𝗵𝗲𝗲𝗷𝗮𝘆
Nominó a LoveTyunning
—¡YeSeo, no toques eso!— Regañó Jay al ver a su sobrina apunto de meter sus dedos en un tomacorriente. —¿Tus papás te dijeron a qué hora iban a regresar?— Cuestiona cansado.
La niña de tan sólo cuatro años negó.
El sonido del timbre sonó, el estadounidense tomó a la niña y luego se dirigió a la entrada de su departamento.
—¿Quién es?— Preguntó mientras abría la puerta.
—Babe, ¿Cómo has est- — La mandíbula de HeeSeung cayó al ver a su novio cargando a una pequeña niña. Aquella imagen era tan linda, definitivamente la tendría en mente por siempre. —¿Desde cuándo tenemos una hija?— Preguntó mientras acercaba su rostro al de la pequeña.
—Desde hace dos horas y media... ¡Extraño mi libertad!— Dramatizó el menor.
—Si quieres te ayudo, soy bueno con los niños.— Comentó el coreano con una sonrisa en su rostro.
—Por favor.
HeeSeung se veía realmente lindo mientras cuidaba de YeSeo, y la menor parecía amar al coreano. Jay sólo se dedicaba a admirarlos.
Habían pasado aproximadamente cincuenta minutos desde la llegada de Lee a su departamento y durante ese lapso de tiempo sólo se podían escuchar risas.
—¿Y si vas y pintas algo con el tío Jay? Yo voy a preparar la merienda, tienes que comer a tus horas.— Le dijo el coreano a la menor al darse cuenta de que faltaban menos de veinte minutos para que sean las siete.
La pequeña asintió, acercándose con una cajita llena de temperas y pinceles a Jay.
—¿Tío? ¿Pintamos un unicornio?— Le preguntó la pequeña. Mientras que una sonrisa adornaba su rostro.
—No soy bueno pintando...— Trató de negarse.
—¡Yo te enseñaré!
HeeSeung se dirigió a la cocina, siendo aquella corta conversación lo último que oyó.
No demoraría mucho y ellos sólo iban a pintar un unicornio, no tenía porque preocuparse.
—¿Por qué YeSeo tiene pintura en su rostro y ropa?— Cuestionó HeeSeung tratando de mantener la calma, sólo había ido a preparar leche y café. ¿Cómo es que la niña se pudo ensuciar tan rápido y cómo es que Jay no pudo evitarlo?
—Son pequeños daños colaterales que tiene que experimentar un artista...— Se excusó el estadounidense mientras pintaba un dibujo de... ¿Naruto?
—Ja- —
—Relajate, ella trajo un cambio de ropa.— Dijo Jay mirando a HeeSeung a los ojos y, a pesar de que aquellas palabras no calmaron a Lee del todo, una sonrisa se asomó en su rostro. ¿Por qué? Simple, Park tenía unas pocas manchas de pintura en su rostro. Y ello sólo hizo a HeeSeung pensar en las probabilidades que habían de que algo parecido sucediera en el futuro, un futuro en donde Jay y él tienen una familia.
Written By Sunnie
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro