Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

━Capítulo Once




❝ 𝐄𝐋𝐋𝐀 𝐄𝐒 𝐋𝐀 𝐔́𝐋𝐓𝐈𝐌𝐀 𝐃𝐄 𝐓𝐎𝐃𝐎𝐒 ❞





╔════ 𓏲✮⊰ •˙ ❅✾❅ ᭕𖤐⊱ ════╗

〘 ✰.༄☼︎ 𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟏𝟏 ☼︎༄.✰ 〙

—– problemas —–

╚════════════════════╝












LÍA POR FIN PUDO LOGRAR ABRIR SUS OJOS, ADOLORIDA SE INCORPORÓ del duro suelo de metal mientras intentaba calmar  su respiración pues la sensación de asfixia seguía ahí ahogandola.

Sin saber porqué llevó su mano a su cabeza y la punzada regresó lo que le ocasionó soltar un quejido.

Miró a su alrededor desorientada, pues no recordaba en dónde estaba. Lo único que distinguía eran cajas por todo el lugar, vidrios rotos y demás aparatos electrónicos como computadoras y monitores que parpadeaban pues parecían dañados pero mostraban imágenes que Lía no terminaba de comprender.

Cegada por su curiosidad se acercó hasta la pantalla de la computadora que no dejaba de mostrar imágenes extrañas.

Estaba tan en su realidad que
sin querer su mano presionó un botón que al instante hizo a la computadora mostrar imágenes al lazar, hasta que paró en una específicamente.

La computadora mostró una imagen con datos de Lía o eso le hizo creer ya que tenía una foto de ella. Pero la imagen estaba
tan distorsionada que se le hizo imposible poder leer que era lo que decía. Lo único que pudo leer fue la palabra 'sujeto de pruebas' pero lo que despertó su interés fue la palabra CRUEL que no paraba de repetirse en el texto.

De pronto sintió la necesidad
de ver más sobre ella y de nuevo presionó uno de los botones que había en el tablero, esperó a ver qué sucedía pero no hubo nada más que silencio y la imagen en la computadora cambio, dejando ver un signo de alerta.

Lía no comprendió que era lo que estaba pasando.

De pronto una distorsionada voz resonó por el oscuro pasillo, haciendo eco. Y una sensación de pánico comenzó apoderarse de la castaña.

—Sistema cargado, sujeto en posición —escuchó que dijo la voz antes de que todo de desatará —. Que comieze la prueba.

En cuanto la oyó supo que algo realmente malo sucedería y no se equivocó pues en cuanto se calló
las luces que antes permanecían apagadas porque eran inservibles de la nada iluminaron el lugar donde la chica se encontraba parada y el sonido de un rugido la hizo ponerse en modo alerta.

El miedo que sentía en aquel momento la obligaba a quedarse quieta en su lugar, sus pies no respondian debido al miedo.

Sabía muy bien que era el momento indicado para correr pues aquel terrorífico gruñido rugido se oía más cerca pero
su cuerpo no obedecía.

El sonido de unas pinzas de
metal resonó por todo el pasillo, haciendo un escalofriante eco.

De entre las profundidades de la oscuridad un cuerpo amorfo salía emitiendo horribles gruñidos.

En ese instante Lía reaccionó y
de un momento para otro sus pies tuvieron vida propia, sin saber a dónde huir Lía se echó a correr
lo más rápido que pudo.

Los acelerados pasos de Lía resonaban por el pasillo igual que sus latidos desbocados, ahora solo necesitaba huir de lo que fuera que la perseguía.

El pánico se apoderó de ella en cuanto escuchó como el monstruo soltaba escalofriantes gruñidos.

Y por más que la castaña corría
y tomaba diferentes pasillos, el monstruo no se dejaba engañar tan fácilmente, lo que le hacía
casi imposible dejarlo atrás.

Lía ya no supo a donde correr, estaba tan asustada y nerviosa que no sabía qué hacer aparte de correr a donde fuera. Se detuvo solo por unos segundos para tomar algo de aire sin embargo al parecer ese fue su gran error.

