—¡¿Cómo demonios que Jongho está?!— Gruñó Hongjoong— ¡¿Que le hiciste?! Porque si le hiciste algo te juro que no vuelves a ver la luz del maldito día, así que habla de una maldita vez y di que le hiciste a Jongho para que se expusiera de esa forma.

—Ni siquiera le preguntaste si ya lo busco— Hongjoong miro a su novio.

—Song, tú crees que estaríamos aquí si él lo hubiera encontrado ¡Claramente Jongho no está en la casa! ¡Responde carajo!— Yunho jamás en su vida había visto a Hongjoong tan enojado como en ese momento.

—Cuando salí con Sihyeon él estaba aquí, me había enojado porque se orinó en ella, estaba haciendo mucho ruido le grite que se detuviera y me fuí— Al pelinaranja la apareció un tic.

—Tú le gritaste— Soltó extrañamente calmado— ¿Por qué se orinó en Sihyeon?

—Dijo que estaba jugando y ella lo cargo— Hongjoong asintió.

—¡¿Y por qué lo tomaste contra Jongho?! Los conejos se asustan fácil, no se debe ser muy inteligente para saberlo ¡Usa la maldita cabeza por una vez en tu puta vida! Jongho no lo hizo con intención, Sihyeon lo tomó cuando sus defensas estaban bajas por eso lo hizo, ahora él está en quien sabe que lugar de la cuidad y ademas por si no lo recuerdas puede que aún lo estén buscando.

—Si lo dices así, me haces sentir culpable...

—¡Eres culpable! Pero sabes qué vamos a buscarlo, tú te vas a ir a refugios de animales e híbridos y parques— Mingi asintió— Tú, intento de humano vas buscarlo por la ciudad, y yo iré al bosque.

—No claro que no...

—No es momento, ahora vamos antes de que le pase algo por tu culpa— Bufó— Y más te vale que lo encontremos sano y a salvó.

Yunho admitía que no reaccionó bien, pero no creyó que Jongho quisiera irse de la casa.

✿｡‧₊🐇

—Mamá— Alzó un poco su voz por si acaso su mamá estaba cerca— Te necesito— Murmuró con su vocesita distorsionada— Quiero estar contigo, te extraño mucho.

Se detuvo y talló sus ojitos llorosos, no sabía cuánto tiempo llevaba ahí dentro del bosque sin éxito de poder encontrar a su mamá.

—¡Mamá!— Gritó una vez más esperanzado a qué lo escucharía, pero nada— Por favor, aparece, quiero volver a casa contigo, quiero que me cuides, quiero hacer postres contigo, quiero ver series y películas, reírnos hasta que nuestros estómagos duelan, quiero volver a nuestra vida antes de que papá desapareciera.

Pero siguió sin obtener respuesta y no tenía cómo regresar jamás estuvo ahí antes.

Pudo escuchar ramas crujir en el suelo y eso lo tensó demasiado, estaba en un bosque aún siendo híbrido él era la presa y eso no iba a cambiar.

—Un conejito no debería estar solo— Él conocía esa voz, era uno de los hombres que habían ido a su casa— Ya te escapaste una vez, pero dos— Aquel hombre rió— Dos no, conejito, ¿Estás buscando a tu mamá? Ella seguro se fue lejos de aquí como el cobarde de tu padre.

—E-ella no haría eso— Balbuceó.

—¿Cómo lo sabes? Aquí no hay forma de que escapes, conozco el lugar mejor que tú, así qué harás lo que se acordó aquel día, cambia de forma y nos vamos— Jongho sabía que escapatoria no había así que no tuvo otra opción— Buen conejito— El hombre lo tomó y empezó a caminar para salir de ahí.

Pero el hombre se detuvo cuando dos zorros se pusieron frente a él, que para suerte o desgracia de alguno, el hombre era sólo un humano. Su instinto lo hizo arrojar al conejito pero a él no le hicieron nada y él conocía a uno de ellos su aroma se lo decía así que con prisa se colocó debajo del cuerpo del zorro, pero aún así estaba en alerta por si debía huir, con horror vio como esos zorros asesinaban al hombre así que se fue a esconder a unos arbustos.

—Jongho— El conejito miro al híbrido y si era quien creía, salió con timidez de su escondite y Wooyoung lo acaricio para después alejarse un poco, así que transmuto— ¿Que haces aquí?

—Busco a mi mamá, pensé que podría estar aqui pero ya lo dudo mucho, gracias— Wooyoung le sonrió.

—No fue nada, ¿Alguien sabe que estás aquí?— El menor negó— Entonces debemos regresar.

—No— El zorro lo miro— No quiero, él no sabe nada sobre híbridos y no comprende mi mecanismo de defensa— Se cruzó de brazos y una tierna mueca de enfado se dejó ver.

