—Hola ma... —Respondió algo nervioso viendo a la mujer castaña.

—Hola Felix —Dijo cálidamente abrazando a su hijo— ¿Cómo estas?

—Bien... —Dijo fríamente correspondiendo a su abrazo.

—Baja a la sala así hablamos más —Dijo separándose y sonriéndole a su hijo.

—Está bien... —Dijo cruzando sus brazos.

La mujer miro raramente a Felix y luego se fue, haciendo sonar sus tacones.

Felix vio como la mujer se fue y al perderla de vista volvió a adentrarse en su cuarto.

Caminó hasta la puerta del baño y giró la perilla.

Al entrar vio como Chan se miraba al espejo.

—Uh... Esto... Mi mamá quiere que baje... Tú... ¿Te irás o quieres quedarte para irte en la noche? —Pregunto Felix mirando al castaño.

Chan lo pensó bastante pero finalmente dijo.

—Me quedaré un rato, y después me iré —Dijo sonriéndole al menor.

—De acuerdo —Dijo Felix sonriendo.

Luego de eso, Felix salió del cuarto.