Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

𝟬𝟭𝟲 ✧┆ six months later

٭ chapter sixteen ٭

✩*⢄⢁ ❝Seis meses después❞ ⡈⡠*✩

╚═══════ ೋღ 🍎 ღೋ ═══════╝




Habían pasado seis meses desde que el príncipe, ahora rey de Auradon, tomó la decisión de traer a cinco hijos de villanos de la Isla de los Perdidos. Una decisión que al principio fue muy cuestionada entre los habitantes del reino y sus alianzas, pero cuando los descendientes de los temibles villanos de los cuentos de hadas arribaron, el temor y la angustia se hicieron a un lado. Abriéndose paso a la aceptación y compromiso para hacerlos parte de su mundo.

Mal, Carlos, Evie, Jay y Killian supieron adaptarse a las comodidades del reino, encontrando pequeños detalles y entretenciones que hacían única su estadía en el otro lado del puente.

Mal se volvió novia del rey de Auradon, quedando bajo el ojo público y siendo entrevistada en cada viaje que Ben hacía debido a su nuevo cargo real. Maléfica no había vuelto a su forma humana, por lo que ahora era considerada la pequeña mascota de la pelimorada.

Carlos convivía día a día con Chico, quien se había vuelto su mejor amigo. Además de comenzar a tener ciertos acercamientos con la hija del Hada Madrina, quién al igual que él, compartían bastantes similitudes. Pero aún ninguno había dado el siguiente paso.

Evie abrió una pequeña boutique en su habitación donde las princesas asistían a encargar los más maravillosos vestidos para sus ocasiones importantes o solo para renovar sus grandes y espaciosos armarios reales. Y todo gracias a la promoción que Killian le hizo el día de la coronación, donde las tres villanas habían utilizado las creaciones de la peliazul. Ah, y por supuesto no se puede olvidar su romance de cuentos de hadas con el hijo de Rapunzel y Eugene, Finn Fitzherbert. Quien ahora también poseía un cargo más alto, y las burlas de la pirata sobre ser una futura reina consorte jamás se terminaban. Tanto que Evie ya se había acostumbrado a su nuevo apodo; "Reinita".

Jay por su lado se había vuelto reconocido gracias al Tourney, ya que desde que ingresó al equipo, Los Caballeros jamás habían vuelto a perder un partido. Y eso aumentaba por completo el ego del hijo de Jafar. También fue aceptado en el equipo de Esgrima, junto con Carlos y algunos príncipes. En primera instancia rechazó la invitación ya que recordó que Killian quería entrar cuando apenas llegaron a Auradon, pero la pirata lo disuadió de su idea, ya que según ella, no necesitaba entrar a un equipo para aprender a manejar algo con lo que prácticamente había nacido manejando. Una espada. Así que tras el permiso de Lia, Jay se volvió integrante del equipo.

La nueva reina de Corona, Raizel Fitzherbert tuvo el permiso de sus padres para terminar sus estudios en Auradon Prep junto a sus amigos y hermano. Y cuando ya tuviera la mayoría de edad, volvería a Corona para hacerse cargo de su reino. Aún así, las responsabilidades no podían dejarse de lado. Cada lunes de cada semana, Rapunzel le enviaba reportes, archivos y peticiones de los habitantes a su hija, para estar al día con los encargos. Y hasta el momento, nadie había tenido queja alguna con el liderazgo de la joven rubia. Lo cual también le permitía sus días libres para pasarlo con sus amigos, pero más con su novio del otro lado del puente.

Killian había logrado lo que tanto siempre quiso. Una tripulación propia que le tuviera el respeto que se merecía. Había dejado de asistir a las clases del Capitán Liam, para ahora pasar a ser ella quien las daba. Liam pensó que aquel curso no podría estar en mejores manos, así que decidió darle el permiso de aceptar y rechazar a los miembros que se postulaban. Hasta el momento, nadie había sido rechazado. Teniendo así, una tripulación de casi quince marineros que variaban entre adultos, jóvenes y niños. Y a raíz de esto, recibía cierto porcentaje de dinero que su tío entregaba cada fin de semana por el buen trabajo y enseñanza.

A diferencia de cuando llegó a Auradon, ahora su cabello era de un negro oscuro como la noche que caía en perfectos bucles y totalmente naturales, detrás de su espalda. Y en lugar de ser adornado por llamativas mechas rojas, había optado por usarlas de color verde y así demostrar el gran afecto que le tenía al hijo de Peter Pan. Ahora conocido como; su novio.

