Jimin picaba su comida, no estaba de buen humor debido a lo que pasó. Ver a Jungkook de esa manera le hizo arrepentirse de haber aceptado estar saliendo con Eunwoo.

También está molesto con él por invitarlo. No sabe sus intenciones, pero ellos no se llevan bien por algo. Ahora se siente mal.

Eunwoo notó que Jimin parecía distraído y sin ánimos, así que le preguntó.

¿Todo está bien, Jimin? Pareces un poco... ausente.

Jimin sonrió débilmente.

─Sí, todo está bien. Solo estoy un poco cansado, eso es todo.

Eunwoo lo miró con escepticismo, sabiendo que Jimin no estaba siendo completamente honesto. De repente, recordó la invitación que le había hecho a Jungkook y se dio cuenta de que esa podría ser la causa del mal humor de Jimin.

─Jimin, ¿te molestó que invitara a Jungkook a cenar con nosotros? ─preguntó Eunwoo.

Jimin suspiró.

─Sí, me molestó. No entiendo por qué lo invitaste.

Eunwoo se encogió de hombros.

─No lo hice con mala intención, Jimin. Solo que Jungkook y yo siempre hemos competido en el pasado, y jamás hemos sido amigos. Supongo que es un hábito difícil de romper.

Jimin lo miró con una expresión crítica.

─Eso es infantil, Eunwoo. Además, es nuestra cena ¿por qué invitarlo?

Eunwoo se disculpó.

─Lo siento, Jimin. No volverá a suceder. Pero... ¿es todo lo que te pasa? Pareces un poco... distante. No creo que solo estés molesto por esto.

─No, no es nada. Solo me duele la cabeza un poco. Quiero ir a casa y descansar. Tuve un día pesado y aún tengo cosas por hacer. ¿Cómo vas con eso de la decoración?

─Voy bien. Ya tengo todo, solo iré a tomar algunas medidas más.

─Genial. No quiero fallas para ese día. Todo tiene que ser perfecto.

─Quedará tal cual lo pediste. Si quieres terminando de cenar te llevaré a casa, para que puedas descansar.

Jimin negó con la cabeza.

─No hace falta, Eunwoo. Iré por algunas cosas que encargué y me iré solo después de cenar.

Eunwoo lo miró con una expresión preocupada, pero no dijo nada más.

─Vale.

Al terminar de cenar ambos fueron a fuera. Seguía lloviendo solo que menos fuerte que hace un momento.

─Señor, su auto. ─le dice el ballet parking.

─Gracias ─Eunwoo mira a Jimin─ Me iré. Por favor mandame un mensaje cuando llegues a casa ¿vale?

─Lo haré, no te preocupes.

Eunwoo le sonrió y lo atrajo a su cuerpo para besar sus labios. Jimin se aparta con una media sonrisa y se despide de él. Toma un taxi y va por la ropa que le mandó su prima. Es una buena diseñadora por eso le encargó su traje para el día de san valentín.

Quería impresionar a todos y demostrar porque él era el dueño de FACE.

Al llegar recogió la ropa y tenía la intención de subirse al taxi, pero un pequeño perrito doberman corrió hacia él. Entonces, Jimin recordó. Es el perrito que le regalo a Jungkook, el mismo que mató también.

Un gran escalofrio le recorrio la piel. El perrito parecía asustado, como si huyera de alguien. Jimin caminaba por la calle cuando escuchó un grito desesperado. Se dio la vuelta y vio a un tipo, un carnicero, que estaba correteando al pequeño perrito doberman. El perrito se escondió detrás de Jimin, temblando de miedo.

─¡Lo mataré por comerme mis salchichas! -gritó el carnicero, con la cara roja de ira.

Jimin se sintió indignado y tomó al perrito entre sus brazos.

─No lo tocarás ─le dijo al carnicero─ Es un crimen matar a los perros. Si no te largas, llamaré a la policía.

