Al llegar al infierno Ran busco con desesperación a Satanás, quería llegar a un acuerdo con el.

Ran se iba a negar a aceptar que su amada ya no iba a estar con él, negaba el hecho de saber que ya no la iba a poder ver, mucho menos besar.

escuchar su voz o sentir sus caricias, verla resplandecer el los cielos con aquel delicado cuerpo y con esas bellas alas.

Y cuando lo encontró exclamó su nombre con enojo y corrió hacia el.

— ¿Qué necesitas Ran? — pregunta Satanás

— Tu maldito, haz que me devuelvan a _____, la quiero devuelva — exclama Ran

Una carcajada salió de los labios de Satanás, se acercó a Ran y lo tomó del cuello haciendo que se arrodillé frente a él, sumiso y sin nada que hacer.

— ¿¡Acaso no te he dado todo!? ¡Eres un idiota! ¡ELLA NUNCA FUE TUYA!

Le gruta Satanás a Ran y lo avienta al suelo para luego darle la espalda.

— ¡Te ofrezco mi alma! ¡Toma mi maldita alma! — exclama Ran haciendo que este se de la vuelta para verlo — ¡Solo la quiero de vuelta!

— ¿Acaso no lo entiendes? — responde este — ¡Tu me vendiste tu alma cuando eras humano! ¿¡Y todo para que!? ¡Para salvar a tu amada!

Satanás se acerca a Ran para juntar sus frentes y así llevar al demonio a un mar de recuerdos de cuando era un humano.

Ran al igual que todos el también fue humano, casado con una bella esposa llamada _____.

La cual sufrió un terrible accidente en auto, que dejó devastado a Ran, no había manera de salvar a la chica.

Pero Ran, hizo un pacto con el diablo, si le traía de vuelta a su mujer o la salvaba le daría su alma.

Y sí, satanás cumplió su palabra y salvo la vida de la chica, por eso mismo, ella se convirtió en ángel

Y el, al morir no llegó al cielo con su amada ya que su alma ahora le pertenecía a otra persona. al demonio más temible y poderoso que existe.

Ran al despertar de ese sueño no dejaba de llorar por su amada, se había reencontrado con ella, pero se la volvieron a arrebatar.

— Yo no negocio con nadie... — Dice satanás para dejarlo ahí.

Ran hundido en dolor, de haber perdido a su bello ángel.