𝑽𝒐𝒕𝒆𝒏 𝒚 𝒄𝒐𝒎𝒆𝒏𝒕𝒆𝒏. 𝑷𝒐𝒓 𝒇𝒂𝒗𝒐𝒓, 𝒆𝒗𝒊𝒕𝒆𝒎𝒐𝒔 𝒔𝒆𝒓 𝒍𝒆𝒄𝒕𝒐𝒓𝒆𝒔 𝒇𝒂𝒏𝒕𝒂𝒔𝒎𝒂𝒔

⚝──⭒─⭑─⭒──⚝

La torre de los premios anuales, esa misma tarde hasta la noche los dos inquilinos estaban a topes con sus deberes. McGonagall les había delegado una pila de pergaminos y libros repletos de ordenanzas y reuniones que planificar junto a los prefectos. Así como la organización del baile de navidad, que ese año se celebraría. Para James era Yule, para Lily, navidad.

Podías encontrarte a ambos, sentados en los mullidos sillones rojos, revisando cada pergamino de forma meticulosa. Leyendo y confirmando el uno con el otro, lo que estaban aprobando y organizando.

—¿Los permisos para vacaciones de Navidad? —Hablaba la pelirroja.

—Listos. Se necesitará la firma de los padres, una semana con antelación antes de Diciembre. Para organizar la lista de quiénes se quedarán. —Hablaba el de lentes.— En lo personal, me gusta más el poner la lista en la sala común y que se anoten los que se quedan. Sería demasiado trabajo el recibir los permisos para salir del castillo por fiestas. Como si fuera el paseo a Hogsmeade.

Ella miró el pergamino y le dió la razón, tachando unas cosas.

—Usaremos la lista de siempre, los que se quedan se anotan y los profesores harán asistencia en el desayuno o almuerzo después de que el tren salga.

James asintió. Tomando otro pergamino de la pila.

—¿Las patrullas de diciembre?

—Seguimos cómo están; dos prefectos de cada casa en dos horarios. Nosotros con los profesores. —El de lentes negó levemente. —¿Qué pasa?

—¿Te piensas quedar esas semanas? —La pelirroja asintió cruzándose de brazos.

—¿Tú no?

—Pues no. Regresaré a casa. No sé si recuerdas. El aullador.

Evans tarareo, moviendo la cabeza.

—Ah, si. Bueno; ni pienso hacer las patrullas sola. Cambiaremos eso —Mencionó leyendo el pergamino.

Durante una hora exacta, estuvieron trabajando en lo que McGonagall les había delegado. Acomodando el próximo horario de los prefectos.

Quedaba la organización del baile.

—Imagino que si las chicas se quedan, ellas te ayudarán con eso. Evans —Ella asintió.

—Ciertamente. Se ofrecieron desde antes; será mayormente una cena. Baile como pequeña celebración. Las lechuzas traerán los presentes de todos por la madrugada.

James suspiró. Cruzado de brazos mientras veía el fuego.

Estaba cansado. Veía todos los papeles que requerían su atención y lo hacían tener jaqueca. Llevaban la mitad al menos. Pero aún así estaba cansado.

Evans se daba cuenta de eso, Lily podía observar de reojo al chico cruzarse de brazos. Ponerse cómodo en el sofá individual y observar el juego de la chimenea.

Había notado lo diferente que estaba el chico en dos a tres meses. El llamado de atención de sus padres y McGonagall lo había hecho poner los pies en la tierra. Pero su ruptura, no había causado nada en él. En dos semanas después, de rogarle, de buscarla. El Potter se había cansado, ya no la seguía.

Evans sentía curiosidad. ¿Quizás solo se enfocaba en sus clases? Era bien sabido que ese año era el más fuerte, debían demostrar que eran mejores que los niños de once años que habían sido un día. Eran prácticamente adultos.

Aclarándose la garganta, la pelirroja llamó la atención del de lentes.

—Escuche que Sirius hará su fiesta de cumpleaños en la sala común. ¿Irás? —Casi rodó los ojos por esa pregunta tan incrédula.

—¿Hmm? Oh si. Si. Ya tengo todo organizado con Remus y Peter. Sirius estará más sorprendido este año.

—¿En verdad? ¿Que harán?

—Pues bueno, pensábamos armar más decoraciones con temáticas de estrellas. Unos amigos de Ravenclaw no facilitaron un encantamiento para simular el techo de la sala común al del gran comedor. Solo que este mostrará el cielo estrellado y la estrella de Sirio más brillante en el centro, enfocando su constelación. —Le pelirroja abrió los ojos sorprendida. Le gustaba esa idea. — El resto ya sabes, algunas cosas de las cocina, bebidas de las tres escobas, dulces, música. Lo normal. Pero lo mayor es eso.

—¡Eso será estupendo! ¿Qué te parece si las mantas y alfombras de la sala común también son de estrellas y lunas? Para que vayan acorde. —Potter asintió, pensando en aquella idea.

—Lo hablaré con los chicos. Igual, aún falta una semana. Hemos practicado el encantamiento y nos funciona, pero lo demás; aún debemos organizarlo.

El silencio volvió a reinar entre ellos. Algo incómodo. Lily jugaba con sus dedos, y James había regresado su atención al fuego.

No sabían que decirse. James había dejado de buscar formas de hablar con Lily y ahora ella le sacaba la conversación como podía. Era extraño.

Evans terminó por ponerse de pie y acercarse al chico, poniéndose frente a él para bloquear su visión. James levantó una ceja por su acción, sin descruzar sus brazos de su pecho. Cuestionando lo que hacía.

_¿Qué? _Ella movió los hombros levemente. —No entiendo, ¿Qué pasa?

_James. Quiero hablar contigo...De lo que pasó; lo estuve pensando y- —El de lentes la interrumpió.

_Evans, me dejaste muy en claro que me fuera a la mierda. Lamentablemente, vivo aquí contigo y no pude cumplir lo que me pediste. —Suspiró. — Pero creo que eso también incluía no mencionar nada de eso.

Ella negó, arrodillándose frente a él y tomando su brazo con sus manos, acercándose levemente al sofá casi pegando su cuerpo al suyo.

«Joder Potter. Que humillante es esto.» Pensaba la pelirroja.

—Lo sé. Se lo que dije; pero lo he pensado. Creo que estás cambiando. —El resopló con una sonrisa pintando su rostro. — ¡En serio!

—Claro, he cambiado. ¿En qué? ¿Tres, dos meses? Vamos Evans. Dime algo que sea más serio que eso. —El chico se acomodó, alejando su brazo de ella. —Es más, yo sí quiero hablar de algo.

Ella se puso de pie, tirando las piernas del chico del sofá para sentarse en el reposabrazos del mismo.

—Adelante.

—¿Por qué me besaste en el partido? Digo. No conozco a nadie que se bese con su ex, más si lo mandaron a la mierda. -Sirius no cuenta, él ni sabe cómo se llaman sus ex novias. —Poniéndose de pie, el chico la observó acusador. —¿Qué tramas?

—¿Yo? Ya te dije. He pensado lo que hice, como reaccioné. Quiero pedirte perdón y decirte que te perdono por ese error. —Ella también se levantó, acercándose a él para tomar sus manos. —Podemos empezar de nuevo. Como amigos...Si quieres.

—Claro, amigos.

Ella sonrió sin captar la ironía de la frase del muchacho, dispuesta a abrazarlo. Pero el la esquivó completamente.

—Hey, hey. Estaba siendo sarcástico. Pelirroja. —Ella lo observó sorprendida. — ¡Es más! Cómo somos amigos. Me ayudarás en algo. Hace un rato que comprobé que me gusta otra chica y bueno. He salido con ella. Es adorable, amable y muy sensual también. No te ofendas. Pero serías muy amable si me dices, si es buena idea mandarle chocolates en navidad.

Lily Evans, el amor eterno de James Potter. Había pasado a ser un personaje extra en la vida del de cabellos rebeldes. Quién sonreía mientras hablaba de la chica que le gustaba.

No terminaba de creer que pudiera ser posible. ¿Tan rápido se había olvidado de ella?

No lo creía. Podría ser todo una venganza de él para ella. Si. Buscaba ponerla celosa.

—Si...Creo que sería buena idea. A mí me gustaría que me enviaran chocolates en navidad. — Su sonrisa era tensa, forzada. Y él negó. Con expresión pensativa, totalmente fingida.

Ese brillo en los ojos del chico, lo conocía la Evans. Era el brillo marca merodeador. Estaba perdida.

—¿Eso crees? Tan raro. Cuándo yo te mandaba chocolates, decías que eras alérgica. Pero bueno. ¡Gracias Evans! Tan amable eres. No cambies. —Le dió palmadas en la cabeza como si de una mascota se tratase y subió las escaleras a su habitación.

Dejando a la pelirroja de ojos verdes en la sala común, anonadada. Indignada y furiosa.

«¡Y este quién se cree! Tratándome como su maldito perro. ¡Le gusta otra chica! Si claro. Ya veremos. Potter.»

El fuego de la chimenea crispaba al quemar la leña. Bailando liso, tal cual el cabello de la Gryffindor, que ahora recogía todo mientras sus ojos verdes brillaban con la luz de las llamas.

𝑽𝒐𝒕𝒆𝒏 𝒚 𝒄𝒐𝒎𝒆𝒏𝒕𝒆𝒏. 𝑷𝒐𝒓 𝒇𝒂𝒗𝒐𝒓, 𝒆𝒗𝒊𝒕𝒆𝒎𝒐𝒔 𝒔𝒆𝒓 𝒍𝒆𝒄𝒕𝒐𝒓𝒆𝒔 𝒇𝒂𝒏𝒕𝒂𝒔𝒎𝒂𝒔

⚝──⭒─⭑─⭒──⚝

¿Han escuchado alguna vez Blackbear? Es un cantante estadounidense. Que tiene una canción llamada "Mean"

En este capítulo James me recuerda tanto a una parte de la canción que dice:

James en los primeros capítulos:

¿Por qué eres tan mala?
Me haces sentir inseguro
En mis sentimientos, me pregunto
¿Te quiero a ti o quiero que alguien se aferre a mí?

James en este capítulo:

¿Porque mientes? Basta
Toma nuestra foto, rompela.
Toda mi vida es una mierda
Mi ex era mala, tú lo superaste.
Y mi corazón es un desastre, solo me quieres para tener sexo.
Estoy mejor solo, me tratas como si fuera obsesionado.

Y yo tipo: ESE ES MI VENADO 🦌

En fin. Lo prometido es deuda.

Julliet Hope ☀️