La horrible criatura se detuvo solo por unos pocos segundos, antes de observar a su presa parada en medio del pasillo y
no tardó en correr hacía ella.

Sus ojos verdes se quedaron viendo cómo un penitente a unos cuantos metros de ella se acercaba para despedazarla.

El miedo podía más que la razón, lo que la dejaba estática en su sitio. El penitente estaba cada vez más cerca pues este se movía a una gran velocidad.

Su cuerpo estaba paralizado
al igual que sus pies, lo que no
le permitió poder mover ni un músculo. Solo podía observar como el penitente se acercaba cada vez más y más, lo único
que le quedaba era esperar a
que el monstruo la atacará.

Era su fin.

El penitente estaba frente a la castaña, con sus pinzas metálicas listas para atacar cuando fuera.

Lía no podía ver al monstruo,
ya que estaba tan asustada que solo cerró los ojos con fuerza esperando a que el penitente se avalanzara sobre ella y pusiera fin con su vida, pero esto nunca paso en su lugar el penitente
soltó un gruñido que resonó.

Lía soltó un grito tan fuerte que se mezcló con el horrible gruñido de la espeluznante criatura.

—Prueba concluida con éxito.

Esas fueron las únicas palabras que Lía pudo escuchar antes de sentir como todo su cuerpo se iba desvaneciendo poco a poco y la oscuridad nublo su vista, había sido picada por el penitente.






























——— ✮✧☾✧✮ ———



























—¡No! —gritó Lía atemorizada, incorporándose tan pronto como pudo de la cama donde estaba.

—Oye tranquila, estoy aquí —intentó calmarla Minho con voz suave, y ella se le abalanzó para abrazarlo con suma fuerza.

—Tengo miedo —musitó Lía
entre sollozos, recordando la pesadilla —. Fue tan real que yo...

—Tranquilizate, todo está bien ¿okey? —musitó el chico, antes de tomar su rostro entre sus manos delicadamente —. Solo fue un mal sueño.

Lía asintió con los ojos llorosos
y escondió su rostro en el cuello del corredor, mientras Minho acariciaba con suavidad su larga cabellera y susurraba que todo iba a estar bien una y otra vez, intentando hacerla tranquilizar.

—No vuelvas a hacer eso,
¿me escuchaste? —la riño Minho una vez que la chica se calmó, y la tomo de los hombros para que lo mirará —. Pensé que te iba a perder para siempre.

—No es tan fácil deshacerse
de mí —mencionó Lía divertida,
a lo que el asiático se rió.

—Te extrañe shank.

—Y yo a tí sarcástico bello.

El momento era tan cálido que Lía sintió esa tranquilidad por todo su cuerpo y su mente. Esa tranquilidad que estaba presente solo cuando Minho estaba ahí.

De pronto le llegó aquel
recuerdo de ella en el laberinto, como el penitente había huido
de ella. ¿Pero que rayos fue eso?

No sabía que había sido aquello pero ella pudo sentirse diferente cuando abrió los ojos al no poder resistir más el miedo, fue justo en ese momento en el que sintió como algo o alguien tomaba el control total de ella. No se había sentido como ella.

Sin previo aviso la castaña hizo un movimiento brusco, alejando al asiático de ella lo más rápido que pudo, cosa que solamente lo hizo confundirse ante esto.

—No soy lo que tú crees...
—musitó entristecida con el rostro cabizbajo y la mirada perdida en un punto no fijo
—. Minho soy peligrosa, ese penitente huyó de mí.

—¿De que estás hablando? ¿Cómo que un penitente huyó
de ti? —preguntó el corredor bastante confundido, intentando acercarse y tranquilizarla.

—No soy buena para ti —siguió Lía con los ojos cristalizados, alejándose lo más que pudo del chico —. No quiero hacerte daño. Se que en cualquier momento me puedo convertir en esa persona, y cuando lo haga no quiero que tu salgas lastimado. Tengo miedo...

—Escúchame bien. Tú no
eres un monstruo; eres Lía, mi Lía —dijo el asiático a la castaña, mientras sostenía su rostro entre sus manos —. Nunca me harías daño, el daño me lo haces tú al intentar alejarme de tí.

Lía se perdía en la oscuridad de los ojos del asiático, intentando descifrar que era eso que estaba sintiendo en estos momentos.

Sus ojos aún estaban llenos
de lágrimas pero esto no le dió importancia ante la cercanía que había entre ambos, la cual fue desapareciendo y sus labios se encontraban a milímetros.

Sus respiraciones se volvieron una sola, sus ojos estaban atentos viéndose directamente con unas ansias de romper la cercanía de una vez.

Minho no perdió más su
tiempo y de una forma bastante tierna apartó unos mechones del cabello de la chica, luego su vista estaba posada en sus labios los cuales acariciaba con su pulgar.

El espacio cada vez más fue
corto hasta que de pronto sus labios se movían en una perfecta sincronía, y definitivamente para ser su primer beso no lo hacían tan mal como se imaginaban.

En aquel beso un sinfín de sensaciones comenzaban a tomar lugar en todo el cuerpo de Lía, un suave cosquilleo le recorría de la nada el cuerpo, de pies a cabeza.

Pero aún le resultaba extraño como con un simple beso todo se activaba en ella de una manera sorprendente en su interior.

Agitados ambos adolescentes se separaron para respirar. Sus ojos seguían clavados en ambos, eso solamente había despertado algo.

Minho observó las sonrojadas mejillas de la castaña y le sonrió para luego dejar un mechón de su cabello detrás de su oreja con delicadeza.

—Pase lo que pase permanecere a tu lado —prometió en susurros.

Luego de eso le dio un beso
en la frente y la acercó a él hasta que volvía a estar en sus brazos.

En eso la puerta de madera fue abierta dejando ver a Chuck. Al instante se separaron sonrientes.

—Lamento si los interrumpí
en lo que sea que estaban haciendo, pero la asamblea va a comenzar —informó el niño, mirando a ambos curioso.

—Ahora vamos.

Chuck asintió y se fue.

Ambos corredores se incorporaron de la cama y empezaron a prepararse para irse. Una vez listos salieron tomados de la mano.

Después de todo los chicos
en la asamblea esperaban por ellos para dar inicio.


——— ✮✧☾✧✮ ———







Por fin la hora de iniciar con la asamblea había dado comienzo, todos los habitantes entraban
en la cabaña de madera bastante apresurados para luego tomar asiento frente a los encargados.

Lía y Thomas estaban en boca
de todos, pues esperaban saber con ansias lo que pasaría con los novatos.

Lía se encontraba cerca de Minho, quien como ya era una costumbre tenía un brazo en sus hombros, intentando hacer que se tranquiliza un poco.

Pronto Gally se acercó a
los adolescentes y les pidió
que tomaran asiento cerca de Thomas para que pudieran empezar con la asamblea.

El corredor le deseo buena
suerte a su chica con un abrazo, que le fue correspondido al instante, no duró mucho pero ayudaba con los nervios.

Al separarse Lía fue hasta una silla junto al novato, quién le sonrió para hacerla sentir mejor.

La castaña estaba desorientada
al ve a tantos chicos pero al dar con la mirada de Newt se sintió mejor. El rubio también le regaló una sonrisa y le guiñó el ojo, una señal de que todo saldría bien.

La hora había llegado.

—Todo es diferente ahora —comenzó a decir Gally con los brazos cruzados, viendo a todos los chicos ya reunidos —. De eso
no hay duda. Primero pican a Ben a plena luz y después a Alby. Y ahora nuestro novato decidió salir al laberinto por cuenta propia. Y lo peor aquí es que su impulsividad llevo a Lía a hacer lo mismo, lo que ponía no solo su vida en riesgo si no la de ella.

Lía apretó los puños molesta
al escuchar las palabras de Gally, pues ella no había hecho eso solo por querer seguir al novato.

—Eso no es cierto, yo no... —
se interrumpió a si misma al ver las señas de sus compañeros, que guardaa completo silencio.

—Ellos dos entraron lo que es una clara violación de nuestras reglas —continuó Gally con su discurso, ignorando lo que Lía había dicho hace segundos.

—Cierto, pero le salvaron
la vida a Alby —apoyó Sartén,
lo que hizo que Lía se sintiera mal ya que que solo Thomas fue el único que estuvo con Alby.

—¿Ah, sí? —cuestionó Gally sarcástico observando fijamente
al cocinero —. Llevamos tres años coexistiendo con esas cosas. Y ahora, tú mataste a uno.

Lía no pudo evitar sentirse mal por el novato. Solo intentaba ayudar y apesar de que fue una estupidez logro acabar con uno de esos mostruos que por años los amenazaban pero no solo hizo eso sí no que desató el caos en el área.

—¿Saben que repercusión tendrá?

—¿Tú qué sugieres que hagamos? —cuestionó Newt con seriedad, una vez que Gally termino con su discurso.

—Castigar al novato.

Luego de escuchar a Gally los murmuros de desataron pero eso no era lo único que quería.

—Que Lía también reciba
un castigo —continuó, la chica
se giró a mirarlo con odio —.
Por entrar al laberinto cuando claramente no tenía porqué.

En ese momento todos los chicos comenzaron a quejarse, algunos no estaban de acuerdo con Gally y sus castigos mientras que otros creía que castigados era lo mejor.

Thomas y Lía soltaron un suspiro de frustración, quién diría que una elección les traería un sinfín de problemas.

Estaba claro que a Gally no le agradaban y al castigarlos se iba a sentir muy alegre por ello.

—Minho —llamó Newt al líder
de los corredores, que desde que la asamblea inició estaba muy callado —. Tú estabas con ellos, ¿qué opinas?

—Hubo un momento en el que los tres nos separamos —relató
viendo a todos los habitantes, quienes solo escuchaban lo que el líder de los corredores tenía que decir —. Yo conocía el laberinto, cada pasillo, cada sección, cada patrón... pero ellos no. Lía aún
es una novata y conoce algunas pero no todas con exactitud, así que lo más probable es que se perdiera. No sé cómo diablos le hicieron para sobrevivir...

Al escuchar a Minho, Lía
recordó lo sucedido anoche.
Aun podía oír en su mente el gruñido de ese penitente y el repiqueteo metálico tras ella,
la manera en la que con solo
verla de frente huyó asustado.

Todo era demasiado extraño.

—Thomas se atrevió a hacer
algo que nadie podría lograr —continuó relatando Minho a los chicos, posando su mirada en los novatos —. Mientras que Lía hizo lo que ninguno de ustedes aquí haría, ayudar. Y yo creo que en todo este tiempo que llevamos aquí, nadie había matado a un penitente. Cuando me di la vuelta y corrí, este torpe shank se quedó

a ayudar a Alby. Y no sé si es valiente o estúpido, lo que sea... necesitamos más como él. Debe ser corredor.

Thomas levantó la mirada muy confundido, sin embargo apesar de eso la idea le agradaba. Lía le sonrió y le susurró 'felicidades'.

—¿Corredor? Minho, ¿Cuál
es la prisa? —cuestionó Sarten  confundido, su voz rompió el silencio y al al parecer a casi nadie le agrado está idea.

—¡Thomas! ¡Thomas! ¡Thomas! —comenzó a gritar Chuck alegre y emocionado por la noticia, pero al ver qué nadie lo apoyaba decidió guardar silencio.

—¡Si quieren hacerle un desfile
al novato, está bien! ¡Háganlo!
—volvio a hablar Gally, molesto ante la propuesta de Minho —. Pero si de algo estoy seguro sobre el laberinto, es que nunca...

La voz de Gally se vio interrumpida cuando unos extraños ruidos inundaron ellugar, todos guardaron silencio.

Lía no dudo en ponerse de pie
aligual que el resto. Al estar en silencio pudieron escuchar a la perfección, se trataba de la alarma de novicio, la caja estaba subiendo con un novato.

Newt y Gally se miraron para
después salir corriendo hacia la caja, siendo seguidos por varios habitantes.

Rápidamente Thomas se puso
de pie y miró confundido a Lía, quién se encontraba en el mismo estado. No dudaron en salir a ver qué estaba pasando afuera.

—Conozco ese sonido —anunció Thomas.

—Esta subiendo —agregó
Chuck, con la mirada puesta
en aquel lugar donde todos
ya estaban yendo.

—No debería —comentaron Minho
y Lía al mismo tiempo, para luego salir corriendo lo más rápido que pudieron tomados de la mano hasta la caja.

Al detener el paso, ambos
chicos se abrieron paso entre toda esa multitud para ver lo que estaba pasando o más bien lo que acababa de llegar.

Al llegar Newt se encontraba dentro de la caja, revisando. Todo estaba en silencio, nadie sabía que estaba sucediendo.

—Newt, ¿qué ves?

—Es otra chica —respondió el rubio, mirando a todos sus compañeros pero con la mirada puesta en la castaña.

Todas las miradas estaban sobre Lía, al parecer ya no sería la única chica en el área.

Lía no sabía como debía de sentirse si confundida, asustada o emocionada, pues después de rogar por semanas tendría una amiga que no sería un varón.

—Creo que está muerta —agregó Newt, aún más confundido que antes.

—¿Qué tiene ahí? —preguntó Gally al ver que la chica sostenía en una de sus manos un pedazo de papel enrrollado.

Newt se agachó para luego tomar el papel que traía la novata. Se apresuró a desdoblarlo para leer que era lo que tenía escrito.

—Ella es la última de todos —leyó
en voz alta, lo hizo que los chicos se mirarán entre ellos confusos —. ¿Saben que significa?

Nadie pudo responder ya que sus mentes no pudieron dar respuestas ni siquiera asimilarlo pues en un instante la chica abrió los ojos rápidamente y miro a su alrededor, buscando un rostro en especial. Esto les saco un susto.

—Thomas —murmuró la chica de bellos ojos azules, para luego volver a caer inconsciente.

Todos los habitantes se giraron a ver a Thomas confundidos, pero a la vez asustados y preocupados.

Thomas no sabia con exactitud cómo debía reaccionar, solo ahí estaba parado en su sitio viendo a la chica mientras que todas las miradas estaban dirigidas a él.

Lía tambien tenía la atención sobre el novato, meditando en su mente las palabras de Gally.

Sabía muy bien que todo esto lo
único que haría eran traer aun más problemas.

—¿Todavía creen que exagero? —mencionó Gally.

Sin embargo sus palabras lo único que hizo fue que todos los chicos en el área comenzarán a creer de cierto modo en él y desconfiaran de novato.
















——— ✮✧☾✧✮ ———























Minho, Newt, Thomas y Lía se dirigían hacia la finca, pues era hora de saber que era lo que estaba pasando y era probable  que la nueva chica tuviera las respuestas a todas sus preguntas.

Al entrar al lugar, lo primero que vieron fue a su líder en un terrible estado. El moreno solo soltaba jadeos y se quejaba. Alby ahora estaba pasando por lo que le llamaban la transformación.

Un escalofrío recorrió la espalda de la castaña, le causaba pánico ver Alby así. Aquello le trajo un vago recuerdo de Ben justo en el mismo estado y eso la hizo sentir mucho peor de lo que estaba.

Al estar frente a la cama donde la nueva descansaba inconsciente, Lía la observó. Sabía que la había visto en algún lugar, pero aún no sabía de dónde, probablemente en alguno de sus tantos sueños.

—Jeff, ¿Qué ocurre? ¿Qué le pasa? ¿Por qué no despierta? —atacó el rubio al doc una vez que el chico de acercó.

—Oye hermano, termine este trabajo al igual que tú —respondió Jeff cansado.

Newt desvío la mirada de la chica para posarla sobre Thomas y Lía, quienes parecían hacian un gran esfuerzo por reconocerla.

—Lía —llamó Newt.

—¿Hum? —respondió entre balbuceos la castaña, saliendo de su pequeño trance.

—¿La reconoces? —cuestionó a lo
que ella negó en respuesta, luego se giró hacia Thomas —. ¿Y que hay de tí Thomas, la reconoces?

—No.

—¿Enserio? —preguntó Newt desconfiado e indignado de la respuesta que recibió —. Porque ella te reconocío a tí.

—¿Qué pasa con la nota?

—Después nos preocupamos por eso —respondió Newt, restándole importancia a su pregunta.

—Yo creo que deberían preocuparse ahora.

—Tenemos suficiente por el momento —respondió Newt, esta vez a Lía.

—Tiene razón Newt —habló Jeff apoyando a Lía, mientras los cuatro chicos lo miraban atentos —. Piensa, si esa caja no vuelve a subir, ¿Cuánto tiempo duraremos aquí?

—Nadie dijo eso —contradijó el rubio, intentando calmarse —. No haremos suposiciones, solo hay que esperar a que ella despierte para ver si sabe algo. Alguien debe tener respuestas aquí.

—Okey —respondió Thomas, antes de darse la vuelta dispuesto a salir de aquel lugar.

Todos se giraron hacia él, sin saber muy bien que era lo que pensaba hacer.

—Oye, ¿tú a donde vas? —
preguntó Newt a Thomas.

—Al laberinto —respondió, sin si quiera mirarlos.

Los tres se miraron entre sí
luego de haber oído las palabras de Thomas.

Minho miró a Lía, quién sólo sonrió y asintió con la cabeza, antes de tomar la mano del corredor para después salir de la cabaña e ir por Thomas y saber que era lo el chico planeaba.

Efectivamente, a unos cuantos metros de la enfermería estaba Thomas caminando sin detenerse con rumbo al laberinto.

—¡Ey, ey, ey Thomas! ¡ey! —gritó el asiático intentando detenerló y al estar frente al novato se paró en seco —. ¿Qué te sucede? ¿Quieres morir? ¿Saliste y ahora quieres volver?

—Newt dijo que nadie había visto un penitente y vivido para contarlo, pues ahora tenemos uno —informó Thomas, mirando curioso y emocionado a ambos —.  No me digan que no tienen curiosidad.

—No, no la tenemos —respondió Minho cortante a lo que Thomas comenzó a caminar de vuelta.

Minho estaba por ir con Thomas cuando una mano lo detuvo, Lía sujetaba con fuerza su muñeca impiendole seguir.

—Thomas tiene razón, Minho —comenzó a hablar Lía, aflojando el agarre de su muñeca, con la mirada puesta solo en él —. Necesitamos respuestas, pero aquí no las encontraremos.

—Es demasiado arriesgado.

—Tenemos que intentarlo —musitó ella, antes de acercarsele para darle un beso en la mejilla.

—Esta bien.

Con rapidez ambos chicos logran acercarse de nuevo a Thomas y Minho una vez más lo hizo parar.

—¿Cuál es tu plan? —cuestionó
el asiático, mientras una pequeña sonrisa se dibujaba en su rostro —. ¿Saldrás tú solo a disecar a ese penitente?

—Lo haré si es necesario —respondióThomas, decidido —.
¿Ya se fueron los corredores?

—Dejaron de serlo esta mañana —informó Minho, observando a lo lejos a tres jóvenes que ahora charlaban con Gally —. Cuando picaron a Alby no tenían mucha prisa por volver a salir. ¿Por qué ustedes si?

—Creo que es tiempo de averiguar
a qué estamos enfrentándonos —les
dijo Thomas a ambos corredores, en susurros una vez que se encontraba cerca para que lo pudieran oír.

Lía también estaba igual de emocionada que Thomas, pero sabía que el miedo en ella pronto se desataría. Estaba desesperada y quería respuestas ante toda lo que estaba pasando en el área.

Así se arriesgaría, al confiar en Thomas. Él era un muy buen chico, pero desafortunadamente no todos en el área pensaban lo mismo gracias a Gally, quién de algún u otro modo los había puesto en contra del novato.

