‎ ‎ᰍ  .  ° 𝗉𝗈𝗀𝗎𝖾𝗌 .ᐟ   ˎˊ˗
: 𓏲𝜗𝜚 ๋࣭  ࣪ ˖✩࿐࿔ ꕤ

La vida para William Smith había cambiado brutalmente. Cuando Summer llevaba cuatro horas sin regresar después de la gran tormenta, William fue directo a comisaría para denunciar un caso de desaparición, pero la policía le dijo que debía esperar al menos dos días para denunciar la desaparición de su hija. Después de aquellos dos días tan largos en los que William no dejó de buscar a su hija, por fin pudo ir a denunciar el caso.

La desesperación se estaba apoderando de él cada día que pasaba sin ver a su hija. Pero un día se convirtió en una semana, y esa semana se convirtió en un mes sin rastro de Summer. Sin embargo, William no dejó de pegar posters con la cara de su hija por todo Outer Banks, y logró reunir a un grupo de personas entre compañeros de instituto de Summer y viejos amigos de William para ayudarlo en su búsqueda.

Aunque a pesar de todos sus esfuerzos, William nunca logró encontrar a su hija. Y todo lo que en un momento fue lo mejor que tuvo en su vida se había desvanecido con un chasquido de dedos.

Y si para William su vida había cambiado, la de Summer se volvió completamente una vida en la que debía luchar por sobrevivir.

Separarse de su padre fue muy duro para ella ya que él era la única persona que estaba a su lado para ayudarla a decidir qué hacer. Y ahora ya no lo tenía a su lado. Entonces, ¿qué debía hacer?

Summer tuvo que buscar ríos con agua dulce para poder beber, comida no venenosa y construirse una casita con ramas de árboles para poder pasar los días de lluvia, además de construir una cama y una manta de hierbas para taparse por las noches.

No era la mejor vida, pero no era tan malo como pensaba, total, vivir a base de comer coco y pescado no era tan malo. Pero no podía evitar echar de menos su antigua vida al lado de su mejor amigo, es decir, su padre.

Pero en cuestión de unas pocas horas, la vida de Summer cambiaría por completo.

A la mañana siguiente, Summer se despertó bastante pronto; el sol aún estaba saliendo y la luna aún permanecía en el cielo. Como de costumbre, Summer desayunó uno de los cocos que el día anterior había recogido, y más tarde, decidió ir al lago más cercano para quitarse la suciedad de su cuerpo con el agua. Summer daría lo que fuera por poder ducharse de nuevo.

Pero cuando acabó de darse el baño y bajó hacia la orilla de la playa, quedó sorprendida al ver un bote en la arena. ¿De dónde demonios había salido un bote? Pero la voz de un chico empezó a escucharse unos metros a su derecha.

Rápidamente, Summer sacó un pequeño cuchillo que había construido anteriormente para cortar plantas de su bolsillo en caso de que tuviera que defenderse. Cuidadosamente, Summer se fue acercando al lugar del que venía la voz del chico, y cuando divisó en frente de ella a un grupo de personas, se escondió tras una palmera.

Después de tanto tiempo sola en una isla, Summer pensaba que era probable que hubiera perdido la cabeza y que esas personas eran producto de su imaginación, pero algo dentro de ella realmente quería averiguar si eran reales.

—Creo que no hay nadie en esta isla, así que podríamos quedarnos —dijo un chico moreno—. Digamos que esta isla ahora es nuestra.

—Poguelandia —dijo un chico rubio—. Me gusta como suena. Haré una bandera: saldrá un pollo con un sujetador fumándose un porro y con unos crocs.

Todo el grupo empezó a reír, y dos de los chicos se sentaron junto a las dos chicas. Pero, en un abrir y cerrar de ojos, una figura apareció, agarrando de la camisa al chico que aún no se había sentado y empujándolo contra el árbol que había. Summer, que tenía el codo en el pecho del chico para que no se pudiera mover, lo apunto con el pequeño cuchillo.

Pudo ver la cara de sorpresa del chico rubio y detrás de ella, todos los miembros del grupo se levantaron.

—Si os acercáis le corto el cuello —les avisó Summer, haciendo que el resto del grupo levantaran sus manos en señal de rendición.

Sin embargo, el chico rubio no se preocupó por tener un cuchillo a centímetros de su cuello, sino que se quedó observando con detalle la cara de la chica. Estaba seguro de que la había visto antes, su rostro era familiar. Entonces, cayó en algo.

—Eres Summer Smith —dijo de repente el chico, sorprendiendo a Summer—. Vivías dos casas al lado de la mía, pero desapareciste con el huracán Agatha.

—Espera, ¿JJ? —preguntó Summer impactada por ver al que recordaba su vecino frente a ella—. Dios mío, lo siento JJ —se disculpó Summer mientras lo soltaba y guardaba el cuchillo en su bolsillo de nuevo.

—¡Summer! ¿Cómo estás? —le preguntó JJ emocionado por volverse a encontrar con su antigua mejor amiga, pero antes de que Summer pudiera contestar, JJ siguió hablando sin parar por la emoción—. Dios, un poco más y no te reconozco.

Summer rio.

—Igual yo, te has vuelto mucho más alto —sonrió.

Todo el grupo se miró confundido.

—Un momento —intervino uno de los chicos—. ¿Esta es Summer, Summer la que decías que te...?

—John B —le interrumpió JJ dándole una mirada amenazadora—. Sí, es Summer Smith, la hija de William Smith, la chica que desapareció.

—No jodas —se oyó decir a una chica morena.

—Es increíble que siga viva después de tanto tiempo —comentó un chico moreno—. Todos te dieron por muerta.

—¿Qué? —se sorprendió Summer.

—¡Pope! —le dijo JJ al chico, mirándolo para que se callara—. ¿Sabéis qué? Creo que será mejor que vaya con Summer para hablar sobre las cosas.

—Claro, JJ, a hablar sobre las cosas —dijo John B con una sonrisa pícara. JJ rodó los ojos y se llevó a Summer lejos de los Pogues.

Como JJ no sabía por dónde estaba llevando a Summer, ella decidió llevarle al mejor lugar de la isla: el lago azul, que era como le llamaba ella por el azul tan fuerte del agua.

Cuando llegaron, JJ quedó sorprendido. Rodeado de palmeras llenas de cocos, plantas y flores, había un enorme lago azul en el que el sol estaba reflejado.

—Así fue mi primera reacción también —sonrió Summer al verlo admirando el lago—. Lo descubrí el día después de llegar aquí; estaba buscando agua cuando resbalé y caí directa al lago. Al menos la encontré.

—Es precioso —murmuró JJ.

Summer se sentó en la orilla del lago, y le hizo unas señas a JJ para que se sentara a su lado.

—Dime, Summer —empezó a decir JJ mientras se sentaba a su lado—, ¿cómo has conseguido sobrevivir en esta isla durante un año?

—¿Llevo un año aquí? —le preguntó Summer asombrada.

—No exactamente —respondió JJ—. Realmente llevas once meses y medio, pero sí, un año.

—¿Lo has contado? —le preguntó Summer impactada.

—Hum... eh, sí, ya sabes —empezó a tartamuedar JJ—. Eras mi mejor amiga y estaba seguro de que volverías.

Summer no podía creer todo el tiempo y las cosas que una adolescente debía hacer que se había perdido: su escuela, sus pocos amigos, disfrutar de fiestas, su padre...

—¿Sabes algo de mi padre? —le preguntó Summer preocupadamente.

—Aún sigue buscándote, no ha perdido la esperanza de encontrarte —le respondió JJ—. Por lo que he visto, aún está triste, pero muchos Pogues de la zona le llevamos regalos y le hacemos compañía para animarle.

—¿Le llevamos? ¿Tú también vas? —le preguntó Summer mientras arqueaba una ceja

—Bueno... hum, sí —respondió mientras se rascaba la nuca—. Los Pogues y yo íbamos casi todos los domingos antes de llegar aquí.

De repente, Summer se acercó a él y lo abrazó

—Muchas gracias, JJ, no sabes lo mucho que significa para mí; mi padre es lo único que me queda —le dijo Summer con agradecimiento mientras JJ le devolvía el abrazo.

—No hay de que —le respondió JJ—. Tu padre es de las únicas personas agradables en Outer Banks.

Summer rio, era cierto, William Smith era la mejor persona en los Outer Banks.

—Respondiendo a tu pregunta —empezó a decirle Summer—, he sobrevivido a base de cocos y peces. Paso mucho tiempo estudiando las plantas y los peces de la isla, aunque dudo que me sirva para un futuro porque no creo que nos lleguen a rescatar de esta isla.

Summer trató de decir aquello con una sonrisa, pero el dolor de pensar que no volvería a ver a su padre la estaba matando. Pero antes de que JJ pudiera decirle algo para animarla, Summer siguió hablando.

—También he construido mi propia tabla de surf para surfear en los días que hay buenas olas —comentó—. Al menos es algo que aún puedo seguir haciendo.

—Tendrás que enseñarnos a todos ahora que estamos atrapados en esta isla también —le dijo JJ—. Sobretodo la parte de construir mi propia tabla de surf.

Summer rio.

—Esa idea es tentadora —le sonrió, y JJ no pudo evitar pensar cómo había echado de menos la compañía de su vieja amiga—. Te he echado de menos, Jay —le dijo Summer mientras le daba un golpecito en el hombro.

—Yo también, Sum —sonrió JJ, contento de saber que su mejor amiga de la infancia estaba sana y salva y a su lado.

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hola chicasss !!

primer cap del fic publicado omggg, tenía muchísimas ganas de empezar a subir capítulos. sé que al ser el primero no es el más divertido pero es más que nada para introducir la historia. pero tranquilas que en nada empezará lo guay del fic !!

¿qué os ha parecido? yo amo a summer y a jj juntos, son muy cuties.

no os olvidéis de votar y comentar, ya que aunque parezca una tontería, un solo voto ya me motiva a seguir escribiendo.

besitos, lai !!

ᯓ★ 𝗺𝗮𝗱𝗱𝘀𝗰𝗹𝗶𝗻𝗲