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❛ No era exactamente
el príncipe azul ❜

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LONDRES, CASA BRIDGERTON
13 DE DICIEMBRE DE 1814
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Mis queridos lectores, hay quienes argumentarían que el engaño y el amor no pueden coexistir pacíficamente en el mismo plano. Pero si hay algo que he aprendido al observar durante tanto tiempo a la alta sociedad londinense, es que las apariencias pueden ser engañosas y que el corazón humano es un territorio insondable y lleno de sorpresas...

COLUMNA DE SOCIEDAD DE LADY WHISTLEDOWN
14 DE DICIEMBRE DE 1814

MIENTRAS REECE AYUDABA A FRIEDRICH a ponerse el gabán le dijo━━: Se está arriesgando bastante, su alteza... ¿Y si alguien lo reconoce?

━━Llevaré el sombrero hacia abajo y la bufanda bien alta ━━respondió él.

La audacia de la situación misma le proporcionó una claridad mental que no había experimentado en meses. Se había sumergido en la monotonía y las expectativas. Era increíblemente liberador romper ese ciclo y sentirse vivo, incluso si solo era por el espacio de un día y una noche.

Pasó toda la noche despierto, sin poder apartar a Eliana Bridgerton de su mente. Con las primeras luces del día, decidió escribirle una carta a la dama mientras el amanecer se filtraba por las ventanas. Luego, envió a Reece para que la entregara en su dirección en el vecindario de Grosvenor Square. Solo entonces pudo dormir, sumiéndose en un sueño profundo y revitalizante que lo dejó preparado para enfrentar cualquier cosa.

Hasta ese momento, sus encuentros habían sido un tejido de mentiras. Pero había algo más en juego, algo que sería imperdonablemente estúpido ignorar. Tal vez, solo tal vez, se estaba engañando a sí mismo. Sin embargo, no podía permitir que ese sentimiento quedara sin respuesta. Se necesitaba un último encuentro con ella para tener certeza. No podía permitirse vivir el resto de su vida consumiéndose en la infeliz soledad de Londres, sabiendo que ella estaba tan cerca pero inalcanzable, clavada en su alma. Era el momento de cambiar, y si Eliana Bridgerton no era la clave para ese cambio, entonces tendría que despedirse de su madre, su hermana y regresar a Berleburg de una vez por todas. Aunque él y su padre se desagradaban mutuamente, seguramente habría algo que un príncipe de la realeza podría hacer para mantener su mente ocupada, incluso si ello implicaba pertenecer del lado de la familia equivocada para heredar el trono.

━━El trineo lo espera a una cuadra, su alteza ━━dijo Reece, siguiéndolo hasta la puerta trasera━━. Le deseo lo mejor en su aventura.

Friedrich asintió con gratitud, sintiendo una renovada energía recorrer sus venas. Aunque quizás pareciera un tonto, al menos ahora se sentía vivo y confiado. Sus pasos resonaban poderosos sobre la crujiente capa de nieve mientras se acercaba a la puerta del callejón, incrustada en el muro de ladrillos cubiertos de blanco. Al girar la esquina, como si fuera un regalo cumpliendo su promesa, se encontró con un trineo resplandeciente y colorido. El mozo de cuadra, serio y rígido, sostenía las riendas del caballo con autoridad.

━━Vengo de parte del príncipe ━━dijo Friedrich con su acento ruso━━. Por favor, informe a Lord Ramsey que el trineo será devuelto al anochecer, con el debido agradecimiento de su alteza.

━━Es bueno ver que el artilugio tiene algún uso, ahora que los hijos del señor han crecido y se han ido ━━comentó el hombre y luego dió unas palmaditas a la yegua gris en el hombro━━. Tenga cuidado con Belle. Ella tiene temperamento.

━━Cuidaré bien del caballo y del trineo ━━Friedrich le dio al hombre un puñado de monedas aún calientes de su bolsillo.

━━Muy bien, señor ━━El mozo de cuadra se inclinó y se dirigió a paso ligero hacia la calle, con las manos metidas en las axilas para entrar en calor.

━━Bueno entonces... Belle ━━Friedrich se quitó el guante. Dejó que la yegua resoplara su cálido aliento en la palma de su mano, y luego acarició su suave nariz━━. Vamos a por la chica.