—Okey —fue lo único que dijo Minho notando las miradas que se daban ambos chicos, planeaban algo —. Pero no van a salir solos, véanme en el bosque en media hora.

—¿A dónde vas? —cuestionó Lía con una mueca de confusión. Minho se dió la vuelta antes de sonreírle para luego hablar.

—Confía en mí.








——— ✮✧☾✧✮ ———










En medio del bosque se encontraban
los dos novatos, esperando a que el corredor regresara y así poder partir
sin embargo estaba tardando.

Durante esos minutos a solas, ambos se entretenian platicando sobre distintos temas, cosas sin sentido hasta que todo eso fue a parar a algo que les resultaba muy inquietante durante todos los días que llevaban en el área.

Resulta que Thomas también había tenido varias pesadillas, que al parecer resultaban ser  recuerdos y en ellos estaba Lía.

Al saber que definitivamente ya no podía ocultar nada más, pues era un hecho de tenían bastantes cosas en común, decidió contarle algunas de sus locas teorías.

Él chico le conto algunas de las cosas cosas que había logrado recordar, mientras que Lía solo le platicó varias de sus pesadillas sin revelar ningún detalle más.

Y sobre la sensación de asfixia que había sentido.

Lo que le impresionó fue todo eso que ambos tenían en común.

Era raro para Thomas hablar
de esto con Lía, pero una vez que
le dijo esto sintió una sensación de libertad y tranquilidad. Por fin había alguien que lo entendía.

Al escuchar pasos los chicos dejaron de hablar y se pusieron de pie al ver al asiático acercarse hasta ellos. Minho no estaba solo  venía con la ayuda extra, tres chicos lo acompañan: Sartén, Winston y Zart.

—¿Suficiente?

—Okey —musitó Thomas, dispuesto a continuar con su arriesgado plan suicida —. Es hora.









——— ✮✧☾✧✮ ———















Después de recorrer los enormes pasillos del laberinto, el pequeño escuadrón de Thomas ya había llegado al lugar en donde ayer habían asesinado al penitente.

Por eso es que al ver unas pinzas de metal sobresaliendo de un muro, el azabache los obligó a detenerse.

Al acercarse un poco más, Lía de la nada sintió un poco de temor y es que los recuerdos de aquella noche aún seguían presentes.

Por lo que a pasos lentos iba detrás del líder de los corredores, pero pronto de acercó más.

—Que asqueroso.

—Estoy viendo algo —mencionó Thomas acercándose más al cuerpo inerte de la criatura, sin dejar de observarla.

—¿Además de puré de penitente? —cuestionó Sartén con burla, quien al igual que todos estaba muy asqueado por lo que veía.

Lía llena de curiosidad se acercó un poco más hasta el cuerpo sin vida del monstruo, pues había visto adentro del cuerpo algo que no dejaba de emitir una luz de color roja.

Parpadeaba con el punto rojo, pero no estaba del todo segura si los demás también podían verlo o solo estaba siendo paranoica.

Pero justo en el momento en el que tocó una parte del cuerpo metamorfo, el penitente logró sacarle un grito de terror al ver como movía una extremidad.

Instantáneamente Lía se alejó lo más rápido que pudo, chocando con el cuerpo de Thomas al retroceder.

—¡Shuck! —maldijo la castaña, al ver que el animal no se había movido solo una de sus pinzas.

Rápidamente Lía se alejó un poco del novato y recobró la postura firme, eso sí que le saco un susto.

—¿Qué no dijiste que estaba muerto? —preguntó Sartén a Thomas,intentando controlar su respiración irregular causada por el susto de hace segundos.

—Eso fue un reflejo —opinó Zart, rompiendo el tenso momento de silencio, su vista estaba puesta en la de ojos verdosos.

—Eso espero.

—Oigan, intentemos de nuevo, ayúdenme —mencionó Thomas a lo que todos los chicos asintieron y se aferraron con a una de sus pinzas metálicas esperando que el novato de la orden para comenzar —. ¿Listos? Todos a las tres. Uno, dos, tres...

