Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

XX. 𝐋𝐀 𝐃𝐄𝐂𝐋𝐀𝐑𝐀𝐂𝐈𝐎́𝐍 (FINAL)

Faltaba muy poco para que los chicos se graduaran de la secundaria. Les quedaban unos días de vacaciones y volverían a empezar las clases en septiembre. 

─Que no se terminen las vacaciones, por lo que más quieras, Dios, por favor─ dice Urabe, estirándose en el sillón─. Joder, me muero de calor.

─Estar echado en el sillón no te ayudará a combatir el calor─ le contesta Kishida─. ¿Por qué no mejor nos ayudas a limpiar?

─La casa de Kumi no se va a limpiar sola, ¿eh?─ le dice Nakayama.

─Pero así me va a dar más calor, dah.

─Está bien, por mí haz lo que quieras, pero le diré a Kumi que su mejor amigo no quiso limpiar su casa.

Kishida descubrió el punto débil de Urabe, decirle que Kumiko se va a sentir decepcionada si él no hace equis o ye cosa por ella.

─¿Puedo poner música de KOTOKO para limpiar?

─Vaya que te gusta esa cantante─ dice Nishio.

─Su música es muy buena, y su voz es hermosa, aunque en los coros de las canciones parece que cantara más de una mujer, jaja.

─Pues sus canciones son muy lindas, pero tus dos canciones favoritas son un poco... No sé, su letra habla de sufrimiento.

─En la época que moría por Kumi me encantaban, no sólo por la música, sino porque me identificaba con la letra, ahora solamente me gustan por la música y la voz de la cantante. Trato de no pensar en mi amor por Kumi.

─¿Aún sigues enamorado de ella?─ le pregunta Kishida.

─Un poco. Le dije que trataría de superarlo, pero es difícil.

─Te entendemos, amigo. No es fácil, pero ya sabes que puedes contar con nosotros para lo que sea, porque no sólo somos tus amigos, somos tus hermanos─ los tres sonríen.

─¡Ay, van a hacer que llore!─ se pasa el antebrazo por los ojos.

─Es la verdad, prácticamente somos todos hermanos. Nosotros, Kumi, Yoshiko, Nitta, Ichijo y Ai.

─Oigan, Ai está muy extraña. Todo el año ha estado muy seria, a veces no quería salir con nosotros, cuando salía apenas hablaba con monosílabos, muchas veces faltó. ¿Qué le pasa?─ pregunta Nishio.

─No sé, ¿acaso serán problemas familiares?─ sugiere Urabe.

─Puede ser, porque recuerden que dijo que tenía a una tía con cáncer...

─Oh... Pobre Ai, y vayan a saber si también tiene problemas con sus padres─ dice Nakayama.

─Recuerdo que siempre que teníamos trabajos en equipo, los hacíamos en nuestras casas, y nunca nos invitó a la suya─ añade Nishio.

─Tiene sentido. No la obligaremos a decirnos lo que le está pasando, ella nos lo dirá a su tiempo, pero supongamos que es por esto que está muy mal.

─Sí.

─Antes de hablar de Ai, quería decirles una cosa, y es que... ahora más que nunca siento gratitud y admiración por Kumi.

─Siempre la tuviste.

─Pero ahora más, porque me doy cuenta de que de no haber sido por ella, nosotros nunca hubiéramos sido amigos en primer lugar, ¿no les parece?

─Ahora que lo pienso, es verdad, porque nosotros dos en particular nos odiábamos, ¿lo recuerdas?─ le pregunta Kishida entre risas.

─Oh, sí, creo que fue cuando teníamos once años...


Urabe y Kumiko estaban en una parada de autobús, esperando a que parase de llover. 

─M-me estoy muriendo de frío─ dijo Kumiko, temblando y abrazándose a sí misma.

─No te me enfermes, niña─ Urabe se quitó su campera bordó y se la puso a la pelirrosa─. Esto te protegerá del frío.

─Gracias─ sonrió.

En eso pasó un niño con un paraguas. Él y Urabe se miraron un poco mal. Los dos se conocían desde los ocho años, y se llevaban mal por ser rivales en el fútbol y por la actitud competitiva y arrogante de Urabe. El niño iba a irse, pero al ver a la pelirrosa resfriada, desistió y decidió hablarles:

─Oye, ¿quieres ir a mi casa hasta que pase la lluvia? Queda a unas dos cuadras de aquí. Es más factible a que te quedes aquí esperando a que pare la lluvia, ya que seguirá así un buen rato, y te estás resfriando.

─¿P-puedo?

─Claro, mamá estaría orgullosa de mí si ayudo a una niña, y yo me sentiría feliz de que esa niña sea una tan bonita como tú─ le sonrió.

─Gra-gracias─ respondió ella, totalmente sonrojada.

En ese momento, Urabe sintió lo que comúnmente se llamaban "celos".

─Si vas a ir, Kumi, deja que vaya yo contigo, no puedo dejar que estés a solas con este tonto.

─¡Oye, cuida tu lenguaje, Urabe! ¡La última vez chocaste conmigo en el supermercado y ni siquiera te disculpaste!

─Hanji Urabe, ¿qué te dije?─ Kumiko lo miró seriamente.

─¡No es mi culpa que Takeshi no sepa por dónde va!

─¡No me eches la culpa!

Kumiko empezó a estornudar más, preocupando a los muchachos.

─Urabe, cárgala en tu espalda y lo llevaré el paraguas para protegernos a los tres.

Urabe hizo caso y llevó a Kumiko a la casa de Kishida.

Los tres pasaron dos horas en su casa, debido a que la lluvia se hizo interminable. Kumiko y Kishida se conocieron y se llevaron muy bien, Urabe y él discutieron un poco, pero Kumiko los convenció de no hacerlo. También convenció a Urabe de incluir a Takeshi en su grupo de amigos, algo que en un principio no estaba de acuerdo, pero luego se hicieron un trío de amigos inseparable.


─Nosotros nos odiábamos, pero terminamos siendo mejores amigos─ ríe Kishida.

─Luego llegué yo─ dice Nakayama─. Apenas nos conocíamos por formar parte del nuevo equipo Nankatsu. Estábamos en nuestros días de descanso, y en uno de esos días me encontraron en el parque llorando porque perdí un examen de Matemáticas. Entonces ella me invitó a su casa para consolarme...


─Ya, Nakayama, no exageres, es sólo un examen...

─¡Cómo se nota que no le tienes miedo a tu mamá enojada!

─Pues sí, pero...

─Oh, pobrecito, ¿quieres ir a mi casa? Mamá está haciendo su famoso pastel de chocolate.

─M-me gustaría─ sonrió levemente.

─¿Otro hombre más?─ pensó Urabe con fastidio.

Kumiko llevó a Masao a su casa, donde su mamá los recibió, y al ver triste al pequeño, decidió abrazarlo.

─No debes temer a que tu mamá se enoje, hiciste tu mayor esfuerzo y eso es lo único que importa. Yo voy a hablar con ella para decirle que te cuesta esa materia y que no es justo que se enoje─ le dijo Tomoko.

Nakayama sintió una calidez extrema por esa familia, por la belleza y amabilidad de Kumiko y por la comprensión y amor de Tomoko.

─Gra-gracias, señora Sakagami.

─Jaja, por favor, llámame Tomoko. 

─Está bien.

─¿Quieres un poco de pastel de chocolate?

─¡Ay síii, tengo hambre!─ empezó a dar saltitos cuan niño pequeño rogando que le den de comer. Tomoko le entregó un trozo de pastel, Masao lo probó...

Nunca había quedado tan encantado por un trozo de pastel.

─Tanto drama por un examen─ dijo Urabe.

─Pero al menos Nakayama está feliz─ sonrió la pelirrosa.

Desde ese día se volvieron un grupo de amigos más grande.


─Y por eso te obsesionaste con los pasteles de Tomoko.

─Exacto, jaja.

─Y yo recuerdo el día que me lesioné en el partido contra el Hanawa. Ella fue a la enfermería a ver si yo estaba bien, y fue quien me curó la herida, bueno, con ayuda del doctor, pero calmó el dolor...


─No te preocupes, Nishio, Kumiko Sakagami va a curarte─ bajó su calcetín manchado de sangre, y se horrorizó al ver la herida.

─No tienes por qué hacerlo, Kumi, el doctor se va a hacer cargo, no quiero que te desmayes...

─¡No! ¡Yo puedo hacerlo!─ tomó un paño húmedo para quitar la sangre. Nishio apretaba la mandíbula por el dolor, pero al ver los ojos grandes y celestes de la pelirrosa se calmó, es más: se ruborizó por su linda carita─Joder, prefiero que me cure ella a que lo haga el viejo este─ pensó.

Al final Kumiko estuvo con él durante todo el partido, hablando con él para que no se aburriera mientras el doctor lo curaba. Ya había conseguido al sexto miembro de su grupo de amigos (porque ya contaba con su amiga Yoshiko).


─Ese día no fue tan horrible mi lesión, jaja.

─Chicos, estamos de acuerdo con que ella nos alegró la vida y que merece tener un novio tan guapo y bueno como lo es Nitta, ¿no?─ les pregunta Urabe.

