Minho siempre había sido una persona segura de sí mismo.

Odiaba cuando la gente era grosera.

Y también odiaba a la gente irresponsable.

Había crecido en una casa pequeña y una familia amorosa.

Su padre falleció en un accidente de tránsito, y su madre se encargó de todos a pesar de ser una omega con el solo trabajo de camarera.

Tal vez no creció en una casa grande, tal vez muchas veces el agua estaba helada porque no podían pagar para tener gas en la casa y muchas veces él tuvo que cuidar a sus hermanas por las tardes porque su madre tenía turnos extras, pero su infancia fue asombrosa, su madre nunca le exigió crecer rápido, sino que le permitió lo que muchos no le dejaban a sus hijos cuando tenían problemas económicos, le dio el amor suficiente a cada uno de sus hijos, por eso cada uno de ellos tenía un corazón enorme, en donde guardaban tanto amor que su caras adorables lo demostraban.

Por el otro lado, Christopher creció en un ambiente hostil, su padre era dueño de una empresa que próximamente heredó, pero al perder a su madre, este se volvió cruel y frío. nunca le permitió a Christopher ser quien él quería ser, nunca vio ninguna de sus pinturas -y vaya que era talentoso- le exigía ser un alfa fuerte y sin emociones, cuando este era como una masita llena de amor que solo quería abrazar a los demás. Cuando termino la universidad, este le exigió contraer matrimonio con una omega, una omega cruel y frívola, aunque Christopher pensara que era una mala persona, jamás la odiaría y feliz le brindaría todo el dinero del mundo para que se mantenga feliz y alejada en su casa en cuba, esto porque le brindo a sus hermosos cachorros.

Esos pobres cachorros... quienes fueron abandonados por su madre sin siquiera pestañear, esos pobres cachorros quienes escucharon todos los días el odio de su madre, quien les repetían constantemente que ella no era su madre, ella pudo haberlos procreado, pero ella no era su madre, ella no era la persona a la que podrían abrazar o llorar en su hombro, ella solo era la que los creo.

Una fría noche de noviembre ella se fue, dejando una nota en la cama y tomando todas sus pertenencias -y una que otra cosa valiosa de los cajones de Christopher- exigió sus cheques continuos, dejó un contrato de divorcio firmado que pudo empezar a tramitar después de la muerte del padre de Christopher, Christopher por un segundo se sintió mal, pero solamente por sus cachorros ya que no sabía cómo reaccionarían, pero después de ese segundo, Christopher sintió paz.

Inhalo y exhalo sin ese molesto olor a coco que ella dejaba.

Los cachorros solo asintieron con su cabeza y no dijeron nada, igual, ella nunca fue su madre.

꒰🍪꒱

Minho se encontraba enfrente de la enorme casa, con un currículum en la mano y su mejor ropa, que consistía en un pantalón que no tenía hoyos que robó del armario de Felix y un suéter suave de color azul marino.

Sus manos temblaban cuando tocó el timbre de la bella casa.

Segundos después un alfa joven de cabello café y ojos azules abrió la puerta.

"¿Quién eres?" el chico acomodaba su cabello debajo de su gorra.

"Buenas tardes, soy Minho, vengo por una entrevista como niñero." le ofreció una sonrisa pero el alfa solo analizó las facciones del omega.

"Adelante, traeré a mi padre."

Sin más el alfa abandonó la sala dejando al lindo omega que se encontraba igual de nervioso, mucho más si consideraba que el joven alfa de seguro era el hijo de otro que era el doble de atemorizante.

"¿Quién eres?" una vocecita atrás de Minho llamó su atención, dejando ver a un niño de cinco o seis años apuntando una nerf al omega frente a él.

"Apuntar a la parte de atrás de alguien no es muy honorable, jovencito." Minho sonrió y el pequeño alfa rió, tenía un olor fuerte a menta fresca.

"Bang Jaeyoon." extendió su manita al omega frente a él.

