
𝚍𝚊𝚢 𝚝𝚠𝚘
—Un día de estos me voy a aventar de un puente— Wooyoung acarició los cabellos del menor.
—Yo solo quiero saber que paso ayer en casa de Jeong— El menor se sonrojó y ocultó su rostro con la almohada. Escucharon que la puerta era golpeada y después como Jongho comenzaba a quejarse.
—Dile que no estoy si llega a ser mi mamá— Mingi negó— Sí me voy a tirar de un puente, dejaré mi carta de despedida junto a los peluches— El pelinegro le quitó la almohada.
—Tonto, ya solo fue un día y no fue tan malo— Jongho se levantó para sentarse, formó un puchero— Yunho si está de buenas puede ser muy agradable, puede ser tu amigo...
—Contigo y Mingi estoy bien, él me dijo eso ayer... Ni siquiera puedo hablar correctamente— El mayor rio— No te burles, ay ¿por qué soy así? ¿Y por qué Mingi ya se tardó?
—Debe ser una de sus citas— Jongho frunció el ceño.
—Entonces vete a arreglar, no debe tardar la tuya... ¡Déjenme solo!¡No los necesito!— Se levantó de la cama para ponerse sus tenis.
—Jongho...— El salió de la habitación ignorando al mayor, se dirigió hacia la puerta para salir de la casa. Al abrir la puerta se topó con otro pelinegro y suposo a quien estaba buscando.
—¡Wooyoung!¡Tu cita está aquí!— El nombrado sonrió y el menor bufo mientras salía de la casa.
Decidió ir a la biblioteca, no podía creer que él estuviera teniendo crisis existenciales y a sus amigos se les ocurre llevar a sus citas de cama, los odiaba un poquito por hacerle eso pero bueno él sabe perfectamente como eran y no podía hacer nada. Llevo su mano hacia la bolsa trasera de su pantalón para tomar su teléfono pero para su muy mala suerte no estaba, lo que le faltaba, si su mamá llamaba más de tres veces el estaría muerto, quiso llorar cuando notó que el cielo se estaba nublado.
Al llegar a la biblioteca tomo el primer libro que se encontró y comenzo a leerlo, solo así su crisis desapareció por un par de horas. Para cuándo reaccionó había alguien frente a él, alzo su vista y casi cae de su asiento.
—Llevo esperando una hora a qué notes mi presencia— Jongho ladeó su cabeza.
—¿D-disculpa?¿Eres quién?— El chico frente a él sonrió.
—Me llamo Hyunsuk ¿Y tú?— El pelinegro más bajo se sonrojó.
—Jongho— Sonrió tímido.
—Bonito nombre ¿Vienes seguido?— Jongho asintio.
—Me hora decir podrás.
—Faltan quince para las cuatro ¿Por qué ya debes irte? Déjame decirte que ya está lloviendo— Jongho lo miró asustado.
—Cielos, mal momento para no haber traído paraguas— El chico frente a él sonrio aún más.
—Yo si traje, si no te molesta puedo llevarte.
—¿En serio? No es problema— Hyunsuk negó.
—De paso te conozco...
—Bien, permíteme dejar el libro— Se levantó de su asiento para caminar hacia la sección donde estaba el libro y camino con prisa hacia el chico— Listo.
—Bueno pues vámonos, tú me dices por donde— Jongho asintio—¿Y que edad tienes?
—Diecinueve— Murmuró.
—Entonces soy menor, tengo dieciocho, pero como estás chiquito no se nota— Sin querer al de medio cabello rojo se le escapó una pequeña risa.
—Me gusta decir que ustedes son muy altos y que yo soy tamaño promedio— El menor asintio.
—Bien, y dime ¿Tienes novio?— Jongho lo medito un poco, en sí no tenía.
—No.
—Eso es bueno, ¿Me darías tu número?
—Claro, ¿Anotas tú o yo?— El menor le entrego su teléfono, y Jongho comenzo a anotar su número.
Después de eso siguieron platicando intentando conocerse lo más posible y para la sorpresa de Jongho estaba hablando correctamente, sin nervios, eso le hizo sentir orgulloso de sí mismo. Al llegar a su casa, le agradeció a Hyunsuk y este tuvo el atrevimiento de besar su mejilla haciéndolo sonrojarse, abrió la puerta deseando que Mingi y Wooyoung no estuvieran ocupados para contarles lo que había pasado pero en su lugar encontró a su madre y amigos junto al pelirosa.
—¡¿Dónde estabas?!— El menor miro a Wooyoung.
—Biblioteca— Murmuró— Yo olvide mi teléfono.
—Sabes cuan preocupada estaba, ni tu novio, ni amigos sabían dónde estabas— Quiso volver a unos minutos atrás junto al agradable chico que conoció.
—Lo lamento— Musitó, bajo su mirada al suelo.
—¿Y por qué no estás empapado si allá afuera está lloviendo?— Se le escapó una sonrisa—¿Por qué sonríes?
—¿Ah? No por nada, aún es temprano... Tengo tarea— Camino hacia su habitación, después de todo había tenido un rato agradable.
—Jongho, te estoy hablando...
—Yo hablo con él— Mingi y Wooyoung alzaron una ceja por las palabras del pelirosa.
—Bien— Yunho camino por dónde el menor se había ido, entro en la primera puerta que vió y para su sorpresa el menor no estaba haciendo tarea estaba sonriendole como idiota a su teléfono.
—Se toca antes de entrar— Murmuró Jongho sin mirarlo.
—Le dije a tu mamá que iba a hablar contigo pero no le haré— El menor alzo la vista y después volvió a mirar su teléfono— Sabes está tontería me arruinó planes.
—Hubieras mentido— El pelirosa frunció el ceño al ver qué el menor estaba muy sonriente— Por mí mejor, así mi mamá no estaría aquí.
—¿Con quién hablas?— Jongho fruncio el ceño.
—No tengo por que decirte, te recuerdo que no somos nada— El mayor asintio.
—Bien me largo— Jongho se encogió de hombros restándole importancia a la situación.
—Chicos— La puerta fue abierta— Ya me voy— El menor asintio— No vuelvas a desaparecer.
—No desaparecí, solo fui a la biblioteca.
—De igual forma, Yunho también se preocupó— Jongho frunció el ceño— Bueno los veo mañana.
—¿Mañana?
—Si mañana, Yunho vigilalo— El más alto asintio, la mujer salió de la habitación.
—Al menos disimula tu sonrisa— Murmuró el mayor.
—Fuera de mi habitación...
—Sacame— Murmuró mientras una sonrisa burlona aparecía, Jongho se levantó de la cama y camino hacia el mayor— Hasta ayer hablabas revuelto ¿Ya no te pongo nervioso?
—Fuera— Yunho tomo su cintura.
—Tal vez tu mamá no vio pero yo sí ¿Te divertiste con ese chico?— El menor frunció el ceño. El pelirosa se encorvó para quedar a la altura del pelinegro.
—Dejame...— Yunho presionó sus labios contra los del menor y aún que el menor se quería rehusarse termino cediendo al beso.
—Jongho mi niño— El pelinegro apartó al mayor— Lo lamento.
—Interrumpes mamá nada— El pelirosa sonrió al lograr su cometido.
—Me voy, los dejo para que sigan— Jongho se sonrojó.
—¿Otro beso?
—Habitacion de mi fuera...
—Nos vemos mañana— Tomo el rostro del menor y lo besó— Tomalo como regalo— Le guiñó mientras salía de la habitación.
—¡No de nada tí quiero!— Mingi se asomó— Tu amigo me cae mal— Se sentó en la cama con los brazos cruzados— Muy mal.
—Te dije que Jeong no iba a obedecer— Hablo Wooyoung sentándose a un lado del menor.
—Mejor dinos ¿Quien era el chico con el que llegaste?— La mueca del menor cambio a una sonrisa tímida.
—Lo conocí en la biblioteca y si no hubiese sido por él, yo hubiera llegado empapado— Wooyoung lo abrazo.
—Cosita— Murmuró el castaño sentándose al otro lado del menor—¿Como fue tu primer beso?
—¡Mingi!— Gritaron Jongho y Wooyoung.
—Ay perdón, pero necesito saber que tan bruto fue Jeong— El menor se sonrojó.
—Bueno sí... ¿Entonces Jonggie?
—Importa a nada ustedes— Tomo uno de sus peluches— Fue nada.
—Lastima que no fue como lo hubieras deseado y que tu mamá los viera.
—Su primer beso fue ayer en casa de Jeong— Corrigió el mayor.
—¡¿Como que en la casa de Jeong?!¡¿Que demonios hacías allá tú solo?!¡¿Es que acaso no te dijimos los peligros de estar solo en su casa?!— El menor negó—¿Ah, no?... Pues un peligro estar en su casa.
—Bueno, al menos fue solo un beso sin importancia— Murmuró Mingi. El pelinegro frunció el ceño viendo al mayor— Bueno fue el primer beso sin importancia de Jonggie y no la primera vez de Jonggie... Escucha eso no se lo des a Jeong— Wooyoung asintio.
—Y ya no vayas a casa de Yunho, por tu bien.
—Y el de tu trasero— El menor volvió a sonrojarse.
—¿Por qué eres así?— Cuestionó Jongho.
—Ni idea, pero así me quieres ¿Me quieres verdad?— Jongho asintio.
—Vamos a comer, tengo hambre— Los mayores sonrieron.
—Vamos, Mingi invita— Wooyoung se levantó de la cama para después sacar al menor de la casa y no oir al castaño quejarse.
Acabo de iniciarla y ya actualizo seguido.
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