Pasaron menos de quince minutos cuando Friedrich se detuvo frente a la majestuosa casa del Vizconde Bridgerton. Bajo su gabán de lana pesada, su corazón latía con incomodidad, pero inhaló profundamente el aire impregnado de fragancia helada y se esforzó por mantener la calma mientras bajaba del trineo. Sin embargo, ese frágil equilibrio se rompió en el instante en que la puerta principal se abrió y emergió la hermosa señorita Eliana Bridgerton. Sus rizos dorados asomaban debajo de un gorro de armiño blanco que hacía juego con su manguito, mientras lucía radiante con una pelliza roja brillante, resplandeciendo en un escarlata glorioso contra el blanco de la nieve y los tenues ladrillos de las estructuras circundantes.

Sin la máscara que había usado la noche anterior, parecía despojada de su misterio, revelándose aún más hermosa. Sería fácil caer en la tentación de creer que detrás de su rostro bonito no había mucho más que eso; de hecho, hasta la noche anterior, Friedrich también lo había pensado así. Sin embargo, la señorita Bridgerton era mucho más de lo que parecía. Y quizás, incluso más de lo que ella misma sospechaba.

━━Buen día, Mademoiselle Roja ━━Le hizo una pequeña reverencia y luego señaló su abrigo escarlata con la cabeza━━. Está usted a la altura de su nombre, una vez más.

━━¡Hola, Conde Nikolai! ━━Ella pronunció con entusiasmo━━. Me encontró fácilmente. Por favor, entre. Mi familia está ansiosa por conocerlo.

━━Ah... ━━Esta era una complicación que no había anticipado━━. Por supuesto. ¿Alguien...?

━━Uno de los lacayos saldrá a cuidar del trineo ━━lo interrumpió, con los ojos brillantes de expectativa━━. Es hermoso. ¿De dónde lo consiguió tan rápidamente?

━━Un conocido de mi madre tiene una colección de carruajes y vehículos peculiares. Pensé en él esta mañana y amablemente me prestó su trineo.

━━Pensé que usted no tenía familia en Londres ━━cuestionó, buscando respuestas en sus ojos.

━━Un viejo amigo que conoció hace tiempo ━━Friedrich desvió la verdad, patinando sobre la superficie helada de la realidad━━. Dígame, ¿su hermano es un dragón que debo enfrentar para ganarme su compañía esta tarde?

El rubor suave tiñó las mejillas de ella. ━━Todo hermano mayor tiene la responsabilidad de proteger a sus hermanas. Él solo quiere asegurarse de que usted no sea un lobo esperando devorarme.

Maldición. Sus palabras despertaron en él el deseo de tomarla en brazos, lanzarla al trineo y escapar corriendo por la nieve en busca de un lugar apartado donde pudiera besarla una vez más.

━━Le dije anoche que en realidad, soy bastante dócil.

━━Entonces no lo niega.

━━Es usted deliciosamente atractiva, Mademoiselle Roja, de eso no hay duda. Pero soy un caballero.

El mozo llegó en ese momento, lo que permitió a la señorita Eliana apartarse para ocultar el color de sus mejillas.

━━Debería llamarme señorita Bridgerton ━━replicó ella, conduciéndolo hacia la imponente puerta principal━━. Le informé a mi familia que nos presentaron anoche... ¿Realmente acosó a Lady Entwhistle hasta que ella reveló quién era yo?

━━En efecto, lo hice. Insistí sin descanso hasta que finalmente descubrí que la misteriosa dama de la capa roja era nada más y nada menos que usted, la señorita Eliana Bridgerton, hija de Lady Bridgerton y hermana menor del actual Vizconde.

━━¿Y si ella se hubiera equivocado? ━━Eliana le dedicó una sonrisa juguetona━━. Entonces, querido Conde, habría caído en un dilema bastante delicado.

El Conde Nikolai no pudo evitar admirar la perspicacia de la joven. Su inteligencia y astucia eran encantadoras, justo como ella misma. Era difícil no sentirse cautivado por su encanto y su agudo ingenio.

━━Ciertamente, me habría encontrado en una situación complicada ━━admitió, devolviéndole la sonrisa━━. Pero estoy seguro de que el destino conspiró a nuestro favor, y aquí estamos, frente a esta puerta juntos.

Eliana asintió, sus ojos brillando con alegría. ━━Así es, Conde Nikolai. El destino siempre tiene una manera intrigante de entrelazar nuestras vidas. A veces, simplemente debemos confiar en él y dejarnos llevar.

