Estaría muy feliz si me dejan comentarios, me motivarian mucho a seguir con este fanfiction. Gracias por leer <3. Les recomiendo escuchar la canción que puse acá abajo para una mejor experiencia. ‼️✨

[Pov:Kai]

- ¿Quieres...tocar mi vientre?

Quedé impresionado. No pensé que Yeonjun algún día me permitiera hacerlo ya que eso era un acto muy íntimo entre pareja. Estaba estático por unos momentos, sintiendo el silencio incomodar, cuando Yeonjun tomó mi mano derecha y me sacó del trance. Levantó parte de su suéter de lana y dejó ver su vientre.

Era redondito y su piel hacía contraste con lo tierno que se veía aquella protuberancia. Me quedé fascinado y después sentí mi mano en él, es suave, muy suave y cálido, calentito.

Mi atención fue toda para su vientre, mis manos quisieron apartarse pero Yeonjun las tomo más fuertemente y me digne a moverla sobre su vientre, sintiendo fascinación por el mismo.

- Me gusta... Me gusta esta sensación.

Dije.

[°°°]

Había pasado un mes. Yeonjun tiene 4 meses ahora y ambos nos hemos vuelto amigos. Ahora puedo decir que nos hablamos con total libertad, aunque mi corazón estaba agrietado sentía que pronto sanará.

A yeonjun le gusta la jardinería. Veo como el departamento empieza a tomar color por las pequeñas plantas y Rosales que pone en las ventanas o en el balcón. Se ve bonito, me gusta, el color siempre lo ha hecho.

Siento que porfin este departamento se ha tornado en calidez pura. Mi corazón palpita con emoción y me gusta pasar tiempo con Yeonjun cuando tengo días libres. Es diferente a cuando estoy con Soobin, no puedo ser tan cercano, pero cuando Yeonjun y yo estamos solos, ambos, nos encargamos de la decoración.

Descrubri que teníamos gustos similares. A Yeonjun también le gusta el helado de menta, cosa que a Soobin le desagrada - irónico - por qué ese es su olor. También le gustan los peluches y las películas de Disney, las cuales veíamos por la tarde casi noche cuando Soobin no estaba en el departamento.

Yeonjun se ha vuelto un buen amigo, y ahora me doy cuenta que estaba muy equivocado al principio al juzgarlo.

- Ningning - Llama Yeonjun y mi atención va hacia él, quien está recargado en el marco de la puerta con una sonrisa.

Sonrisa que me parece muy bonita.

- ¿Si, yeon-ye? -Levantó mi vista de unos papeles jurídicos que he estado haciendo por casi todo el día. Ya son las cuatro de la tarde y no me he levantado para nada de mi asiento de cuero.

- He hecho de comer. -Comento - he hecho ramen. Vi que todo el día te la has pasado acá y... Pienso que deberías de descansar un momento.

Noto que sus mejillas se ponen rojas y eso me hace sonreír. Me levanto, después de todo lo que hacía se entrega en un plazo de tres días. Camino hacia el marco y sigo a Yeonjun hacia el comedor donde dos platos ya estaban en la mesa.

Me siento a su lado y ambos platicamos amenamente. Yo, disfruto mucho el sabor de las comidas de YeonJun, aunque sí, comete un error que otro, su comida me fascina.

- Entonces... ¿Te gustaría acompañarme al supermercado más tarde? Necesito comprar algunas cosas para el departamento. También quiero ir a la sección de bebés a buscar ropita y otras cosas... -Dijo Yeonjun un poco silencioso - Pensé que te gustaría ayudarme a escoger ropa para...

- Me encantaría -Conteste rápidamente haciendo que Yeonjun sonría.

[°°°]

Estábamos ya en el supermercado. Yeonjun llevaba un carrito de compras y ambos estuvimos pasando por infinidad de pasillos. Hasta que vi un helado de menta.

- Yeon-Ye. -, Llame y rápidamente un yeonjun que veía ramen puso su atención en mi.

- ¿Pasa algo?

- Iré por algo, ahora en un momento vuelvo, ¿Vale? -Dije.

Yeonjun solo asiente con su inusual sonrisa y rápidamente corro hacia el pasillo de helados. Estaban en promoción así que tomé dos botes de ellos para darle uno a Yeonjun a quien también le gustaba. Corrí de nuevo hacía el mismo pasillo de ramen donde estaba Yeonjun sintiendo su aroma revuelto con leche picar en mi nariz. Llegué muy rápido y me quedé estático cuando vi a un alfa de gran tamaño intimidar a Yeonjun.

Yeonjun parecía asustado mientras sostenía su vientre y el alfa de gran tamaño se acercaba a él, acosandolo en todo el tiempo.

Mi ceño se frunció y en un estante vacío dejé los botes de helado y sin importar más, tomé al hombre de su chaqueta y lo tire a uno de los estantes al frente haciendo que algunas botellas cayeran en la cabeza del mismo. Me puse delante de YeonJun, rabioso y colérico, lleno de enojo.

Mis ojos se volvieron rojos, y el hombre soltó un quejido doloroso.

- ¿Qué diablos te pasa, estúpido? -Preguntó el alfa de gran tamaño desde el suelo.

- Tú...-Chirrie mis dientes - Vuelves a tocarlo y te partiré la cara.

Él hombre rio y simplemente se levantó. - Él estaba de zorra conmigo, quería que lo preña-

Un golpe. Un golpe fue el que le di en su mejilla izquierda haciéndole caer al piso.

- Esta embarazado, jodido idiota enfermo. -Respondi enojado.

Él hombre no pareció entender y se levantó de nuevo soltandome un golpe en la ceja. Yo no me quedé atrás y le solté otro, la gente pareció notarlo y rápidamente fueron a separarme del hombre, mire a Yeonjun asustado y me sentí mal.

Sin embargo en cuando sentí un poco de calma y ambos ya estábamos fuera del supermercado con las bolsas de compras, simplemente y por instinto me acerque al omega y lo abrace, tomando su cintura con mi mano y rodeando su espalda con otra.

Me quedé unos momentos así aspirando su dulce aroma en su cuello relajandome y dejándome en paz ante todo el enojo el cual bajó al instante.

No lo veía, pero podía notar a Yeonjun tenso y sabía que en su cara se plasmaba confusión. Al notar lo que había hecho me separe y lo vi sonreír.

- Vamos a casa...

[°°°]

Llegamos a casa, quite mis zapatos, deje las bolsas sobre la barra y toque mi herida en la ceja la cual estaba sangrando. Me dispuse a caminar al baño para tomar el botiquín pero antes de entrar Yeonjun salió y tomó mi mano llevándome hacia el sillón.

Me sentó ahí y el lo hizo frente a mi, mi silencio y el de él estaban presentes mientras abría el botiquín y buscaba algunas cosas.

- Dolerá un poco pero aguanta ¿Sí?

Yo solo asentí sin despegar su vista de él. Tomó alcohol y lo rocío sobre mi herida haciendo que mi ceño se frunza, dolía, demonios.

- ¿D-duele mucho? -Preguntó preocupado.

Yo solo negué. Sinceramente si dolía y mucho, pero no quería preocuparle.

- ¿T-tú... Él bebé... Como están?

Él pareció sonreír y me miró a los ojos. - Ambos estamos bien, gracias a ti Hyuka~.

Eso hizo mi corazón palpitar de emoción y mi lobo se sintió orgulloso.

Las buenas acciones siempre eran recompensadas, el dolor algún día sanará.

¿Qué les pareció el capítulo?