La relación de Peter y Killian era única. Jamás hubo discusiones y los detalles de Peter hacia Lia rara vez se acababan. El rubio siempre encontraba la manera de sorprenderla con algo nuevo o invitándola a citas únicas y distintas dentro de Nunca Jamás. De vez en cuando ambos iban a la cabaña del menor y cenaban con Wendy y Peter, creando un vínculo más íntimo y familiar entre los cuatro. Lo que llenaba de calidez el corazón de la pirata.

O eso intentaba aparentar.

Desde el día de la coronación de Ben y Raizel, por la cabeza de Killian recorrían los mil y un pensamientos sobre su padre.

Hace seis meses que no tenía contacto con él. Hace seis meses que su relación con el hijo de Peter Pan se dio a conocer por los medios televisivos gracias a Blancanieves y sus camarógrafos encubiertos. Hace seis meses que había mandado una carta a la Isla y la respuesta jamás había llegado.

En consecuencia, Lia permanecía largas horas de la noche despierta mirando el muelle desde la Roca Calavera a través de unos binoculares. Pero no conseguía ver ninguna señal del Capitán o algo que le indicara que todo estaba bien. Y a la mañana siguiente, cuando Peter recibía el aviso de las sirenas sobre que ella estaba ahí, la encontraba durmiendo sobre duras rocas mohosas.

Desde hace un mes, los pensamientos intrusivos de Killian habían vuelto a atormentarla. Cada vez que cerraba los ojos, la mirada decepcionada de su padre aparecía en sus sueños. Y las ganas de querer verlo aumentaban cada vez un poco más.

Pero sabía que no podía volver a la Isla. Auradon era su hogar ahora. Ahí estaban sus mejores amigos. Su novio. Su nueva familia. No había razón para volver, ¿Verdad?

No había razón alguna para querer alejarse de Auradon y jamás regresar... ¿Verdad?

—Hagamos que Auradon pruebe el mal. —Murmuró la hija de Maléfica con sus amigos al frente —"Hay maldad bajo la piel, quién toque esto será cruel."

Los villanos llenaron un caldero con manzanas que serían envenenadas debido a la preparación de la hija de Maléfica.

Las diferentes risas diabólicas se escucharon en todo el cuarto, mientras un humo de color verde envolvió a los cinco villanos.

We got all the ways to be... W-I-C-K-E-D. ━Cantaron los cinco en sincronía ━We got all the ways to be... W-I-C-K-E-D.

¡C'mon! ━Exclamó el hijo de Jafar.

Hey, hey, hey, hey, hey ━Corearon el resto de villanos, preparando las distintas manzanas para entregar a los habitantes de Auradon ━Hey, hey, hey, hey, hey, hey, hey, hey, hey, hey...

Crashing the party, guess they lost my invitation ━Comenzó la hija de Maléfica, entregándole una manzana a Jane. ━Friendly reminder, got my own kind of persuasion.

Looks like this place could use a bit of misbehavior ━Siguió el hijo de Cruella, alentando a todos a probar un mordisco de la manzana. ━Happily ever after with a little flavor. ━Tomó a Mal de los hombros y juntos se alejaron de la zona de casilleros.

Bad to the bone with even worse intentions ━Jay, estando en el exterior con un par de habitantes de Auradon, pateó una manzana que le pegó a Doug. ━We're gonna steal the show and leave 'em all defenseless.

Terror on my face will frighten anyone ━Continuó la pirata cerca del hijo de Jafar, alentando a un par de princesas a probar rodajas de manzana. ━Do not approach because sunk you will end up.

A fairy tale life can be oh so overrated ━Evie dejó una manzana sobre el escritorio del Hada Madrina. ━So raise your voices and let's get it activated!

Long live, havin' some fun. ━Cada uno en su lugar, juntaron sus voces para continuar con el canto ━We take what we want. There's so many ways to be wicked. With us, evil lives on... The right side of wrong. There's so many ways to be wicked.

Apple, apple.

Dip, dip.

Wanna try it?

Tick, tick.

Take a bite, c'mon, be bold. Change the way the story's told!

This time the dark is finally getting your attention ━Mal entregó manzanas acarameladas a las personas que pasaban por ahí con ayuda de la pirata que sonreía con cinismo.

We're wicked by the book and class is back in session ━Evie, aún en el aula de clases, arrojó un libro por el aire.