Con una mezcla de emoción y anticipación, el Conde Nikolai extendió el brazo hacia ella. ━━Entonces, señorita Bridgerton, ¿me concedería el honor de acompañarla dentro y conocer a su encantadora familia?

La perspectiva de encontrarse en un dilema ya lo atormentaba. No tenía sentido intentar ocultar su verdadera identidad ante el astuto Lord Bridgerton, conocido por su agudeza en los negocios y la administración de su riqueza. Cualquier intento de engaño solo generaría desconfianza instantánea, y su esperanza de pasar la tarde con la encantadora señorita Eliana se esfumaría por completo. Sin embargo, revelar que era el príncipe Friedrich podía tener el mismo resultado indeseado, suponiendo que ella no lo reconociera en el momento en que se quitara el sombrero y la bufanda, cosa qué temía que hiciera, aunque la inteligencia y sagacidad de Eliana eran precisamente algunas de las razones por las que se sentía tan atraído hacia ella.

El majestuoso portal se abrió lentamente bajo la atenta mirada del mayordomo, y Friedrich sintió un escalofrío recorrer su cuerpo mientras tomaba su brazo.

Era ahora o nunca. Debía revelar la verdad, aunque eso implicara algún riesgo.

Con la respiración entrecortada, Friedrich miró fijamente a Eliana, buscando valor en su mirada. ━━Señorita Eliana ━━comenzó con voz firme━━, hay algo que debo confesarle.

Los segundos se hicieron eternos mientras la tensión llenaba el aire. Friedrich sabía que esta revelación marcaría un punto crucial en sus vidas. Todo estaba en juego.

━━Mi nombre no es el que usted cree... ━━le dijo, dejando de lado su falso acento ruso━━. Me temo que la he engañado, señorita Bridgerton, y por ello tiene mis más profundas disculpas.

La sonrisa desapareció de su rostro, y sus ojos azul oscuro buscaban los del hombre frente a ella. ━━¿Qué está diciendo, milord? ¿No es usted realmente el Conde Nikolai?

Hubo un momento de pausa, cargado de incertidumbre, antes de que él respondiera: ━━Me temo que no.

El mayordomo, evidentemente incómodo ante la situación, carraspeó y abrió aún más la puerta. ━━Pase usted.

No era necesario mencionar lo poco cortés que era dejar a la señorita Eliana de pie en el escalón delantero, expuesta al crudo aire invernal. Con un gesto de arrepentimiento, Friedrich la soltó y le indicó que entrara. Había sido un tonto dos veces, y ahora iba a enfrentar las consecuencias. Silenciosamente, él la siguió, retirándose el sombrero y entregándoselo al mayordomo. La puerta se cerró tras ellos, pero el frío todavía se colaba por sus huesos mientras Friedrich desenrollaba suavemente la bufanda de lana que ocultaba sus rasgos. Era consciente de que la señorita Eliana lo observaba intensamente, sin embargo, no se atrevió a cruzar su mirada.

Finalmente, se quitó la bufanda, y el silencio fue roto por el brusco jadeo de ella.

━━¡Príncipe Friedrich! ━━Su voz era dura━━. No sé qué juegos piensa jugar conmigo, pero no son bienvenidos. Ni usted tampoco. Por favor, váyase, su alteza.

━━Señorita Bridgerton, por favor ━━La miró entonces, esperando un destello de calidez en sus ojos━━. Déjeme explicarle.

Su mirada era gélida. ━━Después de convertir a Lady Peony en el hazmerreír el año pasado, ¿pensó en hacer lo mismo conmigo? ¿Esperaba que nos descubrieran...?

━━Ah, el misterioso Conde Nikolai ━━se oyó exclamar la voz de un hombre.

Friedrich levantó la vista y vio entrar en el vestíbulo al cabeza de los Bridgerton y hermano de Eliana, el Vizconde Anthony Bridgerton. La expresión imperturbable de su rostro se transformó en preocupación al posar su mirada en Friedrich y luego en Eliana.

━━¿Qué está sucediendo aquí? ━━preguntó Lord Bridgerton━━. Príncipe Friedrich, no estoy seguro de que el cabello negro le siente bien... Eliana, procura no parecer tan amenazante, pareciera que vas a clavarle un cuchillo en el ojo a alguien. Por favor, vengan a mi estudio y explíquense.

