𝑽𝒐𝒕𝒆𝒏 𝒚 𝒄𝒐𝒎𝒆𝒏𝒕𝒆𝒏. 𝑷𝒐𝒓 𝒇𝒂𝒗𝒐𝒓, 𝒆𝒗𝒊𝒕𝒆𝒎𝒐𝒔 𝒔𝒆𝒓 𝒍𝒆𝒄𝒕𝒐𝒓𝒆𝒔 𝒇𝒂𝒏𝒕𝒂𝒔𝒎𝒂𝒔

⚝──⭒─⭑─⭒──⚝

22 de Noviembre 1977

Querida Srta. Yaxley.

Rose, aquí en el sobre posterior a esta carta, te están adjuntas las tareas que los profesores han mandado en la semana que sufriste tu percance.

Slughorn está al tanto gracias a tu padre y tú hermano. Así que no hay problema que envíes tus pergaminos por lechuza hasta que te recuperes. Potter ha estado más callado que nunca, Regulus y yo creemos que se aproxima una gran payasada de su parte.

A este punto, nos esperamos lo que sea.

Esperando tu pronta recuperación.
Atte. S.S

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27 de Noviembre de 1977

Querido Joven Snape.

Me alegra recibir una misiva de tu parte, y mis más sinceras disculpas por las molestias que pueda ocasionarte, el tener que tomar apuntes extras por mí.

La respuesta ha tardado más de lo esperado, porque deseaba terminar primero las tareas y así no mandar a la pobre lechuza con una carta sin un contexto directo.

Por favor, dile a Regulus que estoy bien. Así podrá descansar en paz y decirle a Barty que deje de preocuparse.

Igual tú. Es probable que vuelva pronto a clases.

Anhelando volver al castillo.
Atte: R.M.Y

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30 de Noviembre de 1977

Querida Rosie.

Barty al habla hermosa rosa. Regulus está que mata a tu hermano.

Severus también pero nadie le presta atención.

Anthony sigue insistiendo que pronto regresaras, pero ya será diciembre. En dos días literalmente. Y lo poco que sabemos de ti nos tiene preocupados.

Pandora y Evans también te extrañan un montón. ¿Pero sabes quién parece perrito pateado?

Potter. Hizo una broma junto al baboso hermano de Reg, para Anthony. Le tiñeron el cabello de rojo y cada que gritaba sus nombres su túnica se ponía de un rosa chillón.

Te hubieras reído de lo estúpido que se veía. De rojo y rosa. Al menos combinaba.

¡Por favor regresa! Nos haces falta. Trae galletas por favor. O mándame una carta para decirle a los elfos que hagan esos roles de canela que tanto te gustan. Es que están muy buenos.

Con hambre y extrañandote.
Atte: Barty JR.

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03 de Diciembre de 1977

Querido Barty.

Al igual que ustedes, me siento algo nostálgica al extrañarles. Hay un elfo en las cocinas, que trabaja para mí familia. Pregunta por "Yafti" y él te atenderá con gusto.

Cualquier cosa, lleva esta respuesta contigo para que vea que hablé sobre él. Más no le pidas roles de canela en producción masiva, o yo iré a Hogwarts a envenenar casa uno de esos postrecitos.

Dile a Pandy que es probable que regrese en enero. Mi padre me lo acaba de mencionar, pues los sanadores aún andan algo paranoicos buscando razones para un par de recaídas que tuve.

Nada grave. Lo prometo.
Les enviaré regalos en Yule.

Gracias por la imagen mental de Anthony combinado de rojo y rosa. Lo necesitaba.

Extrañando los roles de canela de Yafti.
Atte: R.M.Y

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10 de Diciembre de 1977

Mi rosa.

Te extraño...

Te extraño como el sol extraña a la luna cuando tienen que tomar el lugar del otro en el cielo.

Te extraño como las estrellas de una constelación extrañan a aquellas que dejan de brillar de la nada.

Te extraño, porque el invierno ahora es helado sin sentir el calor abrasador que me provocan tus labios.

Te extraño como extrañaría un perro a su amo. Porque me tienes a tus pies, aún sin poner correa formal a nuestro amor.

Podré sonar obsesionado, pero tus labios han pasado veneno a mi garganta y en mis venas ahora está ese torrente diluido que me hace buscar más de ti.

Te extraño, por mucho que me cueste aceptarlo. Y tengo tantas cosas que decirte.

Mi rosa. Vuelve conmigo, que necesito llevarte a tantos lugares y poner fin a este sufrimiento.

Te necesito; pero necesito más el buscar la forma de hacerte la propuesta formal. Pe no lo haré por carta. Te quiero de frente. Viendo tu ojos safiros juzgar mi alma. Mientras te digo cuánto puedo amarte.

Es pronto. Lo sé.
Sueno como un idiota. También.

Soy consciente de lo poco que sé de ti, y lo mucho que has calado en mi ser. Pero si quiero aprender más de tu vida y quiero abrirme transparente a ti.

Quiero que aprendas de mi, y me des lecciones para yo aprender de ti. Pero para eso, debemos ser dos. No uno solamente. Los dos, juntos.

Te deseo.
Te anhelo.
Te sueño.

Te extraño.
Atte: J.F.P.

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18 de Diciembre de 1977.

Mi rosa.

No recibí respuesta alguna de tu parte, y eso me entristeció demasiado. Preocupado esperé estos días a saber de ti. Pero nada.

Sé que recibes mis cartas, pues Ellio regresa sin sobre alguno. Aunque he visto que Snape sí ha recibido misivas con el sello de tu familia.

¿Tú ignoras mis cartas?

Espero que no. Pero respeto si lo haces.

En otras instancias, Sirius y yo hemos vuelto a casa. Mis padres ya estaban calmos del enojo a inicio del año. Aunque si nos llevamos una reprimenda de parte de mi madre.

Por cierto, mamá quiere saber más de ti. Sirius dejó ir en cuento que estoy algo. Un poco enamorado de cierta serpiente pelirroja. Aunque lo negué. Porque no estoy enamorado de una serpiente pelirroja.

Estoy enamorado de una rosa de pétalos brillantes y un tallo con espinas filosas.

Mamá rió. Papá también, sorprendidos de ello. Pero parecía que lo entendían.

Pronto será tu cumpleaños Mi Rosa. He estado pensando en un buen regalo; pero no quiero esperar a dártelo después de año nuevo o enviarlo en navidad.

Ya encontraré la forma para hacerlo llegar. Te extraño, te amo.

Sinceramente tuyo.
Atte: J.F.P

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21 de Diciembre de 1977.

James.

El flú estará abierto hasta la media noche.

Ommy está al tanto. No avisará si atraviesas la chimenea.

Atte. R.M.Y.

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Ommy la elfina de la casa Yaxley volvió a la habitación de su ama con una gran sonrisa. La pelirroja estaba sentada en su cama observando la ventana. Se acercó con cuidado a la joven y tocó su mano con uno de sus deditos para llamar su atención.

—Está hecho amita. El pretendiente de la amita recibió la carta en sus manos. Ommy estará al pendiente por si ha de venir mañana. —Las orejas de la criatura se movían alegres, causando una sonrisa en la joven.

—Eso es perfecto Ommy. ¿Padre saldrá mañana? —La elfina asintió.

—Cómo siempre. El amito Anthony se marchó por la mañana a casa de sus amigos, parecía querer celebrar su cumpleaños lejos. —Negó con la cabeza. —Pero Ommy sabe, que la amita es más feliz sin tener los ojos del gran amo y del amito vigilando todo.

Rose Mary asintió, dándole la total razón.

—Cierto Ommy. Bueno, ya me iré a dormir. Si padre sale temprano. Dile que esta noche tuve un malestar enorme y no podré despedirle por la mañana. Solo déjalo ir sin que te pregunte más. —Ommy asintió. Despidiéndose de la joven después de acomodar las cortinas de la habitación.

Rose Mary se recostó entre las almohadas esponjosas de su cama, y alisó distraídamente el camisón blanco que llevaba puesto, sus rizos estaban sueltos. Libres de tomar las riendas que quisieran. Desparramados en sus almohadas, mientras ella se echaba encima las gruesas mantas de color crema y azul rey.

Cayendo dormida a los pocos instantes.

Algo en su magia le decía que mañana iba a ser un día especial. Un cumpleaños diferente.

Por otro lado; en la mansión Potter. El único hijo del matrimonio; se aseguraba que su mejor amigo estaba dormido y sus padres hubieran dejado el flú activo. Casi nunca era bloqueado desde que Sirius había llegado a la casa.

Bajó con cuidado los escalones de la casa y se dirigió a la chimenea, sosteniendo con fuerza la pequeña mochila que llevaba al hombro.

Tomando los polvos de un jarrón bonito a un lado del crepitante fuego, los lanzó y entrando él a las llamas verdes.

—Mansión Yaxley.