Puede que Elio haya olvidado un detalle pequeñito y es que no le dijo a su madre.

Ahora, eso fue intencional.

Pero cuando Louis insistió en acompañarle estaba tan feliz de pasar unos minutos adicionales con el que se olvido de la obviedad del asunto.

Que su madre, de hecho, no sabía que otro adulto estaría con él. Y que su madre estaba ahí, ahora. Mientras Louis lo tiene apresado bajo el brazo.

Lo que Elio no predijo en su plan original fue que su madre comenzará a atacar con el pequeño bolso de mano negro. Pero es oficial, parece que Louis ha perdido todo sentido de supervivencia.

Pues su madre lo golpea de nuevo, el bolso de negro azota contra el hombro, el brazo, y la cara otra vez. Son tres y seis y no parece detenerse.

En algún momento de eso Louis suelta a Elio y sus brazos se vuelven flojos ante la conmoción, Harry toma esa oportunidad para jalar de la mano a su hijo y ponerlo detrás de él.

— ¡Aléjate de mi hijo! — golpea otra vez. Louis solo puede encogerse en su lugar como acto reflejo, pero es incapaz de apartar los ojos del hermoso hombre que lo golpea. — Elio, ¿este hombre te hizo algo? ¿te estaba molestando?

Encantado.

O algo peor. Tal vez algo peor como una contusión. Elio piensa, ¿acaso tiene una contusión?

— ¡Mamá! — el menor finalmente reacciona, tirando levemente de su chaqueta verde. — ¡Mamá! ¡Está bien, estoy bien! ¡Louis es de la escuela!

Harry se congela con el brazo arriba listo para un nuevo tiro. El mira a su hijo y después al hombre en la banca con ojos de cordero, no dice nada.

El mayor se gira para reclinarse un poco y ver a su hijo al nivel de los ojos, su semblante se suaviza y empieza a acomodar rizo por rizo que el hombre desconocido antes despeino. — Cariño, ¿estas bien? ¿no te paso nada? — pregunta al sostener su rostro con cuidado.

— Estoy bien mami — Elio sonríe, sostiene las manos de su madre manteniendo su tacto cerca y reclina su rostro solo para sentirlo un poco más. — Louis estaba esperando conmigo, para cuidarme.

— ¿Louis? — entonces regresa la vista al hombre en la banca. Lo mira por primera vez con atención, luce joven, tal vez demasiado para pertenecer a la institución. Harry se preocupa por un segundo por haber golpeado a uno de los maestros de Elio, pero luego se percata que este hombre ni siquiera tiene uniforme.

Por el contrario, luce como el vocalista de alguna banda indie: cabello despeinado, brazos tatuados descubiertos, barba desprolija adornando su mentón, hermosos ojos azules que son opacados por las ojeras bajo ellos. Y en otro tiempo, absolutamente el tipo de Harry.

Pero es una madre ahora y este hombre atractivo es un desconocido que estaba con su hijo. Intenta no juzgar pero que va, Harry tiene un rostro expresivo.

— Ese sería yo. — El hombre se pone de pie mientras se soba la frente. — Yo, uh... No tuve intención de causarle disgusto, Señor Styles. Yo acompañe a Elio en la actividad escolar de hoy, como voluntario y solo quería esperar a que llegarán por el porque terminamos antes de su hora de salida y quería que estuviera seguro. — el rasca el cabello naciente en su nuca, parece un poco nervioso. — Uhm, es un placer conocerlo.

Extiende su mano. Harry la toma con un poco de recelo, pero su agarre es fuerte y delicado a la vez, intenta no pensar mucho en el contraste de sus manos.

— Harry Styles. — se presenta. — ¿Voluntario, actividad? ¿De qué está hablando, Elio?

— Padre voluntario — Louis hace comillas con las manos. — Para el desayuno con papá que organizo la escuela para las actividades familiares.

