Toda la maldita noche no pudo ni cerrar los ojos, sentía hinchado el rostro de lo mucho que lloro. La cabeza le daba vueltas, cuando intentaba cerrar los ojos para dormir, las imágenes de las fotografías de su esposo con otra mujer se le aparecían y le torturaba el alma.

Lo único que pudo hacer fue tomar pastillas para dormir, fue la única manera que consiguió para cerrar los ojos y dormir.

Cuando la mañana llegó, Jimin despertó aún más temprano que nunca a pesar del sueño que sentía. Se duchó y salió perfectamente arreglado, con su usual traje elegante de trabajo. Miró las maletas de Jisoo en la sala y esperó a que Namjoon llegará.

Estaba nervioso, había llorado un par de horas en la noche con esas malditas fotografías rondando su cabeza, le dolía y mucho.

Su esposo había cumplido su palabra, no llegó en toda la noche. Eran exactamente las seis cincuenta de mañana, el timbre sonó y el rubio dejó su taza de café en la mesa de la cocina, abrió la puerta con Namjoon y Seokjin a su lado más dos oficiales de policía.

-Buenos días, señor Kim -saludan los oficiales en una reverencia.

-Buenos días, pasen por favor ¿quieren algo café?

-Si no es mucha molestia -Les responden.

Namjoon entró mirando las maletas que suponía que son de Jisoo, el lugar estaba limpio y ordenado como lo esperaba de Jimin. Seokjin le ayudó a su amigo con las tazas de café, era muy temprano aún y necesitaba despertar para lo que venía.

-Espero que estés listo, con todas las pruebas que nos diste es más que suficiente para sacarlo de aquí y llevarlo aún juicio está misma semana. El procedimiento no fue complicado, se que el juez te consejera el divorcio.

Le informa el abogado Kim Namjoon.

-Mientras más rápido mejor, no quiero ni un minuto más a lado de ese maldito infiel -Bebió un poco más de café.

-Jimin sé fuerte, sé que te lo repito mucho, pero solo quiero que estés bien, él no te merece.

Abraza a su amigo y Jimin sabe que el enfrentamiento con su esposo no será fácil, pero teniendo a Seokjin a su lado le daría muchas fuerzas para no derrumbarse.

-Gracias Jinnie, ahora lo que más necesito es a mi mejor amigo.

-Somos almas gemelas, jamás te dejaría vivir esto solo -Le sonríe.

Jimin ahora mira a Namjoon.

-Si las cosas salen bien, ¿cuando piensas que sea el juicio?

-Si él no se opone, esto se podrá dar para el viernes. Y descuida él no tendrá ningún centavo de tu parte, no permitiré eso.

-Eso me calma, gracias.

Unos pasos se escuchan afuera, sus nervios crecieron rápidamente, tomó iré y lo dejó salir para luego ponerse firme ante lo que pasaría hoy. La puerta se abre dejando ver la figura de Jisoo entrar, dejó sus llaves y cuando se da la vuelta mira a los oficiales, a Namjoon y Seokjin al lado de su esposo.

Su rostro era de suma confusión.

-¿Cariño qué pasa? ¿Por qué hay oficiales aquí?

Se acerca y mira sus maletas al lado de la sala.

-Están aquí porque quiero el divorcio- le informa y Jisoo sabré sus ojos de par en par.

-¡¿Qué?! Estás bromeando ¿verdad?, ¿por qué?

-¿Jisoo, cuánto creías que duraría tu maldito engaño hacía mi? ¿Creías que jamás me iba a dar cuenta que te revolcabas con Kim Jennie? ¡Maldito desgraciado! - dijo con reproche.

Jisoo se paralizó cuando el nombre de Jennie salió de la boca de su esposo, es más todo lo descolocó.

-Jimin yo...

-Ahórrate tus malditas excusas de mierda, Jisoo. Quiero el divorcio y por eso traje a Namjoon conmigo, no quiero estar ni un minuto más casado contigo maldito ¡Infeliz infiel! -Grito con suma rabia, no era para menos.