El carnicero, que era un alfa, se rió.

─No te metas donde no te importa ─le dijo─ Dame al perrito o te haré daño.

Jimin se sintió enojado.

─¿Es una amenaza lo que estás diciendo? ─le preguntó.

El carnicero asintió.

─Sí, es una amenaza. Dame al maldito perro.

Jimin sacó dinero de su billetera y se lo lanzó al carnicero.

─Aquí tienes dinero por el jamón que deja en paz al perrito ─le dijo─ Déjalo en paz.

El carnicero se rio.

─No, no quiero tu maldito dinero. Solo dame al perro y estamos todos contentos.

Jimin se dio la vuelta y llamó al chico del taxi que estaba cerca.

─¿Puedes meter la ropa al auto y al perrito? ─le preguntó.

El chico del taxi asintió y se acercó a Jimin.

─Claro que sí. ¿Qué pasa? ─le preguntó.

Jimin le señaló al carnicero.

─Este tipo está amenazando al perrito y a mi persona. Llama a la policía, por favor.

El chico del taxi asintió.

─Sí, claro. Soy testigo de la amenaza. Por si llegan a preguntar.

─Malditos hijos de perra. Ya quedate con el maldito animal. Espero no verlos por aquí.

El tipo se fue.

Jimin le dio las gracias al chico del taxi. El perrito temblaba de miedo, pero Jimin lo cubrió con su suéter.

─No tengas miedo pequeño. Yo cuidare de ti.

El perrito se acurruco en su pecho. A partir de ahora no hará nada malo y no se lo va a regalar a Jungkook, él se quedará el.

Jimin entró en la casa con el perrito doberman en brazos, Taehyung se acercó a él con una sonrisa en el rostro.

─¡Oh, es hermoso! ─exclamó Taehyung, acariciando al perrito─ ¿No lo podemos quedar?

Jimin sonrió y asintió.

─Sí, podemos quedarnoslo. Pero primero necesita ser revisado por un veterinario para asegurarnos de que esté sano.

Taehyung asintió entusiasmado.

─¿Puedo acompañarte al veterinario? ─preguntó─ Quiero ver que todo salga bien.

Jimin asintió.

─Claro que sí. Además, ya tengo un tutor para ti y lo veré mañana en la oficina. Es un chico académicamente bueno y tiene casi tu edad.

Taehyung sonrió de nuevo, pero esta vez Jimin notó que era una sonrisa diferente. Era una sonrisa que conocía muy bien, una sonrisa de enamoramiento.

Su hermano había tramado presentar a su novio como un universitario, ya que querían verse más seguido debido a que lo castigó. En su pasado él reaccionó mal y su hermano lloró y sufrió demasiado por ello.

Pero esta vez hará lo correcto, aunque con sus condiciones

Simplemente sonrió y acarició al perrito, que se estaba durmiendo en sus brazos.

─Vamos a prepararle una linda camita y le dejamos algo de comer.

Taehyung asintió y se levantó, pero Jimin notó que no podía dejar de mirar al perrito, y a él mismo, con una mirada llena de admiración y afecto.

Está haciendo lo correcto.

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Jimin salió del veterinario con una sonrisa en el rostro, después de que el veterinario le dijera que Bam, el perrito doberman, estaba bien y solo necesitaba un medicamento para desparasitarse.

Si, le volvió a poner el nombre de Bam.

Taehyung se llevó a Bam a casa, mientras que Jimin se dirigió a la oficina. En poco tiempo, llegaría el joven académico que le daría tutorías a su hermano.

Mientras esperaba, Jimin decidió ir a buscar un café. Mandaría a Seungmin por él, pero este se había ido por los catálogos nuevos. Así que Jimin decidió ir por él mismo.

Al llegar al café, vio a Hanna riendo con las omegas que trabajaban con Jeon. Lo que le faltaba, ver a los buitres.

─Buenos días chicas.

Ellas lo miraron no muy agradablemente.