— ¿Que? — como reflejo, Harry alza una ceja y pone sus manos en las caderas. Pero Elio no lo mira, juega con con sus manos y mira al suelo.

Oh mierda, Harry no sabia y Louis acaba de delatarlo. Mierda. Jodida mierda.

— ¡Elio!

— Mami, yo... yo, lo siento.

— ¿Cómo no me enteré de esto? ¿Sabes lo peligroso que pudo ser? Elio, hay una razón para los permisos escolares y eso es para cuidarte de que extraños se hagan cargo de ti. No sabes que tipo de gente hay allá afuera. — mira a Louis por un segundo y hace una mueca. — Sin ofender, y lo siento por... — el alza su bolsa, acomodandola bajo su brazo de nuevo.

— Oh, no me ofendo. Entiendo, de verdad. Solo... — el mete la mano en su pantalón para sacar el celular y su cartera. —  Quiero clarificar que no hubo ningún peligro real. Después de que me inscribí me hicieron un montón de entrevistas, y una evaluación psicológica por parte de esa maestra ¿Marina? Revisaron mis antecedentes también — muestra a Harry su celular con el registro de su proceso de selección. — Soy Louis Tomlinson,  identidad real y todo eso. — Entonces enseña sus identificaciones. — Eso tiene la dirección de Doncaster pero he vivido aquí los últimos años. Esta es mi identificación del hospital, soy psicólogo clínico, uh-tengo un montón de hermanos asi que soy bueno con los niños... y usted claramente no necesita esa información; pero solo intento decir que solo quería pasar un buen día con Elio. Solicité sus registros de alergias antes de llegar, solo para estar seguros, no nos excedimos en el consumo de azúcar, me asegure que bebiera un vaso de agua entre cada vaso de jugo, nos lavamos las manos. — Enlista. — Solo un buen día con Elio, desayunamos y jugamos un poco. Solo eso. No era mi intención asustarlo, incluso ahora sólo revolvía su cabello.

Harry revisa por unos minutos la información que Louis le da; con cada palabra el pulso que golpea en su cabeza disminuye de a poco y se siente como respirar otra vez. Estaba tan asustado, por un segundo.

Lleva la mano a su pecho, justo encima de su corazón y toca un poco su propia garganta. Solo para intentar deshacerse del nudo que lo lastima.

— Gracias, Louis, por aclararlo. Gracias por esperar con él. Una vez más, lo siento por golpearte.

— Eso es un bolso pesado. — bromea. — Pero yo hubiera hecho lo mismo. Esta bien. Siempre es un placer ser golpeado por una madre bonita.

Santa mierda, ¿dijo eso en voz alta?

Harry alza ambas cejas y abre sus ojos en demasía, incluso un tenue tono rosado aparece bajo su piel. Louis lo admira maravillado en cada gesto.

Pero joder, el dijo eso en voz alta. ¿Porque dijo eso en voz alta?

Louis cierra los ojos y cubre su rostro con una de sus manos. ¿Acaso existirá el día en que la vida lo compadezca?

— Mami — gracias al cielo es Elio quien rompe el silencio, tiene lágrimas en sus pestañas y Louis solo quiere abrazarlo y decirle que todo va a estar bien.

Pero no es su lugar, se recuerda.

— Hey, cariño — Harry se pone de cuclillas para mirar a su hijo. — Esto no estuvo bien, sol, y vamos a hablar en casa porque necesito saber que entiendes tus acciones y los riesgos que vienen con ellas.

— ¿Estas enojado?

— Si, lo estoy. Pero eso no hace que te ame menos, ¿si? — el levanta su rostro al sostener el mentón de su hijo y entonces deja un beso en la punta de su nariz. — Y como dije, hablaremos de esto en casa pero no hay razón para tener miedo. ¿Quieres llorar, cariño? Esta bien si quieres hacerlo.

Elio asiente y finalmente las lágrimas caen por completo de sus ojos azules. Escucharlo sollozar rompe un poquito a Louis pero admira cada palabra que sale de la boca de Harry y lo dulce que su tono es.

