Prólogo
Taehyung amaba la fotografía. Era su
pasatiempo favorito después de jugar
videojuegos.
Gustaba de guardar recuerdos; ya fueran
paisajes, cosas extrañas, momentos que
necesitacen mantenerse frescos, o tan solo
personas, personas importantes; es decir que
no era cualquier persona la que podía
protagonizar en las distintas fotos, Taehyung
debía tener una razón, o un sentimiento hacia
dicho sujeto.
Jungkook, Yoongi, Seokjin, Jimin, Hoseok eran
casi los únicos constantes en sus fotos, pero
siempre debía haber una persona con algo
especial en ella, bueno, Namjoon era el
protagonista de cada rollo o memoria que el
pelinegro menor gastaba.
Aunque Namjoon no fuera demasiado fan de
las fotos a su rostro o en si, fotos de su
persona, Taehyung no podía evitar tomar
distintas fotos, con distintos ángulos, en
diferentes paisajes y con expresiones raras
que dejaba ver su moreno amigo en todas
esas ocasiones.
...
—Nammie, me regalas una sonrisa -pidió
Taehyung con una sonrisa, agregó:— Por favor
—insistiendo y apuntando con su celular, el
rostro del Kim mayor.
Namjoon negó, tapando su rostro con una
mano, y la otra anotaba velozmente los
apuntes matemáticos que dejaba el profesor
Kang en el tablero.
Taehyung bajo el celular dejándolo sobre la
mesa y empezó a copiar los apuntes. Cuando
vio a Namjoon bajar su mano, para apoyarla
sobre las hojas de su cuaderno, agarró su
celular y tomó la foto de un bonito chico
pensativo y oprimió de nuevo el botón de
captura cuando las mejillas del mayor se
sonrojaron al percatarse de que —de nuevo—
esta siendo acosado con sus fotos, y después
otra, con distintas expresiones en el chico;
cuando llegó el enfado, bloqueó su celular,
protegiendo la integridad de este y de las
recientes fotos. Guardó rápido su celular en el
bolsillo y se hizo el tonto.
—Taehyung, borralas —exigió.
—No.
—Hablo en serio, elimina eso, ahora.
Taehyung sonrió.
—¿A cambio de que?
Namjoon frunció el entrecejo y gruñó leve. Su
nariz fruncida también—. ¿Por qué debe haber
algo a cambio?
—Porque así lo quiero, Namjoonie.
El castaño rodó los ojos—. Eres irritante —dijo
y le dio un manotazo en el brazo del menor—.
Bien, ¿qué quieres?
—Que sonrías en mis fotos, obvio —pidió con
un pequeño brillo en sus ojos mirando a los
ojos color avellana del contrario. Namjoon
asintió de acuerdo con la petición—, y un beso.
El mayor abrió sus ojos, sorprendido—. ¿¡Qué!?
—Tómalo o dejalo.
Bueno, no se si habrán dado cuenta pero mi anterior cuenta, y donde estaba esta historia la eliminaron; para mi lastima, no fui capaz de hacer la copia, si quiera de esta historia y pues se fue todo a la 💩; estaba en el plan de volver a reescribirla, obviamente con bastantes cambios porque aunque sea mi historia no tengo buena memoria, recuerdo solo unas cuantas cosas; entonces ¡hey, nam! sonríele a la cámara, volverá renovada.
Les agradezco el apoyo que puedan brindarle nuevamente. ¡En serio gracias! 💜
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