﹒⌗﹒☂️﹒౨ৎ˚₊‧
FORMAS DE
AMAR. 

Habían pasado ya un par de días de qué Satanás se había quedado con Yuna y el resto, para sorpresa de todos, se comportaba cómo un niño normal

Aunque Baal seguía teniendo cierto disgusto por su presencia, con la ayuda de Yuna la relación entre ambos empezaba a dar frutos, haciendo qué la rubia se llenará de emoción.

Había vuelto a la escuela también, en dónde su profesor Sanjome había cumplido con lo qué había dicho antes, ayudarla con sus clases de biología dándole sesiones extra luego de la escuela.

︈Yuna había empezado a mostrar un mejor rendimiento académico gracias al peli rosa, en especial en su peor materia: biología.

Aunque él también le daba clases extras de matemáticas y química, logrando que ella prestará mucho más atención y explicándole de una forma qué ella pudiese entender perfectamente.

︈─ Sanjome-sensei, hoy no podré quedarme a las clases ya que tengo algo pendiente por hacer. ︈─ Se excusó Yuna, tomando su bolso.

︈─ En todo caso yo también retiraré, ¿te acompaño hasta la salida? ︈─ Yuna asintió, no tenía problemas.

Hoy había aceptado un trabajo cómo animadora en una fiesta para niños, sería algo así cómo una maga.

No quería seguir dependiendo del dinero qué mandaba su madre, quería cortar lazos de forma definitiva así qué, podía hacer algo mientras encontraba un buen trabajo.

︈─ ¿Qué harás hoy?, sí se puede saber, claro.

︈─ Seré una maga en una fiesta infantil. ︈─ Dijo ella con una sonrisa.

Él comprendió, cuándo iban caminando por los pasillos. Una presencia maligna hizo su acto de aparición, haciendo qué Yuna se cubriera ante el intenso polvo qué se había levantado.

Cuándo abrió sus ojos, se encontró a no muy lejos de ambos, a una especie de minotauro.

︈─ ....Mierda.︈─ Fue lo único qué pudo salir de su boca.

Cuándo quiso mirar a su lado, su profesor había desaparecido. ¿Había sido obra del manto qué aparecía junto a este minotauro?

Quizás sea un Yokai, así qué no tenía porqué temer demasiado. Un manto de este tipo no iba anular sus habilidades.

Más sin embargo, aquella criatura desapareció en un abrir y cerrar de ojos, en cuestión de segundos sintió un golpe desde la espalda.

︈─ ¡Ngh, maldita sea, no lo vi! ︈─ Maldijo. ︈─ No me gusta... qué me jodan con el uniforme del colegio, ¿Sabes? ︈─ Ella se levantó y logró esquivar su ataque.

Con un gran movimiento, logró subirse en su espalda, tomándolo de los cuernas con fuerza.

Uso el largo tiro de su bolso para empzar a ahorcarlo. Sin esperarlo, del bolsillo de su chaqueta saco una navaja, cuándo estuvo a punto de clavarla en su cabeza, la piel del minotauro se volvió aún más fuerte.

...¿Qué?

︈︈─ ...Soy invencible, lo soy. ︈─ fue lo único qué dijo y tras eso, yuna fue lanzada hacia la pared.

Pero ella logró evitar aquél golpe, usando su impulso para golpear el abdomen del minotauro pero sólo se volvió aún más dura su piel.

︈Yuna esquivó a duras penas aquél derechazo del minotauro, su abdomen empezó a arder. Pero eso no la detuvo de bloquear el otro golpe y hacerlo caer.

︈─ La gran y poderosa yuna,  cómo su primer truco de magia invocará una cabraaa...︈─ Ella sacó una pequeña barita y un sombrero de su bolso.

Hizo el ademán de magia y metió la mano en su sombrero, empezó a salir un aura oscura, bastante aterradora qué deshizo el manto.

Y tras eso, un simple puff fue suficiente para qué ella desapareciera.

︈─ Huh, eso estuvo cerca. ︈─ Ella corrió hasta su motocicleta y se marchó rápidamente de allí.

Ahora no necesitaba lidiar exactamente con algo paranormal. Se detuvo en una estación de metro para cambiarse y ponerse su traje. No estaba tan lejos.

Al llegar a la fiesta, Gracias a todos los ángeles no habían empezado. La madre se había alegrado al ver a Yuna llegar más temprano de lo acordado.

La fiesta empezó media hora después y con todos los niños presentes, Yuna empezó con sus trucos de magia.

︈─ Mmm...¿Qué habrá en mi sombrero?, ¿Un conejo, una paloma, un gato? ︈─ Ella se acercó con intriga a los niños.

︈─ ¡Un conejo! ︈─ gritó el cumpleañero.

Yuna metió la mano en su sombrero y no salió nada, dio la vuelta para agitarlo.

No solo un conejo, varios conejos salieron causando la impresión en los presentes.

Fue más aún cuándo los conejos se convirtieron en palomas y poco después en mariposas qué finalizaron siendo fuegos artificiales.

︈─ ¡Woah, qué genial! ︈─ Gritaron los pequeños.

Yuna pasó su varita alrededor dejando caer brillos y prontamente pequeñas explosiones formando el nombre del cumpleañero.

Haciendo algunos trucos cómo las cartas o desapareciendo. Hasta que su turno terminó, llegando la hora del pastel y su último show para darle un regalo al cumpleañero.