Los tres asintieron.

─Se lo merece.

─Ha hecho tanto por nosotros, ahora que sea feliz con el mejor jugador del Otomo.


Kumiko y Nitta estaban limpiando el piso de arriba de la casa de la pelirrosa, mientras los demás estaban abajo.

─En pocas semanas vamos a empezar la preparatoria, Shun, ¡qué emoción!

─Tú y los demás sí, pero Ichijo y yo vamos a estar en tercer año.

─Es cierto, lo había olvidado, jeje.

─Por cierto, ¿crees que los demás estén limpiando el piso de abajo? ¿O sólo están hablando estupideces?─ le pregunta Nitta a la pelirrosa.

─Confío en que están haciendo su trabajo.

─Espero, porque cuando nos hacían limpiar el gimnasio y la escuela, Urabe se iba a esconder en el supermercado de la esquina.

Kumiko rio por esos recuerdos.

─Pero cuando yo lo descubrí no lo volvió a hacer más.

─Él te adora, Kumi, y hará hasta lo imposible por verte sonreír. Esa es una amistad real.

─Sí...─ Kumiko mira al vacío, apretando fuertemente la escoba. Ya estaba lista para decirle la verdad a Shun─Nitta.

─Diga.

─¿Re-recuerdas el papelito que me diste el día que salimos a todos lados todo el día?

─S-sí─ se ruboriza levemente.

─Primero que nada, disculpa que te hice esperar todo el año por la respuesta, pero es que me ponía muy nerviosa y no sabía la mejor manera de decírtelo...

─No te disculpes. Es totalmente normal. De todas formas soy la persona más paciente del mundo, jaja.

─Jeje, se nota. Pero en fin, ya sé cómo decírtelo, aquí y ahora, y para demostrártelo, tengo algo que compré hace tiempo, y llegó la hora de dártelo─ deja la escoba recostada contra la pared, y camina a su mesa de luz, que tiene un cajón. Ella lo abre y saca una pequeña caja─. Para ti.

El "vampiro" la toma y la abre para encontrarse con un pequeño brazalete, un brazalete de plata con un pequeño corazón que dice "Nitta".

─Con este regalo quiero decirte que mi respuesta es... sí, tambien me gustas, Shun Nitta.

Los ojos de Shun se iluminaron y una sonrisa temblorosa se formó en su rostro. Valió la pena esperar todo el año para recibir su tan esperada respuesta.

─Oh, Kumi, no sabes lo feliz que me hace escuchar esa palabra.

─Jiji, pues me alegro.

─Entonces... ¿quieres ser mi novia?─ soltó de una la pregunta del millón.

La joven pelirrosa sintió una enorme emoción al escuchar esa pregunta. Había soñado con eso día y noche, había soñado con ella dándose un beso con el "vampiro", viviendo juntos, incluso formando una familia, y hoy, finalmente se cumplió ese sueño.

Sin más, comenzaron a salir lágrimas de sus ojos.

Una sonrisa temblorosa se formó en su rostro.

─S-sí, sí quiero ser tu novia.

─¿E-enserio?

─¡Sí!─ le dio un fuerte abrazo─Quiero pasar el resto de mi vida contigo, Shun Nitta.

─Oh, Kumi─ respondió el abrazo. Los dos se quedaron mirando a los ojos del otro, y sintieron como si una especie de imán uniera de a poco sus bocas...

El beso que se dan es digno del final de una película. Kumiko coloca sus brazos detrás del cuello del más alto mientras él rodea su cintura con sus brazos. El colmillo de Shun no molestaba para nada a la pelirrosa, es más, para ella, él besaba muy bien.

Finalmente, los más amados de la escuela se besaron.

─¡AAAAAAAAAAAAH!─ el cuarteto se moría al verlos así.

Los dos se separaron inmediatamente.

─¡Oigan, no interrumpan y pónganse a limpiar!

─Llegamos justo a tiempo.

─Para ver a Drácula y Draculaura comiéndose a besos─ dijo Kishida en tono burlón.

─Y-ya, no exageren.

─Pero si se ven hermosos juntos. 

─Kumi, felicidades, ahora eres una vampiresa─ le dijo Urabe.

─Yo...─ miró a Nitta, y luego sonrió─Sí, mi novio es un vampiro, y estoy orgullosa de ello. 

─Ay, Kumi, podría morderte el cuello y chuparte la sangre...

─¡UUUUUUH!

─¡YA BASTA, JAJAJA!

Y así fue como nació una hermosa relación, a la cual le esperan nuevas aventuras junto a sus amigos.

https://youtu.be/5RhqTxSVIFg

FIN

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro