.

Hanma tenía que aguantar a Kazutora, tal como Kisaki le dijo fue a reclutarlo.

Sin dudas Kisaki era una persona que traía adrenalina a la vida del chico, no sabía si era felicidad, o diversión, pero trataba de llenar ese vacío que existía en su corazón desde hace mucho tiempo, trato con todo, tatuajes, cigarrillos, alcohol, pero ya nada le motivaba, no producía mucha reacción en el.

Pero el día que Saori le propuso ser amigos fue la primera vez en mucho tiempo que sintió algo sin necesidad de golpear a otros.

No se atrevía a mandarle otro mensaje, ¿que le contestaría? ¿"Ahora tengo el número de un acosador"?, era gracioso, pero si de verdad le incomodaba dejaría de serlo.

Ella era muy simple, pero lo hacía ponerse nervioso, y con sensaciones extrañas que descubrió recientemente que no le gustan.

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Finalmente en casa Saori saco su teléfono, aún no tenía ningún mensaje.

No tenía nada de malo tomar la iniciativa de hablar con el, pero si lo interrumpía quedaría como estúpida, así que lo postergó hasta la noche.

"Buenas noches Hanma"

Al leerlo Hanma estaba fumando montado en su motocicleta, solo sonrió antes de contestar.

"Eres molesta, ¿No deberías estar durmiendo?"
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~Lindo~

Muchas gracias por leer amixes.✨