─Buenos días Señor Park. ─saludaron todas.

Jimin las saludó amablemente, pero ellas respondieron de manera hostil. Jimin las ignoró y se dirigió a pedir su café.

Cuando se dio la vuelta, Hanna cruzó miradas con los omegas y con mala intención echó el café caliente encima de él.

─¡Lo siento mucho! Qué tanta soy.

─Está caliente.

Intentó quitarse el café de la camisa, pero el dolor era intenso.

En ese momento, Jungkook llegó a la oficina cuando esucho el grito, era de Jimin. Se acercó a Jimin rápidamente y le preguntó qué había pasado.

─¿Qué fue lo que pasó? ¿Jimin estás bien?

Hanna respondió.

─Es que no me di cuenta y le eche accidentalmente al el café, pero juro que no fue un accidente Señor Jeon.

─Me duele. ─repite Jimin.

─Ven vamos a mi oficina.

Se llevó a Jimin a su oficina para quitarle la camisa y ayudarlo a limpiar el café. Jimin sentía un poco de dolor, pero Jungkook se mostró muy atento y cuidadoso con él.

Hanna sonrió maliciosa y las demás omegas también.

Cuando llegaron a la oficina, Jimin se quitó su camisa blanca, Jungkook le empezó a limpiar el vientre con agua fría.

─Tranquilo con esto se calmara.

─Joder, esa maldita omega. ─se le sale decirle eso a Hanna, pero Jungkook no le dijo nada.

─Tranquilo, tengo un poco de crema anti quemaduras, con eso bastará para que te deje de doler. Tengo parches fríos igualmente.

─Gracias por esto. No tenías que hacerlo.

─Eres mi amigo ¿no? Además de mi socio, eres mi amigo.

Ambos se miraron a los ojos, Jimin sintió que el cuerpo le temblaba. Hasta a penas se da cuenta que no trae camisa y Jeon lo está tocando. Sus dedos, en su piel suave, blanca. Sus lobos aullaron cuando ellos conectaron. Entonces lo sintieron, esa unión con sus lobos. Mochi y Nochu sean reconocido como uno solo. Jimin se asustó, Jeon también.

─Gracias, por-por la ayuda, me tengo que ir.

Jimin intentó irse, pero Jeon lo detuvo.

─Espera, tengo que ponerte los parches y no pienses que te dejaré ir así.

Le dice por su desnudez. Tal vez sus lobos se hayan aclamado como uno solo, pero ni de puta coña dejará que vieran su cuerpo, el de su omega.

Le coloca el parche y le entrega una camisa de él.

─Se que no es de tu talla.

Jimin está muy nervioso y se la coloca con los dedos temblorosos. Jimin estaba por irse cuando Jungkook lo tomó del brazo, deteniéndose en seco. Jimin se sintió sorprendido y un poco incómodo, y le pidió a Jungkook que lo soltara.

Pero Jungkook no lo soltó. En su lugar, lo miró con una intensidad que hizo que Jimin se sintiera nervioso.

─¿Sí lo sentiste? ─le preguntó Jungkook, su voz baja y suave.

Jimin se hizo el que no entendía, pero Jungkook no se dejó engañar.

─¿Sí lo sentiste? ─volvió a preguntar, su mirada penetrante.

Jimin negó con la cabeza, pero su voz salió temblorosa.

─No... no sé de qué hablas.

Jungkook lo acercó a su cuerpo, y Jimin colocó sus manos en el pecho del alfa. Jungkook le acarició la mejilla, y Jimin se sintió derretirse bajo su mirada intensa y llena de cariño.

Jimin estaba por explotar, su mochi estaba feliz, y Nochu también. Olía el aroma a vino de uvas de Jungkook, y se sintió hipnotizado. Sus rostros estaban cerca el uno del otro, y Jimin podía sentir el calor de la respiración de Jungkook en su piel.

Jungkook le dijo que sabía lo que había pasado con sus lobos, que se habían aceptado.