Minho la tomó y lo saludó cordial. "Soy Minho, me puedes decir Min o Honnie, como te guste"

El alfa asintió.

"Eres un omega bonito, ¿quieres casarte con mi papá?" Minho se sonrojó por el comentario del niño y escuchó como alguien aclaraba su garganta en la puerta de la sala.

"Jaeyoon, deja al omega en paz." el alfa entró, tenía un traje formal puesto, haciendo a Minho sentirse un poco fuera de lugar con su ropa, pero no bajó la cabeza.

"Buenas tardes, soy Lee Minho, vengo por el anuncio de niñero." sonrió con seguridad.

Su madre siempre le enseñó a ser seguro y confiado, en especial en una entrevista de trabajo.

El alfa le sonrió, Minho admite que el alfa es un poco lindo.

"Christopher Bang, te necesito urgente, así que hagamos la entrevista."

Minho asintió y le extendió el currículum que trajo.

El alfa se impresionó por la cantidad de trabajos que había tenido previamente el omega.

"Tienes 21 años y ya tuviste 10 trabajos, me da un poco de desconfianza hacia ti."

"Eran trabajos temporales que tomaba, con estos pagaba la escuela, pero además de eso tengo experiencia cuidando niños, provengo de una familia grande y mi trabajo de verano era cuidar cachorros en mi barrio."

El alfa se asombró.

Este lindo omega no provenía de una familia adinerada o al menos estable parece, se notaba el contraste entre estos, el omega posiblemente trabaja en múltiples trabajos en su verano, mientras que este viajaba a italia o paris en primera clase.

"Mis cachorros son tranquilos, pero necesito que alguien esté en casa más tiempo del que yo estoy, tiendo a llegar tarde y encontrarlos viendo películas o jugando videojuegos a las tres de la mañana." rió nervioso el alfa.

Él omega le dio una sonrisa.

"Me encantaría trabajar para usted, Señor Bang."

"¿Podrías comenzar hoy? te ofrecería el cuarto de arriba al lado de el de Jeongin, puedes tomar lo que quieras de la despensa y si necesitas algo en especial solo pídelo, si cocinas me serías de gran ayuda." empezó a subir las escaleras indicándole que lo siguiera.

Al llegar a la primera puerta encontró una puerta negra la cual golpeó con delicadeza, segundos después el joven alfa que lo recibió abrió la puerta.

"Minho, este es Hyunjin." Minho le sonrió a Hyunjin quien conservó su semblante serio pero con una mirada menos intimidante.

"Un gusto, Minho, tranquilo, no somos una familia de locos que odia a los omegas o a las niñeras." cerró la puerta lentamente y Minho rió nervioso.

Al llegar a la segunda puerta la toco y la abrió dejando ver a Jaeyoon quien jugaba con sus dinosaurios de juguete.

"¡No me mates, tengo huevos que cuidar!" gritaba simulando la voz de un velocirráptor.

Minho rió.

"Jaeyoon, este es Minho, será el nuevo niñero." el niño sonrió.

"Es lindo, cásate con él."

Christopher se sonrojó al igual que Minho.

Christopher rió nervioso y cerró la puerta.

El olor de Christopher es agradable.

Café.

Minho tenía un dulce olor a flores.

Tal vez más de una vez Christopher se perdió en sus pensamientos por ese delicioso y suave aroma.

Al llegar a la puerta del bebé Christopher simplemente la abrió dejando ver al lindo bebé de pelo rizado y castaño jugando con sus juguetes.

"Hola, Innie." se acercó el alfa y lo cargó besando su mejilla.

Una imagen adorable y dulce para él omega.

"Este es Minho, y te cuidará de ahora en adelante." el bebé extendió sus manitas para acercarse a Minho y al tenerlo en sus brazos, Minho simplemente sonrió y el bebé disfrutó de su aroma.

"Iré a traer mis cosas."

Minho sonrió, y Christopher sintió un gran alivio en su pecho.