— Está bien, bebé. Mamá está aquí — entonces Harry lo alza en sus brazos y Elio se aferra a él, con las piernas en su cintura y escondiendo el rostro en su cuello para ahogar sus sollozos. — Está bien.

Louis odia con desesperación lo mucho que siente que sobra en la escena, pero sus pies parecen anclados al suelo. No puede o tal vez no quiere moverse. Debe tragar duro y muerde sus labios nervioso.

No quiere molestar más a Harry, y hacerlo sentir que invade a su hijo. Dios no lo haga sufrir la furia de una madre encima; pero el llanto se Elio remueve algo dentro de él y Louis solo quiere arreglarlo.

Bajo la atenta mirada de Harry, finalmente logra hacer que sus piernas se muevan, y aunque el rizado lo mira aún con recelo Louis se acerca para acariciar la espalda de Elio y darle un poco de confort.

— Hey, Eli — le habla bajito, Elio levanta apenas un poco la cabeza. Louis limpia con sus pulgares las lagrimas del niño — Está bien, mamá sólo está preocupada. Pero esta bien porque ese es su trabajo, y a veces les podemos hacer más difícil su labor de cuidarnos. Es parte de todo campeón, solo queda aprender, ¿si? ¿No me dijiste que estabas emocionado por su viernes de frituras?

— ¿Mami, todavía tendremos viernes de frituras? — pregunta, su labio aun tiembla al hablar.

— Por supuesto, sol. Es nuestra tradición de cada viernes, sin importar que, lo sabes.

Elio sonríe y entonces Louis lo imita con los labios apretados, da un golpecito en justo donde los hoyuelos del niño se forman. — Ahí esta esa sonrisa.

Puede ver como Harry mantiene su frente fruncida, pero no parece enojado, solo confundido. Louis intenta sonreirle pero su gesto no cambia.

— Probablemente debería de irme, pórtate bien ¿si, Elio?

— ¡Espera! ¿Porque no vienes al día de frituras con mamá y conmigo?

— Uh, yo creo que no deberia- — intenta negarse, no deseando incomodar más a Harry.

— Elio, no podemos- — Harry intenta explicar a la par.

— ¿Por favoooooor? — sus ojos brillan con el rastro del llanto y hace un mohin en lo que Louis sabe debe ser un gesto muy bien practicado, y pese a ello, lo encuentra difícil de resistir.

Lame sus labios un poco desesperado. No tiene idea de lo que está haciendo, pero tal vez, si se encuentra encantado por un par de Styles porque de hecho su pecho se alivia con la idea de tener una excusa para estar con Elio un poco más.

Entonces mira a Harry, es un tiro al aire.

— Yo estoy bien si usted esta bien.

Se toma sus minutos para responder, niega con la cabeza y mira a su hijo, Louis casi puede ver los engranajes funcionando detrás de sus ojos. Piensa, como le encantaría ser capaz de descifrarlo.

— Supongo que puedes acompañarnos, Louis. Pero tu invitas la pizza.

— Eso lo puedo hacer.

— ¡Si! — Elio celebra aún en brazos de su madre, le abraza incluso con más fuerza para festejar. — Vamos, Louis. Podemos elegir la película juntos. A mamá le gustan las comedias románticas así que siempre vemos una que me gusta a mi y después una que le gusta a él. Pero dejaré que tomes mi turno, ¡o mejor! ¡Podemos ver tres películas!

Cuando Louis sigue al par de Styles hasta su auto, sigue sin saber que es lo que está haciendo. Pero se descubre sintiéndose feliz al hacerlo.

Viernes de frituras, en realidad, suena como un excelente plan.

・。。・゜🥞 ゜・。。・

Louis descubre que viernes de frituras, es realmente un viernes de frituras. Louis compro tres cajas de pizza, en uno de esos paquetes que vienen con pan de ajo y papas de complemento.

Louis nunca había comprado un combo familiar con un niño prendido de su brazo, emocionado por ordenar.

Eso fue lindo, pero intenta no pensar mucho en ello porque, debe recordarse, el es un invitado y esto es temporal.

De cualquier forma, esta en la cocina sin zapatos porque Harry tiene esta regla de dejarlos en la entrada. Y le está ayudando a freír un montón de cosas.

Tienen diferentes tipos de papas en variedades y presentaciones que Louis ni siquiera conocia, dedos de queso, una versión extraña de nuggets vegetarianos pero con formas de dinosaurio, banderillas, aros de cebolla, croquetas de platano, palomitas, alitas (que aparentemente, son las favoritas de Elio) y unas empanadas que Harry preparo con demasiada rapidez.

Y aunque cocinan en silencio mientras Elio termina con sus obligaciones de la tarde, a Louis le gusta bastante.

— ¿Y haces esto cada viernes? ¿Sin falta? — pregunta tras un rato. Louis es el encargado de repartir todo en diferentes moldes y quitar los excedentes de grasa.

— Si. Elio come bastante sano, tenemos un régimen semanal muy bien establecido pero siempre he querido que tenga una relación sana con la comida así que los viernes es nuestro día libre. Es un niño, ama las frituras tanto como cualquier otro.

— Es un gesto realmente grande, y es una linda tradición. Me gusta, gracias por permitirme estar aquí.

— Escucha Louis. — Harry apaga el fuego y saca la última tanda. — No se que pudo llevar a alguien tan joven como tu a querer jugar a ser papá por un día, pero Elio es mi bebé todos los días. Es un niño inteligente, dulce y cariñoso, y por alguna razón le agradas, no se si te ve como un amigo genial o un hermano mayor o lo que sea... pareces amable, y yo amo a mi hijo, así que estoy confiandote mi casa y mi bebé. No hagas nada estúpido, ¿esta bien?

Louis alza sus manos como señal de paz, entiende a Harry, en serio que si. Sobre todo porque el propio Louis tiene problemas para entender sus razones.

— Nada estúpido, anotado. — sonríe, sostiene la mirada de Harry hasta que logra conseguir una sonrisa también.

Maldición, es una sonrisa hermosa.  Louis casi puede sentir como el aire se le va.

— Y para que conste, no soy tan joven. Tengo 22. Se que debe ser realmente extraño, lo se. Nos asignaron a los niños apenas esta mañana pero disfrute mucho mi tiempo con Elio hoy, has criado a niño maravilloso.

Harry sonríe la mención de su hijo, su pequeño retoño.

— Lo es, es maravilloso.

— Creci sin padre. Mi madre me tuvo a los 19 y bueno, no funcionó. Amo a mi madre con mi vida, es una mujer increíble... pero siempre odie ir a la escuela en días como hoy. No pretendo hacer ningún comentario sobre su vida, pero eso fue lo que me llevo a anotarme como voluntario, eso no implica que sea un juego para mi.

Harry alza las cejas, parece un poco sorprendido. — 17

— ¿17? Es...

— Si, lo se. Pero hemos estado bien.

— Lo se, el esta tan orgullo de ti. No hizo más que hablar de ti todo el día y de lo mucho que te ama. Esa diferencia de edad, hace que crezcas con una relación muy cercana. Lo se por cuenta propia. — No deberia de preguntar, sabe que no, pero una vez más su lengua parece moverse más rápido que su cerebro. — ¿No tienes pensión alimenticia o...?

Louis no sabe porque pregunta. Pero nuevamente tampoco sabe porque mira a las manos de Harry en busca de un anillo o las paredes de su casa que solo tienen fotos de Elio y de el.

Harry suelta algo que parece como una única carcajada. — No, dios, no. No hablo de esto con Elio porque no me parece lindo escuchar que tu padre fue un novio de secundaria que decidió darme €20 para un aborto y después escapo a Estados Unidos. Ahora, ¿ya terminaste de indagar sobre nuestra vida?

