Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

◌Ⳋ𝅄 : OOO

El dinero es lo que mueve el mundo.

Esas resultaron ser las palabras que constantemente resonaban en la cabeza de Kim Chanmi durante todos esos torturosos once años de mala suerte, palabras que habían terminado por convertirse en una de sus tantas frases de supervivencia favoritas.

En más de una ocasión, la chica escuchó a las personas decir que el mundo funcionaba a base del amor que dabas y recibías, pero probablemente éstos no eran conscientes de la realidad de muchos; una donde los prestamistas aparecían cada semana frente a tu puerta para reclamar por su dinero, incluso sin siquiera importarles los sucios métodos que debían usar para obtenerlo. Tristemente para Chanmi, esa era su situación; porque incluso con el sueldo que recibía de sus dos empleos de medio tiempo, la cantidad nunca era la suficiente para cubrir la enorme deuda que amenazaba con arruinarle la patética vida que había estado llevando.

Tanta era la desesperación para Chanmi, que desde hacía unos días había estado pensado seriamente en terminar con el poco valor que aún le quedaba, solicitar una oportunidad en los empleos más degradantes que pudieran existir por unos cuantos billetes. “No podría ser tan malo como que se escuchaba, ¿verdad” Pensó la castaña mientras se encontraba buscando información sobre dicho tema, fue entonces que un anuncio bastante colorido saltó sobre su pantalla. En un primer momento intentó eliminarlo temerosa de que pudiera ser esa clase de virus roba información, pero antes de poder hacerlo, su atención fue capturada por la frase en letras enormes y de colores chillones que decía: [¿Deseas obtener 1000 dólares por solo unos cuantos minutos frente a la cámara?]

Chanmi tuvo el pensamiento de que posiblemente todo se trataba de una estafa, pero curiosear con ello, era incluso menos descabellado que la locura que acaba de cruzarse por su cabeza debido a la desesperación. Sin pensarlo más, la castaña decidió dar click en el colorido anuncio, una página web con el nombre de Gold Productions fue lo primero que sus ojos pudieron notar. La duda comenzó a nacer dentro de ella cuando terminó por entender que se trataba de una página de contenido para adultos, una donde había un extenso catálogo de modelos con diferentes contexturas y nacionalidades. Lo más sorprendente de todo no era el hecho de que se encontraban completamente desnudos en poses demasiado sugerentes, más bien era lo lindo que se veía el sitio web.

Kim Chanmi no era una santa, muchas veces cuando cursaba la escuela secundaria, tuvo la curiosidad de ver vídeos para adultos en compañía de sus compañeros de clase; por lo que tenía una clara idea de cómo lucían las páginas como estas, pero aquella era totalmente lo contrario a lo que estaba acostumbrada a ver. Chanmi se tomó unos cuantos minutos para considerar la idea de enviarles un correo electrónico.

Estaba desesperada, era correcto.

¿Pero lo estaba tanto hasta el punto de involucrarse en la industria del porno?

Sus dedos temblaron un momento sobre la esquina superior derecha que la haría abandonar el sitio de inmediato. Necesitaba el dinero y solo serían unos cuantos minutos, todo terminaría como una loca experiencia y Chanmi podría ir a casa con unos cuantos billetes en la bolsa. Decidida, movió sus dedos por el teclado, llenando cada una de las casillas con sus datos antes de que la duda volviera a nacer dentro de ella. En cuanto el correo electrónico fue enviado, la chica tomó su cartera para salir a su tienda de conveniencia más cercana. Desde hace días que sus víveres se habían terminado y no había sido capaz de comprar absolutamente nada.

•••

—Debe estar bromeando, ¿desde cuándo esto terminó subiendo de precio?

—Señorita, tenemos otras personas a las que atender —Comentó el hombre detrás del mostrador, quien miró molesto a la chica por estar retrasando a los demás clientes que exclamaban molestos por esperar demasiado.— ¿Piensa comprar eso o no?

La mirada del hombre la hizo temblar. Asustada, sacó el dinero necesario de su cartera y abandonó la tienda sin hacer otra clase de comentario que pudiera ponerla en aprietos. Era tan triste hasta que punto había terminado para que Chanmi no fuera capaz de comprar alimentos tan básicos como lo eran las verduras y el arroz. El poco dinero que recibía de sus trabajos de medio tiempo, iban directamente al bolsillo de sus prestamistas que no hacían más que amenazarla de muerte, lo que la dejaba sin un solo centavo para comprar alimentos y pagar el alquiler de su pequeño cuarto de mala muerte.

Cuando Chanmi volvió a casa, se dejó caer sobre el frío suelo, conteniendo sus ganas de llorar porque las cosas no estaban saliendo como ella esperaba. La castaña creía que si sus padres estuvieran vivos, ambos estarían terriblemente avergonzados de tener una hija tan lamentable, después de todo, Kim Chanmi era la clase de chica que los padres nunca deseaban tener en sus vidas.

“¿Suicidarme terminaría con mis problemas?”

Kim Chanmi pensaba en eso constantemente.

Sus sueños se habían ido a la mierda por el error que la atormentaba día con día. Chanmi se encontraba completamente sola en el mundo, por lo que tenía la clara idea de que no habría ninguna persona triste por su muerte, pero la verdad era que la chica era tan cobarde que nunca sería capaz de hacerse daño a sí misma.

Chanmi estaba convencida de que toda su vida había ido cuesta abajo cuando ese chico al que todos acosaban, le lanzó una maldición con su confesión de amor.

Todavía podía recordar su mirada llena de dolor, y el como contuvo su llanto ante la burla de todos los idiotas que se encontraban con ella. Completamente diferente al resto de chicos que se le habían confesado y habían hecho un escándalo por ser rechazados, el chico que era acosado por parecer tan regordete como un oso, le sonrió de manera dulce; y después de hacerle una reverencia, pronunció con palabras amables: “Lamento mucho que mis sentimientos sean una molestia. Te deseo buena suerte con tu audición, noona.”

El sonido de una notificación la hizo abandonar sus pensamientos, la pantalla de su teléfono celular se encendió por un correo con el nombre de la página de esta mañana, pero ni siquiera había un poco de expectación en ella; era muy poco probable que incluso esa industria pudiera interesarse en ella, por lo que el correo podría tratarse de una extensa disculpa sobre el por qué no requerían de sus servicios. Justamente como había pasado con cada una de las audiciones en las que había participado. Los directores estaban reacios a contratar a una actriz novata con un terrible expediente como el de Chanmi, sumándole a ello que no era lo suficientemente bonita para merecer un protagónico o cualquier papel secundario.

Eso era lo que ella estaba pensando hasta que vio en letras enormes: “Aceptada.”

La chica se apresuró a ponerse de pie mientras podía escuchar en su cabeza aquella canción tan famosa de Queen, esa que solían poner en las películas cada vez que el protagonista obtenía lo que quería. Aferrándose a su teléfono celular, comenzó a leer el correo donde se le indicaba la fecha, hora y dirección para comenzar con su vídeo corto. Chanmi comenzó a reír como una loca poco después de terminar de leerlo, era verdaderamente gracioso que estuviera contenta por ser aceptada en la industria del porno.

Tratando de restarle importancia a ese pequeño detalle, Chanmi comenzó a escribir una respuesta de agradecimiento sin imaginarse que su vida estaba a punto de cambiar para bien, o para mal.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro