Buenos días, tardes o noches.
Quiero confirmar una cosa, hace unos capítulos advertí de que solo quedaban 10 capítulos para marcar esta historia como completada.

Pues al final todo lo que queda de este arco no me cabrá por lo que serán más capítulos, no 10 exactamente.

Creo que es lo mejor porque no quiero escribir capítulos de más de 8000 palabras, no me apetece.

Os dejo con el cap.

.
.
.

Capítulo 94

Día antes del tercer ataque

[Cita en Villa Versui]

[Comarca de Noroteo/Kitakami, entrada al Parque de los Compatrones]

{En el futuro}

Narrador Neutral:

Adaman y Celebi recorrieron un corto trayecto para llegar hasta aquel parque donde supuestamente debería esperarle la hermana mayor de Kieran, recordando el tono de voz y la expresión de la joven, el jerarca estaba seguro de que el tema de conversación con ella iba a ser serio.

— ¿Qué crees que pueda ser? — preguntó Celebi.

— "No lo sé, pero si es algo serio ayúdame un poco para sacarme del aprieto" — dijo Adaman.

— Okey.

Después de atravesar la entrada y rodear un cartel un tanto particular los dos llegaron hasta los límites del parque, allí se hallaban vallas de madera colocadas de manera inteligente para que por obvios motivos los visitantes no se precipiten a las alturas, al fondo se podía visualizar Villa Versui.

Carmine se encontraba apoyada a esas vallas, mirando el horizonte, pero cuando sintió la presencia de Adaman se volteó con tranquilidad.

Adaman se acercó a ella con las manos en los bolsillos, con Celebi detrás suyo.

— Dado que me has llamado para hablar tan privadamente estoy suponiendo que es algo muy serio, ¿de que querías hablar? — preguntó el jerarca.

La azabache respiró profundamente antes de empezar.

— ... Adaman, tú podrás engañar a Kieran, a los habitantes del pueblo o a quien quieras — dijo — Pero a mí no.

— ... — Adaman se queda callado, escuchándola.

— Tanto en el Soto Sempiterno como hace un par de horas a punto de irse con Necrozma al Monte Ogro, yo lo pude ver, vi a Ogerpon — dijo.

Adaman y Celebi no se maldijeron, sabían que ese día llegaría, pero que no a tan temprano momento como ese.

— ¿Porque no le dijiste a Kieran que ya capturaste a Ogerpon? Está viviendo una mentira... — preguntó Carmine, triste.

— Porque si lo hago dejará de ser quien es — respondió Adaman de forma directa.

— ...

— No es fácil imaginárselo — se miró una mano vendada — Que alguien te destruya el sueño por el que tú tanto luchas en menos de la mitad de un segundo, no puedo dejar que a una persona tan agradable como él le suceda eso.

— ¿Y entonces qué quieres? Que luche por algo que ya no podrá conseguir?

— Ahí es donde no sé qué hacer...

— ¿Como que no? Puedes regalárselo y ya está, problema solucionado — dijo Carmine, ya un poco molesta.

— Porque no es tan fácil Carmine — Adaman alzó la voz — En primer lugar Ogerpon está muy aferrado a mí, si se lo regalara entonces el ogro lo rechazará, y en segundo lugar, si cumplo su sueño regalándole a Ogerpon ¿entonces qué hará con su vida más adelante?

— ... Tienes razón — cabizbaja.

— Yo también me siento mal por él Carmine, pero espero que nada empeore después de que ese día llegue —.

— ¿Pero no sería mejor idea confesarle la verdad ahora? cuanto más tiempo pase peor, ¿no?

— Soy consciente de ello, pero te en cuenta que mañana será un día apocalíptico para esta comarca, donde es posible que muchos de nosotros mueran, si Kieran no se concentra aún peor para nosotros será, y los dos sabemos que no queremos que eso pase, ¿verdad?

— Si... aún así duele ver a mi hermano esforzándose por algo que no podrá conseguir.

— ... ¿Tu acaso conseguiste lo que querías? o todavía es muy temprano para lograrlo — preguntó Adaman.

— Si te digo la verdad, creo que es muy temprano, verás, los que me rodean siempre me admiran porque piensan que soy la entrenadora más fuerte de mi academia, cuando yo nunca dije eso — dijo, apoyada a la valla mientras el viento revoloteaba su largo y liso cabello negro.

— ¿No lo eres?

— Soy fuerte, si, pero hay compañeros míos aún más, por si te entra la curiosidad solo diré que son miembros del Alto Mando de mi academia, yo no pude entrar, por eso me ves en esta comarca con mi hermano — explicó.

