
EPISODE TWENTY-NINE
El lado positivo de pasar desapercibida, era que podía llevar a cabo ese tipo de acciones riesgosas sin correr ninguna clase de peligro. Tal vez fuera por sus zapatillas o lo suavemente que tendía a apoyar los pies, pero en general no hacía ruido.
Los pasillos estaban tenuemente iluminados, con unas luces más amarillentas según se acercaba a la zona donde juraba haber visto más de una vez a los militares adentrarse. Estaba arriesgando su culo, pero prefería eso antes que enviar a alguien y que después la información que la dieran tuviera lagunas.
- ¡TÚ NO SABES NADA! - bingo. Se detuvo, apoyándose en la pared y cerrando los ojos para así centrarse más en los sonidos. Si se acercaban a su posición o era descubierta, la puerta de las escaleras estaba frente a ella y podría correr tan rápido como fuera posible.
- Si Michiko te viera ahora, te odiaría - esa voz ronca y fría no podía pertenecer a nadie más que a aquel misterioso hombre tatuado.
- No hables de ella, Takatora - advirtió Niragi, moviéndose de un lado a otro con pasos furiosos-. ¡JODER! - escuchó un fuerte golpe. Tal vez había golpeado algo.
- Eres un desgraciado - sonrió apenas cuando escuchó eso-. Michiko...
- ¡DEJA DE HABLAR DE ELLA! - su voz se rompió por un momento-. ¡La perdí, joder, la perdí delante de mis narices y no pude hacer nada! - jadeó-. Idiota Tsunemori, ¡preferiría haber muerto yo mil veces antes que ella! Takatora... Ella... Ella era todo lo que tenía...
- Yo también estaba ahí - espetó-. Yo también la perdí, y no voy violando a mujeres que se parecen un poco a ella.
Niragi soltó una risa aguda, maniaca, de loco. Un escalofrío la recorrió por completo la columna, sintiendo que el lazo aparentemente inexistente entre ambos militares era más profundo de lo que parecía.
- No me hagas reír, Last Boss - pronunció su apodo con desdén-. ¿Tú la perdiste? Solo te llegó a mostrar algo de simpatía como tatuadora porque sentía pena de tu vida de mierda.
- ¿Igual que contigo? - Minhee se tapó la boca ante eso-. Sigues siendo el mismo cobarde que en el instituto.
- No sabes nada - siseó el moreno.
- ¿Ah, no? - hubo pasos-. Persigues a cualquier mujer de pelo negro y ojos claros, a las altas las das caza como un animal y estás obsesionado con la extranjera porque su voz es similar a la de Mich. Eres un desgraciado que debió morir en su lugar.
- ¿Crees que no lo sé? - escupió con dolor-. Estábamos a punto de casarnos, joder, tú solo eras su compañero.
- ¿Compañero? - repitió. Minhee se escondió un poco más cuando los pasos se acercaron-. Puto enfermo.
- No te metas en mis asuntos, Last Boss - dijo con un tono de amenaza-. Lo único que nos unía era Michiko, pero ya no más.
- Púdrete en el infierno.
Cuando los pasos se acercaron, ella se esfumó con rapidez por la oscuridad de las escaleras.
EPISODE TWENTY-NINE
DEATH TO THE TRAITORS
Aquella fue la primera noche que Minhee se sintió extremadamente inquieta. No estaba segura si era la mezcla de nervios, miedo y satisfacción personal, pero mantuvo su mirada en la puerta atenta al mínimo sonido del pasillo. Temía de cierta manera que Niragi apareciera ahí para matarla o hacerla cualquier cosa, aunque eso solo la hizo pensar.
Pensó. Dio tantas vueltas que acabó hartandose de su propia voz interna. Creó tantos planes, calculó tantas posibilidades e ideó tantas ideas que acabó en cierto punto perdiendo el hilo de sus pensamientos bajo una angustiosa nube de ansiedad.
No estaba segura de la hora que era, pero incluso la fiesta estaba ya acabando y las risas eufóricas se escuchaban cada vez más bajas. No tenía sueño, o al parecer era su cabeza forzandola a mantenerse despierta mientras escribía palabras en la pizarra para así asentar todas sus ideas y absorber del todo la información adquirida. Necesitaba memorizar cada detalle, analizar todo más a fondo aún y actuar en función a ello. Si un detalle se deslizaba de su mente, todo podría derrumbarse frente a sus ojos en apenas segundos.
