"Carajo" piensa. Se pasa la mano por el rostro, intentando entrar en calor.

Había salido hace tan sólo hace unos minutos a tomar el aire, y el tan típico clima de la ciudad ya había hecho de las suyas estirando su piel con un poco de dolor a causa del frío.

Saca un cigarro de su cajetilla y lo posiciona entre sus labios. Le toma tres intentos que el mechero de su encendedor saque una llama. Pero el aire helado termina por apagarlo.

Louis maldice una vez más, sujetando con un poco más de firmeza los cuadernos que ya comenzaban a deslizarse bajo su brazo, y se las arregla para pasar el encendedor por debajo de su camisa y encender su cigarro con la cabeza escondida.

Inhala hondo, exhalar el humo es como respirar por primera vez en toda la jornada.

El periodo vacacional no se sentiría como tal con toda la carga de trabajo que justo habían decidido asignar a último momento.

— Damas y caballeros, la voz de la generación en su hábitat natural. — escucha seguido de una risa.

— Cállate Liam. — responde con una sonrisa torcida, sacando su cabeza de su camisa y sujetando entre los dedos su cigarrillo —Tuve una mañana difícil y no necesito tener tu mierda encima.

— Difícil de creer que ese sea el mejor insulto que pueda ofrecerme la mente más brillante de la facultad.

Louis le señala a modo de advertencia. Un poco de ceniza cae sobre los tenis de su amigo.

— Detente, no lo diré otra vez. — se miran unos segundos antes de compartir una carcajada.

— Ya, se que no necesitas la presión extra. He escuchado que el Señor Bruce te la ha puesto difícil el día de hoy.

— ¿Esta jugando conmigo? El semestre esta por concluir y yo estoy seco de palabras. ¿Cómo carajos voy a escribir sobre la ilusión de las virtudes contemporáneas en una semana? Jodido Bruce, y más jodida su presentación de mierda.

— Los créditos lo valen. — responde con su simpleza, asomando una ligera curvatura de diversión en sus labios.

— No puedo argumentar contra eso. Podría ser peor.

— ¿Como?

— Al menos no estudio sociología. — el semblante de Liam de congela como si de cámara lenta se tratase y se lanza sobre el hombre más bajo en estatura para sofocarlo con el antebrazo y revolver su cabello.

Forcejean divertidos un par de segundos. Los libros caen al piso y también el termo hermético de café. Las risas abundan en aquel jardín del edificio hasta que Louis decide terminar el juego, separándose con un golpe hacia el estómago de Liam.

— Bastardo — un quejido le acompaña en busca de aire.

— Me hiciste tirar mi cigarro. — hay un toque de malicia en la mirada de Louis. Solo por un segundo.

— Esas cosas van a matarte — bromea cuándo Louis repite su ritual para encender uno nuevo.

— Con algo de suerte lo harán antes de que termine la semana. Lottie tiene esta nueva obsesión con un cantante extravagante. El poco tiempo que tenga para escribir el artículo de Bruce va ser contaminado por ese ruido que mi hermana tiene por música.

Liam pasa una mano sobre el hombro de Louis para empezar a caminar en dirección a sus dormitorios.

— Pase lo que pase, no te olvides de pasarme un reporte a detalle. Quien sabe, tal vez me ayudes a descubrir la música pop como un incentivo en el instinto asesino.

— Serás idiota. Realmente me gustaría que no usaras mi vida como objeto de estudio, Liam.

— En tus sueños, amigo, tu vida me esta dando el mejor promedio de la clase. A todo esto, ¿Cuál es el nombre de tu nuevo método de tortura? Lo necesito para la investigación preliminar.

Louis ríe de nuevo, casi en tono burlesco.

—Harold. Harold Styles

Y entonces, exhala el humo de nuevo.