❝ SEREMOS SU PEOR PESADILLA ❞

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〘 ✰.༄☼︎ 𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟎𝟑☼︎༄.✰ 〙
–— gran guerra —–

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ROWAN VEÍA POR LA VENTANA DEL AUTO CON ABURRIMIENTO. SU CABEZA ESTABA echa un lio con todo lo sucedido los últimos días y el tema de algunos Salvadores ahora cautivos en Hilltop. Hace mucho que no veía a su hermana y sinceramente estaba muy preocupado aunque sabía que ahora que Rick había partido a la batalla era muy probable que hubiese dejado a Carl y Rylie cuidando de Alexandria.

Hilltop era un lugar muy lindo, pero
ya se estaba cansando de estar solo vigilando a los hombres cautivos.

La angustia por su hermana era notoria así que cuando descubrió que Aaron, quien regreso de la batalla, saldría de la comunidad para asegurarse de ganar decidió acompañarlo.

Enid inistió en que quería ir y aunque  Rowan intentó convencerla de no ir y quedarse a cuidar de Maggie y Gracie,
la bebé que Aaron trajó al regresar y la cuál terminó adoptando cierto rubio ni con eso logró convencerla de quedarse.

Y no hubó manera de hacerla volver.

Ella está sola tal como yo lo estuvé anteriomente, no quiero que sufrá lo que yo sufrí sin un padre.

Y con eso terminó convenciendo a Maggie de que se haría cargo de la bebé.

Aunque Rowan ya había madurado mucho a sus diecinueve años y ya tenía experiencia criando niños. Después de todo en algún punto de todo esto fue niño criando a otro niño.

Enid al principio pareció insegura
de la decisión de su pareja y Rowan le hizó saber que sin importar qué él iba
a cuidar de la bebé. La castaña quedó maravillada cuanto vió los ojitos de la bebé por primera vez y sintió la necesidad de tomarla en brazos sorprendiendo al chico.

Ella necesitará una madre, dijo Enid sosteniendo la manita de la niña.

Entonces Gracie encontró una familia en Rowan y Enid.

Ahora el rubio se encontraba bastante callado pensando en su hermana y como iban a lograr convencer a las mujeres de Oceanside de unirseles a la pelea.

Aaron iba manejando en silencio mirando fijamente la carretera. Cuando llegó a Hilltop les contó a Enid, Maggie y él que Eric había fallecido en la batalla y eso lo había tenido afligido durante esos días.

—Tendrán que escucharnos, ¿verdad?
—comentó Rowan desde el asiento del copiloto a Aaron —. Después de haber venido hasta acá.

—Lo siento, estaba...

—¿Qué?

—Solía hacer estos viajes con Eric cuando buscabamos gente para llevar
a Alexandria —relató Aaron con nostalgia dandole una fugaz mirada al chico antes de volver la vista al camino —. Viajamos a Hilltop hace un par de días para blindar los autos. Él siempre estaba ahí, dónde estás tú ahora. Me estaba acordando de eso.

—Lo siento —musitó Rowan
bajando la mirada.

—Necesito saber que no murió en vano. ¿Qué me estás diciendo?

—Estaba pensando en Oceanside, aunque en realidad fue idea de Enid —informó Rowan mirando al hombre a su lado —. Me pregunto si nos escucharan.

—Espero que sí. Hay que tratar de
no asustarlas. Tara dijo que hasta que llegó ella mataban sin vacilar. Va a ser peligroso, pero necesitamos que sean parte de esto. Tenemos que convencerlas, no hay opción.

—Debimos traer armas para ellas —mencionó Enid desde el asiento trasero en voz baja.

—Debemos aferrarnos a esas armas —respondió Aaron.

—Cyndie puede usar la mía...

—La necesitaras, Enid.

La chica soltó un si en voz baja antes de volver a bajar la mirada entristecida.

—Desearía que no hiciera falta.

—Yo también —comentó Rowan dandole una fugaz a su novia.

Entonces el automóvil volvió a quedar en absoluto silencio hasta que la voz de Aaron los hizó salir de sus mundos.

—¿Alguno de ustedes sabe conducir?

—Yo —informó Enid con una sonrisa nerviosa mirando al piloto —. Bueno, más o menos. Mejor que Rowan seguro.

—Oyéme, ese choque de la otra vez fue accidental —reclamó Rowan indignado al oír a su novia y ante sus palabras cierto hombre no pudó evitar reir.

—Sí, "accidental".

Finalmente Aaron le cedió el lugar de piloto a Enid y continuaron con su viaje a Oceanside solo que justo cuando iban a llegar a la intersección la castaña giró en la dirección contraria.

—¿Por qué giras? —preguntó Aaron viendo con confusión que iban por el camino incorrecto —. Deberíamos seguir derecho.

—Solamente quiero ver una cosa. Tal vez les podamos llevar algo que les sirva.

—Es verdad, llegar con las manos vacías es descortés.

——— ✮✧☾✧✮ ———

Tal como Enid tenía contemplado no llegarían con las manos vacías pues había encontrado un camión en buen estado que serviría como una especie de regalo para amistar con las mujeres.

Rowan y Enid conducieron el automóvil mientras Aaron se encargaba de ir detrás de ellos conduciendo el camión hasta que se detuvieron cerca del bosque.

—¿Aquí? —preguntó Rowan bajando del vehículo dirigiendose al mayor.

—No lo sé, supongo que servirá —respondió Aaron mirando el lugar a su alrededor recibiendo un asentimiento por parte del rubio.

Así de la nada la noche cayó y no tuvieron más opción que quedarse en
el automóvil. Rowan y Enid compartían el asiento trasero de dicho vehículo. La chica se encontraba echa un ovillo contra el cuerpo de su novio temblando a causa de las bajas temperaturas.

—¿Te das cuenta que dejamos a nuestra hija sola en Hilltop?

—Ella está bien, Ro —respondió Enid en voz baja mientras sentía las manos del chico envolverla —. Maggie la cuida y no iba a dejarte hacer esto solo.

—Eres tan terca.

—Por eso me amas, idiota.

Rowan sonrió en medio de la oscuridad dejando un fugaz beso en la frente de la castaña.

En eso sintieron que Aaron hizó un brusco movimiento y antes de que alguno quisiera intentar algo el hombre les hizó una seña para que se quedaran en su sitio.

Rápudamente Aaron salió del vehículo con su arma en manos apuntando en todas direcciones seguido de ambos adolescentes, quienes también iban armados y luego de recibir un breve asentimiento por parte de Aaron avanzaron de modo que rodearon el camión estacionado a pocos metros.

Cuando lo rodeaban escucharon
unos quejidos provinientes de Aaron
y se apresuraron a movilizarse.

—No debiste venir aquí.

Rowan se preparaba para disparar y justo cuando salieron de su escondite Enid se apresuró a disparar terminando con su atacante de un solo disparo.

Rápidamente se acercaron bastante preocupados a Aaron, quien permanecía en el suelo adolorido.

Apenas se acercaron a él se vieron rodeados de las mujeres de Oceanside.

—¡Suelten sus armas, ahora! —
exclamó una mujer apuntandoles a los adolescentes con lanzas mientras se levantaban con cuidado —. Despacio.

Y como si las cosas no pudieran empeorar apareció Cyndie viendo con preocupación a la mujer en el suelo.

—¿Abuela? —preguntó alarmada acercandose al cuerpo en el suelo con lágrimas en los ojos —. ¡Abuela! ¡No!

Y estaban en graves problemas.

——— ✮✧☾✧✮ ———

Las cosas por Alexandria marchaban bien. Hasta ahora era una noche muy tranquila así que aprovechando que estaban libres de responsabilidades y Judith estaba dormida, Carl y Rylie decidieron ir con Siddiq a ver como estaba.

Rick aún no regresaba y ellos aún no tenían definido como hablar con el líder sobre su nuevo invitado sin que el pobre hombre recibiera una bala.

En medio de la oscuridad de la noche ambos adolescentes se dirigían a las alcantarillas. Una vez ahí, Carl se dió a la tarea de comenzar a quitar la tapa y cuando se disponía a bajar alguien los detuvó en el momento.

—Carl, Rylie —llamó Michonne haciendolos girarse mientras ella se acercaba a ellos —. Los estuvé buscando. Ya vámos a irnos, ¿qué están haciendo?

—Estámos ayudando a alguien, a un viajero —respondió Carl.

—¿En la alcantarilla?

Justo cuando Rylie estaba por responder unos fuertes golpes que parecían venir de la entrada de Alexandria lograron interrumpirla y rápidamente se giraron en dicha dirección preocupados.

"Se estarán preguntando porqué cuernos sus vigias no dieron la alarma. Verán, somos gente educada. No sé cuando van a despertar de un tiro como ese, pero deberían despertar. Así que vámos directo al grano. Perdieron. Se van a poner en fila frente a sus casitas y van a ofrecer una disculpa..."

Rylie se giró hacia atrás al igual que
Carl notando la llegada de varios de sus compañeros que estaban igual o más preocupados que ellos al oír la voz de Negan por medio del altavoz.

"Y él que ofrezca la disculpa más
patética será asesinado, después voy a matar a Rick frente a todos y seguiremos adelante. Tienen tres. Repito, tres minutos para abrir esta puerta o los haremos mierda a bombazos."

—Salieron —musitó Michonne sin poder creerlo.

Y el famoso silbido de Negan se escuchó por todo el lugar dejando a la morena congelada en su sitio.

—Vámos —pidió Carl antes de acercarse a cerrar la tapa de la alcantarilla con ayuda de Rylie para dirigirse a la mayor —. Michonne, vámos.

Carl la tomó de la mano y ella no
tardó en reaccionar para después salir corriendo en la dirección contraria siendo guiada por la jóven pareja.

No tardaron en encontrarse con el resto de su grupo y apenas estuvieron todos juntos Carl empezó a idear un plan.

Mientras tanto el grupo, entre ellos Rylie vigilaba que nadie los viera.

—Tiene que parecer que estámos escapando por átras —informó Carl con rápidez mientras guardaba un par de bombas de humo en su mochila —. Lleguen al bosque antes de la cantera y apaguen las luces. Mantengan una buena distancia, ataquenlos y huyan a pie. Saben dónde estaremos. Buscaré las armas, reuniré a los demás y los veré allá.

"Dos minutos, chicos. Más vale que se esfuerzen, quiero oír unas disculpas memorables. Habrá puntos extras por creatividad, pueden recitar un poema, cantar una canción. Amo esa porquería."

—Ya vayanse, habrá gente en la enfermeria y necesitaran su ayuda —pidió Carl a varios del grupo que rápidamente acataron la órden.

—Tenemos armas, podemos pelear —comentó Tara acercandose al ojiazul.

—Si, pero ahora no. Él tiene razón —respondió Rosita a su compañera.

—Carl, no puedes dejar que tomen este lugar.

—Si puedo, solo hay que sobrevivir esta noche —informó el mencionado a Michonne con decisión —. ¡Este es mi show, tú lo dijiste! Es mi plan y lo van a seguir. Todos lo van a seguir, andando.

El grupo se dió a la tarea de seguir
el plan del ahora líder mientras Carl
y Rylie se dirigían en la dirección contraria a ellos. Estaba claro que Rylie no iba a dejar que Carl fuera solo pues no quería que nada le pasará ya había estado a nada de perderlo hace días y no iba a perderlo por culpa de Negan.

"Un minuto. ¡Un minuto!"

Sin embargo, ese minuto transcurrió
y al ver que nadie obedecia su mandato Negan empezaría con su desastre.

"Oki dokei. Tú te lo buscaste, Rick, porque yo estaba dispuesto a cooperar. Todo lo que tenías que hacer era seguir unas pocas y muy simples reglas. ¿Pero ahora? Bueno, ahora está claro que tienes que irte. Estás jodido, desgraciado."

—No está en casa —exclamó Carl
de repente desde los muros siendo apuntado por bastantes Salvadores.

"Oh, ¿qué carajo? Oigan, que nadie dispare es Carl y la linda rubiecita Miley. Miráte, atendiendo la puerta como todo un hombrecito. Miley, que hombre tienes. Como me enogulleces, Carl."

Rylie lo miró con furia mientras contenía las inmensas ganas de darle un balazo en la cabeza para no echar a perder el plan inicial de Carl.

"Tu papi no está en casa, ¿eh? Bueno, cuando vuelva se llevará una humeante sorpresa."

—Hay familias aquí dentro, niños —informó Carl con cierta ira mirando al hombre frente a ellos —. Mi pequeña hermana.

"Eso si que me rompe el corazón. En el Santuario había niños, seguro los vieron. En uno de los puestos hasta había un bebé. Me pregunto que le pasó."

Rylie observó con cuidado los movimientos de Negan, quien se acercaba un poco más aunque había metros de diferencia.

—Nada de esto es justo, chicos. Ustedes ya lo saben —comenzó a decirles Negan con un tono neutral dirigiendose a Carl —. Tuviste que matar a tu propia madre, eso te jode la cabeza. Ergo necesitamos a alguien a cargo dispuesto a hacer lo que haga falta para garantizar que eso no pase. ¡Oh, espera ese soy yo!

—Las cosas malas pasan, pero podemos resolverlas —explicó Rylie dando un paso al frente buscando la mano de Carl —. Podemos parar esto.

—¿Ahora quieren hablar? Tu suegrito decidió que yo muera, sea como sea —comentó Negan mirando directamente a la rubia antes de señalar a sus hombres —. Le dió una opción a mi gente, no a mi. Ahora necesitaremos un nuevo acuerdo. Disculpas y castigos.

—¡Ya matáme!

Rylie alzó la mirada hacia Carl con incredulidad al oír sus palabras y la firmeza con la que se expresó incluso Negan pareció sorprendido.

¿Acaso se volvió loco?

—¿Qué dijiste?

—Si alguien tiene que pagar, si tienes que matar a alguien matáme a mi. Hablo en serio.

Rylie no daba crédito a lo que oía. Tantas suplicas desesperadas de ella rogandole que se mantuviera con vida por ella, por su familia y ahora deseaba morir por su gente.

La rubia sintió sus ojos llorosos y
apretó disimuladamente su mano contra la suya porque si, en medio de la gran guerra su mano buscó la suya como solía hacerlo siempre para sentir que aún seguía con ella.

—¿Quieres morir?

—No. No quiero, pero lo haré tarde o temprano —respondió Carl con un tono bajo y la voz algo quebrada —. Y si... si mi muerte ayuda a parar esto, si hace que todo sea diferente para nosotros, para ustedes, para los niños valdrá la pena. Dime, ¿este era tu plan? ¿Así es como debía ser? ¿Esto es lo que querías ser?

Negan se quedó en silencio quizás analizando la profundidad de aquellas palabras y la firmeza con la que Carl hablaba.

"Escapó un convoy, vámos por ellos"

Ante tal distracción Carl tomó la mano de Rylie y la obligó a seguirlo para así bajar de las escaleras aunque Carl terminó cayendo de la escalera a una altura bastante fea.

—¿¡Qué carajos, Carl!? ¡Solo era un truco barato! ¡Creí que teníamos algo especial, cabroncito! —exclamó Negan bastante molesto desde el otro lado del muro —. ¡Vuelen todo!

Rylie casi salto también solo para revisar que Carl estuviese bien, pero justo cuando lo hizó una explosión a metros de ellos llamó su atención.

—¿¡Estás bien!?

—Yo... solo sigamos —exclamó Carl en respuesta poniendose de pie para ir por la bolsa y ponerse su sombrero —. Ayudanme con las bombas, será mucho más rápido entre los dos.

Rylie asintió sin más antes de tomar varias bombas de humo de la bolsa que llevaba Carl y encenderla para así lanzarlas en la entrada creando una cortina de humo para confundirlos y en eso a metros de ellos explotó un edificio.

—Carl, ¿te encuentras bien? Estás cojeando mucho —preguntó Rylie con preocupación lanzando una bomba detrás suyo —. ¿Te fracturaste?

—Solo es algo leve, estoy...

Y se vió interrumpudo cuando de pronto el auto frente a ellos explotó lanzandolos lejos del vehículo en llamas.

Rylie se levantó como pudó tosiendo por el humo y se apresuró a ayudar a Carl a ponerse de pie, aunque ahora era más que obvio que no podía andar e incluso terminó tambaleandose asustando más a su novia.

—Necesitamos buscar un lugar dónde escondernos, no puedes ni mantenerte de pie —anunció Rylie pasando su mano por la cintura del chico para ayudarlo a andar una vez se pusó su sombrero.

Con mucho esfuerzo lograron llegar hasta el porche de la casa más cercana que vieron y Rylie dejó a Carl en el suelo para que descansará.

Sentía un horrible dolor en el pecho que no hacía más que aumentar al ver el estado en el que se encontraba el ojiazul.

Carl apoyaba su cabeza contra la
pared respirando entrecortado por la boca mientras sudaba y eso solo empeoró las cosas.

—¿Qué sucede, cielo? —preguntó Rylie examinando como pudo el cuerpo del chico y después su rostro.

—Rylie, estoy bien...

—Pues no te ves bien.

En ese momento Carl se percató de un extraño ruido en el interior de la casa y tomó a su rubia de la mano para alejarse lo más que pudieron de la casa que apenas se alejaron explotó junto a las demás a su alrededor en fila.

Carl quedó estático sintiendo un zumbido en sus oidos mientras miraba el lugar en llamas.

—¡Carl, debemos seguir! —exclamó Rylie haciendole señas para hacerlo volver en si ayudandolo a mantenerse de pie —. ¡Tenemos que llegar a las alcantarillas!

—Sí, sigamos...

Como pudieron avanzaron hasta las alcantarillas aunque era una tarea complicada si la mitad del peso de Carl lo sostenía Rylie, pues por la caida de hace rato no podía ni andar de pie.

—¡Al suelo, chicos!

Rylie tomó varias bombas y como pudó las destapó al mismo tiempo creando una barrera dd humo para esconderse que les dió tiempo de adentrarse a las alcantarillas sin ser detectados.

—¡Diablos, por allá!

——— ✮✧☾✧✮ ———

No fue fácil, pero siguiendo todas las indicaciones de Carl al pie de la letras todos los alexandrinos se encontraban refugiados en las alcantarillas incluido todo el grupo de Rick.

El hombre no tardó en aparecer acompañado de Michonne y su sorpresa no pasó desapercibida al nitar que todos estaban a salvo ahí dentro, incluida su pequeña Judith que jugaba con cierta rubia en el fondo.

Rápidamente se acercó como pudó a sus niños y Rylie se apresuró a levantarse de su lugar para abrazar al mayor para luego separarse al notar la presencia de un rostro que no le era familiar.

—Lo traje aquí —se apresuró a reaponder Carl sentado a un lado llamamdo la atención de su padre
—. Así es como pasó.

—¿Qué sucedió? —preguntó Rick a su hijo al verlo sentado en el suelo bastante alarmado.

—Creo que me fracture algo o no sé,
me duele un tobillo y el pie —respondió Carl con una sonrisa débil haciendo a su padre soltar un suspiro aliviado —. Solo espero y sea algo pasajero, aunque no deja de dolerme.

Rylie permanecía a un par de metros un poco alejada recargada en el hombre de Daryl, quien mecía a Judith pues arriba se escuchaban el sonido de bombas.

Rick y Michonne se aseguraban de que Carl estuviese cómodo pues el dolor en su puerna no hacía más que aumentar así que Siddiq insistió en que usará los medicamentos que el llevaba para el dolor y fiebre, los cuales ayudarían a bajar la hinchazon y disminuir el dolor.

Las bombas no hacían más que sonar sin parar y en algún punto Michonne se pusó de pie ignorando al resto para ir hacia Dwight e implorarle que hiciera algo para que se detuvieran, pero aquel hombre no podía frenarlos.

—¿Dijiste que Hilltop era seguro? —preguntó Rylie acercandose al rubio.

—Sí.

—Hay que llevar a todos ahí, podemos llevar a Carl para curar esa pierna —mencionó ella suplicante.

—Pero creen que ustedes escaparon al bosque —comentó Dwight mirando con seriedad a la chica —. Están ahí buscandolos.

—Nos vieron yendo al oeste así que
no iremos al oeste —intervinó Tara acercandose al grupito.

—Su mejor opción es quedarse aquí hasta que ellos se vayan.

—No, si nos encuentran aquí moriremos —informó Daryl de repente mientras mecía a una inquieta Judith en brazos.

—Deben estar por terminar. Se de lo que hablo. No vinieron aquí para destruir el lugar, no tienen las municiones para hacerlo —continuó explicandoles Dwight antes de que sonará un nuevo cañonazo —. Luego de que terminen, cuando ellos se vayan ahí será cuando saldremos.

Entonces nadie dijo nada más y el lugar se volvió a sumir en silencio antes de que un nuevo cañonazo hiciera eco.

Michonne se alejó dejando a Rylie, Tara y a Rosita con el hombre.

—Niña, ¿estás segura de que Hilltop es el mejor plan?

—¿Tienes uno mejor? —cuestionó Rosita interviniendo en la conversación con desafio.

—Todos ustedes juntos en un solo lugar...

—Sí, todos juntos —interrumpió Daryl de nueva cuenta con firmeza para después alejarse un poco —. Seremos su peor pesadilla.

Después de un rato los sonidos de motores encendiendose se escucharon fuerte y claro.

—Suena a que se están yendo.

—Parece que tenías razón, se están yendo —comentó Rosita al rubio.

—Tal vez —musitó Daryl para después acercarse a Rylie y pasarle a la niña en brazos antes de dirigirse al líder —. ¿No quieren que vaya a ver?

—Sí.

Daryl le dió una última mirada al grupo antes de salir.

Mientras tanto Rylie se acercó a su novio y lo abrazó con Judith sentada en las piernas de jóven rubia, tratando de no aplastarlo en el proceso o lastimar su pierna.

—¿Duele demasiado?

—Muchísimo.

—Cal, ¿triste?

—No, linda, estoy bien —respondió Carl con una sonrisa soltando un quejido en voz baja —. Solo es un mini golpecito.

—¿Chiquito? —preguntó Judith haciendo con su mano un gesto de mínimo y su hermano asintió.

—Pequeñito.

Rylie rodó los ojos con diversión.

—Cal, sanarás pronto —musitó Judith tomando la mano de su hermano con la suya dejando un besito en ella.

Aquella acción enterneció a los mayores que los acompañaban y Carl sonrió con ternura dejando un beso en su frente mientras sostenía la mano de su rubia.

—Está despejado, no hay nadie —informó Daryl de repente llegando justo a dónde están de nueva cuenta —. Es ahora de movilizarnos a Hilltop.

Rick asintió para después con ayuda
de Daryl ayudar a su hijo de ponerse de pie intentando no apoyar todo su peso en el suelo, pero si que pesaba un poco
y entre quejidos lograron avanzar.

Pronto dejaban su hogar que ahora se reducía a cenizas y fuego con la pequeña ilusión de regresar o al menos intentar reconstruir aquel lugar que así como les dió malos recuerdos algunos fueron buenos.