Christopher preparaba el desayuno, era sábado y tenía planeado un gran día con Hyunjin, irían a la feria, comerían tteokbokki. Sería un gran día. Christopher distinguió una expresión diferente en los ojos de su cachorro cuando este se sentó a comer sus panqueques.

— ¿No duele tu cabeza?—

— Nop— dijo el niño y siguió comiendo.

Christopher tenía clavado en la mente al médico omega del día anterior, sus pómulos altos, su nariz alta, esos ojos color café, el flequillo cayendo por su frente como una suave ola. Oh y su aroma, no podía pensar en otra cosa. Pero debía concentrarse en su día y cuidar muy bien a su cachorro.

El alfa cargó una mochila que contenía un suéter bien abrigado para su cachorro, una gorra para el niño por sí el sol era muy fuerte, el jarabe que el doctor había recetado el día anterior, una botella de agua y un par de snacks.

Hyunjin por su parte había decidido que ese lindo omega sería su madre, él solo quería ese cariño maternal.

En la feria, después de estar en casi todas las atracciones Christopher compró tteokbokki, ambos se sentaron en el puerto a comer, estaban al lado de una familia. El niño veía con curiosidad la banderilla que el niño con quien jugó un poco comía. Le señaló a Christopher.

— ¿Puedo tener uno de esos?— Christopher se giró y se dirigió al alfa, padre del niño.

— ¿Dónde compró la banderilla?—

— En ese lugar— señaló un puesto lleno de gente— Son muy buenos, le ponen mantequilla de maní a la mezcla, de hecho a todo— Christopher dio las gracias y se regresó con su cachorro.

— Hey, Hyun, no puedes tener uno, perdón—

— ¿Por que?—

— Porque tienen mantequilla de mani y eres alérgico a las nueces— el niño comprendió. Sabía que no debía comer eso ó tendría que ser llevado al hospital.

Esperen. Tenía que ser llevado al hospital donde el omega bonito lo atendería y así su papá vería que debían estar juntos.

Así que Hyunjin acabó su pastelito y después siguió jugando con el otro niño. Le pidió amablemente al niño que si le convidaba de su comida y él le daría del suyo. El niño aceptó, así que Hyunjin mordió dos veces la banderilla y tuvo que admitir que no era gran fan del sabor.

Se acercó con su papá y tomó su plato de tteokbokki, Christopher lo detuvo y le preguntó a donde iba.

— Él me dio de su comida, le daré de lo mío—

Christopher tomó su mochila y cargó a su niño, repitiendo sus acciones del día anterior corrió hasta emergencias. Fue de inmediato al mostrador, contó un poco la situación y antes de acabar el omega del día anterior apareció.

— Yo me encargo Dahye— la enfermera asintió— Sígame— le dijo a Christopher.

Llegaron al cuarto con el número 8, Christopher recostó a Hyunjin en la camilla, vio al omega y una enfermera empezar a moverse con rapidez. Christopher no vio cuando le pusieron suero a Hyunjin, que extrañamente parecía muy feliz. La enfermera inyectó algo al suero y salió.

— Con qué te gusta venir al hospital amigo— le dijo el omega a Hyunjin, este río— Señor Bang, ¿debería llamar a servicios infantiles?— Christopher sonrió pero negó.

— No, yo me distraje un segundo y mordió una banderilla— el omega rió mientras apuntaba algunos datos en la plantilla que después le entregó a Christopher. Hyunjin parecía muy a gusto en ese momento, ni siquiera se había quejado.

— Les daré de alta cuando el suero se acabe, necesito su firma ahí— señaló la última línea de la hoja, Christopher asintió y firmó con el bolígrafo que el omega le ofrecía.

— Gracias—

— No hay nada que agradecer, para eso estoy aquí— Christopher sonrió y el omega se sonrojo por unos segundos, la misma enfermera que ayudó antes se asomó por la puerta y uso bastantes términos médicos, el omega asintió— Los dejo, el trabajo llama—

Y así salió corriendo detrás de la enfermera. Christopher se volteó a ver a su cachorro quien le sonreía. El alfa negó con una pequeña risa amenazando salir de entre sus labios. Le avisó a Hyunjin que iría al baño y no debía moverse de ahí, al volver Hyun parecía aun mas feliz que antes, tenía una paleta en la mano, así que Christopher supuso que el doctor había vuelto a darle el dulce. Después de un tiempo el suero se había acabado, la enfermera le quitaba las cosas a su niño. El doctor llegó una vez más.

— Ya di el alta, pueden irse— el niño bajó de la camilla y tomó la mano de Christopher— Creo que debe de no quitarle el ojo de encima—

— Bueno, es bastante complicado—

— No le estoy diciendo que sea un mal padre o algo así, nunca lo haría, no tengo cachorros no debería juzgar a nadie, además generalmente vienen los omegas con los cachorros, así que usted suena como un buen padre y seguramente es un buen alfa para su familia— terminó cerrando los ojos y sintiéndose avergonzado.

— De hecho esta es toda la familia— el omega asintió— Sólo nosotros dos— se agachó para levantar a Hyunjin, el niño se acurrucó contra Christopher— Gracias por todo, otra vez— el omega sonrió.