Cuándo la fiesta terminó, Yuna recibió su paga.

︈─ Muchas gracias, estuviste genial señorita. ︈─ La madre le entregó el dinero en un sobre.

︈─ Gracias a usted por permitirme hacer mi show, fue un gusto trabajar aquí. ︈─ Dijo con una pequeña sonrisa.

Cuándo caminó hasta su moto, guardó su sombrero y su varita. Al subirse empezó a escuchar una voz demasiado familiar.

Al voltear no vió nadie, hasta que bajo la mirada encontrándose con la turbo abuela.

︈─ ¿Huh?, Turbo abuela, ¿Pasó algo? ︈─ preguntó al verla tan apresurada.

︈─ ¡Ayase está en peligro, el mocoso también, todos lo están, debes ayudarlos! ︈─ Tras ello. Yuna encendió la moto y la tomó.

Le puso su casco a la gata y aceleró a toda velocidad para dirigirse al lugar en dónde ellos estaban en peligro.

No tenía tiempo para llamar a Aira o a Jiji, necesitaba qué Ayase y Okarun aguantarán.

︈─ Allá voy, Ayase.

Yuna frenó de golpe viendo cómo la turbo abuela se apresuraba junto demás antiguos compañeros suyos para entrar al juego maldito.

Cuándo se aferró a la turbo abuela, ambas pudieron entrar junto a los demás pero fue peor de lo que creían.

El propio Okarun parecía ya demasiado débil, mientras el espíritu maldito no hacía más qué burlarse de todos ellos.

Yuna miró a su alrededor, algo confundida pero...sus ojos se clavaron en la persona que parecía ser el enemigo.

Reconocería esas tontas sandalias y ese estúpido estilo dónde sea. No pudo moverse durante unos largos minutos, mirando cómo Okarun era quién reaccionaba.

︈─...¿U..unji?, ¡Unji! ︈─ Gritó, empezando a correr hacia él.

︈─ ¡Es el yokai del paraguas, está poseído, no te dejes llevar! ︈─ Advirtió la turbo abuela

Sin embargo, Yuna tomó rápidamente la bola de Okarun entre sus manos cuándo él cayó, además de lograr atraparlo a él.

Yuna dejó con cuidado al pelinegro para correr hasta Unji, quién estaba gravemente herido.

Ella tocó su rostro, qué aún estaba transformado. Sus ojos se llenaron de lágrimas, así qué... él también era un poseído.

Un chico paraguas...entonces su hermano menor...

Yuna se aferró al cuerpo de Zuma mientras las lágrimas salían de sus ojos, recorriendo su rostro con pena.

︈─ Quédate conmigo, Zuma. No me dejes, quédate aquí...︈─ Suplicó.

Dios...yo nunca te he pedido nada...

Pero te suplico qué no te lleves a Unji, no a él...por favor.

︈─ Unji, no te vayas, tú puedes seguir vivo. ︈─ Ella lo movió con desesperación.

¡Unji!

Aquél vago recuerdo de cuando ambos vivían entre las calles siendo pandilleros, cuándo ella se escondía tras él cuándo la pelea se volvía aún más serie.

No había nadie más fuerte ni mucho más genial qué él. Él era realmente cool.

Unji se había convertido en la luz de su vida, su mejor amigo. Su compañero, su otra mitad.

Era quién la había enseñado a pelear, a conducir motocicleta...fue quién le regaló su moto.

︈─ ¿Sabes?, sí tú desaparecieras...te buscaría por todosss laadoos. ︈─ Yuna ríe un poco mientras se balancea un poco.

︈─ Yo también haría lo mismo, no creo poder vivir sin tí.︈─ Respondió Unji mientras sostenía su mano.

︈─ No seas tonto, sí algún día yo muero...debes prometerme qué seguirás siempre adelante. ︈─ Yuna se detuvo.

Ambos se miraron a los ojos, quizás era algo rápido para este tipo de conversaciones. Pero Unji había perdido todo, estaba prácticamente solo.

Pero Yuna era su luz, yuna era esa chica qué había conocido por azares del destino y terminó siendo muy importante para él.

Su calidez lo hacía sentir...bien. Ella era diferente a la estúpida sociedad qué se formaba.

Ella era igual de pura y sincera qué su antiguo hermano menor.

︈─ Unji, yo quisiera...ayudarte a pagar tu fianza..︈─ Sus ojos se llenaron de lágrimas mientras se veían tras aquél vidrio.

Él negó.

︈─ Cuándo yo salga, volveremos a estar juntos..y ni la muerte podrá separarnos otra vez.

Los ojos de Yuna derramaban lágrimas, aferrándose al cuerpo de Zuma mientras lloraba de forma desconsolada y desesperada.

Pero se habían empezado a elevar, ¿Qué estaba pasando?, ella sostuvo con firmeza la muñeca de Zuma.

Y por fin, habían vuelto al mundo real. Pero él no respondía apesar de haber vuelto a la normalidad.

︈─ No me dejes, Unji. Lo prometiste, dijiste qué la muerte no podría separarnos. ︈─ Gritó.

Ella presionó su pecho, una y otra vez...Le dio respiración boca a boca, volvió a presionar su pecho.

︈─ ¡Despierta, despierta, tienes que hacerlo!, ¡Me lo prometiste!, ¡No me abandones tú también! ︈─ Gritó desesperada.

No...no me dejes, Unji.

No lo hagas...