—¿Que hizo?— Preguntó ligeramente curioso, en realidad estaba muy curioso por saber.

—Orine en su amiga porque estaba jugando y me cargó, no lo hice intencional y ambos creyeron que sí, estaba enojado y me gritó, quiero a mi mamá así que la voy a buscar hasta encontrarla— Wooyoung asintió, entendía al conejito.

—Bien, pero recuerda que aquí eres una presa y aparte te estan buscando, pero podemos acompañarte— El otro zorro alzó una sus cejas— Por cierto no los he presentado, Jongho él es Yeonjun, Yeonjun él es Jongho, listo ¿Podemos?

—No lo sé, ¿Que hacen aquí?— Los zorros se miraron— ¿Ustedes cazan?— Ambos negaron— Les voy a creer, ¿Ustedes si saben salir de aquí?

—Por supuesto, vamos— Los tres empezaron a caminar, Jongho iba un poquito enfrente por si acaso veía a su mamá— ¿Y que te hizo pensar que ella estaría aquí?

—Es un lugar muy grande, los animales pequeños podrían esconderse con facilidad— Ambos asintieron— Tal vez si está en algún refugio.

Siguieron con su camino para poder salir de ahí, Jongho aún esperaba poder encontrar a su mamá ahí, no sabía que pasaría si no la encontraba.

—¡Jongho!— El menor se detuvo cuando escucho su nombre— ¿Estás bien? Dime qué sí, porque tengo ganas de matar a alguien— Jongho asintió— Menos mal ¿Que haces aquí?

—Vine a buscar a mi mamá, porque quiero vivir con ella— Hongjoong lo miró con una pequeña sonrisa comprensiva— Pero no está aquí.

—¿Piensas buscarla por toda la ciudad?— Jongho asintió.

—La extraño mucho— Murmuró— Quiero vivir con ella— Sus ojitos se llenaron de lágrimas— Quiero mi vida de antes, yo no me quería separar de mamá.

Los mayores se miraron entre sí y después al conejito, era tan obvio que Jongho necesitaba saber que su mamá estaba bien y además quería verla.

—Jong— El menor miró a Hongjoong— Tal vez no la encuentres hoy ¿Qué harás cuando se oculte el sol?— Jongho abulto sus labios, pensando dónde se quedaría porque con el humano no quería quedarse— Tus opciones están reducidas.

—No volveré con él, me gritó, me hizo ver cómo un mentiroso, así que no volveré— Mientras hablaba, Wooyoung notó como movía su colita, el conejito estaba disgustado.

No lo pensó demasiado antes de poner su mano sobre la cabeza del conejito, Jongho se tensó por un momento pero acepto el acto aunque cuando Yeonjun entendió que hacía jalo su brazo para que dejara de hacerlo, Hongjoong no entendió que pasó.

—Hagamos esto— Hablo el Wooyoung— Yeonjun y yo lo acompañamos a qué busque a su mamá y ya que no quiere regresar con Jeong, se quedará conmigo unos días, total conozco más de conejos— Sonrió al final.

—Maldito zorro aprovechado— Wooyoung asintió— No estoy seguro.

—Yo no tengo problemas— Comento el menor— Confío en ellos, ya me salvaron una vez.

—¡Ardillita!— Hongjoong volteó— Me tenías preocupado ¿Estás bien?— El pelinaranja asintió— Tú también estás bien ¿Que haces con este par de zorros aprovechados?

—Me van a acompañar a buscar a mi mamá— Le sonrió al lobo, Mingi alzó una ceja y miro al par que igual sonrió.

—Y haremos un gran trabajo— Volvió a poner su mano sobre la cabeza de Jongho y Yeonjun de nuevo la quito.

—Pues mas les vale cuidarlos bien, pero antes alguien va a pesar perdón— Jalo a Yunho y por reflejo el conejito retrocedió— Ves baboso lo que causas— El pelinegro frunció el ceño.

—Lo lamento— Jongho no bajo sus defensas— Perdón por gritarte y por creer que sí lo hiciste con intención— Wooyoung se acercó al mayor para oler un poco, alzó una ceja, cosa que a Yunho se le hizo muy raro.

—Pon tu mano sobre su cabeza— Yeonjun golpeó su frente.

—¿Que?¿Por qué?— El zorro se encogió de hombros.

—No— Soltó apurado el menor— Aceptó tu disculpa, pero buscaré a mi mamá.

Pero a Yunho ya le estaba dando curiosidad eso de poner su mano sobre la cabeza de Jongho, no entendía porque debería de hacerlo o que podía significar, y quería que alguien le respondiera así que colocó su mano sobre la cabeza del conejito y este lo miró aturdido. Jongho quería quitar su mano, no le gustaba, él no quería eso además con Yunho no valía, pero estaba aturdido por su repentina acción, él aún seguía algo enojado con el humano eso no se valía.