Se exaltó ante lo último, Jin tomó sus manos para poder reconfortarlo, estaba temblando mirado con sus ojos acuosos al que una vez le prometió amor eterno.

-Jimin amor déjame explicarte, todo es un malentendido jamás quise engañarte, de verdad jamás lo quise por favor escúchame lo arreglaremos bebé, me ayudarás a cambiar y...

-¡Cállate! No quiero tus patéticas excusas, no me creeré ninguna de ellas. 3 años de matrimonio se fueron a la mierda porque así tú lo quisiste, ahora no vengas que es un "error" por qué bien que disfrutabas burlándote de mí con tu amante.

El pelinegro se pasa las manos por su rostro no sabiendo qué hacer, no sabía cómo es que Jimin lo sabía, pero si ya lo descubrió, ya que más daba.

-Si tienes razón, me acosté con alguien más y no sabes cómo lo disfruté -Jimin quería golpearlo, pero Jin lo detuvo apretando sus hombros- Estar contigo era tan aburrido, ya no eras el mismo no tenías el mismo valor, y que bueno que ya te enteraste porque pensaba divorciarme de ti, e irme con esa joven actriz que sí sabe cómo complacer al hombre como yo.

-Eres un desgraciado -Aguanto dejar salir sus lágrimas, estaba muy dolido por sus palabras, ni siquiera sentía culpa o remordimiento.

-Si quieres el divorcio yo te lo daré, pero con la mitad que me corresponde -Dijo muy seguro, él no pretendía dejarse.

Ahí entra Namjoon.

-No tendrás absolutamente nada de lo de mi cliente Park Jimin -Le informa.

-Tengo derecho a la mitad de todo, somos esposos -Interpela.

-Sería así si fuese un divorcio con bienes compartidos, un divorcio sano. Pero teniendo cuenta que fuiste tu el infiel Y que tengo las pruebas en mis manos no tomarás ningún centavo de mi cliente -Abre su maletín con los papeles de divorcio y la copias de las pruebas de su infidelidad -Te veremos en el juicio, se te dará la fecha correspondiente.

Le entrega la documentación y Jisoo la toma para leerla.

-Esto tiene que ser una broma, no me puedes hacer eso.

-Claro que puedo, tú fuiste el infiel, y eso no es todo, ya que tú tienes lo mínimo que yo, no tocaré esa parte porque falta no me hace, pero tú no tomarás lo mío, lo que tanto me costó tener -Traga grueso y con mucha confianza dice -: Ahora que ya está todo aclarado toma tus cosas y lárgate de mi Penthouse, además quedas despedido de mi empresa como modelo y de todo lo demás. Soy el CEO y puedo hacerlo sabiendo tu falta.

Toma eso infeliz.

-También vivo aquí, no puedes echarme, esta es mi casa también. -Parecía que una vena se le quería reventar, sus ojos estaban inyectados en color rojo, se estaba muriendo por dentro y no sabe cómo lo estaba disfrutando Jimin.

-Yo lo pague tú no pusiste nada de dinero. Así que toma tus cosas y lárgate que no te quiero volver a ver.

-Los oficiales te acompañarán, no queremos escándalos porque no te conviene en este momento- le dice Namjoon, firme y mirándolo con desprecio. Jimin es su amigo después de todo.

Jisoo miro las fotografías dónde estaba con Jennie en aquel hotel, miro sus maletas y la gran cagada que hizo. Tomó sus maletas sin decir nada más, los oficiales lo acompañaron y cuando al fin dejaron abandonado todo, Jimin se derrumbó entre los brazos de su mejor amigo.

Namjoon se sentía mal por su amigo, Jin lo miró haciéndole una seña de que se fuera.

-Me voy Jimin, y lamento esto de verdad. Sé que no es fácil pasar por esto.

El rubio seca sus lágrimas mirando al moreno.

-Gracias por todo.

-No fue nada, llora lo que tengas que llorar esto no es fácil de procesar. Nos vemos en juicio cuando nos den fecha. Jin amor me tengo que ir, nos vemos en casa.

-Claro, amor. Me quedaré un poco con Jimin.

-Muy bien -Beso los labios de su esposo.

Namjoon se despide y sale del penthouse dejándolo solos al par de amigos. Durante la mañana Jin se encargó de no despegarse de Jimin, ambos prepararon el desayuno, almuerzo y comida.

Se dieron el día libre hoy, aunque sí trabajaron un poco para distraer su mente de todo lo que pasó en la mañana. Miraron películas, comieron helado, lo típico de una ruptura a la que todos llaman cliché, y eso no tenía nada de malo.

Jin dejó un tazón de palomitas mientras veían la película favorita de Jimin: Mujeres al ataque. Que va de lo mismo, infidelidad con tres mujeres que se unen para hacer caer al tipo que las engaño.

-¿Oye Jimin, estás seguro de que quieres hacer pública la infidelidad? No Crees que hablarán de ti.

-Quiero que él sufra, será como una venganza y estoy bastante seguro que se quedará sin empleo.

Come palomitas mirando su película favorita, donde Kate enfrenta a Carly cuando se entera de que ella es su amante.

Jin no estaba muy convencido.

-Estoy seguro de lo que hago, Jin, mañana todo Corea sabrá de su maldito engaño. Aunque hablen de mí no me importa en el momento, solo quiero que él sufra como yo lo estoy haciendo ahora.

-Te apoyo en todo amigo, aquí estaré para ti cuando el chisme vuele.

-Lo agradezco mucho.

El peli-rosa no dice nada más y miran atentos las películas. Una hora después Seokjin se levanta listo para irse, Jimin lo acompaña hasta la puerta para despedirlo, agradeciendo que se quedara con él porqué seguro hubiese estado llorando todo el día.

-¿Estás seguro que quieres que me vaya? No quiero dejarte aquí solo.

-Estaré bien, soy un hombre adulto, sé que puedo manejar esto -Le muestra una sonrisa no muy convincente.

-Cualquier cosa me llamas bien, te quiero Jimin.

-También te quiero, nos vemos mañana en el trabajo.

Abraza a su amigo despidiéndose de él. Seokjin sale del edificio, tenía un mal presentimiento, pero confiaría en él, sabía que su amigo era muy maduro y que tomara esto del divorcio con mucha madurez.

Unos minutos después con Jimin...

Tenía puesto su traje de bodas mientras miraba su video de bodas con Jisoo, donde se miraban tan felices ese día que se prometieron amor eterno. Lloraba A Mares mientras comía crema batida, y de fondo sonaba Gone de Rose.

-¡Todo fue mentira!... No me amaste lo suficiente, te odio Jisoo -Su maquillaje estaba un poco derramado por sus ojos.

Comió más crema batida vendiendo también vodka. Estaba en una crisis ahora mismo, esas palabras que Jisoo le dijo le dolieron, preguntándose si de verdad él fue quien hizo algo mal durante su matrimonio, lo cambió por una más joven, él tenía 26 años y no era tan viejo.

Se desplomó en la alfombra mirando la película donde ambos comparten un beso sellando su compromiso, fueron días buenos donde pensó que su amor sería para siempre, y por mucho que doliera tenía que darse cuenta de que no todo es para siempre, nada es mágico y no es como los cuentos de hadas.

Uno no termina de conocer a las personas, estuvo con Jisoo desde la universidad, 6 años al lado de ese hombre que le bajó la luna y las estrellas.

Cerró sus ojos y después de llorar un rato más, cayó dormido en la alfombra. Mañana todo Seúll sabrá la clase de persona que es Kim Jisoo, y así comenzando una nueva aventura para él.

La parte de Jimin comiendo crema batida mirando su video de bodas y con su traje; fue inspirada en esa misma película ( Mujeres al ataque) si no la han visto, mírenla, está muy hermosa y divertida.

Espero que les haya gustado este capítulo.