— Mierda.

Seoyun fue la primera en dar un golpe el rostro del hombre, haciendo que este callera al suelo y se quejara. Jimin dio una patada en su entrepierna y al igual que un golpe en su mejilla dejándolo inconsciente.

— Nunca pensé que esas clases de karate me servirían de algo. — Dijo Jimin.

— Vamos. — Jimin empujó la puerta dejándolos entrar al club, había un montón de gente bailando en medio de la pista. — ¡Allá!

Jimin vio a lo lejos a Nancy y a Eunji sentadas en una mesa rodeadas de hombre que no se veían para nada amigables.

— ¿Seoyun? — Nancy pudo ver el rosotro de Soeyun en la gente pero luego desapareció.

— ¿Esa no es tú ex? Vamos a otro lugar para que te olvides de ella. — Nancy la miró con terror y negó.

— Ya es tarde, tengo que irme...

— Linda, aún no vamos a la mejor parte. — Miró a los hombres que estaban enfrente de ellas y sonrió. — Chicos, encierrenla.

— ¿Qué? ¡No! ¡Seoyun!

— ¡Nancy! — Los tres llegaron donde estaban esos hombres y Eunji. — Jungkook, ve a buscarla.

Jimin se escabulló en la piernas de uno pegándole en su entrepierna, de apoco cada uno caía al suelo inconscientes.

— ¡Cuidado! — Seoyun pudo esquivar aquel cuchillo que iba directo a su abdomen.

Tomo su brazo y le hizo una llave, Eunji soltó un quejido.

— Eres bastante astuta, Seoyun, pero tú noviecita es bastante idiota para caer ante cualquiera. — Seoyun subió más su brazo.

— No la encuentro. — Jungkook llegó donde estaban algo desesperado, su hermana no estaba por ningún lado.

— ¿Donde está? — La chica rió. — ¡¿Donde está maldita sea?!

— No lo sé, ellos lo sabían, yo solo di la orden. Lamento no poder ayudarlos, chicos. — Hizo un puchero.

Unos sollozos se escucharon de repente, Jungkook se puso alerta y siguió el sonido llevándolo a una bodega.

— ¿Nancy?

— ¿Jungkook? ¡Jungkook, aquí! — El castaño abrió la puerta de la bodega y vio a su hermana.

Al instante corrió a sus brazos, Jungkook acarició su cabello y la llevo hasta arriba.

— ¡La tengo! — Jimin ayudó a llevarla al auto dejando a Seoyun con Eunji.

— ¿Me puedes soltar? Ya la tienen. — Soeyun la soltó y se cruzó de brazos.

— ¿Por qué la engañaste? ¿Por qué la trajiste hasta aquí?

— Da igual, mi plan no funcionó.

Seoyun no quiso seguir discutiendo y salio de aquel club con una sonrisa victoriosa.

Dios, que asco esta narración

Pido perdón, definitivamente esto no es lo mío:/

Solo tendrá 30 capítulos, ya queda poquito ♡