— Mh, entiendo — dijo — Bueno, al fin de cuentas todo se conseguirá con el tiempo —.

— Solo hay que estar concentrado en mejorar y ya — dijo Celebi.

— "Exacto" Bueno, me encantó poder tener esta pequeña charla Carmine, pocas veces se puede hablar tranquilamente contigo — dijo Adaman, dándose la vuelta y empezando a caminar.

— Oye! — molesta.

— Aún así me relaja ver que verdaderamente te preocupas por tu hermano — dijo Adaman.

— *suspira* Solo intento ser una hermana responsable... pienso que él esta dando mucho de sí mismo, pues yo también tengo que actuar — dijo de brazos cruzados.

— *sonríe*

Antes de que el jerarca y el Pokémon singular se retiraran, Carmine los detuvo para preguntarles una última cosa.

— Adaman espera — dijo la azabache.

— Mh, ¿qué quieres? — dándose la vuelta.

— ... Como bien sabes el Festival de Máscaras es esta noche — dijo moviendo los dedos nerviosamente.

— Claro que lo sé.

— Es algo muy tradicional ir en parejas al Centro Cultural, así que...

— ...

— Así que... te gustaría que tu y yo... ya sabes, nosotros dos... ¿vayamos juntos? — preguntó ruborizada.

— Claro — dijo Adaman.

— ¿¡De verdad?!

— Si pero... ¿que ocurre con tu hermano? tú habitualmente ibas con él —.

— No te preocupes, él mismo era el que quería cambiar de pareja, aunque no me dijo con quien quería ir al festival — dijo.

— Ya veo, tampoco fue mala idea, nuevas experiencias después de todo, podré conocerte mejor — dijo Adaman.

— Ya, y yo a ti.

— Además podremos divertirnos hasta muy tarde, mañana será un día lleno de entrenamiento para el ataque de la noche siguiente, vayámonos — empezando a caminar.

— Ok.

.
.
.

[Villa Versui]

Era poco más de las tres de la tarde en Noroteo, y nuestro grupo de entrenadores ya campaban a sus anchas por todos los rincones de la aldea, debían comprarse su kimono y todo el material para el cercano Festival de Máscaras, que tendrá celebración en el Centro Cultural.

En una tienda de ropa, nos encontramos con Liko. Estresada al no poder escoger con qué kimono quedarse.

— "Aunque la variedad de colores no es mucha el precio es muy alto..." — pensó preocupada.

Una chica hermosa, de cabello azul y rosa entró en la misma tienda donde se hallaba ella.

— "Podría pedirle dinero a Adaman, pero no quiero hacerlo... parecerá que me quiero aprovechar de él" — pensó Liko, con ansiedad.

— ¿Liko, te encuentras bien? — le tocó de un hombro.

— ¡! Eres tú Iono, que susto me diste...

— Perdóname, ¿por cierto ya compraste tu Kimono? — preguntó.

— N-no, pero el problema es el siguiente.

— Que sucede — confusa.

— El problema es que quiero ESE kimono, ningún otro me gusta más que ese — señaló.

Su dedo índice apuntaba a lo que era una vestimenta de color azul marino muy bien decorada, se podía leer con facilidad que valía más de 65.000 Pokedolares, una barbaridad si hablamos de ropa.

— Adivino, no tienes dinero suficiente, ¿verdad? — deducía la streamer.

— *asiente con timidez*

— Tranquila, ya la pago yo por ti.

— ¿S-segura? es mucho dinero — sorprendida.

— Claro, ¿si no como harás?  — sonriendo.

...

Después de tres minutos, las dos salieron de la tienda con una sola bolsa. De ahí empezaron a caminar en dirección al hotel.

— Por cierto Iono, ¿porque entraste en esta tienda si tú ya tenías un kimo-

— En realidad te estaba buscando a ti — la interrumpió la líder de gimnasio.

— Ah, ok, gracias por dejarme acabar la pregunta... — irónica.

— Veras Liko es que quería hablar de un tema en concreto contigo porque recientemente me di cuenta de algo — dijo Iono.

— Hablemos, ¿que paso? — curiosa.

— ¿A ti te gusta Adaman verdad?

— *en shock*

Un silencio incómodo e inquietante invade su zona de conversación, solo faltaba que apareciese un Bramblin siendo empujado por el viento para recrear una buena escena.

— Dios mío Iono, que directa eres... — dijo Liko, incrédula.

— De verdad lo fui...— avergonzada — ¿Aun así podrías responder a la pregunta?

— Eh... n-no estoy segura — ruborizada — ¿Pero porque la pregunta tan repentina?