Al recibir la orden, todos los chicos jalaron con fuerza de la extremidad del penitente, pero esto solo duró unos segundos antes de que se desprendiera la parte del penitente y los seis de un momento para otro cayeran
al suelo debido a la potencia.

Entre quejidos y con ayuda de Minho, Lía pudo ponerse de pie. Pero ella no era la única, todos se incorporaban a excepción de Minho, quién no había caído al suelo.

Luego Minho se acercó poco a poco al suelo de piedra donde se encontraban los órganos y toda la baba del penitente, entre todo eso había un pequeño cilindro de lo que aparentemente vendría siendo su corazón.

Minho tomo el cilindro y lo examinó, tenía el número 7 en números digitales y unas palabras que la castaña pudo reconocer al instante: CRUEL.

—¿Qué es eso?

—Cruel —leyó Minho en voz alta, examinando el cilindro en sus manos para luego girarse a ver a los demás —. Interesante.

—Sea lo que sea, ¿por qué no lo llevamos al área? —comentó Sartén, ganándose las miradas de todos los chicos —. No me gustaría conocer a sus amigos.

—Cierto, se hace tarde —comentó en respuesta Minho una vez observó el cielo que comenzaba a ponerse rojizo
—. Vámonos.

Todos asintieron rápidamente y comienzaron a seguir al líder de los corredores a una buena  velocidad para no quedarse muy atrás, ya era hora de regresar al área para informar sobre su nuevo descubrimiento.

Pero en todo ese tiempo de camino al área, Lía estaba tan sumergida en su mente teniendo un extrañas presentimiento.

Los chicos hablaban sobre todo ese tema del penitente hasta que la conversación tomo otro rumbo y terminaron contando anécdotas graciosas, mientras tanto Lía de mantenía de lo más callada y pensativa, sumergida en sus propios pensamientos.

Estaba reflexionando sobre todo ese asunto del penitente y aquello la estaba empezando a preocupar. Una sensación de nerviosismo se hacía presente, sabía que algo grande estaba por venir pero no tenía idea de que.

Estaba tan en su mente que cuando el líder de los corredores intento susurrarle por detrás de su espalda la castaña estuvo a nada de soltarle un puñetazo.

En cuanto supo que se trataba del corredor solo se relajó y se acercó más a él. El muchacho no dudo en pasarle uno de sus brazos por los hombros como era ya una costumbre tan suya.

Esto realmente la alguna manera la hacía sentirse más segura.

—¿Todo bien primor? —cuestionó el asiático en susurros una ves estuvo a su lado —. Te noto algo rara.

Lía solo se giró verlo a los ojos y asintió levemente, fingiendo. Minho no estaba satisfecho con aquella respuesta, era obvio que estaba mintiendo pero no quería contárselo. Aun así él sonrió y siguió caminando a lado suyo.

Lía no quería que Minho se preocupara más al enterarse de que al volver al laberinto algo se activo nuevamente dentro de ella, al estar en aquel lugar pudo sentirse una vez más distinta.

Con todo lo que estaba pasando tenía bastantes preocupaciones por el momento. Aunque sabía bien que podía confiar en él solo se abstenía de contárselo por ahora al menos hasta cuando fuera el momento más indicado.











════════════════════

CAPÍTULO ONCE EDITADO

BANDAAAAAA ME MURIJIII
a no cierto pero meh. A veces la edición me da flojera, casi paso un milenio y terminé de editar este cap JAKKASKS.

Entonces la pregunta aquí
es... ¿Les gustó? Espero que sí, lo edité con mucho amor.
¿Tienen teorías? CON UNA JODIDA CUÉNTENMENLAS.

No sé si lo notaron pero
opte por borrar la escena de Lía y Minho besuqueandose. ¿El por qué? Ni yo lo sé, solo se que estaba media pendejita...

Nos vemos en el próximo
cap bandamax, recuerden comentar, votar y agregar el fic a sus listas de lecturas yo no más digo claro 7u7

¡Y si se pasan de buenorras vayan a seguir a esta besha y talentosa escritora! Eso es todo los amodoro manguitos :^



Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro