31 de Diciembre, un día muy ajetreado para muchos dado a las cenas de fin de año, y era mucho mas ajetreado para los que no había comprado nada, la razón por la que momo se encontraba en ese centro comercial ella sola, sí, sola, ya que Dahyun y las demás se habían quedado adelantando lo que faltaba mientras ella compraba lo de la cena.

Aún no sabía porqué le había encargado a ella lo de cena, todas, hasta ella, sabían que la japonesa era muy despistada y nada paciente, pero ahí estaba caminando por todos lados entre la gente con un gran lista en la mano. Según ella la cena solo era un pavo y puré ¿Por qué necesitaban tantas cosa?

A pesar de todo terminó mas rápido de lo que pensaba, aunque sus pies ya dolían pasa su suerte podía llevar el carro de mercado hasta su auto, pero en el camino al estacionamiento vio un puesto de helado, así que decidió parar para comer uno, llevaba casi dos horas caminando, se merecía un helado. Cinco minutos después estaba sentada en una banca mientras comía su helado felizmente.

La multitud de personas ya empezaba a ir, lo que ya no obstruía su vista, al frente de ella vio algunos puestos de artesanías, en uno ellos había algo que llamó su atención, una guantes de bebé tejidos en lana, eran de color rosa pastel, eran de su color favorito, así que se acercó, cuando estuvo frente a este vio algo que le llamó aún más la atención, una pequeños zapatos que simulaban unos converse, se le hicieron muy familiares, al bajar la vista que vio que eran exactamente iguales a los que ella tenía puestos, lo que la hizo sonreír.

- ¿algo en específico que estés buscando? - la chica encargada del puesto le habló haciéndola voltear.

- No, no, gracias, solo estoy viendo - En ese preciso momento ella misma se estaba preguntando que estaba preguntando porqué estaba viendo cosas de bebé, pero por alguna razón no podía dejar de ver eso pequeño conjunto de guantes y zapatos - ¿Sabes qué? Si quiero algo, dame esos guantes y los zapatitos converse.

- ¿Bebé en camino? - preguntó la chica mientras empacaba cuidadosamente las cosas.

- Eh n-no solo - ni siquiera ella sabía el porqué las estaba comprando, cierto, la hija de Lisa, le debía un regalo, o al menos de eso trató de convencerse ella misma - son para la Hija de una amiga - apresuró decir recibiendo un asentamiento de la chica - ¿aceptas tarjeta? - recibió otro asentimiento.

En minutos ya estaba en su camioneta de camino a casa, todas las bolsas de compra estaban en el baúl, menos la que tenía los guantes y zapatos, esa estaba en el puesto del copiloto, cada cierto tiempo le daba un vistazo, no sabía cómo una simple ida al centro comercial la había confundido tanto.

Cuando llegó a su casa, en donde sería la cena, algunas de sus amigas la ayudaron a bajar todo y ponerlo en la cocina, ya todo estaba listo, bueno todo menos lo que había comprado Momo, sacó las cosas de la cocina en completo silencio, muy pensativa y callada, la japonesa nunca era así, y Dahyun se dio cuenta de eso, sacándola de su trance mientras la abrazaba por la espalda dejando su mentón en el hombro de Momo.

- ¿todo bien? - preguntó en tono muy suave casi susurrando, Momo asintió, pero sabía que eso no iba a calmar a su esposa, así que habló.

- había muchas personas en el centro, me maree un poco - en parte era verdad, pero no le quería decir lo demás, ni siquiera que ella sabía lo que tenía - me voy recostar un rato, si necesitan algo me avisan - volteó quedando frente a la más baja dándole un corto beso en los labios y una pequeña sonrisa, para después retirarse, no sin antes agarrar la bolsa en donde estaban los guantes y los zapatos.

Momo llevaba casi media hora acostada en su cama viendo el techo, acariciando los pequeños guantes de lana, eran muy suaves, le daban calma y un sentimiento de seguridad, pero al mismo tiempo la confundían mucho, o solo era ella que no lo quería aceptar.

¿En serio quería ser madre?

Nunca había pensado en eso, le gustaban los niños, pero nunca pasaba mucho tiempo con ellos, ya que era muy torpe, demasiado, varias de sus amigas hasta tenían cuidado de ella cuando estaba cerca de sus hijos, ella lo entendía, su torpeza era algo que no podía controlar mucho, sus amigas no lo hacían con mala intención y hasta ella misma se hacía a un lado cuando se trataba de niños.

Uno de los peores días de su vida fue cuando por culpa de su torpeza rompió el brazo de Hyunseo, la pequeña hija de Jihyo y Somi, ella y la pequeña de cuatro años, en ese tiempo tres, estaban jugando, Momo la llevaba en hombros mientras saltaban y reían, hasta que cable en suelo se enredó en los pies de Momo haciendo que cayeran, cayó sobre el pequeño y débil brazo de la niña, rompiéndolo.

Hyunseo no fue la única que lloró ese día, Momo se la pasó toda la noche hecha bolita en su cama mientras lloraba, ya que no fue capaz de ir a al hospital, la culpa no la dejaba, el doctor dijo que no le había dejado daños a largo plazo lo que era bueno, pero eso no le quitaba la sensación de culpa.

Desde ese día ella misma trató de no acercarse demasiado a los niños, talvez una pequeña palmada en la cabeza, y hasta ahí, no se iba a arriesgar.

Pero ahora estaba hablando de un hijo propio, ¿en serio estaba preparada para eso? Era demasiado torpe con niños algo grandes, imaginar lo que le pasaría un bebé recién nacido le daba pánico.

Además, llevaba ocho años de relación con Dahyun y tres casadas, y la menor nunca sacó el tema y ni en manera de chiste, o al menos no con ella, tal vez sabía lo torpe que era Momo y le daba miedo, Momo era como una bomba que iba a explotar en cualquier momento ¿Quién querría eso cerca de un bebé?

Todos esos pensamientos estaban atormentando la mente de la Japonesa, a tal punto que sintió algo húmedo correr por sus mejillas.

Estaba llorando.

Ahora se sentía impotente, sentía rabia hacia ella misma, se preguntaba porqué tenía que ser tan torpe y descuidada.

Unos toques a la puerta la asustaron, haciendo que se limpie las lágrimas lo más rápido que puedo con el torso de su brazo.

- Amor ¿Ya estás mejor? - la voz de Dahyun sonaba preocupada, Momo no salía de ese cuarto desde hace tres horas - Ya está la comida, solo falta que nos arreglemos, sé que no te gusta el Pavo, así que te preparé Jokbal - Dahyun abrió la puerta de la habitación encontrándose con Momo, la cual estaba sentada en la orilla de la cama aún restregándose se los ojos.

- Ya estoy mejor - Mintió - me doy un baño y bajo enseguida ¿O te vas a bañar tu primero?

- Los otros baños están ocupados, así que me quería bañar acá arriba.

- entonces date un baño, te espero aquí - volvió a recostarse en la cama, mientras Dahyun entraba al baño.

Dahyun se estaba vistiendo, mientras Momo se bañaba, no iba a demorar mucho ya que ella no era de las que elegía que ponerse cuando salía del baño, sino que ya tenía su ropa elegida tiempo antes, el Maquillaje casi siempre era algo natural, siendo los labios lo más destacable.

Un elegante, pero sencillo vestido negro de tirantes delgados, con escote en la pierna y espalda descubierta, solo le faltaba el maquillaje y los tacones.

No encontraba sus tacones, así que decidió buscar bajo la cama, cuando se agachó para agarrarlos vio la bolsa con los guantes y zapatos que había comprado Momo, los guantecitos estaban fuera de la bolsa, pero los zapatos no, así que decidió sacarlos..

- Amor - alzó un poco la voz para que la escuchara, pero ya esta ya estaba saliendo del baño envuelta en una toalla mientras se secaba el cabello con otra más pequeña.

- Dime

- ¿Para que son estás cosas de bebé? - Momo se quedó estática por un segundo, hasta que recordó su mala escusa.

- para la bebé de Lisa y Jennie, hace tiempo no las veía, así que le quería dar un regalo.

- Cariño, pero estás son cosas para recién nacidos, Wooyoung ya tiene 6 meses - Momo quería que se la tragara la tierra en ese momento.

- Entonces me va a tocar devolverlo, o se los doy a mina que esta casi nada de tener el bebé - se apresuró a decir a lo que dahyun asintió no muy segura.

Eran las 11:30 de la noche, ya habían terminado de cenar, la cena por parte de Momo transcurrió muy silenciosa, las demás hablaban de cosas que le habían pasado en el año, el nacimiento de Wooyoung, el comportamiento de Hyunseo, el pequeño Chris de 6 años siendo el mejor de su clase y muy respetuoso, y cosas así, también de como extrañaban a Rosé, Jisoo, Tzuyu y Sana, las cuales estaban viaje por fin de año, Roseanne y Jisoo estaban en Australia y Sana y Tzuyu en Taiwan.

Momo solo comía en silencio mientras agarraba los pequeños guantes en una de sus manos bajo la mesa, Dahyun le daba miradas preocupadas todo el tiempo, pero Momo tenía su mirada fija en el plato.

Después de la cena fueron al patio a esperar los fuegos artificiales, Wooyoung y Hyunseo ya estaban dormidos, así que nos les iban a molestar, Christopher, el hijo de Nayeon y Jeongyeon, era el único que soportaba ese tipo de espectáculos.

La cuenta regresiva comenzó, para después todas gritar el "Feliz Año nuevo" a todo pulmón, ella también, aunque con menos ganas que las demás.

Abrazó a todas sus amigas y por último un gran abrazo su esposa, seguida de un gran beso y muchos te amo.

Aproximadamente una hora más y ya todas estaban tomadas, menos Mina, la cual por obvias razones no podía, y Momo, que solamente se había tomado dos copas de vino.

Lisa llevaba casi cinco minutos tratando de abrir una botella de whisky, pero no podía, así que decidió  pedirle ayuda a Momo.

- Hey, momoring, atrapa - tiró la botella sin aviso alguno a las manos de Momo, la cual si llegó a sus manos, pero resbaló tantas veces que terminó cayendo y rompiéndose en pedazos.

Momo veía los pedazos de botella en el piso con la mandíbula apretada, en serio estaba enojada ¿Cuándo iba a dejar de ser tan torpe? Se alejó de allí entrando a la casa, dejando a sus amigas confundidas.

Dahyun no se dio cuenta de eso hasta que Jennie le llamó la atención, sin pensarlo se levantó y fue tras ella, aunque Momo ya no estaba al alcance se su vista, escuchó un portazo en la parte de arriba, subió rápido las escaleras en busca de su esposa, pero cuando llegó Momo ya no estaba, solo sus tacones el suelo. 

Pero la puerta al final del pasillo estaba abierta, la cual llevaba a la azotea de la casa, la coreana se dirigió hacia allí encontrándose con Momo sentada en el piso, la cual ya no tenía el chaleco de su traje y tampoco los tacones, en cambio ahora tenia puesto los converse que traía puestos en la tarde, y justo al lado de sus pies estaban los pequeños zapatos de bebé que había visto unas horas antes.

- ¿Ahora si me vas a decir que es lo que tienes? - habló asustando un poco a Momo, pero la mayor no volteó, así que dahyun se acercó y sentó a su lado, quedando los pequeños zapatos en medio de las dos.

- Solo son cosas mías, al rato se me pasa -trató de evadir la conversación.

- te conozco desde hace casi diez años, sé que no estás bien, sabes que puedes contarme todo.

- voy a ser mala madre - Momo soltó en un pequeño susurro que Dahyun no pudo escuchar

- Bebé, no escucho

- ¡Que voy a ser mala madre! - Dahyun se quedó en shock poor unos segundos, nunca creyó que Momo pensara eso, es más, no creía que Momo pensaba en tener hijos, por eso nunca sacó la conversación.

- Por eso compraste las cosas de bebé ¿Quieres que tengamos un bebé?

- Aunque lo quiera no creo ser capaz, un bebé es algo muy delicado para que una persona tan torpe como yo esté a su cuidado.

- Yo creo que serías una buena madre - Momo volteó a ver a Dahyun, pero esta estaba viendo hacia el frente - Eres muy cariñosa y responsable.

- Le rompí el brazo a Hyunseo.

- Fue un accidente, ese cable era muy delgado, nadie lo vio.

- No puedo ni sostener un botella sin que termine cayendo.

- ¿Sabías que Somi dejó caer Hyunseo con meses de nacida? - habló llamando la completa atención de Momo, la Japonesa negó ante la pregunta.

- Jihyo dice que Somi era y es, aún más torpe que tú, hasta se enreda al caminar - rio contagiando a Momo - Pero después de tener a Hyunseo se volvió mucho más cuidadosa, al menos con su hija, la trata como si fuera una muñequita de cristal, así que yo estoy segura de que serás una muy buena madre - Le sonrió - además, creo que sería lindo tener un mini tú con pequeños converse.

- y guantecitos rosas - agregó Momo

- Si, y guantecitos rosas - rio la menor - Ahora vamos a abajo que está haciendo frío, además que Lisa cree que te enojaste con ella.

Momo asintió y se levantó no sin antes levantar los zapatitos converse.

Ya abajo vio que Hyunseo había despertado y estaba en los hombros de Somi mientras esta le daba vueltas y la pequeña reía.

Somi la bajó cuando ya estaba algo mareada, la niña corrió hasta los brazos de Jihyo, ella no estaba mareada, pero Somi si, y cuando iba a caminar hasta su esposa e hija sus pies de enredaron haciéndola caer.

En ese momento, Momo, pensó que tal vez, podía ser una buena madre y ponerle esos pequeños zapatos Converse a su bebé.

Y claro, los guantecitos rosas también.

Gente ando llorando con esa vaina, es lo mas cute que he escrito, esta le gana a Best part 😭

Ojalá les guste tanto como a mí, los amo abortitos