— ¿Eh, acaso no le habías pedido ser tu pareja en el festival? — preguntó Iono, confundida.

— ¿¡Qué?! Yo nunca le dije eso! "Aunque en verdad tenía esa intención..." — dijo y pensó Liko.

— Oh v-vaya, jeje... — dijo Iono, nerviosa — L-lo siento creo que estaba deduciendo cosas muy rápidamente.. "¡Espero que ignore lo que le pregunté hace pocos segundos..!"

— "Espera un momento" — sospechando — ¿Y porque lo preguntaste de esa manera Iono, tienes algún problema...?

— "Mierda" ¿Qué? Nooo que va... solo quería saberlo, no es porque me guste ni nada que se le parezca jeje... — mentía lo mejor que podía con un leve sonrojo en sus mejillas.

— "Está oculta algo... ya se, mejor no me haré la loca" — pensó Liko — Aún así no me importaría ser su pareja para ir al festival.

— ¿¡Qué?! — exclamó Iono, celosa.

— ¿De qué estáis hablando? — preguntó una voz diferente.

Carmine tomó por sorpresa a las dos, esta se acercaba tranquilamente hasta donde estaban ellas, su presencia allí daba a indicar que ya había llegado junto a Adaman y Celebi a la villa.

— ... ... De nada — mintieron las dos.

— No penséis que soy idiota, sé que hablabais de Adaman — dijo molesta.

— ¿Y qué problema tiene eh? — dijo Iono, a la defensiva.

— Mh — sonríe triunfante — Pues creo que soy yo la que ganó esta competición.

— ¿Competición, qué competición? — preguntó Liko.

— Aunque no me creáis, Adaman aceptó ser mi pareja para el Festival de Máscaras.

— ¿¡QUÉ?! — dijeron las dos.

— ¡¿Eso no puede ser, estarás mintiendo verdad?! — dijo Iono, celosa e incrédula.

— ¿Porque iría a mentir en esta situación? Si lo digo es porque es la verdad.

— "Rayos... eso me pasó por no habérselo preguntado antes..." — pensó Liko, triste y celosa.

Iono y Carmine tuvieron un duelo de miradas, una viéndola con una mirada de celos y la otra con superioridad.

— En fin Iono, mi hermano hace pocos minutos me dijo que te estaba buscando — dijo Carmine, volteándose.

— ¿A mí? Oh cierto, hace poco me dijo que quería hablar conmigo... — dijo.

— ¿Porque no lo buscas y así te quitas un peso de encim-

— ¿De qué habláis tan privadamente? — preguntó Kieran.

Peor podía ser la coincidencia, las tres se voltearon y se llevaron la sorpresa al ver al pequeño Kieran acompañado de Adaman acercándose hasta donde estaban ellas. Ahora debían callarse e intentar no hablar acerca del tema anterior mencionado.

— Ey enano jeje... — dijo Carmine — Que sorpresa verte de forma tan repentina por aquí.

— Estaba hablando con Adaman hasta que os vimos paradas en este banco, ¿ocurre algo?

— N-no, no ocurre nada... — dijo Liko, intentando sonar creíble.

Adaman sentía en la carne la molesta mirada de Iono, siendo observador, no ignoró el dato de que aquella fue la primera vez que esta lo veía con algo de furia.

— Ehhh... ¿Te ocurre algo, Iono? — incomodó, con las manos en los bolsillos.

— ¿A mi? Nada — de brazos cruzados, mirando en otra dirección.

— Le ocurre algo — afirmo Celebi, comiéndose un helado.

— "Je..." — rio Adaman mentalmente de forma nerviosa — "¿ahora qué hice...?"

— ¿Y me lo preguntas a mí? acaso soy un dios omnipotente? — dijo Celebi.

— "Estaba pensando solo no te hablaba a ti cebolla de mierda..." — dijo Adaman, evitando enojarse.

— Bueno estábamos hablando de las parejas para el festival de esta noche, ahora sabemos que yo voy con Adaman, eso es todo hasta ahora — dijo Carmine, sonriendo.

— Yo mejor me voooy.... *empieza a silbar* — dijo Celebi.

— "Tu no te vas" — lo interrumpió Adaman, agarrándole de la cabeza.

— ¿Y qué enano? No vas a decirle a Iono lo que te estabas guardando desde esta mañana? — preguntó Carmine, pícara.

— ... Iono — dijo el pelinegro.

— ¿Si?

— ... *preparándose* ¿Te gustaría ser mi pareja para el Festival de Máscaras? — preguntó con mucha vergüenza.

— ¿¡Eh?! P-pero...