— Lo prometo. ¿Llevo esto a la sala?

— Por favor, y reclina el sofá. Tiene forma de convertirse en reclinable. Iré por unas cobijas y almohadas adicionales, no husmes en mi casa.

— ¡Prometido! — grita a la distancia. Bien, el puede descifrar como acomodar un gran sillón.

La casa de Harry es realmente bonita. Hasta sus muebles son bonitos. Es cálido y se siente como un enorme abrazo, aunque parece un poco grande para solo dos personas.

Cuando logra convertir el sofá en una cama enorme, comienza a dar vueltas a la cocina para montar su bufete sobre la mesa de la sala de estar.

— Harry, en realidad tengo una pregunta más para usted. — dice en cuando regresa de arriba, el rizado avienta todo lo que carga en brazos hacia el sofá con una gran mueca de disgusto, Louis contiene una risita para el. — Es lo último, lo juro.

— Dime — comienza a acomodar las sábanas como un fuerte. Louis no sabía que un sofá podía lucir tan cómodo.

— Me estaba preguntando,  solo porque no quiero incomodarlo, pero Elio le llama... — respira, vamos Louis no es tan difícil.  — ¿El o ella? ¿Tiene alguna preferencia?

— Oh — Harry parece extrañamente satisfecho con su pregunta, incluso le sonríe un poco. Elio tiene sus hoyuelos, Louis ama tanto los hoyuelos — ¿Ambos, supongo? Se que muchos portadores deciden quedarse con el término padre, pero siempre me sentí más como una madre, creo. Y para mi, son solo palabras, así que uso ambos. El o ella, es lo mismo pero a Elio le gusta combinar y eso es agradable.

— Así que el y ella, anotado. ¿Entonces puedo decir que es realmente hermoso, señora Styles?

Harry abre su boca y mira a Louis de la misma forma que lo hizo cuando le llamo bonita. Es gracias a su expresión que Louis se percata de lo que ha dicho, por una mierda ¿porque no puede cerrar su bocota?

— ¡Mami, ya regrese! — dice Elio en cuanto atraviesa la puerta. Se quita los zapatos y una beagle entra corriendo hacia ellos, es tan adorable la manera en la que se tropieza un poco con sus orejas.

— Oh, tu debes ser la señora coco — Louis se pone de cuclillas para recibir a la mascota, ofrece su mano para ser olfateada y después acaricia sus largas orejas marrones. — Hola hermosa, que preciosa, si ¿Quién es preciosa? Hey, ¿porque se llama señora?

— Porque era una cachorrita muy gruñona que no dejaba que nadie más que Elio se le acercara. En realidad suele ser... reacia a la gente. — Harry explica, se detiene a mitad de su diálogo pues parece que miente porque la señora coco se ha tirado de barriga para recibir más cariños de Louis, agitando su cola con felicidad. Harry sacude su cabeza para deshacerse de la conmoción que ese hombre le genera. — Vamos cariño, tienes que quitar tu ropa de calle y déjala en el cuarto de lavado. Louis ¿Porque no eliges la primer película?

— Si, claro. — Louis se queda en el suelo, acariciando a la señora coco mientras elige una película de spiderman para hacer feliz a Elio.

Es solo unos minutos después que ambos rizados regresan con ropa mucho más cómoda. Elio usa su pijama de superheroes y Harry, bueno, joder, Harry tiene una bata encima y sus rizos caen preciosos y libres al costado de su rostro.

— Louis, mamá te trajo ropa porque no nos gusta usar la ropa de calle en casa. — Elio anuncia. Louis se pone de pie y recibe el par de prendas que Harry le ofrece.

— El baño es ese de allá — señala al alzar su brazo. Pero ese movimiento hace que su bata se abra un poco y Louis puede ver su clavícula, un par de pájaros bajo ella y la forma en la que su pecho se sombrea por el volumen de... no, joder, no. Ojos arriba, Louis, ojos arriba. Hermosos ojos verdes que lo miran con atención, mierda.

