Capítulo 61

Quinto general de Volo: Vs. N [Ronda 1]

[Región de Unova, Ciudad Castelia]

{En el futuro}

Narrador Neutral:

Seguimos por donde lo dejamos, y no nos vamos a perder la reacción que tuvieron Celebi y Adaman al ver como un lanzallamas destroza por completo el suelo de una zona alejada del edificio donde se encuentran sus amigos.

Eso creó un miedo profundo en los cinco entrenadores que estaban corriendo en dirección contraria a la gente que intentaba evacuar la ciudad. Esta vez, los generales eran muy poderosos, tanto que fácilmente podrían desintegrar la ciudad entera en un segundo.

— Adaman... — dijo Celebi, impactado.

Lo que interrumpió a Celebi fue ver la ira, la más grande que había visto en su vida marcada en el rostro del jerarca, eso ya le sucedió con Carola, estaba tan enojado que varias venas rojas se podían apreciar en sus ojos, eso fue lo que le sucedió.

Todo lo relacionado con Volo haría explotar a Adaman. Y como se diera cuenta de que ya murió un ser querido no tendría piedad con nadie.

— Son muy fuertes esta vez Adaman... — dijo Celebi — ¿Crees que será la mejor opción acercarse al peligro sin saber el riesgo?

Irida escuchaba la conversación de Adaman y este, sabiendo que ella también lo podía escuchar, no le importó y siguió corriendo hacia delante.

— "Haremos lo que yo diga" — consumido por la ira.

— Pero...  — dijo Irida.

— "No permitiré que más gente muera por mi culpa, si soy yo a quien tengan que matar, pues que vengan a mi, si quieren cumplir con el objetivo de Volo, QUE VENGAN A MI!"

En la décima de un segundo, un temblor detiene a todos los entrenadores, todos menos Adaman siguieron corriendo, pero al ver como el jerarca y Celebi no se movían dejaron de moverse, confundidos.

— ¿¡Adaman que sucede?! — preguntó Gloria.

La tensión se podía cortar con un cuchillo.

Adaman, paralizado igual que su compañero singular, alcanzó a decir con una mirada muy tensa apuntando al suelo unas pocas palabras:

— No mováis... ni un músculo — advirtió.

Sabiendo que si se movían podía pasar algo malo, le hicieron caso y se quedaron en las posiciones en las que estaban, había una presencia muy cerca que los podía matar al notar mínimo movimiento. Y el jerarca lo sabía.

En un pestañeo, todos se asustaron en su interior al ver como la cabeza de un dragón colosal de color blanco estaba cerca del hombro de Adaman, viéndolo muy de cerca. Era Reshiram, que de forma muy veloz llegó hasta ellos por detrás.

Sabiendo que si se movía podía morir, Adaman siguió quieto, esforzándose por mantenerse en su lugar, sin girar la mirada o voltear la cabeza. Sabiendo que un Pokémon legendario se encontraba detrás suyo.

— Es un gusto por fin conocer al mayor enemigo de nuestro señor, un viajero del tiempo en carne y hueso, igual que nosotros —.

Hablo Ghetsis, que estaba detrás de Reshiram, sonriendo sabiendo que ya no tenían escapatoria, aprovecho que Adaman no podía hacer para hablar tranquilamente con él, sin importarle lo que oyeran los demás.

— ¿No vas a dejar ni verte el rostro, cobarde? — dijo Adaman, enojado pero paralizado.

— Dicen que lo más cruel de un asesinato es que una víctima nunca pueda conocer el rostro de quien la mató — dijo Ghetsis —.

— ¿Cuantos sois? — refiriéndose a los generales

— Dos, ya te es suficiente con eso, ¿no? — sonriendo.

— ¿Qué hacéis aquí? Acaso no es suficiente con robarme la flauta Azur? — preguntó el jerarca — ¿Acaso no es suficiente con haber matado a tantas personas?!

— Para empezar, la flauta azur nunca fue tuya, es un objeto sagrado por el cual miles de almas luchan por obtener, y segundo, ¿porque finges que no sabes la verdad? Tu, esa jerarca y ese Pokémon singular que te acompaña — señalando a Celebi — y yo sabemos porque hemos venido a matarte.

— "Me puede ver..." — le dijo Celebi a Adaman.

— "Lo sé, Carola y Maxie también pudieron verte" —.

— Según la leyenda, una persona necesita una gran responsabilidad y un gran orgullo para invocar a Arceus con esa flauta, apuesto a que Volo todavía no ha consigo ese orgullo, ¿me equivoco? — dijo Irida.