Iono, sin saber qué responder, tuvo un cruce de miradas con Adaman, este último no tuvo miedo a hablar. Ya teniendo pareja.

— Dile que sí Iono — dijo Adaman, de brazos cruzados — Solo será un par de horas.

La streamer volvió a girar su mirada para ver el rostro de Kieran, sabía el valor que había reunido el chico para llegar hasta el punto de preguntárselo delante de todos ellos, y con el consejo de la persona a la que amaba no se pudo resistir.

— ... *suspira* Esta bien... — aceptó Iono.

— *emocionado* ¿¡De verdad?! Te lo agradezco...! — haciendo una repetida reverencia.

— Tranquilo tranquilo tampoco tienes porque celebrarlo tanto.. — dijo la líder de gimnasio sin mucho interés.

— Y yo... — susurró Liko, triste.

— ~Creo haber escuchado a Nate tener ganas de ir contigo al festival, sé que quieres ir con Adaman pero como bien sabes yo soy su pareja, si no quieres quedarte sola creo que esa es la única opción que te queda~ — susurró Carmine en su oído.

— Em... Agh está bien...— dijo Liko.

Mientras ellos tres seguían hablando, Iono y Adaman los observaban con un poco de incomodidad al no hablarse entre ellos dos, algo raro y triste de ver en una amistad tan grande como la suya.

Iono rompió el hielo, intentando encontrar alguna razón por la que Adaman aceptó.

— ¿Porque aceptaste ser su pareja para el festival, acaso te manipuló la cabeza? — preguntó Iono, molesta y celosa.

— Porque fue la primera que me lo preguntó, supongo — dijo inocente él.

— Oh, ahí tienes razón... — dijo con una gota en la cabeza — Aún así sigo sin entenderlo.

— ¿Estás enojada?

— Tu qué crees — dijo sin mirarlo.

— Qué clase de pregunta es esa — le dijo  Celebi, tenso.

— "Podrías estar ayudándome en vez de criticarme en un momento tan complicado como este..." — pensó con ganas de golpearlo.

— No no no, a mí no me metas en tus problemas amorosos, no soy tu sirviente — dijo el Pokémon singular.

— *suspira* Iono, ¿porque te enojas conmigo?

— *se cruza de brazos* Tu ya sabes porque me enojo por esto Adaman, no hagas como si no lo supieras...

Y tenía razón, Adaman sabía que no intentaba ser perdonado de la manera correcta, debía cambiar de estrategia, era cierto que desde un punto de vista Iono se veía muy tierna estando enojada, pero de seguro ella lo estará pasando bastante mal.

— Tengo que proponerte algo, ahora que ellos no nos oyen, y no me importa si no me quieres escuchar — dijo el jerarca.

— Lo que tú digas, yo no te voy a responder — dijo, sin interés.

— Tengamos una cita.

— ... ... ¿C-como dices?— impactada.

— Bueno jeje... si no quieres tener una entonces olvidemos esto, ¿ok- — rascándose la cabeza.

— Tengámosla ahora — dijo simplemente, emocionada.

— ¿Perdón?

— ¡Tengámosla ahora mismo! — directa y sonrojada. Acercándose mucho al rostro del jerarca.

— Vaya cambio drástico de actitud... — dijo Celebi, con una gota en la cabeza. Cuando de repente su helado se cae al suelo — Oh mierda.

.
.
.

Cinco minutos después, vemos a Iono caminando en dirección al hotel, le dijo a Adaman que quería cambiarse para poder sorprenderlo en su futura cita, decir que estaba emocionada era poco decir en realidad.

— "¡Voy a tener una cita con Adaman...! Que emoción...! Espero que esto no sea un sueño, a lo mejor no podré estar con él en el festival pero si podré estar un buen tiempo a solas con él, si!" — pensaba la streamer.

Cuando la chica alegre llegó a la entrada del hotel, estaba tan distraída con sus pensamientos que no se dio cuenta de que Carola y Elesa se hallaban allí hablando entre ellas.

— ¿Te pasó algo bueno Iono? te ves muy feliz — preguntó Elesa.

— ¿Mh? A mi?! ¡Pues si, voy a tener una cita con Adaman, ahora mismo!

— Oh vaya, felicidades — dijo Carola.

— ¿Y que tienes pensando hacer? — preguntó la líder de gimnasio.

— Supongo que pasearemos y haremos de todo por alrededor de toda la villa antes del festival — dijo con un dedo en el mentón — Pero ahora lo que quiero es cambiarme para verme bien, ¡y no sé qué ponerme...!

— ~¿Como le decimos que ya se ve bien con esa vestimenta...?~ — susurró Carola.

— ~Mejor no le digas nada~ — contestó Elesa — ¿Acaso no tienes ropa más hermosa que ponerte?

— No estoy segura, creo que sí pero-

— ¡Ya sé, tengo una idea! — dijo Elesa — Menos mal que tenía pensando regalártela después del festival.

— ¿Regalar, el que...? — confundida.

.
.
.

15
MINUTOS
DESPUÉS

Eran las cuatro de la tarde, indicando que tan solo quedaban más de cuatro horas para el comienzo del festival, un tiempo que podría ser muy aprovechado para cierto jerarca y una líder de gimnasio de tipo eléctrico, procedentes de Paldea y Hisui.

En algún lugar del que desconocemos ubicación en Villa Versui, se encontraban Adaman y Celebi parados a la espera de Iono, delante de una fuente bastante preciosa en la que el agua se veía cristalina.

(Aviso: Podría haber advertido de esto desde un principio pero lo diré ahora, sé que en los videojuegos los pueblos son más pequeños de lo que parece, pero en esta historia los he hecho grandes para no ser tan aburridos, es por eso que en Villa Versui hay una fuente como también hay de todo tipo de cosas)

— ¿Estás seguro de fue buena idea llevarme contigo para la cita...? — preguntó Celebi.

— "Celebi, ya pasó un buen tiempo desde la última vez que te dije que ya no me importaba que estuvieras conmigo en cualquier momento, me conoces muy bien después de todo, así que no me daría vergüenza tenerte a ti en compañía en una cita" — dijo mentalmente, de brazos cruzados.

— Okey entiendo....

— "Pero eso sí, tendrás que callarte, no quiero escuchar tu voz en toda la cita porque me distraerías" — advirtió.

— Si eso ya lo tengo muy claro, solo voy a decirte que te diviertas y pues bueno ve a por todas — dijo.

— "Gracias".

Transcurrieron tres minutos, y a cada segundo Adaman se volvía más impaciente, Iono no aparecía, como habitualmente sucedía con cualquier persona, empezó a pensar en cosas que podrían explicar el porqué de su ausencia. Sé arrepintió... Le ocurrió algo... eso son algunos ejemplos de los pensamientos que invadían la mente del peliazul.

— No aparece... — dijo Adaman en voz baja.

— No te pongas nervioso, de seguro se estará preparando muy bien para la cita, ¿acaso te olvidaste que le gustas?

— "Si, tienes razón, mejor me pongo a meditar".

Adaman cerró los ojos, intentando olvidarse de todo lo que le rodeaba. Pero la paz mental tampoco perduró mucho, ya que en ese mismo momento nuestro protagonista escuchó finalmente la voz de ella.

— ¡Adaman, siento mucho haberte hecho esperar!

— ¿Mh? — abre los ojos.

Cuando sus párpados se abrieron para dejarle ver la figura que se le acercaba, Adaman no lo creía, Iono estaba vistiendo una ropa idéntica a la de Elesa, líder de gimnasio de la región de Unova, como esta última era modelo, a Adaman unas cuantas veces se le pasó por la cabeza la imaginación de verla vestida de esa manera. Y la verdad era que se veía estupenda.

Acerca de la reacción de Adaman, este se quedó embobado mirándola de forma perdida, mientras que Celebi apreciaba su pequeño rubor con satisfacción y de forma pícara.

— ¿M-me veo bien...? — preguntó la chica.

— Te ves... demasiado hermosa, la verdad — confesó Adaman, mirándola de pies a cabeza.

— ¡Gracias! — agradece feliz y sonrojada.

— ¿Pero como conseguiste una réplica idéntica a la de Elesa?

— Al ser su mejor amiga me la había regalado hace pocos instantes, y pues quería probarla contigo a ver qué me decías.

— Oh, entiendo, bien Iono, ¿que quieres hacer? eres tú la que manda en esta cita — dijo Adaman.

— ¿¿De verdad puedo ser yo la que elija lo que vayamos a hacer?? — ilusionada.

— Todo menos comprar ropa — dijo — no me veo con las ganas de cargar bolsas e ir de allí para allá.

— Ah, okey, se ve que conoces bien el gusto de las mujeres... — con una gota estilo anime en la cabeza.

— Tengo experiencias, ¿en fin tienes alguna idea?

— Tenemos bastante tiempo para que caiga la noche — Iono se puso a pensar con un dedo en el mentón — Podríamos ir a ver alguna película nueva en el cine, por si no lo sabías eso es muy típico hacerlo en citas en esta época jiji.

— Si ya lo sabía, el tema es que es muy probable que unas simples palomitas no nos alivien el hambre, ¿te apetece si primero vamos a comer? —sugirió Adaman.

— ¿A-a comer, adonde? — nerviosa — "Comer a solas con Adaman, me lo sigo preguntando, ¿esto es un sueño?"

— En un restaurante lujoso, de seguro debe haber alguno por aquí, invito yo — dijo Adaman, con una leve sonrisa.

— ¿¡Eh?! Pero, ¿estás seguro? Son demasiado caros... — preocupada.

— Si, ¿y que tiene?

— Sé que obtuviste mucho dinero por haber vendido aquellos diamantes, pero yo también tengo, quedaría muy mal si no pago nada — dijo Iono apenada.

El jerarca se ríe y coloca una de sus manos en la cabezita de la entrenadora.

— Y yo sé que tú tienes dinero para lo que sea Iono, por algo eres mi streamer favorita, pero aún así quería compensártelo por toda la ayuda que me has ofrecido en todos los combates hasta ahora, ¿te parece bien?

— ...*suspira* Está bien... solo esta vez okey?

— Claro, solo esta vez.

— *lo observa con una sonrisa, en silencio*

— ¿Te ocurre algo, Iono? — preguntó.

— ...

La líder de gimnasio no responde a la pregunta y sin decir nada se le acerca para darle un beso en la mejilla a Adaman.

Este se sorprendió y se sonrojó un poco porque no se lo esperó de forma tan repentina.

— Gracias — dijo Iono por lo del restaurante — Bueno, ¿vamos?

— Por supuesto, pero antes de nada...

Iono sintió algo cálido agarrando su mano, era la de Adaman, esta lo miró sonrojada sin poder creérselo.

— Ahora sí que podemos ir —.

— *asiente feliz*

...

Caminando al rededor de toda la villa, nuestros entrenadores estaban conversando tranquilamente mientras buscaban algún sitio lujoso en el que comer.

Iono a veces tenía que voltear su mirada hacia el suelo, ya que mucha gente los miraban como si de una pareja se tratara, y eso a ella le ponía nerviosa. Mientras que a Adaman este estaba tranquilo, como si tuviera control de todo lo que estuviera sucediendo.

— Y dime Iono, ¿has seguido haciendo streams en estos últimos días? Te habrá sido difícil, ¿o no? — Preguntó Adaman.

— No, de hecho hoy estuve en directo.

— ¿Como?

— Sé que te parecerá imposible pero no miento, siempre hago streams cuando no estás tú — comentó.

— ... ¿Debería ofenderme?

— ¿Qué? Nononono! No lo dije para ofenderte, quería decir que siempre que estás tú no me veo en condiciones de grabar porque...

— ¿Porque...?

— *se ruboriza* Porque siempre me quedo observándote...

— Mh, que tierna — sonríe.

— ¡No te burles de mí! — con un puchero.

— No lo hago — negó — Cambiando de tema quería perdonarme por haberte hecho enojar en aquel entonces, no sabía que te ibas a sentir muy mal al darte cuenta de que iba a ir con Carmine al festival, creo que es mi culpa — dijo un poco apenado.

— ... Adaman, tú ya sabes que no es tu culpa, solo soy yo y mis celos que me hacen ser así en esos momentos... debería ser yo quien debería perdonarse — triste.

— Bueno, en mi opinión, tener a alguien celoso/a me parece bastante útil en una relación — dijo.

— ¿Útil? — sorprendida.

— Si, porque te convences de que esa persona te sigue amando con su vida, eso es lo que yo creo — explicó.

— Claro, pero el problema aquí es que tú eres un mujeriego, por eso tengo que ser así contigo.

— Eso duele...

Cuándo finalmente se detuvieron, Adaman señaló un restaurante que tenían justo delante, Iono nunca lo había visitado.

— Aquí se especializan en comida de Sinnoh, si no me equivoco, la comida no debería ser tan diferente a la que se servía en Hisui, ¿tú nunca fuiste a esa región verdad? — preguntó el jerarca.

— ¿A Sinnoh? Nop, nunca fui.

— Pues sería buena idea comer aquí, tú pruebas nuevas cosas y yo te puedo explicar que son, ¿quieres comer aquí? — preguntó — Te recuerdo que aquí mandas tu, puedes elegir otro restauran-

— ¡Vayamos a este! Quiero comer en este!

— "Que decidida..." — pensaron Celebi y Adaman.

...

Ambos ya habían entrado y pedido mesa para sentarse, había mucha gente del restaurante que observaba a Iono, normal al ser muy popular, pero no podemos descartar que también habían otras que se fijaban en Adaman.