And i don't hear to the voices that tell me, to away... ━Killian tomó su espada para comenzar a caminar a los jardines de la preparatoria.

You like it, steal it, gotta beat 'em to the treasure ━Jay mordió una manzana mientras él estaba rodeado de porritas completamente exaltadas por el hechizo de las manzanas.

A rite of passage, bad just doesn't get much better ━Carlos hizo malabares con sus manzanas, para luego entregárselas a Bella y Bestia.

Long live, havin' some fun. ━Los cinco volvieron a unir sus voces ━We take what we want. There's so many ways to be wicked. With us, evil lives on... The right side of wrong. There's so many ways to be wicked.

Mother always knows best. ━Mal elevó la bandera de Auradon grafiteada ahora con su marca característica.

Show her, pass every test. ━Evie tenía en sus manos una manzana con una mordida a su lado.

Hear her voice in my head ━Carlos colocó sus manos en los audífonos en sus oídos mientras se recostaba en un casillero.

Telling me i'm a problem and that... ━Killian agachó la mirada un segundo.

Evil is the only real way to win.

Los cinco hijos de villanos llegaron a los jardines donde todos ya se encontraban bajo el hechizo de las manzanas.

We got all the ways to be...

Hey, hey, hey, hey.

W-I-C-K-E-D ━Imitaron las letras con su cuerpo.

Let's go! ━Exclamó Jay.

We got all the ways to be...

Hey, hey, hey, hey.

W-I-C-K-E-D.

Yeah!

Long live, havin' some fun. ━Todo Auradon decidió unirse al canto de los villanos. Pues, era apenas una demostración del todo el mal que tenían para dar ━We take what we want. There's so many ways to be wicked. With us, evil lives on... The right side of wrong. There's so many ways to be wicked.

Hey, hey, hey, hey.

We got all the ways to be...

W-I-C-K-E-D ━Formaron las letras con sus movimientos.

We got all the ways to be...

W-I-C-K-E-D.

We got all the ways to be...

W-I-C-K-E-D.

We got all the ways to be...

So many ways to be wicked... ━Pronunció Killian por última vez.

Los villanos arrojaron cada uno una manzana al aire, siendo atrapada posteriormente por las que consideraban sus parejas. Si los villanos podían volverse buenos, ¿Por qué los bondadosos no podrían probar un poco de maldad?

La ensoñación de la pirata terminó cuando un par de manos se movieron frenéticas frente a ella. Parpadeó un par de veces para ubicarse en tiempo y espacio, pues aquel pensamiento de volver a ser lo que eran antes, la había estado persiguiendo hacia un par de días.

—Lia, ¿Estás bien? ¿Me estás escuchando? —Raizel preguntó, cruzada de brazos.

—Eh, sí... —Frunció el ceño —¿Qué decías?

—Que recibí algunas quejas porque Crockie al parecer disfruta tomar sol panza arriba en medio del patio, y cuando ellos pasan cerca de él, les gruñe o quiere morderlos —Explicó —. Y, Lia, sabemos que Crockie ya no es aquel lindo cocodrilo bebé de hace un par de meses. Ya casi alcanza los dos metros de largo.

—Rai, he intentado miles de maneras para llevarlo al arroyo de los cocodrilos en Nunca Jamás, pero no hay caso —Apoyó el hombro en el casillero —. Se niega a quedarse lejos de mí. Igual, hasta el momento no se ha querido comer a nadie... Punto a favor.

—Hablando de comida... —Buscó un papel dentro de su carpeta —Recibí esta carta hoy a la mañana. Es del nuevo encargado de Tiana's Palace.

—Dame eso —Le quitó la carta de las manos y comenzó a leerla con detenimiento. —¿Por qué dice que necesito un permiso para pedir siete kilos que carne diario? —Miró a la joven reina —Es lo promedio que come Crockie. Si no le doy esa cantidad... Bueno, ahí sí tenemos que preocuparnos por la desaparición de algún príncipe o princesa.

—No lo sé, Lia... —Raizel alzó los hombros —Desde que Tiana despidió a su hijo del cargo, la cocina no ha estado bajo el mando de nadie... Por eso podías hacer lo que querías. Pero ahora, ya hay alguien nuevo.

—¿Y quién es este nuevo cocinerito?

Raizel tomó una bocanada de aire y miró un corto segundo a la pelinegra. El historial de Killian con el hijo de Tiana era terreno peligroso, por lo que se preparó para lo siguiente.

