2장
Huh Minji y su hermano menor, Sooyoung, se embarcaron en la búsqueda de Marcel. Sin embargo, encontrarla resultó una tarea casi imposible. Tres días después, justo cuando estaban a punto de rendirse, la castaña apareció frente a ellos como un rayo. La vieron caminar con paso rápido, tanto que ellos tuvieron que apresurar el paso para alcanzarla.
Al estar lado a lado, Marcel los observó con confusión, incluso se detuvo en seco.
—¿Unnie? —dijo Marcel, mientras observaba a Minji, luego desvió la mirada hacia Sooyoung y le lanzó un saludo amistoso—. ¿Has cambiado de opinión, Huh-ssi?
Marcel continuó caminando, pero ahora lo hacía más despacio, permitiendo que ellos la alcanzaran.
—¿Quién es su acompañante, unnie? —preguntó Marcel, curiosa, mientras observaba a Soo tras de Minji.
—Este es mi hermanito, Sooyoung —respondió la pelirosa, con una sonrisa mientras apretaba suavemente la mano del niño—. Soo me convenció. Lei, hagamos que el fútbol mixto sea oficial en Corea, demostremos que nosotras también podemos jugar fútbol.
La sorpresa se reflejó en el rostro de Marcel, pero pronto fue reemplazada por una sonrisa radiante—. ¡Muchas gracias, Sooyoung!
El niño se sonrojó ante el agradecimiento, tratando de esconderse tímidamente detrás de su hermana mayor.
Minji soltó una risa ligera—. Creo que a Sooyoung le gustas, Marcel.
—¡No, noona! —exclamó Sooyoung, avergonzado, mientras intentaba esconderse aún más detrás de Minji.
Marcel los observó con una sonrisa en su rostro, dejando que su imaginación divagara por un momento.
Al llegar al edificio donde tomaba sus clases extra —a pesar de estar de vacaciones, aún se dedicaba a algunas actividades académicas adicionales— se despidió de los dos hermanos, acordando reunirse al siguiente día en la plaza temprano por la mañana.
Marcel estaba segura de algo: si quería tener éxito en esto, tendría que faltar definitivamente a sus clases, y tenía miedo de las consecuencias. Era consciente de que debía hablar con sus padres sí o sí.
* ‧₊˚*♡ * *" ♡. ♡
Para Marcel, las clases que llevaba se le hacían aburridas. Había cosas que no entendía para nada y eso le molestaba, más aún cuando veía que todos los demás sí podían hacerlo.
Ella suspiró frustrada.
Ese día tuvieron una prueba. Marcel solo podía observar tres cosas: al docente, su lápiz y la hoja del examen. Movía el lápiz en forma de balanceo, apretó los ojos y, con un sentimiento de culpa, se levantó de su asiento. Colgó su mochila sobre su hombro derecho, dejó el examen en la mesa del profesor y salió del lugar.
No había contestado nada.
Sabía lo chismosos que eran allí, así que sus padres se enterarían pronto. Suspiró, anticipando el regaño que seguramente vendría. Tanto que incluso caminaba lentamente hasta que llegó a su casa. Ella entró con miedo, pero...
Solo Seokmin se encontraba en el apartamento.
—Keopi, deja tus cosas en tu habitación y luego ven un momento —le dijo él, con una sonrisa.
Ella solo asintió, con la mente llena de preocupaciones. Dejó su mochila sobre una silla en su habitación, fue al baño, lavó sus manos y, con una toalla pequeña, se las secó. Se miró en el espejo, su expresión reflejaba nerviosismo.
¿Su hermano la regañaría?
Finalmente, se dirigió hacia la sala donde estaba Seokmin.
Él solo le sonrió—. Llamaron de la academia, tienes suerte que nuestros padres no estaban. Yo contesté.
—Gracias
—No me agradezcas —pronto el ambiente se hizo más serio—. ¿Qué tanto estás haciendo, Marcel?
Marcel sintió un nudo en el estómago.
"Es raro que me llame Marcel," pensó.
—Tengo cosas que hacer, oppa.
Él la observó esperando que continuara.
Marcel le explicó con lujo de detalles sobre todo el tema, incluso le explicó su plan y por último:—. Oppa, tú también tienes que ayudarme.
Seokmin solo la observó incrédulo. Esperaba alguna risa por parte de su hermana, pero al ver su rostro, entendió que no era ninguna broma. Solo hizo una mueca y después negó.