El nombre del jerarca se hacía popular en el mundo poco a poco, primero por haber salvado Galar, y segundo por haber defendido Ciudad Castelia del segundo ataque, eso era suficiente para hacerlo popular.

Cuando ya pidieron de comer y agarraron sus utensilios, Adaman observaba como la streamer veía confundida su plato.

— ¿Tienes alguna duda? — sonriendo.

— Em... si, ¿de que es específicamente esta carne "exquisita" de pescado? En el menú no lo dicen — preguntó Iono.

— De Feebas — contestó.

— ¿¡De Feebas?!

— Es una especie de Pokémon muy difícil de encontrar en Sinnoh, por eso tan alto el precio, aunque supongo que te dará pena comerte a un Pokémon tan raro — supuso.

— Si, pero aún así está rico... — con una lágrima.

— Te entiendo, da una sensación muy extraña comerte algo que te gusta a la vez que te da pena — se ríe el jerarca.

— Si cierto — empieza a beber de una copa.

A Adaman, viendo como la chica estaba bebiendo y como bien juguetón que és, se le ocurre una de sus bufonas bromas.

— Tienes unos ojos muy bonitos Iono.

— ¡!

La streamer se empieza a atragantar con la bebida al escuchar tan repentino comentario del jerarca, a este le salió bien su broma.

— ¡Idiota, no me digas eso cuando esté bebiendo...! — sonrojada.

— *se ríe*

Después de alargada la conversación, cierta persona se acerca a la mesa de estos dos personajes, más bien dicho, eran dos personas, que no pensábamos volver a ver nunca más.

— Eh, tu — dijo una voz grave.

Un sexto sentido les confirmó a Adaman y Celebi que esa voz se dirigía a ellos, voltearon sus cabezas junto a Iono para ver a dos hombres de media edad delante de su mesa. La mirada que estos se dirigían a Adaman no era muy agradable.

— Bastante grande es la coincidencia verte rondar por esta comarca hombrecito — dijo uno de ellos.

Iono no entendía lo que sucedía, pero igualmente se molestó con ellos al verlos dirigirse a Adaman de esa manera tan ofensiva.

— Perdonar mi ignorancia, pero... ¿os conozco? — preguntó el jerarca, serio.

— ¿No te acuerdas de nosotros? Somos esas personas a las que tú llamaste "pederastas" en Ciudad Castelia, a los que humillaste en frente de todos solo por coquetear con esas malditas novias tuyas — dijo, crujiéndose los dedos.

— ¿P-pederastas...? — dijo Iono, enojada e impactada.

La streamer estaba segura de que estaban exagerando con eso de las "novias", Adaman podía ser un mujeriego, pero se negaría a tener más de una novia a la vez, estaban mintiendo y ella lo sabía.

Con el jerarca, este recordó fácilmente cuando ocurrió eso. Lo que les pasó a Gloria y Liko.

— Anda, ¿en serio sois vosotros? Pues yo no le llamaría coincidencia, ¿acaso me estáis siguiendo? — preguntó Adaman.

— ¡Cierra la boca! Nos hemos hecho amigos de una chica millonaria, es por eso que estamos aquí, y tenemos pruebas — dijo uno de ellos.

— Tenemos cuentas pendientes contigo amigo, puedes decidir esperar a la salida o crear un desastre en medio del restaurante, cual sea la opción que elijas no vas a salir muy bien — dijo uno, muy enojado.

— Vale vale, dejarme pensar un poco tampoco hay porque ponerse tenso — se levantó con una sonrisa.

— ~¿Adaman que vas a hacer?~ — susurró Iono, preocupada.

— ~No te preocupes, ya les di una paliza a estos anteriormente, esta será la segunda~ — confiado.

— ~Pero...~

— Déjame a mi, ya me encargo yo — dijo Celebi, ya harto de ellos.

— "Nop, tú no tienes nada que hacer más que observar Celebi" — lo detuvo Adaman — "Ya me ocupo yo de ellos"

— ... Espero no arrepentirme de no ayudarte... — dijo el Pokémon singular.

El jerarca corrió la silla y se levantó para estar a la altura de los dos hombres abusivos, lo cierto es que no se podía ver nada de miedo en su mirada. Eso estremeció a los dos hombres.

— Y de paso nos darás a esa chica linda con la que tanto coqueteas, ¿te parece? — refiriéndose a Iono, con una mirada muy asquerosa.

Por acto reflejo al oír eso, la pobre streamer se aterrorizó al pensar lo que esas personas podrían llegar a hacerle, por lo que se tapó con sus brazos el busto de su cuerpo.

— Eh — dijo Adaman, ahora con una voz grave — A mí hacerme lo que queráis, pero a ella no le vais a poder tocar ni un pelo, y eso os lo puedo jurar.

— Arceus mío como hemos llegado a esto... — susurró Celebi, haciendo un facepalm.

— ¡Como siempre vas de creído, te vas a enterar imbecil! — uno de esos hombres cerró un puño.

Pero antes de que el rostro de Adaman recibiera el puñetazo y se realice una pelea en el restaurante, algo ocasionó una quemadura en la mano del hombre abusivo, fue un rayo eléctrico.

— ¡Ah! Pero que?! — quejándose del dolor.

La verdad era que Adaman no hizo nada, lo que ejecutó el movimiento fue un Emolga enojado que les estaba gruñendo, efectivamente, era el de Iono.

Está última se había levantando para ponerse al lado de Adaman, la forma en la que los miraba los intimidaba, allí los tres hombres que se hallaban en medio de la escena entendieron que si, desde luego, nunca hay que hacer enojar a una mujer.

— Lo diré una sola vez — dijo Iono — Como no os vayáis de aquí y me arruinéis la mejor cita de mi vida sois hombres muertos, ¿me habéis oído?

Ante la gran amenaza, los dos hombres se hicieron pequeños, la forma en la que la líder de gimnasio lo dijo los obligó a retroceder, perdonarse y salir corriendo una segunda vez. Por lo menos, el restaurante no sufrió un combate adentro.

— Interesante, con que mi streamer favorita tiene carácter para lidiar con unos pervertidos como ellos — dijo Adaman, sonriendo.

— C-cállate... lo último que querría sería verte pelear en esta cita, no quería que te hiciesen daño...

— Ya, pero tú eres mi prioridad, mi objetivo no era derrotarlos era protegerte a ti — explicó.

— Lo sé... — sonrojada y cabizbaja.

— Adaman — dijo Celebi.

— "Que"

— Será mejor que nos vayamos de aquí, todos nos miran raro, dejemos la propina y marchémonos — dijo el Pokémon singular.

— ... "Esta bien" — cerró los ojos.

Iono sintió un estirón en su mano derecha, el jerarca la agarró para llevársela consigo cuando esta ya guardo a su Emolga.

— ¿Adaman que haces??

— Nos vamos.

— ¿P-pero y la cuenta? No hemos paga-

La entrenadora se interrumpió a sí misma viendo como en la mesa se hallaban los Pokedolares de Adaman. Sé sorprendió por la rapidez en la que este lo hizo todo.

— Por supuesto que ya he pagado Iono, hay que ser cultos en esta vida y época — dijo Adaman, llevándosela.

— O-ok..

...

Cuando salieron del restaurante, los dos se pararon cerca de la entrada.

— La comida más divertida que he tenido — razonó Adaman, sonriendo.

— ¿Pero qué dices? — dijo Iono — ¿Estaban a punto de golpearte tú le llamas a eso divertido?

— Mh... ¿si no? Me encanta que esta cita sea tan movida — dijo, inocente.

— ... *suspira* Cuando podré entenderte Adaman...

La streamer se voltea, dándole la espalda a Adaman para mirar perdidamente al cielo, el jerarca seguía sin entender cómo era que no le veía la gracia a lo que sucedió hace pocos minutos, pero viéndola de espaldas no podía desaprovechar la oportunidad, por lo que se acercó a ella.

Sin su permiso, el jerarca de pelo azulado y verde abrazo a Iono por detrás, sentir los brazos de este rozando su piel hizo que la chica se pusiera totalmente roja.

— ¿Adaman?

— Hacía tiempo que quería abrazarte por detrás, pero viéndote en los problemas en los que estabas metida no me atrevía.

— ... ~A mí no me importaría que me abrazases en cualquier momento...~ — susurró.

— ¿Dijiste algo?

— N-no — nerviosa — No dije nada.

— Te escuché, pero quería comprobar si tenías el valor a decirlo.

— ¿¿En serio?? — sorprendida y ruborizada.

— En fin, son las 17:30, nuestra cita todavía no ha terminado, ¿qué quieres hacer? — preguntó Adaman, con una mano en el bolsillo.

— ¿No te acuerdas? Al cine, quiero ir al cine!! — activa.

— Como tú quieras.

Ambos entrenadores, sonriéndose el uno al otro, se agarraron de la mano y empezaron a caminar en dirección al cine del pueblo.

.
.
.

Fin del cap.

La historia continúa...