—Su nombre es Ray —Trago saliva —. Ray de Maldonia.

—Tiene que ser un chiste —Killian dejó de apoyar su hombro en el casillero y colocó ambas manos en su cintura. —¿Otro hijo de Tiana?

—Aún no tuve el placer de conocerlo, pero escuché buenas cosas de él.

—¿Ah sí? —Enarcó una ceja —Lo mismo decían de Tiago y resultó ser un asqueroso sapo traicionero.

—No lo sé, Lia. Talvez él es diferente... —Formó una línea con sus labios. —Me encantaría seguir hablando contigo y tus... adjetivos hacia los demás, pero aún no terminé los archivos que mandó mamá ayer y son importantes —Suspiró —. Se acerca el festival anual de Corona y necesito organizar todo.

—¿Y puedes hacerlo desde aquí?

—Eso creo... Si no, tendré que tomarme una semana y viajar a Corona para la organización presencial. —Hizo un ademán con su mano —. Pero en fin, ya encontraré la manera de solucionar todo.

—Buena suerte, alteza —Lia hizo una pequeña reverencia. Raizel soltó una risa por lo bajo.

Cuando la rubia desapareció de la vista de Killian, esta abrió su casillero y buscó un par de libros para su siguiente clase que guardó dentro de su nuevo bolso escolar diseñado por Evie. Era de color negro con franjas en color rojo, y un gran garfio plateado adornó el frente. Lo amaba.

Aún le quedaba un par de minutos, pensó que sería mejor hacerle una visita al nuevo chef de la cafetería y pactar un par de acuerdos antes de que Crockie decidiera comérselo.

Si Auradon le enseñó algo, era no juzgar a alguien antes de tiempo. Killian sufrió a causa de Tiago. Había sido el hazme reír del príncipe solo por sus raíces villanas. Su hermano no tenía por qué ser igual a él, ¿Verdad?

Le daría el beneficio de la duda. Aunque eso no hubiera salido bien la última vez.

Antes de que la pirata cerrara la puerta del casillero, un par de manos cubrieron sus ojos.

—¿Quién es el imbécil? —Soltó con desagrado.

—Eh, que boquita. Lindo recibimiento le haces a tu novio.

Killian dio media vuelta, encontrándose con el rostro del rubio frente a ella.

—Ah, hola. —Acomodó la correa del bolso sobre su hombro.

—¿Qué te sucede? —Inclinó un poco la cabeza, preocupado.

No era nuevo para Peter ver a Lia con el ánimo bajo. Es lo que venía ocurriendo hace algún tiempo, pero no solía durar más de dos o tres días. Luego, volvía a ser la Lia carismática y amenazante de siempre. Pero, de todas formas, Peter buscaba la manera de sacarla de ese abismo emocional.

—Raizel recibió una carta esta mañana —Comentó cerrando la puerta del casillero que seguía abierta —. Decía que necesito hablar con el "nuevo encargado de cocina" ya que el suministro de carne excedía el promedio.

—Pero ¿Le explicaste a Rai que es para Crockie y que si no le damos esa cantidad... es probable que se coma a alguien?

—Le dije exactamente lo mismo. Pero excede de ella. La cocina ya no es su territorio.

—Entonces vamos a hablar con el nuevo encargado. No creo que sea tan malo, ¿Verdad?

—Ahí viene el problema —Dejó caer sus manos al costado —. El nuevo encargado de cocina es el hermano de Tiago.

—¿Tiago tiene un hermano? —Preguntó el rubio. Killian asintió. —Bueno, ahora entiendo.

—Quiero darle el beneficio de la duda, Peter, pero eso la última vez no salió bien. —Se cruzó de brazos. —Temo que si le doy mi confianza, algo como lo de Tiago se vuelva a repetir.

—No se repetirá, Lia —Apoyó ambas manos en sus hombros —. ¿Sabes por qué? Porque aprendiste de la última vez. Sé que sabrás tomar las medidas necesarias en caso de que todo se vaya por la borda.

—Y además, como la última vez... Te tengo a mi lado para darle un buen golpe en la cara —Sonrió.

—Oh, me encantaría.

Lia rodeó el cuello de Peter con sus brazos, acercandola a ella. Acortando la distancia entre ambos que terminó sellandose en un beso cálido.

