-capitulo nueve
Era un domingo a medio día, un domingo en el cual Tzuyu se arrepintió de haber ido a la casa de Momo.
Mejor dicho, se arrepintió de haberle comentado que ahora ella y Jihyo estaban en una relación.
-Entonces, ¿Que tienes que hacer si tu bebe esta en llamas?- Pregunto la mas alta después de haber mostrado mas de diez diapositivas de power point.
-La pregunta es ¡¿Por que rayos mi bebe estaría en llamas?! - devolvió la pregunta, estaba estresada.
Las únicas que estaban pasándola bien eran chaeryeong y ryujin, las cuales estaban jugando en la habitación de esta ultima.
-¡No puedes descartar ninguna tragedia Tzu! ¡Cualquier cosa podría pesarla!- Aclaro su garganta - Ahora, ¿Que tienes que hacer si tu bebe llora?
-¿Darle su biberón?
-Depende.
-¿Como que depende?- Se arrepintió de preguntar ahora tendría que aguantarse otras diez diapositivas.
-Asi como lo oyes, tendras que confirmar si el bebé necesita cambio de pañales, si tiene hambre, esta enfermo, herido o asustado- Fue pasando las diapositivas- En el caso del pañal obviamente debes de cambiarlo, si tiene hambre alimentarlo, si esta enfermo o herido llevarlo al hospital inmediatamente, si esta asustado tienes que tranquilizarlo, ya sea cantándole una canción, dándole algún juguete, cargarlo, jugar con el, etc.
-Entiendo- dijo en un suspiro.
Recordaba la secundaria, cuando Momo era una estudiante malhumorada que odiaba a los niños pequeños y que le daba asco ver a las parejas felices.
Ahora es todo lo contrario, aquella chica que hacia arcadas a las parejas y cara de odio a los niños, estaba enseñándole sobre ellos, como ser una madre responsable y ejemplar.
Cambio y mucho, aunque le de un poco de vergüenza que Dahyun le demuestre su cariño en frente de los demás, sabia que le encantaba, Dahyun y su hija eran las personas que mas amaba en todo el mundo, y a las unica que les demostraba amor.
-Aho- Un pequeño tiró en su camiseta hizo que no terminara de hablar, bajo la cabeza y se encontró a su hija- Princesa, ahora no, mamá momo esta ocupada- Dijo suavemente .
-Perdon mami, queria saber si podrias darnos algunas galletas por favor- Pidio
-Oh, claro -Sacó la caja de galletas del mueble y colocó unas cuantas en un plato de plástico, entregándoselo a Chaeryeong.
Tzuyu y Ryujin intercambiaron miradas, una de "Ayúdame por favor" y la otra de "Suerte soldado"
Deseaba que Dahyun estuviera ahí para que controlara a su esposa, lamentablemente había ido de compras
hace un buen rato.
-Muchas gracias -Agradeció Chaer con una tierna sonrisa, tomando a la menor de la mano y devolviéndose a su habitación.
-Como iba diciendo, ahora aprenderemos a cómo poner un pañal –Continuó
"Dahyun por favor, vuelve pronto"
—
-¿De qué estarán hablando? -Preguntó Ryujin refiriéndose a ambas mayores, mientras se echaba una galleta a la boca.
-Seguramente cosas de adultos Respondió sin quitar la vista del televisor.
-¡¿Por qué tengo que saber que significa cada color de caca?! -Se escuchó a Tzuyu gritar.
-¡Los colores de caca pueden decirte muchas cosas! ¡Ignorante! -Respondió Tzuyu en el mismo tono.
-Tienes razón -Ryujin poyó la teoría de Chaer
-¡Mira! ¡Ya empezó el festival de ballet! -Exclamó emocionada con un gran brillo en los ojos y una inmensa sonrisa.
-¿Tanto te gusta? -Preguntó, aunque ya sabía la respuesta.
-¡Claro que si! Es un baile hermoso y elegante, sus pasos tan delicados y acorde a la tranquila música... -No podía apartar la vista del aparato, el ballet era algo que le apasionaba, le encantaba bailarlo, aunque sabía muy poco se sentía libre haciéndolo, la música era tan tranquila y relajante, junto con los pasos flexibles y delicados.
Se puso de pie y retrocedió un poco, cerró sus ojos y se dejó llevar por la música, se sabía de memoria los pasos de esa canción.
Estiraba los brazos, las piernas, daba vueltas, todo impecablemente, haciendo que fuera un baile elegante.
Ryujin miraba expectante a la contraria, eran pasos totalmente increíbles para ser alguien de corta edad.
Chaeryeong era tan talentosa, si era talentosa a aquella edad no podía imaginarse como sería cuando ya fuera adulta.
Quería estar con ella en ese momento para ver en lo asombrosa que se había convertido.
Quería ver a Chaer ser una bailarina profesional de ballet, quería verla cumplir sus metas y sueños.
Quería pasar el resto de su vida junto a ella.
Chaeryeong abrió los ojos y le sonrió.
-Bailemos juntas -Pidió con entusiasmo.
-P-Pero, no sé bailar ballet...
-Yo te enseño -La tomó de la mano haciendo que se levantara.
Tomó su otra mano y empezó a moverse al ritmo de la música.
Si Chaeryeong daba un paso hacia adelante, Ryujin lo daba hacia atrás.
-El ballet no es sólo dar vueltas y vueltas, son pasos elegantes y flexibles, es como si estuvieras bailando una historia -Dijo la mayor mientras le enseñaba unos cuántos pasos.
Se separó y empezó a dar vueltas,Ryujin la imitó con un poco de torpeza y terminó estirando un poco la pierna hacia atrás, extendiendo su mano hacia Chaeryeong.
Ésta la tomó y se enrolló en el brazo de la contraria, para después volver a su lugar anterior dando rápidas vueltas y finalizando con los brazos estirados.
Una ladrido las interrumpió.
Al principio decidieron ignorarlo, pero se siguieron escuchando y ahora acompañado de gritos.
-¿Boo? -Llamó Chaeryeong a su perro buscándolo con la mirada.
-Allí está -Apuntó Ryujin al perro que estaba mirando a la cocina.
Se acercaron y vieron lo que ocurría.
-¡Vamos Momo! Si quieres enseñarme a cómo cuidar a un bebé y tú vas a ser un bebé, tienes que ponerte éste babero -Tzuyu estaba cobrando venganza.
-¡No voy a ponerme eso! -Reclamó mientras alejaba el babero de su rostro.
Empezaron a forcejear aquella tela.
Ryujin y Chaeryeong intentaban ver la escena sin reírse.
-Entonces ponte éste sticker -Tomó un sticker de la mesa y le quitó la parte de atrás, anteriormente momo estaba enseñándole algunas cosas que les gustaban a los niños pequeños.
Dado a que Momo estaba ocupada forcejeando el babero Tzuyu aprovechó y se lo puso en la mejilla.
-¡Quítamelo! -Exigió, Tzuyu solo reía.
Chaer se acercó y tomó otro sticker, también poniéndoselo a su madre, solo que esta vez en la otra mejilla
-¡Esto es traición! -Dijo Momo mientras dejaba escapar una sonrisa.
Todos los stickers que habían terminaron en las caras de las chicas.
Para la suerte de Tzuyu, Momo se distrajo del tema principal y comenzaron a jugar con las pequeñas.
Las mayores estaban en una batalla, la peli castaño trataba de hacerle peinados a Momo y ésta última intentaba alejarla.
Las menores miraban expectantes dando ánimos.
El sonido de la puerta llamó la atención.
Voltearon y ahí estaba Dahyun cerrando la puerta con bolsas en las manos.
Las miró, todas con pegatinas en la me cara y Tzuyu haciéndole una coleta a Momo.
Ésta última se levanto
-Cariño, que bueno que llegaste, me salvaste de que Tzuyu me peinara.
Dahyun no dijo nada, solo sonrió y empezó a reír entusiasmadamente.
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-Las odio... -Dijo Momo con dos coletas.
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Maratón 1/5
Disculpen la tardanza, he estado un poco ocupado. Mañana seguiré actualizando. 😸🫶
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