Cuando Yunho miro a Jongho pudo ver claramente que estaba mucho mejor que hace unas horas y se sintió más tranquilo, pero aún así le faltaba algo.

—¿De qué?— Yunho lo miró, y Jongho pudo ver lo mismo que había visto el día que fue a buscarlo al departamento de Wooyoung, arrepentimiento, culpa, soledad, y no le gustaba verlo de esa forma.

—De lo que dije— El menor bajo un poco su cabeza— Va a ser estúpido lo que diré pero mentí sobre que mentí— Jongho frunció levemente el ceño y alzó su cabeza.

—¿Cómo?

—Lo que dije esa noche fue real, pedí que lo olvidarás porque sería lo mejor para ti— El menor lo sin comprender— No quería lastimarte, aunque lo hice, de una u otra forma termino lastimando a alguien, toda mi vida ha sido así y en algún punto deje de pedir perdón por lastimar a las personas, prefiero no saber si me perdonaran, a qué me digan lo que ya sé.

—¿No mentiste?— Yunho negó— No creo que en toda tu vida hayas lastimado a personas, no creo que seas una persona mala.

—Yo creo que sí lo soy, me lo dicen todo el tiempo, siempre que lastimo a alguien lo único que escucho es como me llaman mierda— Jongho negó— Me arrepentí después de decir que mentí, pero preferí que te alejarse, preferí volver a quedarme solo aún si no me gusta— Jongho se sorprendió un poquito, casi nada, cuando el pelinegro admitió lo que él sospechaba.

—Lo sabía— El pelinegro ladeó su cabeza— No te gusta estar solo, te asusta quedarte solo... Pero ¿Por qué prefieres quedarte solo?

—Aprendí que de esa forma nadie sale lastimado por mí, así nadie tendrá de decirme lo que soy— Jongho lo miró y sin pensarlo demasiado lo abrazo, cosa que por supuesto a Yunho le sorprendió, pero no lo apartó y tampoco le devolvió el gesto— Perdón por haberte lastimado, de verdad, lamento mucho que hayas tenido que aguantarme todo este tiempo— No le importaría mucho si Jongho igual le decía todo lo que su hermano le dijo hace unas horas, él se sentía bien por haberse disculpado.

—Te perdonó— El mayor lo miró incrédulo, el conejito le regaló una pequeña y tímida sonrisa— Yo sé que no eres así, yo sé que esa no es tu verdadera personalidad— Jongho lo miró con una calidez que no sentía hace demasiado tiempo, aún con sus amigos, especialmente con Mingi, él no se sentía tan cálido como en ese momento— Todo estará bien, ahora me arrepiento de haberle pedido a mi mamá que nos fuéramos— Abulto sus labios.

—Pasaria de todas formas, igual no estaré solo porque Mingi y Hongjoong vivirán ahí un tiempo— El conejito ladeó su cabeza— Mingi mencionó que no quiere morir y que su cadáver no sea encontrado.

—Oh, el embarazo— Yunho se encogió de hombros— Me alegra que no vayas a estar solo, me estaba sintiendo culpable por eso.

—No tienes que sentirte culpable por nada— El menor negó con un adorable puchero— Tengo una duda ¿Cómo supiste que no me gusta estar solo?

—Fácil, antes de que te hicieras novio de Sihyeon tú estabas en casa todo el tiempo y Hongjoong mencionó que era extraño porque salías todo el tiempo, después cuando encontré a mi mamá tú ya no estabas todo el tiempo en tu casa, pero cuando me regalaste esa pelota con la que reemplazante la que pisaste volviste a estar en casa y luego que llegó Wooseok volviste a salir, sólo lo deduje por mi falta de atención— Sonrió de lo más tranquilo— Y esa noche me diste a entender que no te gustaba estar solo, pero preferí no darlo por hecho hasta ahora.

—¿En un mes?— Jongho asintió— Mingi tardó tres meses— El menor se encogió de hombros.

—Soy muy observador, pero tú hermano no sabe eso ¿Por qué?— Dejo ver su curiosidad.

—Porque no quiero que lo sepa— El conejito ladeó su cabeza— No importa.

Bien ahora Jongho estaba conectando otras cosas que lo podían llevar a una posible razón por la cual Yunho era como era, y esperaba equivocarse en algo para que su repuesta no lo llevará a Wooseok.