Con el tiempo, Killian se adaptó a las demostraciones en público. Ya no le afectaban como la primera vez, donde las miradas juzgadoras estaban en cada rincón y en cada pensamiento. Ahora ya nada importaba. Porque lo tenía a él y eso era más que suficiente.

Más o menos.

Al separarse, Lia comenzó a caminar por el pasillo rumbo a la cocina. Peter la abrazó de costado, caminando juntos.

—¿Cómo va el asunto de Nunca Jamás? —Preguntó la pirata. Peter suspiró, cansado.

—Igual. Nada ha cambiado. En unos días, mis tutorías comenzarán.

—Pero, ¿Es algo que tú quieres?

—No lo sé, Lia. No creí que llegaría tan pronto.

Hace un par de días, Peter tuvo una larga charla con su padre. Una donde salió el tema de tomar el cargo de Nunca Jamás cuando fuera mayor de edad.

Peter tenía dieciséis, pero dentro de un par de días, cumpliría diecisiete años. Y por ende, sería hora de comenzar con los aprendizajes y enseñanzas de todo lo que involucra mantener un reino, o un país en caso del rubio.

Y los consejos de Peter Pan, serían unas clases de todo un año completo. Hasta que cumpla por fin los dieciocho y ceder el trono a su primogénito.

Pero Peter, siendo un espíritu libre como su padre en tiempos de juventud, veía la idea de gobernar como... Una atadura para toda la vida.

Así que no. No estaba muy contento con la idea.

—Pero puedes hablar con él. Te escuchará y entenderá. Todavía no es momento.

—Todos en Auradon estamos condenados a gobernar siendo adolescentes, ¿Verdad? —La miró apenas sonriendo.

—Todos en la Isla estamos condenados a ser catalogados como villanos a pesar de ser adolescentes, ¿Verdad? —Alzó una cena, divertida.—Aunque no siempre tiene que ser así. Miranos a nosotros.

—Ya no son considerados villanos. Ahora son solo... Ustedes.

—Solo nosotros, sí —Tragó saliva —. En fin, aún tienes un par de días para pensarlo. Porque cuando soples las velas, tu nuevo destino estará esperándote.

—¿Cuándo te volviste tan filosófica? —Sonrió de lado.

—Hace seis meses. Cuando comencé a salir contigo y tu vocabulario auradeano.

—Admito que de vez en cuando extraño tu jerga pirata —Alzó los hombros —. Pero también me gusta que poco a poco te adaptes al modo «Auradon».

Lia no formuló palabra. Solo le regaló una sonrisa de labios cerrados y continuaron el resto del camino conversando cosas triviales, hasta por fin llegar a las puertas de la cocina.

Peter deshizo el cruce de su brazo con el hombro de Killian y la miró de frente. Sintió como ella soltó un largo suspiro y comenzó a jugetear con el anillo en su dedo anular.

—Oye, todo saldrá bien. Pero si necesitas ayuda, solo grita y vendré volando.

—¿Juego de palabras, niño perdido? —Alzó una ceja. —Descuida, Peter. Todo estará bien. No creo que la historia se repita dos veces... No tengo tan mala suerte, creo.

—¿Segura que no quieres que entre contigo? —Preguntó nuevamente. Lia negó. —bien, entonces iré con Finn. Necesita mi ayuda para el obsequio que le tiene a Evie.

—¿Aún no me dirás que le tiene preparado?

—Lo siento, pero no puedo. —Lia formó un puchero con su labio inferior. —No, no me hagas esa cara porque no te lo diré. Funcionó otras veces, pero esta vez no.

—Ya qué...

—¿Te veo luego en Historia de Reinos Mágicos? —Ella asintió —Recuerda que mamá cambió el horario. Ahora es a la tercera hora.

—Claro, casi lo olvido. Allí te veo.

La pirata se despidió de él con un movimiento de mano, pero Peter no conformado solo con eso, se acercó a la pelinegra de mechas verdes y depositó un corto beso sobre sus labios.

Y solo así, se permitió alejarse de ella.

Con una sonrisa boba, como con cada gesto del rubio con ella, dio mediavuelta para adentrarse a las cocinas.

Si no hubiera dejado su espada en el barco de su tío esa mañana, la pirata ya hubiera estado apretando la empuñadura en caso de que todo se fuera por la borda y que ese tal Ray sea otro príncipe despreciable.

Porque la primera vez la dejó pasar. Ya la segunda... No.

























