Advertencia: Spoiler del manga (yo solita me antoje)

~10 de diciembre~

Hanma tomo el raro hábito de ir aunque fuera solo unas horas a su casa, Saori últimamente estaba ocupada con los estudios, el examén para entrar a la universidad está cada vez más cerca, y a solo una semana de sus vacaciones debía dar un último "empujón".

—Oye, dame algo de beber— estaba sentado en el sillón mientras la más baja estudiaba en el comedor.

—Toma lo que quieras del refrigerador— contesto con simpleza.

El más alto se paró y al caminar junto a Saori notó que la joven estaba atorada en un problema de matemáticas.

—Eres tonta, se hace así— se acercó quitando el lápiz de su mano y corrigiendo unos números.

—Eres inteligente— Saori parecía sorprendida.

—¿Pensabas que era un puto retrasado?— comento Hanma con un tono indignado.

—No es eso, solo que me sorprende, ¿no has pensado en volver a la escuela?— preguntó mirándole directamente a los ojos.

—Es jodidamente aburrido— se encogió de hombros para después sentarse junto a ella en la mesa.

La menor trataba de concentrarse pero era imposible.

—Oye— habló llamando la atención del ojiambar —¿Por qué siempre buscas diversión?.

—Porque cualquier persona busca la felicidad en la vida— Hanma desvío la mirada de los ojos marrones.

—Son cosas distintas.

—Estoy seguro que es lo mismo— contestó riendo.

—La felicidad es más como plenitud, y la diversión es más momentánea— trató de comunicar esto de la manera más suave posible.

—Para mi es imposible estar pleno— tomó un cigarrillo y lo colocó entre sus labios.

Saori solo señaló la ventana y Hanma se dirigió a ella para poder fumar, era un acuerdo al que llegaron. Pasaron los minutos hasta que Saori abrió la boca otra vez.

—El fumar produce cáncer— comentó para después sacar otro cuaderno de su mochila.

—Que muerte tan más puta aburrida— el de mechas rubias exhaló el humo.

—Ni siquiera se disfruta— señaló el cigarrillo entres sus labios.

—¿Lo has probado?— Hanma arqueó las cejas con una sonrisa santurrona.

—Una vez, pero no fue agradable— Hanma solo la miro —Sentí como si me hubiera quemado la garganta— explico un poco avergonzada.

—Ya veo— una idea cruzó la retorcida mente de Hanma.

Procedió a darle la última calada, reteniendo el humo mientras tiraba la colilla, así se acercó a la menor.

Saori pudo sentir como una mano levantó su mentón, para después ver la cara de Hanma acercarse a la de ella en cuestión de segundos.

Sus labios terminaron uniéndose, la cara de Saori estaba roja, y sus ojos cedieron al contacto cerrándolos, acompañados de una pequeña descarga eléctrica que se dió en su columna vertebral.

Sintió el humo en su boca, y aunque esto le desagradaba un poco, en ningún momento aparto a Hanma, quien posó su mano libre sobre la mesa, ninguno de los dos se atrevió a mover los labios, ambos por miedo al rechazo del contrario

Estuvieron así unos segundos más, hasta que el ardor en la garganta de Saori fue insoportable y tuvo que apartar la cara para toser. Hanma tenía una sonrisa orgullosa mientras se enderezaba.

—Si, definitivamente alejate de los cigarrillos.

Saori estaba roja y su cuerpo comenzó a subir de temperatura, después del ataque de tos estaba jadeando, está era una vista simplemente espectacular para Hanma.

—Debo irme— sentenció para después salir por la ventana.

El pecho de Saori subía y bajaba rápidamente, sus labios temblaban, esa sensación fue agradable.

~•~
~17 de diciembre~

Durante la siguiente semana ninguno menciono nada de lo que pasó, pero ambos pensaban constantemente en eso.

Hanma estaba tumbado en el sillón de Saori, quien hacía notas en su cuaderno, de a ratos Shuji la veía de reojo, tan concentrada, en su propio mundo.

La menor vestía una camisa blanca con mangas largas y unos jeans negros, sin duda a Shuji le gustaba como un estilo tan simple le quedaba bien.

—Oye— la menor le hablo haciendo que el mayor la viera —¿Quieres dar una vuelta?— preguntó cohibida.

—¿No se supone que debes estudiar?— contesto el más alto.

—Lo sé, solo que estoy agotada— guardó sus libretas.

Hanma solo se puso de pie, y pudo notar como sus uñas estaban mordidas, Saori de verdad estaba estresada.

—Vamos— caminó hasta la ventana para después cruzarla.

—Esta bien si no quieres.

—Sal antes de que me arrepienta— una sonrisa ladina se postró en sus labios, mientras estiraba la mano para que Saori saliera con más facilidad.

—¿A dónde vamos?— dijo tomando sus llaves para comenzar a caminar en dirección al mayor.

—Deja de joder— le tomó la mano para asegurarse que no caería.

Hanma le dió su casco y empezó a conducir su motocicleta, la más baja recargo completamente su peso en la espalda del ojiambar, pero esto no le incómodo.

Terminaron junto a un pequeño arroyo.

Saori al ver que Hanma la llevo a ese lugar para distraerse no pudo más, y sus ojos se pusieron cristalinos. No era la más inteligente, pero siempre trato de esforzarse, y últimamente eso ya no era suficiente, no quería decepcionar a su familia.

—Si lloras te patearé el culo— dijo Hanma sacando sus cigarrillos para después prender uno.

—Es que a veces es difícil— la menor se puso de cuclillas frente al agua —La escuela es desgastante— limpio las gotas rebeldes que bajaban por sus mejillas.

Hanma la contempló en silencio y desde lejos.

—Pero gracias a ti los días son más alegres.

Saori perdió el equilibrio al ponerse de pie, haciendo que cayera de cara en el arroyo.

—Mierda— de inmediato se acercó para ayudarla.

La menor se levantó de inmediato, por lo que Hanma no pudo ayudarle, solo la miro, la muchacha se reía, había olvidado que en el mundo real no solo se siente bien sacar buenas notas.

Por un momento una risa salió de Hanma, hasta que bajo la mirada notando como aquella camisa blanca se volvió totalmente transparente, dejando ver las líneas de su sostén, y apegandose al abdomen de la mas baja.

Se quitó la sudadera y se la puso en frente.

—Puedo ver tu brasier.

La cara de Saori se puso más seria, el color carmín apareció de inmediato y se colocó la sudadera para después sentarse en el pasto.

—Ya sabía que eras estúpida, pero de verdad trata de no caerte cerca de mi— los dos se quedaron en silencio, Hanma no haría ningún movimiento antes que la azabache.

—Me gusta pasar el tiempo contigo— colocó su mano sobre el tatuaje del contrario.

—Eres desagradable cuando hablas así— contestó junto a un suspiro, pero en ningún momento aparato la mano.

~Que chico tan malo~

Yo pienso que Hanma es muy listo, pero actúa como tonto.😔

Espero que les guste el capítulo, muchas gracias por leer.❤️