Eddie y Rebecca se encontraba caminado con sus bicicleta a un lado 

—¿a donde iremos? — preguntó el chico 

—primero pensaba ir a tomar unos helados y luego ir a la feria, ¿que te parece? 

—me gusta la idea — sonrío 

....

Los adolescentes llegaron a la heladería.

Abrieron la puerta del establecimiento haciendo sonar la típica campana que anunciaba la llegada de un cliente. 

Se acercaron al mostrador 

—buenas tardes, ¿que van a pedir? — preguntó la chica que atendía 

—yo quiero un helado de vainilla — pidió el castaño 

—a mi uno de menta y chocolate por favor — pidió la castaña 

—bien, son cuatro dólares 

Rebecca abrió su mochila para buscar dinero  

—no te preocupes, yo pago — la detuvo el asmático 

—no, claro que no, yo te invite, yo pago — negó 

—insisto 

—yo también insisto 

La cajera miraba divertida la absurda pelea de los menores 

—ya dije que no — la castaña saco el dinero y se lo entregó a la cajera 

Eddie suspiro rendido 

—bien, pero la próxima vez, yo pago 

—¿habrá una próxima vez? — lo volteó a ver con una ceja alzada y una sonrisa 

El chico carraspeó nervioso 

—bu-bueno, solo si tú quieres — la miro atento a su respuesta 

—claro 

El sonrío 

—aquí tienen sus helados — se los entregó 

—gracias — tomó los helados y le dio el suyo a Eddie 

—gracias — lo tomó 

Los dos se dirigieron a la mesa más cercana 

—¿te gusta el helado de vainilla? — le preguntó la castaña 

—si, ¿a ti no? 

Rebecca se quedó pensativa.

No comía helado de vainilla hace mucho así que no recordaba muy bien su sabor.

Se le ocurrió una idea.

Tomó una cuchara y tomó un poco del helado de Eddie 

—no, no me gusta — dijo cuando lo probó 

—¿como que no? pero si a todo el mundo le gusta — el chico la miro extrañado 

—¿así? pues yo no soy todo el mundo — dijo mientras empezaba a comer su helado 

—¿quieres probar el mío? — le acercó su helado 

—¿sabes cuantos gérmenes nos podríamos contagiar comiendo el mismo helado? 

—no pasará nada — rodó los ojos 

 —¿segura? — preguntó temeroso

—vamos, come antes de que me arrepienta — se lo acercó más 

El chico comió un poco de helado.

—es-es mejor que el de vainilla — la miro sorprendido 

—¿a que si? yo tengo buenos gustos — sonrío 

Los adolescentes empezaron a hablar muy animadamente sin saber que esa felicidad pronto se acabaría por culpa de la persona que los miraba desde la otra mesa 

—así que los fenómenos son novios — oyeron una voz que reconocían perfectamente 

—lárgate Loreline — Rebecca la miro con desagrado 

—soy Lorelay — la miro con odio — y no, prefiero quedarme aquí — se apoyo con una mano en la mesa ya que con la otra sostenía su helado 

—¿no tienes nada mejor que hacer? ¿tal vez chuparse la a Bowers? — la miro con una sonrisa falsa 

—¡eres una maldita perra! — le tiro su helado encima 

Rebecca jadeo de la sorpresa. 

sintió como ese postre que consideraba delicioso ahora caía por sus mejillas 

Eddie se levantó haciendo que las dos chicas lo miraran

—¡la única perra aquí eres tú!! — se dirigió a Jenner  

Eddie hizo algo que nunca imaginó hacer 

—¡¿que te pasa idiota?! — chilló la rubio cuando sintió algo frío en su cabeza 

Eddie Kaspbrak le había tirado su helado encima.

Rebecca lo miro con la boca semi abierta gracias a la sorpresa.

La rubio salió furiosa de la heladería mientras intentaba no ser vista. ya saben cosas de "chica popular" tenía que cuidar "su imagen y reputación"

La castaña soltó una carcajada 

—¿Eddie Kaspbrak acaba de decir una palabrota? — se burló 

—eso es lo de menos — rodó los ojos 

—amigo, me hubiera encantado estar en tus zapatos — río un poco 

—bueno, a mi no me hubiera gustado estar en los tuyo — la miro — estás llena de helado 

Rebecca tomó su cabello para olerlo 

—eww — hizo una mueca — encima es de frambuesa, que malos gustos tiene esta chica 

—ven, vamos a limpiarte — tomó una servilleta — ¿sabes cuantos gérmenes puedes tener ahora mismo? yo te lo digo miles, si no te limpias rápido podría...

—si, aja, los gérmenes, bla bla bla — lo interrumpió mientras se limpiaba el cabello — ten, comételo — le dio su helado 

—vámonos de aquí — se paró de su asiento 

El chico imitó su acción 

—¡¿que miran idiotas?! — se dirigió a los clientas que la miraban mientras cuchicheaban 

Los adolescentes salieron del lugar 

—¿vamos a tu casa? — preguntó Eddie 

—no, vamos a la feria como lo habíamos planeado 

—pero, ¿y tu cabello? — la miro preocupado 

—mi cabello no importa ahora, yo te dije para ir a la feria y lo voy a cumplir — lo miro — además quiero comer palomitas de maíz 

—¿estás segura? 

—si, vamos — se subió a su bicicleta 

Se dirigieron a la feria. 

....