Mientras escribía los nombres (Takatora, Niragi, Michiko, Sombrerero, Chishiya, Kuina, Arisu, Usagi), uno más se deslizó inconscientemente. Mira.
Se detuvo de golpe, mirando fijamente aquella interpretación en Hangul* de su nombre. En ocasiones su mente recordaba cosas aleatorias que en algún momento tomó importancia, y acababa recordándolas de golpe de esta manera. Recordó la conversación de los ejecutivos, burlándose de Arisu. Recordó las teorías sobre los juegos. Recordó la Junta como si estuviera volviendo a ver una serie.
Estaba completamente segura de que el 10❤️ tan sólo sería la llave que desbloquearía el resto de cartas, pero si de verdad este mundo estaba siendo dirigido constantemente y los juegos no surgían por azar, ¿cuáles eran las condiciones que Ann buscaba para que este apareciera? Si saliera así como así, el teatro que se estaba interpretando con ellos como protagonistas no tendría ninguna clase de sentido. Debía darse algún caso especial, algo que...
Tiró el bolígrafo de sus manos, y el aire dejó su cuerpo por unos segundos. Tan pronto como toda su cabeza se unió para plantear la única posibilidad posible su cuerpo comenzó a temblar.
- Será en la Playa...
No quedaba otra. ¿Dónde más? Era obvio que ellos debían saber ya que estaban recolectando las cartas, y si de verdad los corazones implicaban numerosas muertes, caos y una dificultad especial, no había mejor lugar que finalizar todo que con el enorme grupo de supervivientes que estaba dejando sudor y sangre en aquella búsqueda. Ella misma elegiría la Playa como el destino final, ya fuera por morbo, crueldad o estrategia.
¿Significaba eso que había cámaras que observaban todos los lugares? ¿Estaba siendo ella observada en ese momento, mientras desentrañaba las más remotas posibilidades de aquel apocalíptico lugar? Tenía cuatro días de visado, la siguiente noche el Sombrerero moriría y el golpe militar se haría a la mañana siguiente. La quedaría entonces un día de visado. ¿Podría coincidir con su plazo? ¿Tendría que esperar con los nervios de punta a que todo estallara?
No. Ella se largaría de ahí nada más el golpe militar se llevara a cabo. Antes de que llegara la noche, Chishiya ya habría robado las cartas y podrían dirigirse a otro juego para sobrevivir unos días más hasta que el 10❤️ fuera resuelto. Debía ocurrir rápido, ya que las noches hasta que el 10❤️ se presentara estaban contadas, y no podía irse sin las cartas.
Las cartas. Todas.
Ahogó un grito de rabia. Definitivamente no podía irse sin ese 10❤️, pero tampoco sería tan estúpida como para quedarse. Si Kuina, o tal vez Chishiya se quedaran... No. Mira dijo...
Mira. Mira Kanao. Mira, la ejecutiva de corazones. Mira, la que sabía cosas de Arisu que ni si quiera ella conocía. Mira, quien se jactó del juego.
Borró toda la pizarra con las manos temblando y las lágrimas acumuladas en sus ojos, comenzando a escribir de nuevo.
10❤️ en la Playa
Alguien nos observa (desde dentro????)
Mira
Alargó la última sílaba, arrastrando levemente el rotulador al haberse quedado en blanco por un momento, abrumada por todo lo que estaba ocurriendo. El ruido se había detenido finalmente, y estaba segura que pronto amanecería. Sentía ganas de llorar, su cabeza la enviaba fuertes punzadas y su pecho se apretó por la ansiedad que buscaba tragarse hasta llegar a la solución del problema.
Tal vez lo de Mira fue tan solo una suposición. Tal vez estaba perdiendo la cabeza y cualquier cosa la hacía estallar en sospechas infundadas. Tal vez estaba equivocada y ni si quiera el 10❤️ sería en la Playa o hubiera figuras. Tal vez...
- Minhee - un grito se la escapó inconscientemente, sin saber en qué momento se había quedado dormida. Chishiya estaba frente a ella con un gesto de preocupación, apartando los mechones castaños de su frente empapada en sudor-. Hey, ¿qué ocurre?
Pestañeó confundida, pasándose las manos por la cara tratando de ubicarse de nuevo. La pizarra estaba tirada en el suelo, y estaba completamente sudada y con el pulso acelerado. Al principio tan solo podía observar al rubio con confusión, hasta que lo recordó todo.
- Y-Yo... - su voz tembló un poco, teniendo que carraspear para poder quitar ese nudo tan incómodo-. Creo que estoy perdiendo la cabeza.
Chishiya se agachó a su altura, quedando de cuclillas frente al borde de la cama donde se trataba de serenar.
- Minhee - llamó. No le miró, dándose una palmada en las mejillas para volver a enfocarse y no perderse de nuevo en estúpidas hipótesis-. Ahn Minhee - repitió con algo de exigencia. Finalmente, sujetó sus manos sobre las suyas, guiando a su vez su mentón para mirarle-. ¿Qué ocurre?
- Tenemos tres días - quitó sus manos de su rostro, sujetandolas con algo de fuerza-. Hoy el Sombrerero morirá, mañana será el golpe militar y pasado todo podrá irse a la mierda - enumeró. Chishiya asintió despacio, tratando de entenderla-. Nos observan, Chishiya. Ellos están aquí.
- ¿Quiénes? -sostuvo con una sola mano sus manos temblorosas, mientras con la otra apartaba los mechones sueltos que impedían que pudiera verla a los ojos-. Minhee, me estás preocupando - musitó, tirando levemente de sus manos al ponerse en pie-. Vamos al baño.
- ¿Al baño? - repitió, aunque de golpe recordó que ya era por la mañana y había sudado. Estaba jodidamente sucia. Se soltó de inmediato, y corrió hacia el baño cerrando con un portazo-. ¡Escribí todo anoche en mi cuaderno!
Apenas segundos después, el agua de la ducha comenzó a correr. Tomó el inseparable cuaderno lleno de cosas aleatorias que Minhee apuntaba (fórmulas, palabras nuevas que aprendía o solo el recuento de su boba competición), aunque cuando le abrió por la última página solo pudo reír.
- ¡Minhee, no sé coreano!
- ¡Pues estudia!
Se dejó caer en el mullido colchón de la coreana, dejando a un lado el cuaderno. Ni aunque se esforzara podría lograr leer aquello, aunque deseó más que nunca saber el idioma natal de la chica para poder entender por qué estaba tan alterada.
░░░░░░
Chishiya aún no sabía cómo, pero en el pequeño rato en el que la dejó sola (más bien, ella se escabulló dejándole solo a él), había conseguido información sobre lo que estaba haciendo Arisu por ahí. Al parecer estaba buscando información como Minhee y Chishiya ya creían, y el momento de incluirle a él y a su amiga escaladora estaba ya frente a ellos.
Minhee se sobresaltó con los tiros, aunque aparentó tan bien que si no hubiera estado sujetando su mano jamás se habría dado cuenta. Realmente sabía fingir extremadamente bien, como una profesional.
Arisu se alejó espantado y asqueado del contenedor cargado de cadáveres, y ese fue el momento estrella de Chishiya. Avanzaron en silencio, aunque ella quedó más atrás para evitar acercarse demasiado a ese generador masivo de enfermedades.
- Esta es la verdadera esencia de la utopía - dijo, llamando su atención de inmediato. A pesar de haber sido Chishiya el que había hablado, su mirada se posó en ella inmediatamente después-. Es una de las reglas de la Playa - hizo una pausa, sonriendo de lado-. Muerte a los traidores.
Arisu quedó perplejo, sin saber exactamente a quién mirar de los tres. Kuina masticando un palito de helado, Chishiya con esa sonrisa de burla y ella con su mirada afilada analizando hasta sus átomos.
- Suenenos, Arisu - indicó ella, con un tono lo suficientemente alto como para que la escuchara perfectamente.
- Se dice "síguenos" - corrigió bajito Chishiya, mientras subían escaleras hacia la azotea con el cagado de Arisu tras ellos y Kuina comprobando que nadie les seguía.
- ¿Y me lo dices ahora? - reclamó en el mismo tono.
- Me dijiste que dejara de corregirte.
- ¡Pero hazlo para no quedar como idiota!
- Perdona, perdona - alzó las manos-. Acabas de pronunciar mal...
Minhee le dio un fuerte tirón de pelo, empujando la puerta de la azotea para entrar dejándole detrás. Kuina ahogó una carcajada, mientras Arisu seguía mirándolos con desconfianza.
Minhee se cruzó de brazos, frunciendo el ceño molesta por la luz que impactaba directamente sobre sus ojos ámbar. No la gustaba demasiado salir al campo, y no disfrutaba especialmente de actividades exteriores en general. Odiaba el verano, pero amaba el invierno. En invierno, tan sólo debía cerrarse en su habitación con sus libros y mantas para estar tranquila.
- Arisu - Chishiya metió las manos en los bolsillos, colocándose a su lado-. Usagi y tú habéis conseguido mucha información. ¿Qué tramáis?
El moreno les miró con duda.
- No mucho - negó.
Hubo un silencio tenso. Minhee se cruzó de brazos con impaciencia.
- Ve al grano, Chishiya - murmuró. El rubio la miró de reojo.
- ¿Cómo viviréis en este mundo desesperado, Arisu? - preguntó. Arisu se vio aún más confundido.
- ¿Cómo? - repitió. Minhee asintió-. Sólo quiero saber quién está detrás de esta locura, y quien fue el que mató a mis amigos. Creí que sería capaz de sobrevivir y volver al mundo real con todos, pero si no es posible, quiero que al menos Usagi vuelva - Minhee torció sus labios en un ligero gesto de asco-. Es por lo que sigo vivo. Gracias a ella.
- Qué dramático - refunfuñó con burla Minhee. Chishiya rio.
- Menudo drama - apoyó, caminando hacia el borde-. Tu sueño... - se detuvo un momento, como si estuviera pensando en algo-. Está bien, pero no es nada práctico.
Kuina le imitó.
- Tendrías que ganar todos los juegos y convertirte en el siguiente número uno - señaló-. Y eso es imposible.
- No os incumbe - espetó Arisu, borde. Minhee cambió el peso de una pierna a otra.
- Creemos que tienes potencial - añadió Chishiya-. Por eso venimos a hablar contigo - Chishiya cruzó miradas con Minhee, antes de volver su atención al adolescente-. ¿Qué harías si te dijera que es posible cambiar el statu quo?
Arisu quedaba cada vez más sorprendido según ellos lanzaban más información, por lo que una dosis de habla brusco y directo no venía nada mal. Minhee carraspeó silenciosamente.
- El Sombrerero quiere controlar a los Paramilitares, pero están tan mal de la cabeza que van a contraatacar - explicó resumidamente-. Tan sólo hace falta una pequeña mecha, y esta se encenderá sola. Cuando eso ocurra, los militares van a tomar el control - expresó seriamente. Arisu tragó saliva ante la mirada de furia que pudo detectar por un momento en sus orbes ámbar-, y son unos descerebrados. No pienso quedarme aquí para ver eso.
- ¿Qué has pensado? - Minhee sonrió apenas, captando el tono de obviedad en Arisu. Como si fuera obvio que ella ya tendría un plan.
- Voy a robar todas las cartas, y largarme de aquí - resumió. Kuina frunció levemente el ceño ante el singular empleado-. ¿Qué dices?
Arisu les miró con cierta desconfianza.
░░░░░░
Estaba casi un 90% segura de que aquella sería la última conversación que tendría con el Sombrerero. Partiría en minutos hacia su juego, y tan solo podía pensar en cual sería el tema del que querría hablar en privado. Si Arisu ya había sido elegido como nuevo hombre de confianza para el loco, ¿qué querría ahora? ¿Quería acaso que le confirmara diferentes teorías e ideas desde su punto de vista?
- Tu mirada es la de toda una guerrera - comenzó aquella conversación. Ladeó un poco la cabeza con confusión-. Eres inteligente y confío en ti, Ahn - se inclinó en el sofá, estableciendo contacto visual-. Quiero que trabajes más cerca de mí. Informame de todas tus ideas, teorías e hipótesis. Calculame todas las posibilidades y analiza los datos. Quiero explotar tu potencial, Ahn Minhee.
- ¿Por qué yo? - se atrevió a preguntar-. Kuzuryu es el número dos, y de diamantes como yo. Tan solo soy una estudiante extranjera.
El Sombrerero negó, alcanzando un vaso de licor que terminó de un trago.
- No soy ciego, Ahn - sonrió-. Sabes que eres inteligente, y también sabes que quieres poder.
- ¿Quién no? - alzó las cejas-. El poder es esencial en un mundo así. O en el anterior.
- No muchos creen eso - se encogió de hombros-. Respeto, admiración, poder. Puedo dártelo, si sigues a mi lado.
- Está bien - no dudó -. Lo haré.
El Sombrerero soltó una ruidosa carcajada, victorioso de haberlo logrado aparentemente.
- ¿Qué te parece si empiezas a contarme tus ideas sobre nuestra última carta? - propuso-. Estoy seguro de que tienes ya varias ideas.
¿Debía contarlo? Definitivamente no, porque entonces ella peligraba. Igualmente, él moriría en minutos, así que...
- El 10❤️ será en la Playa - El Sombrerero se inclinó con una mirada confundida-. Saben que estamos recolectando las cartas, y para acabar con la primera temporada de cartas van a hacer un caos aquí - soltó todo. El Sombrerero estaba pensativo-. Es una estrategia infalible. Muchas personas, corazones... Tal vez crean que no lo lograremos, o que será divertido.
- ¿Estás completamente segura de tu teoría, Ahn Minhee? - establecieron contacto visual. La coreana tenía una mirada decidida.
- Estoy completamente segura.
Cuando el Sombrerero se perdía entre la gente subido a un coche viejo que habían logrado arrancar por su tipo de funcionamiento antiguo, solo pudo pensar en que, si las cosas no se tuvieran que dar así, el Sombrerero y ella podrían haber hecho un buen equipo liderando ese lugar. Ella tenía buenas ideas, él carisma y poder. Tal vez si hubiera llegado en otro momento...
- No te separes de mí a partir de ahora, por favor- musitó hacia Chishiya, ambos viendo desde lejos el caos de la despedida-. Niragi va a tratar de matarme. Sabe que el poder del Sombrerero ha caído, y ahora podrán hacer lo que quieran.
- Claro - asintió, con el rostro medio escondido tras la capucha-. No tendremos que estar mucho tiempo aquí, Minhee.
- En menos de cinco minutos podría matarme - replicó. Estaba jodidamente asustada-. Además de la fotografía, he estado haciéndole perder la cabeza desde hace días.
- ¿Ese era tu plan? ¿Provocar el golpe militar a través de la furia de Niragi? - asintió.
- Reuní todas las mujeres que odiaban a Niragi, y las convertí en réplicas de su novia muerta - explicó cortamente-. Después hice que aparecieran por lugares recurrentes, para que estuviera todo el rato viéndolas. Mató a una.
- Tú... Eres bastante retorcida - Minhee le miró, expectante-. Fascinante.
Minhee sonrió, apartando la mirada de nuevo.
- Volveré a casa, sea como sea.
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PLAY
*Hangul: alfabeto coreano
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𝗚𝗥𝗔𝗣𝗛𝗜𝗖 𝗔𝗥𝗘𝗔
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Cómo es que estoy actualizando capítulos tan largos tan seguido? Xd
Dije que iba a actualizar ayer peeeeero
DUDAS RESUELTAS SOBRE MICH Y SAMURA! Se conocieron en el otro Tokyo, en su estudio de tatuajes~
ADVERTENCIA
Así como Phobia contiene menciones de HOLLYWOOD y ligeros spoilers, IDOL contendrá menciones y spoilers de Phobia y lo mismo con Fireworks. Es una saga conjunta, por lo cual todo está conectado aunque sean en diferentes universos
Recuerdo que Minhee tiende a ser egocéntrica, pero realmente es una verdadera genio trastornada
También recuerdo que este Niragi no es el mismo Niragi de Hollywood. Si en Hollywood le cambié fue a propósito, aquí le estoy mostrando como es en la serie:un abusador
Disfruten ahora porque el final está cada vez más cerca~~
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