✩.・*:。≻───── ⋆🍎⋆ ─────.•*:。✩





























Killian ingresó a las cocinas de la preparatoria, encontrandola muy diferente a la última vez que estuvo ahí.

Las paredes habían dejado de ser blancas para ahora estar pintadas de un verde claro con alguna que otra pintura de beignes, palos de cocina y hasta notó el dibujo de un ukelele. Los utensilios de cocina también habían sido reemplazados por nuevos accesorios igualmente en la paleta de verdes.

Parecía tener más vida y ser un espacio personal para un verdadero fanático de la gastronomía.

Los ayudantes de cocina se movían de un lado a otro, organizando platillos y acomodando la mercadería recién entregada. Lia tuvo que hacerse a un lado cuando uno pasó cerca de ella cargando varias cajas y que casi choca con ella al no verla.

—Uh, disculpe, señorita. No la vi —Se disculpó —. ¿Necesita algo?

—Ahm, sí. Ando buscando al nuevo... ¿Encargado? ¿Dueño?

—Sí, claro. El señor Ray. Está por allá —Como pudo señaló un rincón sin que se le cayera las cajas —. Lo siento, pero tengo que dejar estas cajas de tomates. Están pesados.

—Ouh, sí. Lo siento.

Killian se hizo a un lado para que el sujeto pudiera pasar sin problemas. Este le agradeció con un asentimiento de cabeza.

La pirata buscó con la mirada al joven chico de Maldonia y logró distinguirlo gracias a su portapapeles y las indicaciones que se encontraba dando a los demás ayudantes.

Con pasos decididos, pero también calculados y alertas en caso de que quisiera cobrar venganza por lo de su hermano, se acercó a él.

Cuando estuvo a una distancia prudente del chico donde este podía verla con total claridad, se permitió analizarlo un segundo antes de entablar conversación.

Su cabello era negro azabache, de estatura alta y su tez morena característica de los Maldonia. Al estar rodeado de sus compinches cocineros, notó cierta sonrisa de dientes blancos que casi nunca le había visto dar a Tiago con sus ayudantes.

Alguien le habló al oído y solo así, notó la presencia de la pirata frente a él.

—Bien, muchachos, terminen de acomodar la mercadería y después entre todos arreglaremos el menú de la semana —Ordenó con una sonrisa —. Quiero escuchar ideas de todos, así que vayan pensando.

Ray se acercó a Killian cuando los demás volvieron a sus tareas pendientes.

El cocinero real se cruzó de brazos al estar frente a ella. Killian repitió su acción, sin quitar la mirada de él.

—Hola, ¿Qué la trae por aquí, señorita...?

—Killian. Me llamo Killian Hook —Aclaró —. Necesito hablar contigo sobre... Ciertos asuntos.

—Killian. Sí, yo... Creo que te conozco —Dejó de cruzar sus brazos y señaló una puerta —. Ven, sígueme. Aquí hay más privacidad.

Con desconfianza, Killian siguió a Ray a través de la puerta la cual daba al exterior. Y la que era utilizada para descargas de pedidos o solo para salir a tomar un poco de aire fresco.

—Bien, sueltalo, dulzura.

Lia enarcó una ceja —Punto número uno, no me digas "dulzura", me llamo Killian. Punto número dos, ya tengo novio. Y punto número tres, ¿Por qué necesito tu aprobación para el pedido de carne?

—Lo lamento, no quise ofenderte. Creo que fue mi naturaleza... En fin, vamos a lo que nos interesa... —Examinó el portapapeles en sus manos —Según mis datos, has estado recibiendo una dotación importante de carne los últimos... Dos meses. Con todo lo pasado y que las cocinas no han tenido un orden como tal, el presupuesto disminuyó considerablemente. El gasto más importante ha sido el tuyo. ¿Por qué?

—Mira, tú... Cocinerito número dos —Ray frunció el ceño tras el apodo —, ¿Quieres saber por qué gasto siete kilos de carne diario? Bien, te lo presento.

Killian buscó en su teléfono la foto de la razón número uno de su excesivo consumo de carne. Colocó el teléfono frente a Ray y este observó con detalle la foto del cocodrilo que descansaba pansa arriba junto a la pirata.

—Él es Crockie. Un cocodrilo que crié desde que salió del cascarón —Guardó el teléfono en su bolso otra vez —. Al principio se conformaba con ratas o insectos medianamente grandes, pero desde que adoptó el tamaño de un cocodrilo promedio, su hambre no cesa con nada. A menos que le de sus kilos de carne diarios. Con eso se conforma hasta el otro día.

—Eso es más razonable. Yo creí que estabas en algún mercado negro de carne o algo parecido —Sonrió —. Entonces, no habrá cambios. Seguirás recibiendo el lote correspondiente.

—¿Eso es todo? ¿No me dirás algo al respecto?

—¿Por qué te diría algo? Solo te aseguras de la buena alimentación de tu mascota antes de que nosotros seamos la comida, ¿Verdad?

—De hecho, es exactamente lo que hago... Al menos hasta que pueda hacer que se quede en Nunca Jamás y abastecerse por sí solo, pero...

—Se ha adaptado tanto a ti, que no quiere irse.

—Es todo un tema... —Soltó un largo suspiro —Pero oye, si tienen problemas por la cantidad de dinero que se gasta, no me importa dar una comisión para él.

—¿Segura? —Ray miró a la pirata sorprendido.

—Claro, mi tío me paga cada fin de semana y es una cantidad de dinero considerable. Hasta el momento no he tenido en qué gastarla —Killian colocó ambas manos en su cadera —. Sé que el camión descarga cada dos días, podría darte un cheque semanal para eso.

Las clases de Economía que Evie le había obligado a tomar con ella, le sirvieron en ese momento. Pues, era un acuerdo mutuo. Y mientras las dos partes estuvieran conformes, la demanda no era necesaria.

—Claro, sí... Me parece perfecto. —Ray extendió la mano hacia ella y la pirata cerró el trato, estrechandola con él —. Y si algún día tienes un problema, quédate tranquila que el pago de la mercadería vendrá por mi cuenta. Es lo menos que puedo hacer después de... Todo lo que hizo mi hermano.

—Ouh, las noticias corren rápido dentro de la familia, ¿Verdad?

—No te hubiera gustado estar en la cena el día después de todo lo que pasó. Nunca vi a mamá tan enojada...

—La primera vez que cruce palabras con Tiago, me pareció amable... Alguien interesante. Solo que no vi lo que ocultaba detrás.

—Mamá envió a Tiago a Auradon para "corregirlo" tras lo que pasó tiempo atrás. Pensó que al estar lejos de Maldonia, todo sería diferente —El príncipe pasó una mano por su cabello —. Pero luego ocurrió el problema con la hija de Ariel y luego otra vez contigo... —Killian inclinó un poco la cabeza. ¿Problema con la hija de Ariel? Sin duda investigaría un poco más sobre ese asunto. —Y mamá entendió que no tendría más remedio que recluirlo otra vez en casa.

—Lo lamento mucho, Ray. Tu mamá no se merece tener un hijo como él.

—Mi hermano es y siempre será un idiota.

—Bueno, hay algo en lo que concordamos —Lía sonrió —. Si te soy sincera, no sabía que él tenía un hermano. Cuando Raizel me dijo que el otro hijo de Tiana llevaría el cargo de la cocina, creí que serías como él.

—Es la reputación que nos dejó mi hermano. No tienes que disculparte, Killian.

—¿Dijiste "nos"? —Inquirió frunciendo el ceño. —¿Acaso hay más hermanos?

Ray asintió —Somos tres, de hecho. El mayor es Tiago y después le seguimos mi hermana y yo.

—Oh, wow. Hay una hermana.

—Sí. Se llama Evangeline. Es mi melliza.

—Ojalá algún día poder conocerla. —Lia expresó con sinceridad.

—Talvez venga para el baile real. —Killian lo miró, confundida. —Ambos queríamos venir para la coronación de Ben y Raizel, pero mamá dijo que después de lo de Tiago, era mejor dejar pasar un tiempo y que ninguno de nosotros se presentara. Solo por si acaso. —Formó una línea con sus labios.

—Es horrible cuando tienen que esconderse de los errores de los demás a pesar de que ustedes no han hecho nada malo.

Lia entendía demasiado bien esa sensación. Es lo que cada villano vive cotidianamente en la Isla. Siendo señalados con el dedo por ser... Eso. Hijos de villanos. A pesar de que algunos no tuvieran ni un gramo de maldad en su interior o eran demasiado pequeños para siquiera entender de donde venían. Sin embargo, eran discriminados por igual.

—Pero lo superamos con el tiempo, ¿Verdad?