—No seas malo, oppa.
* ‧₊˚*♡ * *" ♡. ♡
Al día siguiente, cerca de las seis de la mañana, Marcel junto a Seokmin iban camino al parque. Por otro lado, Minji y su hermanito Sooyoung también se dirigían hacia el mismo lugar.
Después de todo, Marcel había logrado convencer a su hermano de ayudarle. No había sido fácil, pero al final lo logró
El primer dúo de hermanos, los Huh, llegaron primero al parque. Tuvieron que esperar cerca de diez minutos para que los Son llegaran.
—¡Noona! —exclamó Sooyoung al verlos llegar—. Y otro.
El niño frunció el ceño y solo observó a Minji, quien no tardó en reír.
—Por fin, hablemos de todo, Lei. ¿Quién es tu acompañante? —preguntó Huh.
Una vez cerca, los cuatro se sentaron en una banca.
—Mi hermano, Seokmin.
Los ojitos de Sooyoung brillaron con ilusión. —Entonces no es tu novio, noona.
Marcel asintió.
—Huh Minji, él es mi hermanito Sooyoung.
—¿No eres la chica que apareció en Produce 101? —dijo Seokmin.
Minji solo lo observó y asintió.
Después de las presentaciones, finalmente empezaron con lo importante. Marcel sacó un cuaderno (ella es de la vieja escuela) y empezó a escribir, explicando paso a paso cada una de las acciones que llevarían a cabo.
— ¿Eso sería el final, Keopi? —preguntó Seokmin, observando el cuaderno mientras ponía la palma de su mano sobre su mejilla, no muy convencido—. Supongo que Minji juega muy bien.
Las miradas de los tres se fueron hacia ella, quien solo atinó a ponerse nerviosa y cambiar su mirada.
—Sé patear el balón.
Seokmin arqueo una ceja, no era la respuesta que esperaba
—Además, juego en un equipo de fútbol —intervino Marcel.
Marcel conocía bien a su hermano, él no se encontraba seguro sobre Minji.
—Minji noona es banca —habló también Sooyoung, ese dato sorprendió a los dos Son. Ese era un secreto entre Minji y Sooyoung.
Marcel desconocía eso y la confianza de Seokmin hacia la pelirosa solo iba en decadencia.
—Oh...
—Keopi, no creo que esto funcione.
—No seas pesimista, oppa —Marcel lo regañó—. ¿Minji, alguna vez has jugado un partido los 90 minutos?
Ella negó—. Solo participo en entrenamientos, Lei.
El silencio se adueñó de ellos. Minji observaba los árboles y cómo caían sus hojas, Seokmin mantenía su vista perdida, Marcel observaba el piso pensando en algo y Sooyoung solo cambiaba su mirada viendo a todos.
—Noona, tú puedes entrenar a mi hermana —habló bajo Sooyoung.
Todos lo observaron, Marcel con una simple sonrisa asintió.
—Lo tengo —ella tocó su bolsillo y buscó su celular, pero entonces recordó algo: sus padres le habían quitado su celular —. Olvídenlo, no lo tengo. Oppa, convence a nuestros padres para que me regresen mi celular.
Seokmin negó—. Marcel, sabes que ellos no me harán caso.
Marcel se mantuvo en silencio, solo suspiró y, para no hacer que el ánimo decaiga más, una sonrisa apareció en su rostro.
—Entre todos podemos ayudar a Minji, no te preocupes.
—¿Ahora serás entrenadora? —dijo Seokmin, se le notaba algo cansado.
Marcel lo observó como si estuviera dando una advertencia—. Oppa.
Por fin, él sonrió.
Ahora la nueva meta era entrenar a Minji y esperar resultados rápidos en dos semanas. Su plan final se ejecutaría en un mes, solo uno y todo finalizaría.
Pero primero debía recuperar su celular, en este tenía información muy valiosa con la cual podría entrenar más fácilmente a la chica.
Al parecer Huh Minji no logro cumplir su ultimo sueño por completo.
Aaaah, Soo es muy chiquito, tiene diez añotes🥸.
A como he presentado hasta ahora a los personajes relevantes de este segundo libro: Huh Minji, Son Seokmin y el pequeño Sooyoung. ¿Cuál es su opinion de cada uno?
Información valiosa = Fotos y videos.
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