La señorita Eliana dio un paso atrás. ━━No tengo nada que decirle a este hombre ━━respondió con firmeza.

Las cejas de su hermano se alzaron en sorpresa. ━━Razón de más para que vengan los dos. Ahora.

El gesto autoritario del Vizconde dejaba claro que no había espacio para discusiones. Sintiéndose más como un niño que como un príncipe, Friedrich suspiró resignado mientras seguía a Eliana y a su hermano hacia el estudio, sintiendo cómo la tensión aumentaba en el ambiente. Sabía que tenía mucho que explicar, pero también sabía que enfrentarse a Lord Bridgerton sería una tarea complicada. Una vez en el estudio, Anthony Bridgerton se sentó detrás de su escritorio, exudando una mezcla de curiosidad y desaprobación. Friedrich y Eliana se mantuvieron de pie frente a él, esperando instrucciones.

━━Ahora, espero que alguien empiece a hablar ━━dijo el Vizconde con voz firme━━. Eliana, tú puedes empezar.

━━Él me engañó ━━Ella se giró y señaló a Friedrich━━. ¡Cómo se atreve a asistir disfrazado a la Mascarada del Solsticio de Invierno!

El Vizconde Bridgerton sofocó algo que sonó sospechosamente como una risa. ━━¿No es ese el objetivo del baile?

Friedrich cuadró los hombros. ━━Sabía que el Príncipe del Hielo no sería bienvenido. La verdad es que últimamente estoy cansado de mi propia compañía. No era mi intención molestarla hoy, señorita Bridgerton. Es sólo que quería verla de nuevo, sin ninguna historia desafortunada entre nosotros.

━━¿Así que pensó en seguir con la farsa? ━━Sus ojos brillaron con ira━━. ¿Que era perfectamente aceptable seguir engañándome para disfrutar de mi compañía? Eso, señor, no se aceptará.

━━Tiene razón. Fue muy mal hecho por mi parte. Aunque revelarme ante usted estaba destinado a terminar mal, como lo demuestra ampliamente este encuentro. ¿Me culpa por querer posponer esa infelicidad un poco más?

Ella tomó una inspiración profunda, preparada para lanzar más desprecios hacia él, pero Lord Bridgerton se adelantó.

━━¿Entiendo correctamente que desea cortejar a mi hermana? ━━ preguntó con seriedad.

━━Así es, señor.

━━Bien, pues yo no quiero tener nada que ver con usted ━━protestó Eliana enviándole una mirada de desconfianza.

Friedrich se volvió hacia el vizconde. ━━Lord Bridgerton, ¿puedo pedir un momento a solas con la señorita Eliana?

━━No creo que pueda ━━contestó Lord Bridgerton cruzando los brazos, luego miró de Friedrich a su hermana y nuevamente a él, con una expresión pensativa en su rostro━━. Pero creo que deberían dar ese paseo en trineo con la carabina de Eliana.

Eliana lo miró asombrada. ━━Hermano, ¿cómo has podido? No quiero que me vean en compañía del Príncipe Friedrich bajo ninguna circunstancia.

━━Me pondré el sombrero y la bufanda ━━intervino Friedrich━━. Todo el mundo cree que el Príncipe Friedrich está actualmente enfermo. Por lo que respecta la a sociedad, cabalgará junto al Conde Nikolai.

━━Pero...

━━Yo deseaba disfrutar de la nieve en compañía de una joven que me parece interesante e inteligente. Señorita Eliana, incluso cuando está enfadada, creo que seguiré disfrutando de su compañía ━━expresó Friedrich sinceramente.

Él la contempló con una mirada profunda, tratando de evocar en ella el recuerdo de la noche anterior. Sabía que no solo habían compartido una simple conversación, sino un beso cargado de calor y pasión. Ella hizo una pausa , y el rubor en sus mejillas no parecía ser únicamente producto de la ira. Había algo más en su expresión, algo que sugería una chispa de complicidad y deseo mutuo. Un destello de esperanza iluminó los ojos del noble príncipe mientras anhelaba que ese momento mágico no se desvaneciera entre ellos.

━━Si voy en el trineo con usted, ¿promete no volver a buscarme?

Su corazón se apretó al pensarlo, pero le hizo una reverencia conciliadora. ━━La señorita Eliana Bridgerton y el Príncipe Friedrich no se conocen. Y después de hoy, el Conde Nikolai dejará Londres para siempre.

━━Muy bien ━━Ella tragó saliva━━. Estoy de acuerdo con un corto paseo en trineo.

━━Entonces está decidido ━━dijo el Vizconde Bridgerton━━. Eliana, ve a buscar a Hetty. Yo hablaré en privado con el príncipe.

Ella apretó los labios con firmeza y el desafío brillo en sus ojos, lanzando a Friedrich una mirada cargada de advertencia. Él respondió con un pequeño encogimiento de hombros, consciente de que no entraría en una discusión con Lord Bridgerton y mucho menos revelaría el beso secreto que habían compartido.

Una vez que la señorita Eliana salió del estudio, el vizconde aclaró su garganta con elegancia. ━━No puedo decir que quiera saber todos los detalles, pero es evidente que mi hermana ha quedado prendada de usted.

Estas palabras provocaron una breve risa en Friedrich, aunque sorprendido. ━━Estoy seguro de que se equivoca. Es evidente que la señorita Eliana me tiene en el más bajo aprecio.

Lord Bridgerton se movió para colocarse frente a Friedrich, clavando una mirada penetrante en él. ━━Ella se dará cuenta de la verdad, siempre y cuando no la decepciones más ━━declaró con seriedad━━. Pero eso nos lleva al punto clave. ¿Cuáles son sus intenciones con respecto a Eliana?

En ese momento, Friedrich sintió un nudo en la garganta, su boca repentinamente seca. No estaba acostumbrado a sentirse tan nervioso. Por segunda vez en apenas unos minutos, Lord Bridgerton había logrado hacerle sentir como un joven atolondrado en lugar del príncipe seguro de sí mismo que solía ser.

━━Esperaba tener la oportunidad de conocer mejor a su hermana ━━respondió Friedrich con cautela, consciente de su falta de certeza en cuanto a sus propias motivaciones. Maldita sea, ¿cómo podría explicarse ante Lord Bridgerton cuando ni siquiera estaba seguro de lo que realmente quería? Actuar por impulso nunca había sido su estilo, ya que prefería tomar decisiones cuidadosamente reflexionadas.

━━¿Con qué fin? ━━El vizconde levantó las cejas. Aunque su expresión seguía siendo apacible, su voz había adquirido un tono de voz━━. Confío en que está actuando como un caballero honorable, su alteza.

━━Por supuesto. No estoy tratando de llevar a su hermana por el mal camino, Lord Bridgerton, se lo aseguro.

Al menos, no mucho. Friedrich no diría que no a otro beso de la señorita Eliana, pero la posibilidad de que eso ocurriera era tan pequeña como la de un copo de nieve sobreviviendo al corazón de un incendio.

━━¿O romperle el corazón en un intento de venganza? ━━inquirió el vizconde.

Friedrich parpadeó al hombre. ━━No le entiendo, milord.

Lord Bridgerton se inclinó hacia delante. ━━Seguramente es consciente de que Lady Peony Talbot es una buena amiga de Eliana. Tal vez, aún alberga alguna mala voluntad hacia esa joven.

━━¡Usted es más retorcido que yo al insinuar semejante plan! ━━espetó Friedrich━━. Aunque estoy descontento por el malentendido del año pasado y, no me gusta demasiado mi posterior apodo, no estoy impulsado a la venganza.

━━¿Entonces perdona a Lady Peony?

Friedrich parpadeó. ¿Acaso sospechaba el vizconde la verdad sobre las mentiras de Lady Peony? ━━¿Cuánto sabe usted de lo que ocurrió? ¿Esta su hermana...?

━━No. Eliana piensa lo mejor de todos. No creo que se le haya ocurrido cuestionar la versión de los hechos de su amiga. Pero otros lo han hecho, su alteza, y sacan una conclusión ligeramente diferente.

Friedrich respiró hondo, como si hubiera estado aguantando la mayor parte del año. No había buscado la comprensión de nadie, y su respeto por la perspicacia de Lord Bridgerton aumentó una vez más.

━━Yo no podría hacer ninguna acusación, por supuesto ━━dijo Friedrich.

━━Lo entiendo ━━Lord Bridgerton se acercó y le golpeó el hombro━━. Tiene mi permiso para cortejar a mi hermana. Ahora, no hagamos esperar a Eliana y a Hetty. Esta nieve no durará para siempre.

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