— No eres tonta, jerarca del antiguo Clan Perla, y que me iba esperar, tú estuviste en el incidente de aquel templo — dijo Ghetsis.

— No le hables — dijo Adaman, enojado — Si tienes que matarme pues entonces no tienes razón para hablarle a los demás, ten dignidad y solo dirígete a tu víctima —.

— *se ríe* Tienes razón tienes razón... Nuestro objetivo es matarte a ti, pero eso no significa que no podamos matar a los demás, ¡te haremos perder la cabeza matando a todos tus seres queridos!

Silencio...

— Lo de Carola fue un accidente, pero esta vez, os prometo que no le perdonaré la vida a nadie si me doy cuenta de que habéis asesinado a uno de mis amigos, esta vez, os mataré, lo prometo — dijo Adaman, de espaldas y con una gran determinación.

— ... Ya veo...

De nuevo, la brisa y el ruido de los relámpagos ocupan el silencio que volvió a aparecer.

— Pues inténtalo, ¡Jerarca!— con una sonrisa diabólica.

— ¡Gh!

Adaman estaba a punto de girarse muy rápidamente para encarar a Reshiram, pero su intento de acción fue interrumpido por el ruido de una explosión de humo en el edificio del restaurante, grande fue su susto al ver que otro dragón de color negro se acercaba de forma agresiva desde el cielo hacia ellos luego de impulsarse del edificio.

Encima de Zekrom, estaba N, dispuesto a matar ahí mismo a Adaman, con un rostro asesino. Dispuesto a empezar la batalla con mucha emoción.

— ¡¡¡Y que con esto empiece la fiesta!!! ¡Rayo Fusión! — ordenó N.

Zekrom estuvo dispuesto a desintegrar al jerarca con un placaje eléctrico contra el suelo con el fin de aplastarlo, pero Celebi tuvo reflejos, previno el movimiento y usó Psíquico para apartar a todos los entrenadores además de hacer retroceder a Reshiram. De esa manera esquivando el ataque meteórico.

Los amigos del jerarca fueron expulsados a mucha distancia gracias a la onda psíquica de Celebi, pero este último y Adaman no tanto.

Luego de ser apartado de la explosión eléctrica, Adaman se levantó del suelo, con algunos rasguños. Ahí pudo ver con claridad el rostro de Ghetsis, mientras que el otro general seguía oculto en las nubes de polvo luego de bajarse de su Pokémon legendario.

Ghetsis solo sonrió al ver su cara de odio, hasta él podía sentir toda la ira que había dentro del jerarca.

— ¡Vaya vaya vaya...! Me hierve la sangre ante tal momento, ¡de verdad! Ninguno de vosotros sabe cuanto he esperado este momento!

El polvo se disipó y de ahí apareció en todo su esplendor el quinto general de Volo, ahí fue la primera vez donde la mirada del jerarca con la del peliverde se cruzaron.

— "¡Otro general!" — dijo Celebi.

— *enojado, manteniendo la mirada*

— ¿¡Cómo has estado Adaman?! Me conoces?! Soy N! Líder del equipo plasma y quinto general de Volo, no sabes cuánto te he estado admirando y cuánto he ansiado probar el sabor de tu sangre, es mi sueño!! — dijo, con una gran sonrisa.

— ¿Mi sangre, quien te crees? — serio.

— Ghetsis, intercambiemos legendarios, ¿qué te parece? — dijo, ignorando a Adaman.

— ¿Estás seguro?

— ¡Por supuesto! Cuanta más diversión mejor!! — dijo.

— *suspira* De acuerdo, pues tú te quedas con Reshiram y yo con Zekrom — rascándose la cabeza.

— ¡JA JA! Esto va a ser emocionante, se me escapan las lágrimas de la emoción por combatir en un duelo a muerte contigo Adaman! — con una voz maligna.

Incluso Irida y Celebi pudieron sentir la sed de sangre presa de la locura que tenía N, una que no habían apreciado en ningún general, eso indicaba que era muy poderoso, que estaba dispuesto a matar al jerarca, aquí y ahora con sus propios esfuerzos.

— ¡Venga Adaman! Libremos un combate a muerte! A MUERTE! — gritó, sonriendo.

— ... "Su sed de sangre es increíble... me da la sensación de que habrá matado a más de cien personas inocentes para llegar hasta mi..." — pensó Adaman, intimidado por su actitud.

— Adaman — dijo Celebi.

— ?

— Vamos a ganar, créeme, los mataremos y nos haremos está vez con la victoria — con determinación.

— ...

— ¡Tu sigue hablando cebolla! — dijo N, con una sonrisa muy grande — ¡No hay forma de que podías derrotarnos, no la hay!

— Tienes razón Celebi — dijo, furioso— Está vez, ganaremos, ¡¡¡cueste lo que cueste!!!

— Ja ja ja! Que placer me da esa actitud, venga jerarca, libremos un combate de los que marquen época!!!

— Adaman, yo ayuda- — Irida fue interrumpida.

— ¡No, Irida, vosotros iros a salvar a los demás en el edificio central, yo combatiré a ese general! — dijo Adaman, dispuesto a cumplir con su cometido — Yo solo.

— N, yo mataré a esos entrenadores, junto a los del edificio, tú encárgate de matarlo, tú mismo lo has desafiado — dijo.

— ¡Entendido! Vete ya — dijo, mirando fijamente al jerarca.

Y así los amigos de Adaman junto a Zekrom y Ghetsis desaparecieron de esa zona, dejando a los dos entrenadores en un duelo de miradas mientras ese silencio que siempre reinaba antes del comienzo de un combate irradiaba.

— "Celebi, no sé porque, pero algo me dice que...

— Son legendarios del Trío Tao, pertenecientes a la misma leyenda que Marnie nos contó — explicó — Son muy poderosos, debemos tener cuidado si queremos sobrevivir.

— Lo suponía, mierda... "Este será un combate complicado..." — pensó Adaman.

— * N sonríe*

...

Que empiece un combate a muerte.

— ¡No perdamos más tiempo Adaman! Reshiram usa Colmillo Ígneo!! — con emoción, montándose encima del dragón blanco.

Reshiram incendió sus colmillos en fuego ardiente y se impuso a una velocidad incalculable en dirección al jerarca, con el fin de matarlo de un solo mordisco, como bien dijeron ese iba a ser un combate a muerte, por lo que el objetivo por encima de todo de cada combatiente sería matar a su contrincante. A eso se le llama un Combate Pokémon a Muerte.

Adaman le ordenó a Celebi mentalmente hacerlo levitar y desplazarlo hasta la cima de un edificio, esquivando el mordisco de Reshiram.

— ¿Mh? Y qué con qué ibais a ganar si o si? — preguntó N, burlón — ¿¡Ahora vais a huir de mi?!

— Te equivocas, asesino, yo también voy a muerte, pero debe procurar ganar el mayor tiempo posible para que los demás se alejen de nosotros — explicó Adaman, molesto y observándolo desde la altura.

— ¡Jaja, no hay de que preocuparse viajero del tiempo, a mí no me importan los demás, si he llegado hasta aquí es solo para arrancarte la cabeza! Adelante Klinklang, usa Foco Resplandor!

De la Pokeball que rápidamente N lanzó salió el Pokémon tuerca de tipo Acero, y sin perder tiempo disparó un láser de energía hacia donde se hallaba el jerarca.

— ¡Celebi Pantalla de Luz! — ordena Adaman.

— ¡Entendido!

Celebi creó una barrera mágica con sus poderes psíquicos para detener el ataque especial del Pokémon de N. Acto seguido el jerarca sacó dos de sus Pokeballs con el fin de ganar ventaja de número, cosa que no iba a ser posible.

— ¡Ferropuas, Ogerpon, adelante!

Los dos Pokémon en posesión de Adaman salieron de sus Pokeballs, Ferropuas enfrente de Reshiram y Ogerpon a la altura de Klinklang, que levitaba en el aire.

— ¡Interesante! ¡Será mejor igualarme a tu altura! — dijo N.

Reshiram batió sus alas para llevar a N hasta un edificio en frente del jerarca, estando a la misma a la altura y ganando más visión de la zona. El peliverde lanzó otra Pokeball al aire para dar pelea al Ferropuas que se encontraba abajo.

De ahí salió su Carracosta, que al ser del mismo tamaño que el Pokémon paradoja podría darle mucha pelea. Ellos empezaron a pelear cuerpo a cuerpo con el fin de combatir sin recibir órdenes de los entrenadores.

— ¡Klinklang, Rueda Doble!

Mientras que el combate en la altura se disputaba.

— Celebi, crea plataformas con Reflejo y Ogerpon devuelve las tuercas con Contraataque!

Celebi creó varias plataformas mágicas para que Ogerpon se pudiera mantener de pie en el aire mientras que este último sacó su garrote para devolver de dos batazos las tuercas que Klinklang le había lanzado.

— ¡Esquivalo, y Reshiram, Llama Fusión!

El Pokémon tuerca cambió de posición con Reshiram a la vez que esquivo las tuercas y el Pokémon legendario por su boca una esfera enorme de fuego. Era su movimiento característico, o mejor dicho, único.

Celebi no pudo proteger a Ogerpon y este recibió el ataque especial súpereficaz, retrocediendo hasta quedarse donde estaba Adaman, muy dañado.

— "¡Mierda!" — pensó Adaman — "Se me olvidó de que aquí hay gente escondida en los edificios para que ese asesino no las vea, tengo que protegerlos, ¡no puedo perder!" Celebi usa Fitoimpulso!

Cubriendo a Ogerpon, Celebi activó su movimiento y se acercó con mucha velocidad a Klinklang, pero Reshiram se interpuso en medio y recibió el ataque tipo planta por él, cosa que ni sé inmutó del daño.

— "Es inteligente, usa a Reshiram como escudo para recibir mis ataques de tipo planta, al ser tipo Fuego y Dragón, es muy resistente a dicho tipo" — pensó Adaman, frustrado — Tengo que sacar a Ferropaladin...!"

— ¡Lanzallamas y Foco Resplandor! — sonriendo.

Los dos Pokémon del general expulsaron sus respectivos ataques especiales para intentaré dañar a Celebi, este con su buena velocidad esquivaba los láseres y se protegía con pantalla de luz, todos los edificios empezaron a dañarse debido a tantos movimientos que se estaban empleando.

— ¡Pulso Dragón! — ordenó N.

— ¡Adelante!— lanzó una Ultra Ball.

De ella salió Ferropaladin y este, encima de una plataforma mágica creada por el Pokémon singular recibió el ataque tipo dragón sin recibir daño alguno.

— ¡Ja, es de admiración, los ataques tipo dragón no afectan al tipo Hada! — analizó N — Que inteligente eres Adaman!

— "No lo escuches, no lo escuches, céntrate en ganar, céntrate en conseguir la ventaja" — pensaba Adaman — ¡Ferropaladin usa Onda Vacío!

— ¡Foco Resplandor!

Klinklang y el Pokémon paradoja lanzaron sus respectivos movimientos especiales y estos colisionaron creando una explosión enorme.

— ¡Garrote Liana/Colmillo Ígneo! — ordenaron los dos a la vez.

Ogerpon y Reshiram se adentraron en el humo de la explosión para empezar a golpearse físicamente con sus movimientos, lamentablemente el dragón esquivó uno de los garrotazos de Ogerpon y su lanzallamas en él, estrellándolo contra la pared de un edificio.

— ¡Ogerpon!

— ¡Llama Fusión!

Reshiram acabo de rematar al ogro con una esfera llena de energía ígnea, creando una explosión tal que hizo temblar toda la zona, Ogerpon quedó fuera de combate al recibir nada más ni nada menos que tres ataques supereficazes.

— *impactado*

— ¡Adaman cuidado! — advirtió Celebi.

El jerarca reaccionó al ver a Klinklang acercándose a pocos metros de él, con el fin de matarlo, pero Ferropaladin se puso en medio y bloqueó al Pokémon tuerca con su lanza, creando un choque que haría retroceder a ambos Pokémon.

Klinklang siguió levitando en el aire, pero Ferropaladin no, clavó su lanza en una pared para intentar mantenerse a la altura y no caerse, pero fue inútil y se cayó hasta donde estaban Carracosta y Ferropuas peleando. Allá abajo eran dos contra uno. Y arriba, dos contra uno también.

— "¡Celebi! Ten cuidado" — dijo Adaman.

— Si... lo sé...

— *N sonríe*

Celebi contra Reshiram y Klinklang.

Y Carracosta contra Ferropaladin y Ferropuas.

La primera ronda acabó de esa manera, con dos combates, uno a la altura de los edificios y otro en la carretera, y según iba todo las cosas se estaban complicando, Adaman debía cambiar de estrategia para poder salvar a todas las personas que se encontraban escondidas en los edificios. Para evitar que N mate más gente, para evitar la destrucción de Ciudad Castelia.

Lo último que vemos es el contacto visual que tienen los dos entrenadores, N y Adaman, mirándose de una manera distinta el uno del otro, N con superioridad y malignidad, mientras que Adaman con odio e ira.

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Fin del cap.

Equipo Normal:

Legendarios:

El combate continúa...