—Es diferente nuestra situación, pero es agradable tener a alguien que comprende el sentimiento —Ray empujó levemente el hombro de la pirata. Ella sonrió. —Lo siento, Killian, pero tengo que dejarte. La cocina me necesita.

—Claro, ve. No te quitaré más tiempo —Indicó señalando la puerta —. A propósito, me gusta el cambio. Digna cocina de un hijo de Tiana.

—Gracias. Fue la condición que le pedí a mamá para venir. Adornar mi propio espacio.

—Pues, bien hecho, cocinerito dos.

—No me lo digas, mi hermano era el «cocinerito» original, ¿No es así? —Lia asintió —. Bien, pero si pudiera elegir... Me gusta más el apodo de; chefsito.

El joven príncipe le guiñó un ojo antes de desaparecer puertas adentro. Killian dio media vuelta y salió de ahí, guíandose por el caminito que llevaba al patio de la cafetería.

Ray había resultado ser muy diferente a lo que Lia llegó a conocer de Tiago. Él era amable, solidario y por sobre todo, tenía aquel espíritu que caracterizaba tanto a Tiana como a Naveen. Mientras que Tiago era la contra cara. Siendo cruel, manipulador y despreciable.

Y Killian lo había descubierto por las malas. Pero, a pesar de todo eso, sentía cierto agradecimiento hacia él. Porque de ser lo contrario, Lia jamás habría visto todo lo que Peter hacía por ella.

O tal vez sí.

Pero su mente hace seis meses pensaba cosas completamente diferentes a las de ahora. Estaba cegada por la idea de robar la varita del Hada Madrina. Cegada por la idea de complacer a cada villano encerrado en la Isla.

¿Y en qué terminó todo eso? En decepción y miedo.

Porque hace seis meses, cinco villanos habían cambiado sus ideales para vivir una vida mejor que de la que se les podía dar en la Isla. Cinco villanos habían encontrado su lugar feliz en un mundo rodeado de príncipes y princesas, sin pensar en lo decepcionados que se sentirían sus padres.

Pero solo un villano tenía miedo. Miedo al no saber que le deparaba el futuro. ¿Podría ser feliz después de todo lo que sacrificó?

Y seis meses después lo confirmó. Todo estaba en orden. El destino había sido solidario con Killian.

Pero, a pesar de tenerlo todo, ¿Por qué ya no se sentía ella misma?

La felicidad del momento se esfumó como una nube pasajera. La pirata caminó a través del patio con la cabeza perdida en sus pensamientos. Algo que ocurría con bastante frecuencia.

Antes de entrar a su siguiente clase, se desvió un segundo para ir al baño. Una vez se aseguró de que no había nadie, apoyó ambas manos en el lavado y observó su reflejo.

Tomó una gran bocanada de aire y lo contuvo en sus pulmones un largo tiempo. Su corazón palpitó con rapidez y cerró los ojos. Al pasar casi un minuto completo, los abrió y una sonrisa fingida escapó de sus labios.

¿Por qué después de seis meses se sentía otra persona?

Talvez porque la Killian que llegó a Auradon desde la Isla había quedado en el pasado.

Talvez... Porque ya no era lo que solía ser.



































































━𝗪𝗔𝗥𝗜𝗜'𝗦 𝗦𝗣𝗔𝗖𝗘 🧚🏻‍♀️

¡Al fin he actualizado!

En fin, disculpen la demora, pero como saben, ahora soy una chica trabajadora y el tiempo libre no ha estado de mi lado. Y si lo tengo, lo uso para mis cosas personales, pero bueno...

Díganme, ¿Qué les pareció el inicio de este acto?

A pesar de que me gustan los finales felices, no es algo que precisamente se aplique a este acto. Bueno, talvez sí, pero antes de llegar a esa parte, tenemos que pasar por VARIAS complicaciones y todas las sufre Lia...

Este acto quiero tratar de enfocarme un poco más en los pensamientos de ella y cómo afronta la idea de ser «una chica más de Auradon». Aunque, como consecuencia, su cabeza termine corrompida por las ideologías de los demás.

En fin, mejor me callo porque si sigo, termino contandoles todo el acto dos completo. Y es mejor dejarlo a libre interpretación hasta llegar a la conclusión.

Muchas gracias por seguir apoyando este fic y nos volveremos a leer espero que pronto. Los quiero mucho, mucho <3

palabras; 5677

IG¹: warii_bazan | IG²: wariifangirls | TW: wary_bazan5SOS | TIKTOK: waryfangirls

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro