Era una noche anterior del día en el que viajarías con Taiju por temas del trabajo.

Estabas haciendo tu maleta en tu habitación, cuando Chifuyu entra a ella.

— ¿ama? Por qué está alistando una maleta — pregunta el androide

— Ohh, no te lo dije verdad, iré de viaje como por tres días con mi jefe, te quedaras solo en casa

Dijiste tranquila, Chifuyu hizo una mueca de disgusto por ello, no le gustó la forma tan tranquila en la que dijiste esa palabra.

Por tu parte, tampoco te importaba mucho la forma en la que le hablarías a Chifuyu ya que sabias que el no sentía como los humanos.

No experimentaba los sentimientos, por ello nunca te preocupaste en la forma en que le hablarías.

— ¿A qué hora sale su vuelo ama? — pregunta Chifuyu

— A las seis, tengo que salir de aquí a las tres de la mañana más o menos — dices

No se te hizo raro que te preguntara a que hora salía tu vuelo, ya que el era el que te levantaba siempre.

— ¿Gusta un té antes de dormir?

— Por favor... — dijiste ya guardando las ultimas cosas.

Chifuyu bajo a la primera planta donde estaba la cocina para preparar tu té.

Mientras tanto, buscaba entre los cajones de medicinas, unas pastillas para dormir.

Cuando las encontró las guardo con el, caminando de vuelta a la cocina y poner las pastillas en tu taza de té.

Y llevártelo.

— Aquí tiene ama — dice con una sonrisa

— Gracias Chifuyu...

El humanoide veía detenidamente como te tomabas todo el té, y esperaba a que las pastillas surgieran efecto.

Cuando por fin te dormiste, tomó tu maleta bajandola hasta el sótano y dejarla junto a la cama vieja que estaba ahí.

Vio la habitación, era perfecta a sus ojos, tenía todo lo que a él le gustaba.

Cuando volvió contigo, te cargo estilo nupcial bajandote por las escaleras y llevarte al sótano.

Recostandote en la cama, dejando una pequeña a un lado tuyo.

Salir del lugar y cerrar por fuera, mientras tanto, iba a su lugar seguro, el lugar donde se controlaba toda la cada.

Las cámaras de seguridad a que rodeaba la cada por dentro y por fuera, viendo la pantalla de la cámara de seguridad del sótano.

Viéndote dormir. Que gran sorpresa te ibas a llevar nada más despertaras.