Capítulo Dieciséis
—¡¿Qué hacemos?!
Haerin gritó mientras todos corrían.
—¡No podemos irnos!—Esta vez Minho exclamó.
—¡¿Qué?! ¡¿Por qué?!
—¡No vamos a dejar a Felix y a las brujas como si nada! Quién sabe lo que harán si los dejamos vivos...
—¿Y cómo se supone que los mataremos?
—Hay que encontrar una forma.
—Minho tiene razón—Dijo Ruiqi—Además, Seungmin y Yeonjun siguen estando con Felix.
—¿Estarán bien?—Haerin preguntó con preocupación.
Sentía que todo era culpa de ella.
—Espero que sí...
—Minho, a ti te gusta leer mitos o cosas sobre seres sobrenaturales—Dijo Minju, Minho asintió—En alguno de estos libros, ¿no hay alguna información sobre cómo matar a las brujas?
El chico se detuvo de golpe.
—¡Oye! ¡¿Por qué te detienes?! ¡Tenemos que seguir...!
—No sé si hay alguna forma de matarlas—Comenzó diciendo Minho—Pero sé que hay unas flores que las espantan.
Hubo un corto silencio.
—¡Asombroso! Vamos todos a plantar flores mientras nuestros amigos se mueren—Comentó Ruiqi con sarcasmo.
—¿Qué flores son? Porque mientras escapaba de Felix, había una pequeña construcción vieja donde estaba lleno de flores cuando entré.
Todos miraron a Haerin con atención.
—¿Sabes donde está esa casa?
—Ni idea... Es difícil guiarse en el bosque, sobre todo cuando es de noche y no puedes prestar atención a tu alrededor porque alguien que quiere matarte te está persiguiendo.
Todos dejaron escapar un suspiro derrotado.
—¿Entonces qué diablos hacemos?
☠︎︎
—Y eso fue lo que pasó... Después no recuerdo mucho, solo sé que desperté así.
Seungmin sollozó mientras Felix lo veía desde arriba con confusión.
—Oye... ¿Por qué lloras? ¿Tanta tristeza te causó mi historia?
El contrario no le respondió, solo lo miró con ojos llorosos.
—Es de mala educación no responder...
Y antes de poder reaccionar, Felix le proporcionó un corte en la mejilla izquierda. Seungmin dejó escapar un quejido por el dolor que le causó, mientras que el rubio reía por lo bajo.
—Es divertido hacer esto—Murmuró con una sonrisa—Me refiero a causar una muerte lenta.
Esas palabras no causaron algo en Seungmin, estaba demasiado perturbado.
—Mmm, creo que mis palabras no te están causando miedo—Felix dijo con una pizca de enojo—Veremos si es que haciéndolo puede cambiar eso.
Y levantó la navaja.
Pero no pudo hacer mucho, ya que otro cuerpo lo derribó en el suelo.
—¡Seungmin! ¡Reacciona!—La persona gritó.
El mencionado parpadeó varias veces y luego se levantó con espanto, por fin siendo consciente de lo que estaba ocurriendo.
—... ¿Yeonjun? ¿No te habías ido?
—¡Nunca me fui! Era muy peligroso dejarte solo.
Felix golpeó con fuerza a Yeonjun en el rostro, haciendo que este se quite de arriba de él.
—¡N-No sé qué podemos hacer para derrotarlo!—Seungmin dijo con pánico.
De pronto, el chico sintió un cálido aire a su izquierda. Algo así como el aliento de alguien.
"El collar" Una voz le dijo muy bajo.
Seungmin se sobresaltó y luego se quedó de piedra.
Esa fue la voz de Felix.
Pero el Felix real.
El Felix que él conocía y era su mejor amigo.
—¡Seungmin!
El mencionado salió de su sorpresa y observó a Yeonjun, quien estaba siendo preso de Felix.
—¿El collar?—Susurró para sí mismo.
Entonces, sus ojos se abrieron en demasía cuando por fin entendió.
"—Nada, solo decía...—Seungmin trató de cambiar de tema al notar como su amigo se ponía a la defensiva. Entonces, notó algo en su cuello—¡Hey! ¿Es un nuevo collar? No lo había visto.
Felix lo miró con sorpresa y bajó su mirada, agarrando el collar como si hubiera olvidado que lo tenía puesto.
—¡Oh, lo es! Lo encontré en el suelo cuando decidí "desaparecer"—Dijo divertido, el castaño sonrió.
—Es bonito... ¿La piedra significa algo?
—Mmmh, no lo sé—El rubio hizo una mueca pensativa—Pero me gustó, así que por eso me lo quedé."
" —Felix—Llamó Seungmin—No te he visto quitarte ese collar—Señaló.
—¡Es que me gustó mucho! Pero me lo quito para dormir...
—Yo creí que hasta dormías con el collar puesto.
Felix solo rió."
"¿No se quitaba el collar?" Pensó Seungmin, mientras una luz se prendía en su cabeza.
—¡S-Seungmin!
El mencionado observó y se espantó al ver a Yeonjun siendo ahorcado por Felix.
—¡Yeonjun! ¡Quítale el collar!
Felix se tensó ante eso, mientras que Yeonjun no le cuestionó nada, ya que no tenía aire para hacerlo. Le arrancó el collar a Felix se un tirón y se lo lanzó a Seungmin, quien lo atrapó y miró con atención al rubio, para ver qué hacía.
Felix se quitó de arriba de Yeonjun y se levantó con enfado, mirando fijamente a Seungmin sujetando su collar. Yeonjun observaba todo con atención mientras que tosía y se acariciaba el cuello.
—Esto es importante para ti, ¿no?
Felix solo gruñó.
—Pero no veo que esté sucediendo nada—Seungmin hizo una mueca pensativa—Probemos esto.
El chico dejó caer el collar al suelo y luego lo aplastó con fuerza con una gran piedra que se encontraba ahí.
Pero el collar no se rompió.
Seungmin frunció el ceño mientras que Felix aprovechó para acercarse a él.
O mejor, tratar de acercarse, ya que Yeonjun lo agarró de un pie e hizo que el rubio cayera al suelo.
—¡No sé qué estás haciendo, pero intenta otra vez!—Exclamó el bailarín.
Seungmin aplastó el collar otra vez con la piedra, se le hizo una grieta, pero no se rompió por completo.
—¡Seungmin!
Yeonjun observó con horror como la boca de Felix se abrió mucho, dejando ver unos horribles dientes afiliados, así que solo cerró sus ojos esperando su fin.
Pero eso nunca pasó.
El bailarín abrió sus ojos lentamente, encontrándose con un Felix quieto en su lugar.
—S-Se rompió...—Escuchó decir a Seungmin.
De pronto, el rubio se agarró el cuello mientras tosía con fuerza y se apoyó del suelo al vomitar sangre. Yeonjun se levantó con rapidez y observó todo con ojos muy abiertos.
Los ojos de Felix empezaron a llorar sangre y él dejaba escapar unos gritos ahogados de dolor, esta vez apoyando sus manos sobre su corazón.
Pero no pudo hacer más, ya que su cuerpo cayó inerte al suelo.
Pasaron unos segundos en silencio.
—... ¿Está muerto?—Se atrevió a preguntar Yeonjun.
Seungmin se armó de valor para acercarse a Felix, encontrándolo con ojos muertos y vacíos.
—Creo que sí...
Y entonces, Seungmin por fin se percató de algo.
Había perdido a su mejor amigo para siempre.
Sus ojos se llenaron de lágrimas y sus piernas fallaron, habría caído al suelo, pero Yeonjun lo sujetó.
—Entiendo que sea difícil, Seungmin—Habló el bailarín con tristeza—Pero tenemos que encontrarnos con los demás y salir de aquí, después de esto puedes llorar todo lo que quieras...
Seungmin asintió secándose las lágrimas.
—Vamos.
—Espera—De pronto, Yeonjun lo detuvo—Tienes una herida—Apuntó su abdomen.
Oh, ya lo había olvidado.
—No te preocupes, no es tan profundo y casi no duele—Seungmin lo calmó.
Yeonjun se mostró preocupado, pero asintió.
☠︎︎
Minju iluminaba el camino mientras que los demás la seguían.
—¿La luz no le hará saber a las brujas donde estamos?
—Lo más probable, pero no tenemos otra opción...
—¿De verdad que por aquí vinimos, Ruiqi?—Le preguntó Haerin a su mejor amiga.
—Estoy noventa y nueve por ciento segura...
—¿Y ese un por ciento?
—Ese significa que no estoy muy segura.
—Pues crees bastante en ti misma, wow...
Los cuatro se detuvieron en seco al escuchar unas voces.
—¿También escucharon?—Susurró Minho.
Guardaron silencio para ver si se volvían a escuchar.
Y eso pasó.
—¡Ah! ¡Son Seungmin y Yeonjun!—Exclamó Ruiqi—Reconozco sus voces.
—Hay que darnos prisa—Dijo Minju y continuaron caminando.
Caminaron un poco más y luego la linterna iluminó a dos personas.
Eran Seungmin y Yeonjun.
—¡Chicos!
Yeonjun bajó la navaja que tenía Felix al darse cuenta de quienes eran.
—¿Están bien?—Haerin les preguntó con preocupación—¿Están heridos? ¡Ay! Seungmin... Tu mejilla.
El mencionado se tocó donde tenía el corte que le había hecho Felix.
—No te preocupes, no es nada.
—¿Y Felix?
Los dos chicos observaron el cuerpo que estaba más atrás, haciendo que los demás dejaran escapar un jadeo sorprendido.
—¿Está... Muerto?
—Sí...
Hubo un largo silencio después de eso. Todos estaban demasiado perturbados como para hablar.
Pero no era tiempo para eso, tenían que encontrar una solución y salir de ahí.
—Tenemos que deshacernos de las brujas y luego irnos de aquí...
—¿Cómo diablos nos deshacemos de unas brujas? Digo... Son brujas por algo.
—¿No son inmortales?
—No, no lo son—Respondió Minho—Tenemos que planear algo.
—¿Alguien sabe qué hora es?—Yeonjun se cruzó de brazos—Esta noche se está haciendo eterna.
—¿Seguro de que sigue siendo de noche?
Todos observaron a Haerin extrañados, pero luego siguieron la mirada de ella. La chica miraba el cielo, donde se veía que ya se estaba aclarando.
—¿Está amaneciendo?
—No puede ser, con razón sentía mi cuerpo tan cansado...—Murmuró Minju.
—Tenemos que hacer esto rápido.
—¿No podemos dejarlo en las manos de la policía?
—¿Qué podrían hacer ellos?—Minho frunció el ceño.
—¿Y qué podríamos hacer nosotros? Somos unos simples adolescentes...
—Seungmin y Yeonjun acabaron con un chico poseído por quién sabe qué—Señaló Minho.
—Las brujas eran las culpables.
Todos observaron a Seungmin con atención.
—Felix había muerto en este bosque la noche que desapareció, pero las brujas lo encontraron y lo devolvieron a la vida con algún ritual o algo así... Le habían puesto un collar, el cual sospecho que era lo que lo mantenía vivo, ya que cuando lo rompí él murió.
El resto trató de procesar la información.
—¿Cómo diablos llegamos a esto?—Murmuró Ruiqi con espanto.
Unos ruidos de hojas siendo pisadas alertaron a todos, poniéndolos a la defensiva.
Guardaron silencio mientras observaban a su alrededor, hasta que todos miraron un lugar en específico ya que se volvió a escuchar.
Una persona salió entre los árboles.
Seungmin abrió sus ojos en demasía al reconocerlo.
—¿Changbin?
—Pasó algo... Algo muy extraño...—Pronunció el mencionado con voz ahogada.
Todos se acercaron a él inmediatamente.
—¿Qué haces aquí? ¿Por qué estás aquí?—Seungmin preguntó alterado.
—Desde la noche en la que presencié todo lo que ocurrió no he dejado de venir.
—¿Qué?
—¿Tú viste lo que pasó?—Preguntó Haerin con sorpresa.
—Se me quedó grabado en la mente y es como si mi cuerpo se manejara solo hacia acá... Se que una persona normal no habría venido nunca más y hasta se habría mudado, pero conmigo no fue así...
—¿Qué pasó de extraño que dijiste?—Yeonjun preguntó con cautela.
—Las brujas se esfumaron.
Todos se quedaron de piedra.
—¿Qué dijiste?
—Desaparecieron como una sombra...
—¿Así sin más?—Minju frunció el ceño—¿Cómo es posible?
—¡Dios! Ahora que recuerdo...—Todos guiaron su atención hacia Minho, quien era el que había hablado—En uno de los libros de mitos sobre este pueblo decía que luego de que el cometido que tenían las brujas no lograra salir bien, se esfumaban y se iban en busca de otro lugar para hacerlo.
—¿Entonces no hay caza de brujas malvadas?—Ruiqi intentó bromear, aunque su rostro no expresaba nada.
—Y es mejor así—Dijo Seungmin con frialdad.
Los presentes sabían porqué el chico se estaba comportando de esa manera y lo lamentaban mucho, no se podían ni imaginar el dolor que estaba sintiendo Seungmin en ese momento por perder a su mejor amigo.
—Entonces todo ya está resuelto, ¿no?
—En realidad no.
La voz de Seungmin llamó la atención.
—¿Por qué lo dices?
—Esos bastardos que provocaron la muerte verdadera de Felix siguen libres...
—¡¿La muerte verdadera de Felix fue un asesinato?!—Exclamó Ruiqi horrorizada.
—Que lo hayan matado fue un accidente, pero todo fue culpa de ellos.
El resto se estremeció por la forma en la que Seungmin estaba hablando y por esos ojos vacíos que tenía.
—Hay que hacer algo.
Haerin miró a Changbin de reojo, viendo como su cuerpo temblaba y su mirada transmitía miedo.
—¿Hay pruebas que puedan incriminar a esos tipos?
—Habrá que investigar...
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