—Mi conejito ya llegué— Jongho miro al mayor con preocupación— ¿Que hace aquí?— Cuando las orejas de Minkyung se echaron hacía atrás el par supo que no era una buena señal.

—Vino a disculparse— Habló Jongho colocándose enfrente del pelinegro— Mamá, él vino a disculparse, todo está bien, lo prometo— Minkyung se calmó al ver el brillo en los ojitos de su hijo, sus orejas volvieron a su posición original— Lo juro— La mayor asintió y se alejó.

—¿Me iba a atacar?— Jongho asintió— Gracias entonces.

—Tienes suerte de que seamos conejos, porque de lo contrario hubiera sido más difícil ¿Haz visto a Mingi o a Wooyoung molestos?— El pelinegro lo pensó un poco y después negó— Que bueno.

—¿Tan malo es?

—Sí— Murmuró— Uhm, yo, yo dejé mis juguetes— Yunho lo miró— Y me arrepiento de eso.

—Me alegra que los mencionaras— Jongho lo miró emocionado— Los traje por si acaso todo salía bien y no me mandabas a la mierda.

—¿De verdad los trajiste?— El mayor le sonrió.

—¿Vamos por ellos?— Jongho asintió demasiado feliz, junto al mayor caminaron a la puerta pues Jongho recordó que por si acaso debía decirle a su mamá que iba a a salir aún si no iba lejos— ¡Mamá ya vuelvo!— Minkyung apenas reaccionó cuando Jongho ya había salido.

El mayor abrió la puerta trasera de su auto y sacó una bolsa donde estaban los juguetes del conejito, Jongho la tomo con felicidad pues al menos así no se iba a aburrir mucho, miró Yunho y le sonrió.

—Gracias por traerlos— El pelinegro le sonrió de igual manera.

—Son tuyos— Murmuró.

Ambos sintieron una ligera tensión que por supuesto trataron de ignorar, pero sentía que poco a poco iba creciendo y no sabían que hacer exactamente, ambos pensaban que la mejor opción era huir, pero sólo uno iba a llevarlo a acabó.

Jongho estaba por decirle que ya tenía que regresar a su casa, cuando Yunho lo tomó de forma delicada el brazo y lo besó, el menor evidente tardó en poder creer que estaba pasando, Yunho lo estaba besando, de verdad lo estaba besando y él no reaccionaba aún. Yunho ya empezaba creer que fue una muy mala idea besarlo, pensaba en alejarse y huir, pero Jongho comenzó a responder y sintió como su mano disponible de forma tímida se colocaba sobre su hombro, y poco después se alejaron. Ambos estarán de acuerdo en que no fue el mejor primer beso por lo repentino que fue, pero cuando sus labios se unieron una vez más fue distinto, está vez ambos estaban perfectamente coordinados, y los dos quedaron satisfechos por ello.

—¿No te vas a arrepentir?— Yunho dejo salir una pequeña risita.

—Esta vez no— El conejito le sonrió— No me arrepentiré de haberte besado— El menor lo abrazo y está vez si fue abrazado de vuelta.

Jongho pensó en que sí era un buen momento para decirle al mayor lo que sentía, tal vez sí, tal vez aún era muy pronto, lo pensó demasiado hasta decidir que no diría nada, al menos por ahora no.

—A mi mamá no le gusta que está muy noche fuera de casa— Murmuró el menor volteando a ver su casa.

—Y tiene toda la razón, ya debería entrar— Jongho asintió lentamente— Quizás venga después.

—¡De verdad!— No pudo ocultar su emoción y se avergonzó por eso.

—De verdad— Afirmó— Por ahora deberías entrar a tu casa— Jongho sonrió— Ten una linda noche y descansa.

—Tú igual, y suerte con Hongjoong— Yunho sentía la iba a necesitar.

El conejito camino hacia su casa y antes de entrar se despidió con su mano del mayor, al entrar se encontró con su mamá que no se veía muy feliz.

—Fue sincero— Murmuró.

—¿Estás seguro?— Jongho asintió completamente seguro— ¿Ahora qué?

—Ahora voy a tratar de saber porque él es así— Minkyung dejo ver una pequeña sonrisa, su conejito era demasiado amable— Trajo mis juguetes— Le mostró la bolsa.

Minkyung pudo sentirse tranquila, al menos un poco, ella estaría bien mientras su hijo se viera tranquilo y feliz, si él creía en Yunho ella no le daría ningún motivo o un largo discurso sobre no confiar en él, además su hijo casi nunca se equivocaba.