— No es nada, enserio, es un placer poder ayudar y su cachorro es un buen paciente—

— Si, él es el mejor— se colgó la mochila— Creo que ya nos vamos—

— Si, claro, hasta luego— dijo antes de darse la vuelta e irse por el pasillo del hospital.

Hyunjin vio como su papá se quedaba viendo por donde el omega se había ido, así que su plan funcionaría. Al menos eso creía.

〔🥣〕

El lunes cuando Christopher salió de casa para ir al trabajo, Hyunjin asomó su cabecita por el respaldo del sillón viendo a su tío Jisung viendo algo en su teléfono. Decidió que era momento para pedir ayuda.

Así que se acostó boca abajo en el piso y empezó a arrastrarse hasta llegar al cuarto de su padre, se levantó y abrió la puerta. Cosa que Jisung vio, pero no tomó importancia, sólo grabó a Hyunjin haciéndose pasar por el peor espía del mundo, le mandó el vídeo a Christopher y después fue a la cocina.

Hyunjin tomó el teléfono que había en el cuarto de su papá, sacó una tarjeta que su tío Jeongin le había dado. Marcó los mismos números de la tarjeta en el teléfono y esperó.

— ¿Christopher?—

— Nop— entonces esa risa conocida se hizo presente para el pequeño.

— Hey Hyun, ¿y tu padre?—

— Trabajo, tío Jisung me cuida—

— Bien, ¿así que hay una emergencia?—

— Sip, quiero que Hoonie sea mi mamá—

— ¿Quién es Hoonie?— el niño escuchó ruido, así que se metió en el armario de su papá.

— Honnie es doctor, es bonito—

— Okay, hombrecito no puedes elegir un omega para que sea tu mamá. El que hace esa decisión es tu padre y ni siquiera eso, es decisión del omega—

— Ahora sé por que tío Jisung ya no te quiere— Jeongin bufó— ¿Me ayudas?—

— ¿Cuál es tu plan?—

— Ir al hospital todos los días—

— ¿Y cómo harías eso?—

— Pegándome con algo— Jeongin rió.

— Amigo, no puedes pegarte todos los días para ir al hospital, además si vas al hospital todos los días tu papá tendrá problemas y no queremos eso—

— Cierto, entonces puedo lastimar a papá—

— No, Hyunjin—

— Si, lastimó a papá y me lastimó yo, así vamos a ver a Minho, gracias tío Jeongin, adiós— el niño terminó la llamada y salió del armario. Puso el teléfono donde estaba, salió del cuarto de Christopher y volvió al piso para arrastrarse hasta llegar a la sala.

Jisung rió por las acciones de su sobrino. Cuando Christopher llegó Jisung se fue de inmediato gritando un adiós y advirtiendo a Christopher que Hyunjin estaba a la mitad de su baño y que no lo dejara sólo.

— Hey cachorro— el niño sacudió su mano varias burbujas cayendo de su manita— ¿Fue un buen día?— dijo echando un poco de agua en el cabello del niño, quien cerró sus ojos y su boca de inmediato.

— Sip— dijo después.

— ¿Qué falta hacer aquí?—

— Nada, tío Jisung me deja nadar— Christopher rió mientras tomaba la toalla de Hyunjin— No, aún no—

— Ahora Hyunjin, es tarde, debes dormir—

— Pero no cené— Christopher lo hizo pararse, lo envolvió con la toalla y lo sacó de la tina.

— ¿Enserio?— el niño asintió mientras Christopher ponía la parte con las orejitas en la cabeza de su cachorro— Bien, te pondrás tu pijama e iremos a cenar—

El niño siguió las órdenes de su papá, una vez con su pijama puesta y sus pantuflas con forma de perritos fueron a la cocina. Hyunjin bajó de su silla sin que Christopher se diera cuenta. El niño se acercó a uno de los gabinetes y sacó un sartén, se escondió detrás de la isla.

— Papá— susurró. Christopher se dio media vuelta y al no ver a su cachorro en la silla su alfa se puso alerta.

— ¿Hyun dónde estás?—

— Tengo una misión— susurró el niño.

Christopher se agachó, ya que su niño solía esconderse dentro de los gabinetes. Abrió uno por uno hasta que volteó y vio a Hyunjin, quien le dio un golpe en la cara con el sartén. El niño rió y soltó el sartén de inmediato.

La nariz de Christopher dolió en demasía, no sabía por que Hyunjin lo había golpeado, pero sabía que toda esa sangre que salía de su nariz no era normal. Su cabeza dolía también.

— ¿Irás a doctor?—

— Creo que es la mejor idea que has tenido Hyunjin, ve a ponerte un abrigo— el niño asintió.

Al llegar a emergencias Christopher llenó la forma y cuando le dijeron a que cuarto ir se levantó de la silla para seguir a la enfermera. Parecía una noche tranquila en la sala de emergencias. Christopher sentó a Hyunjin en el pequeño sillón que había en cada cuarto y él se sentó en la camilla. Volteó a ver a su cachorro.

— Tu debes empezar a pensar que me puedes lastimar— el niño sonrió— No es divertido Hyun, le diré a tu tío Jisung que nada de dulces por toda la semana—

— Ush, nada de dulces toda la semana, ¿Qué le hizo mi paciente favorito?— Christopher volteó a ver al omega— Okay, entiendo, no dulces por una semana suena a buen castigo— confirmó.

— Hola doctor—

— Soy Minho, es la tercera vez que me ven, creo que les daré un pase de clientes frecuentes ahora— se acercó hasta quedar frente a Christopher— Hemorragia nasal y dolor de cabeza, ¿puede quitar el pañuelo de su nariz?—

— Christopher, soy Christopher—

— Bien, Christopher, ¿puedes hacerlo?— el alfa quitó el pañuelo que tenía bastante sangre en el y el omega frunció el ceño— Creo que una semana es poco— susurró. Christopher sonrió y Minho empezó a revisarlo.

En algún punto sus ojos se encontraron y ninguno de los dos apartó la mirada por algunos segundos, Minho bajó la mirada y sonrió antes de apartarse, segundos después varias personas entraron con una máquina al cuarto. Tomaron rayos x de la nariz del alfa y cuando todos se fueron, sólo quedaba Minho.

— No parece que esté rota ó que el tabique se haya desviado— dijo viendo la imagen en la pantalla— Y la hemorragia se detuvo, así que no sé que pasó—

— Mi hijo me golpeó con un sartén, eso pasó— entonces Minho rió. Mientras ponía una crema desinflamatoria en la frente y parte de la nariz de Christopher.

— Creo que enserio quería el pase de cliente frecuente— Christopher sonrío— Es un buen cachorro, haces un buen trabajo—

— Gracias, ¿tu tienes cachorros?— Minho negó.

— No, ni siquiera tengo alfa, mucho trabajo para tener algo serio— Christopher asintió— Pero al parecer le puedo contar mi vida a un alfa a quien su hijo agredió— vio al cachorro que ya estaba dormido en el sillón.

— Es un espía—

— ¿Quieres llenar una forma de violencia familiar?— Christopher rió y negó— Es el primer paso— Christopher negó una vez más— ¿Viven lejos?—

— Unos veinte minutos en bus—

— ¿El bus aún pasa a esta hora?— Christopher vio su reloj— Puedo llevarlos, mi turno acaba en unos minutos—

— No quiero ser una molestia—

— Es parte de la experiencia de clientes frecuentes— trató de bromear, pero Christopher negó— Vamos, es muy tarde para el bus y Hyunjin está dormido, los puedo llevar, no es molestia—

— ¿No lo es?—

— No, sólo iré a darte de alta, firmare mi salida y los veo en el frente, ¿te parece Christopher?— Minho se alejó, tomó la receta para Christopher y se la dio.

— Suena bien— dijo el alfa algo nervioso, Christopher asintió antes de salir del cuarto.

Christopher esperó hasta que una enfermera le dijera que se podía marchar, cargó a Hyunjin y lo cubrió con su propio abrigo, ya que hacía más frío y no quería a su cachorro enfermo.

Fue a la farmacia del hospital, le dieron los medicamentos de su receta y salió del hospital. Vio al omega, con un abrigo negro y un gorro del mismo color, recargado de un auto gris. Minho le sonrió antes de abrir la puerta del asiento trasero. Christopher frunció el ceño al ver un asiento para niños.

— Es de mi hermana— Christopher asintió mientras ponía a Hyunjin en el asiento— ¿Te importa si paso por algo de comida?—

— No, claro que no—

Ambos subieron al auto, Minho pidió la dirección del alfa, quien la dio de inmediato, el auto estaba lleno del aroma del omega, haciendo sentir a Christopher un poco mareado, pero de la mejor manera posible, dulce pero algo picante, era el aroma perfecto y Christopher debía admitir que estaba cayendo por el omega.

— ¿Tu quieres algo?— preguntó Minho cuándo se formó en la línea del drive-thru de McDonald's. Christopher negó— ¿Estás rechazando el ofrecimiento de un omega?, eso es cruel Christopher—

— No, es.. ya estás haciendo mucho llevándonos a casa, es suficiente Minho—

— Debes tomar tus pastillas— Christopher vio la bolsa de papel entre sus manos con el logo del hospital— ¿Has cenado?—

— No—

— Bien, si no me dices que quieres voy a ordenarte lo que me plazca— Christopher rió. Pero le dijo su orden regular a Minho. Quien también compró una cajita feliz para Hyunjin.

Al llegar a la torre de departamentos, Minho ayudó a Christopher a bajar a Hyunjin del auto. Christopher agradeció una vez más provocando que el omega se sonrojara otra vez. Era hermoso verlo de esa forma.

— Espero no verlos tanto en emergencias—

— ¿Bromeas?, tenemos pase de clientes frecuentes, no lo puedo desaprovechar— Minho rió en alto.

— Cierto, cierto, bueno hasta luego Christopher—

— Hasta luego Minho—

Christopher entró al edificio cargando a su cachorro y una bolsa de McDonald's en su mano. Sé dio media vuelta para ver el auto gris alejarse después de algunos segundos.

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