─Sabes qué significa eso, ¿verdad? ─le preguntó, rozando su nariz con cariño─ ¿Sabes? Lo que significa esto que nos ha pasado, no puede ignorarlo Jimin.

Jimin estaba perdido, y su deseo de besar a Jungkook era casi irresistible. Sintió cómo su cintura fue tomada por el alfa, y su cuerpo se derritió bajo su contacto. Era una sensación como que él pertenece ahí, que debe hacer caso a su lobo.

Estaban por besar, sus labios se rozaron, pero Hanna entró interrumpiendo el momento. Jimin se apartó sonrojado, y le dio las gracias a Jungkook antes de marcharse casi corriendo.

Jungkook quería ir detrás de él, pero se detuvo, necesitando asimilar lo que había pasado. Se quedó allí, parado, con la mirada perdida en el espacio, intentando procesar sus emociones y lo que había sucedido entre él y Jimin.

Hanna los miró, hizo como que no y le sonrió.

─Lamento interrumpir, pero está el señor Hoon afuera esperando por usted.

Jungkook asintió.

─Hazlo pasar.

Hanna sale pero prestó sus puños ante el enojo.

Mientras tanto, Jimin estaba en su oficina con el rostro hundido en su escritorio. No podía creer lo que hizo su mochi, no podía creer lo que estaba apuntado de hacer. ¡Se había vuelto loco!

Joder no sabía qué hacer, ahora como lo va a ver a ma cara. Quería morirse. Ya verá como lo hace, aunque la tenía muy difícil.

Jungkook se dirigió al estacionamiento, listo para ir a ver a Namjoon a su casa. Al llegar al estacionamiento, vio a Eunwoo saliendo de su auto. Eunwoo lo saludó y Jungkook se detuvo cuando Eunwoo se paró frente a él.

─Hola, Jeon ¿A dónde vas? ─preguntó Eunwoo.

─Tengo un asunto importante con mi hermano ─respondió Jungkook.

Eunwoo asintió.

─Vengo por Jimin ─dijo.

Nochu, el lobo de Jungkook, gruñó, pero Jungkook lo calmó.

─Qué bueno. Ya me tengo que ir con permiso ─dijo Jungkook.

Eunwoo sonrió.

─Espera. Quería preguntarte algo. ¿Pasa algo entre Jimin y tú?

Jungkook quería decirle que sí, pero no estaba seguro.

─No, somos amigos solamente. Claro, además de socios.

Eunwoo frunció el ceño.

─¿Por qué? ─preguntó, Jungkook.

─Es solo curiosidad ─dijo Eunwoo─ De verdad, Jimin me gusta y quiero ir en serio con él. Solo no quería malentendidos, ya sabes.

─Jimin es alguien bueno, espero que al menos te tomes la molestia de conocerlo bien. Cuales son sus gustos.

─No te preocupes, lo sé.

Jungkook lo miró serio y como un alfa que quiere proteger a su omega, le preguntó:

─Han salido hace días. Así que te quiero preguntar algo. Dime, Eunwoo, ¿cuál es su libro favorito? ¿Cuál es su cuento favorito?.

Eunwoo frunció el ceño y no respondió. Jungkook sonrió.

─Su libro favorito es Heartless y su cuento favorito es Alicia en el país de las maravillas.

Con eso, pasó por su lado y subió a su auto. Eunwoo lo miró con enojo. Claro, Jungkook ganó, no sabe absolutamente nada de Jimin.

─Como si eso fuera importante.

Pero lo que Eunwoo no sabía era que Jimin lo había escuchado. Había escuchado a Jungkook decir aquello y eso hizo que una lágrima se derramara de su hermoso rostro.

Uf lo que se viene. Al final solo les subí dos, ya que mi mamá se enfermo y he estado ocupada. Realmente estoy agotada.

Igual manera gracias por amar la historia. Ya viene lo bueno.