Capítulo tres: Dejando la Isla

Skylar se quedo un momento en sus pensamientos, miraba a todos en el lugar, sabía que sus padres no los mandarian a Auradon a si por a si, bueno menos su padre que siempre buscó lo mejor para ella, pero los padres de sus "hermanos" No.

Scar miro por un momento a su leoncita, el no quería que al momento de ir a Auradon la señalaran por los pecados que el cometió.

--- ¡Villanos!--- el grito de Maléfica, saco a padre e hija de sus pensamientos.

--- ¿Si?--- dijeron los adultos al mismo tiempo.

--- Ha llegado nuestro momento, Reina, dale es espejo mágico--- ordenó Maléfica.

La Reina Malvada le extendió el pequeño espejo a Evie la cual lo miro con disgusto.

---¿Este es tu espejo mágico?--- Evie pregunta  con desilusión.

--- Si, bueno no es lo que solía ser, pero bueno ¡Nosotros tampoco!--- Reina Malvada ríe y Skylar no puedo evitar sonreír con burla --- Te ayudará a encontrar cosas..

---¿Cómo un príncipe?--- ilusión en la voz de la peliazul.

--- Como mi cintura..

---¡Como la varita mágica!,¡Hola!--- les dice Maléfica.

---Hola--- Reina le contesta.

Skylar dejó de prestar atención cuando su padre la tomo del brazo delicadamente y la llevo a otra parte de l habitación.

--- ¿Creías que me olvidaría el cumpleaños de mi cachorrita?--- dijo Scar con una sonrisa mirando a su hija. Para después abrazarla con cariño, cosa que la pelinegra devolvió --- Te tengo un regalo--- dice una vez que se separon.

--- No hacia falta un regalo--- le dice Skylar mirando a su papá.

--- ¡Tonterías!--- dijo Scar para sacar de su bolsillo una pequeña cajita y se la extendió.

La Leona tomo la cajita con cuidado y la habría, encontrando un hermoso anillo el cual tenia un leon en el y una "corona" de diamantes.

--- Le perteneció a tu madre--- comentó Scar con una sonrisa nostálgica --- Lo mande hacer cuando estaba embarazada de ti

Skylar despegó la mirada del anillo y miro a su padre, sus ojos grises reflejaron tristeza, como le hubiera gustado haber conocido a su madre.

--- Gracias papá--- dijo Skylar dándole una sonrisa.

Scar le dio un beso en la frente y después le dijo para que valla a empacar sus cosas, la Leona sólo asintió y fue a guardar todo lo que llevaría a Auradon.

--- ¡Sky! --- dijeron cuatro voces enterando a la habitación de la pelinegra.

Skylar sonrió calidamente mientras se dejaba abrazar por sus hermanos de alma, después de unos segundos se separaron del abrazó.

---Feliz cumpleaños--- volvieron a decir al mismo tiempo con grandes sonrisas.

--- ¡Habré mi regalo primero! --- dijo muy emocionada Evie, para pasarle su regalo el cual estaba envuelto con papel de colores.

Skylar lo tomo, lo desenvuelve y se encontraba con una mochila de color negro con algunos dibujos en color blanco, la pelinegra le agradeció con una sonrisa.

Después seguio Mal, la cual le dio unas nuevas botas de color negro, agradeció, Jay le regalo una pulsera el cual tenia un dije de león, y Carlos le regaló un lindo y sencillo collar de perlas blancas, volvio a agradecer.

--- Muchas gracias chicos, son los mejores regalos del mundo --- dijo Skylar con una sonrisa cálida.

Con todos puede ser mala, sarcástica, cruel y grosera, pero con sus hermanos de alma, era todo lo contrario.

---¡Carlos vuelve aquí! --- grito Cruella a su hijo, pero la pelinegra se interpuso y miro mal a la loca de perros.

Si no fuera la madre de su cachorro, hace mucho tiempo, le hubiera arrancado el cuello con sus dientes, pero ahora se estaba aguantado las ganas.

--- ¿Quién es la más bella de todas?--- pregunto la Reina

---¡Evie!--- dijo la peliazul, pero después borro su sonrisa --- Tu --- dijo mirando a su madre, la cual sonrió.

--- Vamos Evie--- dice Skylar mirando mal a la Reina malvada, la pelinegra tomo su bolso donde está sus cosas.

La peliazul asintió y rápidamente caminó hacia la salida, mientras que la pelinegra hablaba con su padre en italiano.

--- Ahora, recita nuestro juramento--- dice Jafar a Jay.

--- Sólo importó yo--- responde Jay.

--- Oh, corre que me haces llorar--- dice divertido Jafar.

Jay tomo si bolsa, mientras salió de la casa, pero primero llamo a su padre, el cual estaba robando algunas cosas de la casa.

Mientras tanto, Maléfica y Mal se encontraban en el balcón, mirando hacia el horizonte de Auradon.

--- El mundo libre depende de ti, no lo arruines --- dice Maléfica a su hija.

--- ¡Mal!--- grito Skylar desde abajo, sin inmutarse por la mirada de Maléfica en ella, más bien le devolvió la mirada con sus ojos en dorado.

--- Vuele a gente común--- dijo la Reina malvada.

--- ¡Vuelve aquí!, ¡Ahora!, ¡Carlos!, ¡Ingrato!--- grito Cruella, pero se calló ante la mirada de la leona, la cual estaba dando al chófer sus cosas para que la ponga en el maletero.

Skylar miro a su padre, el cual le regaló una pequeña sonrisa, se acercó a ella, como una de sus manos sobre su hombro y en perfecto Italiano le dijo.

--- Mio piccolo leone, sei l'unica cosa buona che ho e voglio che tu trovi il tuo "vissero felici e contenti" --- me sonríe con cariño. (Mi leoncita, eres lo único bueno que tengo, y quiero que tu encuentres tu "Feliz para siempre").

--- Ti amo papà --- dijo Skylar para subir a la limusina, donde ya se encontraban los demás. (Te amo papá).

---Anche io, il mio cucciolo --- dijo en un susurró Scar, viendo como la limusina se alejaba.( Yo también, mi cachorra).

--- ¡Trae oro!

--- ¡Trae un perrito!

--- ¡trea un príncipe!

En la limusina los cinco adolecentes se miraron y soltaron un suspiro, ahora que pasaría?, dejaron la isla para adentrarse a un mundo de colores pastel, y todos son "Felices para siempre".

--- todo saldra bien  --- pensó Skylar mientras comía un caramelo y miraba por la venta.

960 palabras

Espero y les guste.

Los regalos de Skylar

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