Cuando ya habían llegado encontraron el puesto de palomitas, Rebecca se iba a dirigir haya pero Eddie la detuvo 

—¿que tal si hacemos una carrera hasta el puesto de palomitas? el que gana paga — le propuso 

La chica lo miro divertida 

—Eddie, tú eres asmático y yo soy del equipo de fútbol — le recordó — ¿quien crees que va a ganar? 

—no lo sé, dímelo tú — salió corriendo 

—¡ehh! ¡eso es trampa! — se quejó para luego ir corriendo tras el 

....

—deme dos palomitas por favor — pidió 

El señor asintió.

—aquí tiene señorita — se las entregó 

Le entregó el dinero 

—muchas gracias — dijo tomándolas 

Volteó y se encontró con Eddie que recién llegaba 

—eres más lento que una tortuga 

El chico la miro indignado mientras empezaba a usar su inhalado 

—eso fue pura suerte 

—si, claro — rodó los ojos — ten — le extendió sus palomitas 

—gracias 

—¡damas y caballero! ¡acérquense! ¡está apunto de empezará el espectáculo! — oyeron gritar 

—¿vamos? — volteó a ver a Eddie con una sonrisa 

Aunque no le agradaba mucho la idea de ver payasos después de lo que paso en la calle Neibolt, la sonrisa de la chica lo hizo aceptar 

—vamos — afirmó mientras empezaba a caminar 

....

El espectáculo había terminado y ya casi era hora de irse 

—eso fue divertido — dijo el chico 

—si, pero lo mas divertido de hoy fue verte tirarle tu helado a Lorelay — río recordando la cara de la rubia 

—no pensé que le fueras a hacer algo así — lo volteó a ver — como es tu amor platónico 

—no es mi amor platónico — la miro con una mueca — ya te dije que no me gusta Lorelay Jenner 

—bueno, después de lo que hiciste me queda claro — asintió 

Se quedaron en silencio. 

Los dos se voltearon a ver y explotaron en carcajada al recordar lo furiosa que estaba la rubia 

....

—¡ya llegue! — grito mientras entraba a su casa junto a Eddie 

Erick salió de la cocina 

—¿se divirtieron en su cita? — preguntó mientras comía chocolate 

—¡que no fue una cita! — Rebecca se quitó su zapato y se lo lanzó 

—¡ehh! ¡cuidado con mi chocolate! — se quejó mientras protegía su dulce 

—¡pásame mi zapato! — le pidió 

Erick tomó el zapato y se acercó a su melliza 

—¿por que hueles a frambuesa? — preguntó mientras se acercaba a oler su cabello 

—Lorelay Jenner me tiró su helado encima — lo apartó 

—¡¿que?! — grito sorprendido 

—no te preocupes, Eddie le tiró el suyo también — miro al chico que estaba a su lado 

—¿de verdad? — lo volteó a ver con sorpresa 

El asintió 

—y eso no es todo — sonrío — también dijo una palabrota 

—cuéntamelo todo Kaspbrak 

—si, hablen porque yo iré a lavarme el cabello 

Los chicos asintieron y Erick llevo a Eddie a la sala 

Cuando oyó que la puerta de la habitación de su melliza se cerraba el rubio volteó a ver al asmático 

—¿que intenciones tienes con mi hermana? — dijo sin rodeos 

—¿que? — la pregunta lo tomó por sorpresa 

—he notado como la miras últimamente, Eddie 

—no se de que hablas — lo miro confundido 

Erick suspiro.

Entendió de inmediato que el castaño aún no había notado ese algo que empezaba a florecer en el 

—nada, olvídalo — se sentó en el sofá — ¿quieres ver algo en la tele? 

—claro — Eddie tomó asiento a su lado 

El castaño estaba confundido.

El miraba a Rebecca como a todo el mundo ¿o no? 

....

Rebecca había acompañado a Eddie hasta su casa como lo habían planeado 

—¡ya llegue mamá! — dijo mientras entraban 

—Eddie, cariño, ¿por que tardaste tanto? — la señora K se callo cuando vio a la castaña al lado de su hijo 

—buenas tardes señora K — saludo nerviosa 

—oh, Rebecca, que gusto verte — le sonrío 

Rebecca intento sonreír. 

Honestamente la mamá de Eddie la asustaba un poco 

—Eddie estuvo en mi casa haciendo tareas conmigo y Erick — mintió 

—por eso tarde — le siguió el castaño 

—oh, si es así no pasa nada — le resto importancia — son muy responsables 

Los dos adolescentes se miraron.

Claro, muy responsables — pensaron ambos 

—¿te quieres quedar a comer? — le preguntó 

—oh, no, Erick está en casa y no quiero dejarlo solo — rechazo la oferta 

—pero puedes llamarlo para que venga a comer también 

—lo siento señora K pero ya casi es toque de queda y no me gustaría que Erick venga solo — se negó 

—entiendo, eres una buena hermana — le sonrío 

—bueno, yo ya me voy — miro a Eddie — adiós Eddie, adiós señora K — dijo mientras salía 

—¡vuelve cuando quieras! — la oyó gritar 

Rebecca suspiro pesadamente 

—que momento tan incomodo — murmuro mientras subía a su bicicleta 

Holaa 🤗

Ya termine de editar mi fic "Wonderwall" y al fin pude actualizar ✨ tal vez vuelva a actualizar esta semana, ¿que fic les gustaría que actualice primero? déjenme sus pedido en los comentarios por favor 💬

El siguiente capítulo se tratará de la salida de Erick y Richie 😉 espero que les guste 

Espero que les haya gustado este capítulo, si es así me alegraría mucho que voten y dejen su comentario 🫶🏻🩷 

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