¿Que esta haciendo? Joder. Louis, concéntrate.

— Si, gracias. Uhm- no me tardo.

Harry termina por prestarle un pantalón de chandal gris y una sudadera del mismo color. La sudadera le queda un poco grande cosa que Louis aprecia porque sería muy incomodo tener que masturbarse en la casa de la madre de Elio.

Se moja la cara para deshacerse de esas extrañas ideas, y regresa a la sala de los Styles. Esta aqui para ver una película con Elio, solo eso. ¿Porque siente tanto apego hacia el? Sera un pregunta para despues.

Acomodarse al inicio es un poco incómodo, Louis no quiere sentirse demasiado cómodo demasiado pronto, no siente que tenga el derecho sin embargo la tensión en sus movimientos parece desaparecer en el momento en que Elio pega un enorme brinco y se entierra bajo las mantas justo en medio de ambos adultos.

La primer película se termina y sus bocadillos comienzan a bajar, entonces Elio elige continuar con la saga del héroe lo que hace que Harry finja molestia y de lugar a una corta pelea de almohadas que termina con el mayor haciendole cosquillas a su hijo, y Elio pidiendo a Louis por auxilio. Louis no recuerda haberse reído tanto antes.

En algún punto de la película que Harry elige después, ambos Styles terminan por acurrucarse cerca de Louis. Le pesan los ojos cuando siente el estómago lleno a reventar, pero nunca estuvo tan feliz de haber comprado pizza, no como en ese momento.

Louis despierta cuando siente una pesada mirada sobre el. O tal vez es el trueno. Le toma un par de segundos reconocer donde está pues está completamente oscuro. ¿Cuánto ha dormido?

No es la cosa más inteligente, quedarse dormido en la casa de un desconocido.

Cuando alza la mirada puede ver a Harry observarlo de pie junto al sillón, talla su ojo con cuidado y parece recién levantado.

— ¿Que hora es? — Louis pregunta. Su voz sale ronca y aún siente los párpados pegados. — Debería irme.

— Hay una tormenta. — es lo que Harry responde. En sincronía, el cielo retumba con un sonoro estruendo y un relámpago alumbra la oscuridad en la sala. — No puedes irte así. Es de madrugada.

— ¿Podría llamar a un taxi si eso quieres?

— Mi niño esta sobre ti. — Oh, es cierto. Louis se hace consciente del peso sobre el que hasta ese momento, adormilado, pensó que se trataba de una manta. Pero Elio lo abraza fuerte y dormita sobre el pecho de Louis, sonríe cuando lo ve e incluso acaricia los rizos que caen sobre la frente del niño. — Le asustan las tormentas, no puedo despertarlo.

— Está bien, déjalo dormir aquí, no me molesta. — dije bajito. Louis tampoco quiere despertarlo, mantener sus ojos abiertos es tan difícil.

— No puedo dejarte con mi niño aquí. Eres un extraño. — Louis no puede ver mucho, no cuando está tan oscuro. Pero la voz de Harry suena extraña y tal vez es el sueño, pero ¿Harry está completamente despierto? No parece estarlo.

— ¿Porque no te recuestas otra vez? Así duerme con ambos, ¿eso estaría bien? — intenta sugerir.

— Eso estaría bien. — repite bajito. Harry se acuesta a su lado, se voltea hacia el y aún sin luz, estando tan cerca, Louis puede observar las facciones en su rostro. El acaricia sus rizos también.

— Buenas noches, Harry.

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nota. que vergüenza que se me fue publicarlo antes de tiempo. pero soy debil y me convencieron. ♡

de cualquier manera, al fin tenemos interacción de los tres juntos, ¿que tal la dinámica entre ellos?

ahora se que dije que seria una historia sencilla y rápida, pero me da un poco de miedo caer en el demasiado rápido. déjenme saber si se siente muy inverosímil.

¿opiniones hasta ahora, si les está gustando?