O5. ❝ 𝗗𝗲𝘃𝗶𝗹 𝗖𝗵𝗶𝗹𝗱 ❞
En el jardín real, se escuchaban las risas de Minerva Morningstar, quien se encontraba jugando con sus dos guardaespaldas, Fazzle y Sazzle, también se encontraban sus tres hermanos en el palacio, siendo el único que cuidaba de Minerva era Lucifer.
Mientras que en el palacio Fenix estaba leyendo un libro en la biblioteca, Charlie estaba mirando su teléfono ya que ella estaba en una fase rebelde / emo, vestida de negro y se había teñido un mechón de color negro, además de tener unos frenos, y por el lado de Marceline está tenia a un pobre pecador montándolo como si él fuera un pony.
── Minerva ten cuidado ── Hablo Lucifer ── No te vayas a caer o a lastimarte, mi amor.
── Si papi ── Responde Minerva.
── Muy bien, ahora en que estábamos.
Tras ello se ve a Lucifer leyendo un libro llamado "Como liderar con una hija malvada", mientras que Minerva se iba a jugar más allá del jardín real junto con sus guardaespaldas, Fazzle y Sazzle, las dos creaciones de Lucifer, y con Kee Kee, la mascota de la familia real.
── Muy bien ── Murmuro ── Apple Pie.
── Si señor.
Apple Pie apareció dandole un pequeño susto a su superior.
── Apple Pie, te había dicho de que no aparecieras así ── Dijo Lucifer ── Casi me da un ataque.
── Mis disculpas ── Se disculpo ── Que necesita, su alteza.
── ¿Sabes como están ellos? ── Pregunto nervioso ── Ya sabes... los que cuidan a Marceline.
── Podría decirse que más o menos, señor ── Respondió Apple Pie ── Y debo decir que algunos de ellos ya están en estado de shock y algunos terminaron en el hospital
── Rayos ── Maldijo en bajo ── Ya intente todo para que nadie caiga bajos los efectos del poder de mi Marcie, pero nada funciona.
── Se que lo intenta, señor.
── Y ahora que me doy cuenta ── Hizo una pequeña pausa ── ¿De donde Marceline saco ese lado sádico? ── Se pregunto asimismo ── Ni mi madre ni mis hermanos son malvados, bueno tal vez mis hermanos algo estrictos como arcángeles, y mi madre es un gran ejemplo de una deidad benevolente, no como la Deidad Suprema.
Lucifer pensó un poco ya que no tenía ni idea de cómo su hija había sacado un lado tan maligno y perverso, probablemente su hija era por así decirlo la "oveja negra" de la familia, ya que era la única que disfrutaba de hacer maldades, era por así decirlo un demonio ejemplar para el propio infierno.
Incluso algunos de los consejeros de Lucifer, le decían que Marceline era la más apropiada para ser la heredera al trono, aunque Lucifer no estaba seguro de ello ya que había elegido a Charlie como su heredera, y cuando le preguntaron a Marceline sobre ello, ella respondió que no estaba muy interesada en ser reina.
── Apple Pie, ¿anotaste cada uno de los efectos secundarios del poder de Marceline? ── Pregunto mirando a su mano derecha.
── Por supuesto que sí ── Respondió mostrando una libreta con toda la información ── Aquí están todos los detalles de todos los efectos del poder de su hija, majestad.
Lucifer suspira antes de empezar a leer la información.
—Amor: Cualquiera que posea odio en la presencia de Marceline será incapaz de infligir daño hacia cualquier otro.
—Verdad: Cualquiera que mienta en la presencia de Marceline se convertirá en piedra o por así decirlo en estatuas.
—Fe: Cualquiera que demuestra falta de fe en presencia de Marceline tendrá sus ojos prendidos en fuego, pero eso también ya que a los pecadores que murieron quemados será un daño casi severo.
—Piedad: Cualquiera que le de la espalda a Marceline, los afectados son sometidos a un estado completo de sumisión y obediencia, obligándolos a servirle tanto a ella cómo a su familia, lo que es que básicamente los volvería sus esclavos.
—Desinterés: Cualquiera que muestre deseo hacia cualquier otro en presencia de Marceline, la persona perderá su memoria, emociones, y sentido de sí mismo, el efecto puede ser temporal para los pecadores que les pueden durar como en unos 10 años y nativos una semana.
—Pacifismo: Cualquiera que cometa asesinato en frente a Marceline, serán condenados a sufrir y repetir las mismas heridas y el sufrimiento que tuvieron antes de morir, eso es en caso de los pecadores, mientras que los nacidos morirán de formas misteriosas
—Reposo: Cualquiera que combata durante 24 horas los 7 días de la semana, tendrá sellado su propio poder y será incapaz de usarlo, sin importarle a Marceline quien sea esa persona y solo ella puede revertirlo.
—Paciencia: Cualquiera que sienta que se muestre impaciente en su presencia, la víctima tendrá muy mala suerte, y podría morir por tanta mala suerte, sin importar si la víctima tiene amuletos de buena suerte.
—Reticencia: Cualquiera que exprese sus más ocultos secretos y deseos en su presencia, tendrá sellado su poder total, haciéndolos completamente indefensos y débiles, que serán más difícil de defender y además de que no serán capaz de usar magia.
—Pureza: Cualquiera que tenga pensamientos impuros en su mente o muestre deseos impuros cerca de Marceline, morirá debido a ciertas enfermedades, a los nativos del infierno no les afectará aunque muestras leves síntomas y de los pecadores solo sentirán los síntomas de las enfermedades, pero son bastante dolorosos e insoportables que nadie no sería capaz de soportarlo.
—Justicia: cualquiera que cometa un crimen o pecado en presencia de Marceline, los afectados son obligados a sentir dolores inmensos y quemaduras, más si cometen asesinatos los dolores son más intensos.
Todo esto dejo a Lucifer en shock al ver todos efectos secundarios del poder de su hija, que si no los controla casi todo el infierno estaría en un caos que ni siquiera el o el Cielo puedan hacer, ya que Lucifer no quería que los Ancianos del Cielo le hicieran algo a su hija.
── Esto esta más difícil de lo que pensé ── Murmuro preocupado ── Muy bien Apple Pie.
── Si señor, ¿Que necesita?
── Necesitare todos los libros que tengan que ver con los diferentes efectos del poder de mi hija, y además creo que ya necesitare el segundo tomo de como liderar con una hija malvada, y creo que también unas manzanas acarameladas.
── Como usted ordene, señor.
── Bien ── Suspira ── Ahora a leer un poco ── Murmuro tratando de leer un poco.
Para Lucifer era un poco difícil en leer algunos libros, por que el sufría a veces de dislexia y como todo personificación del orgullo se negaba a creer que la tenía. También Apple Pie, su mano derecha notaba que también Lucifer era por así decirlo un autista ya que Lucifer era un poco torpe a la hora de interactuar solo, pero no cuando estaba con Lilith.
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Mientras tanto Lilith se encontraba tomando el te con su cuñada, Aradia, y su amiga Bethesda von Eldritch, quienes ahora estaban hablando de asuntos familiares y personales.
── Así que ahora tienes otra hija ── Comento Bethesda empezando la conversación.
── Si ── Afirmo Lilith ── Una hermosa hija, su nombre es Minerva Morningstar.
── De seguro que es una niña encantadora.
── Realmente lo es ── Respondió Aradia tomando un sorbo de su te.
── ¿Entonces será tu ultima hija o van a tener más? ── Pregunto Bethesda con curiosidad.
── Creo que sera la ultima ── Responde Lilith antes de tomarle un sorbo a su te.
── ¿De verdad? ── Cuestiono Bethesda.
── Si ── Afirmo.
── Ya veo ── Dijo Bethesda ── Eso me recuerda que hace unos meses tuve otro hijo.
── ¿Otro hijo? ── Cuestionó Aradia ── ¿Tuviste otro hijo? ── Preguntó ahora mirando a Bethesda.
── Si, de hecho tuve dos hermosas hijas ── Responde Bethesda sonriendo ── De hecho sería una buena idea que mis dos hijas conozcan a Marceline y Minerva, no crees que sería una buena idea.
── Tal vez si.
── ¿Y como se llaman?
── Se llaman Heather y Hellen von Eldritch ── Responde Bethesda con una sonrisa ── Tu que piensas Lilith.
── Me parece bien ── Comento Lilith ── Así Marceline y Minerva podrían tener amigos.
── Que tal en navidad ── Sugirió.
── Por supuesto, tu que opinas Lilith.
── Bien ── Afirmo sonriendo.
── Que maravilla ── Tarareo ── Por cierto enviaras a tus hijas a la escuela como con Charlie y Fenix
── Probablemente si ── Respondió Lilith ── Quizás haga que el rey Salomon le de clases especiales a Minerva y Marceline para puedan desarrollar más sus habilidades y poderes, y que además mi cuñada pueda ayudarles con ello.
── Sabes que puedes confiar en mi, Lil ── Dijo Aradia con orgullo ── Además me intriga mucho el poder de mi sobrina.
── Sigues intrigada por el poder de Mandamiento de tu sobrina ── Comento Bethesda intrigada ── Pensé que ya lo habías resuelto
── Aunque no lo creas todavía queda mucho por descubrir por aquí ── Responde Aradia con una sonrisa orgullosa ── El infierno y los poderes demonios son un gran enigma para mi investigación.
── Ya veo ── Murmuro.
── Mi cuñada lo descubrirá ya que ella es una de las brujas más grandes y poderosas de todo el infierno ── Comento Lilith con orgullo de tener una cuñada así ── Ve a su cuñada ── Verdad Aradia.
── Por supuesto que sí ── Afirmo con una sonrisa.
── Hay rumores de que hay algunos pecadores que también saben usar magia ── Comento Bethesda.
── Ustedes que piensan de ello.
── La verdad a mi no me importa ── Responde Aradia con tranquilidad ── Yo fui el primer ser que les enseñó el arte de la magia, además de que ningún otro seria capaz de superarme.
── ¿Ni siquiera uno de los Ars Goetias?
── Ellos son mis aprendices o en caso de ya graduarse son como compañeros ── Responde con una sonrisa ── Especialmente los jovenes, ellos también tienen mucho que aprender.
── Ya veo ── Murmuro Bethesda interesada ── Realmente eres una persona agradable, Aradia.
── Gracias por el cumplimiento.
── Vez ── Dijo Lilith ── Mi cuñada es una persona muy especial y trabajadora.
── Bueno suficiente de halagos ── Comento sonriendo ── Ahora que tal si tomamos una taza de té y un poco de macarrones.
── Bien.
── Me parece bien.
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Por el otro lado, el Príncipe del Infierno se encontraba cuidando de sus dos hermanas Charlie y Marceline, quien la primera había entrado en una fase "emo", ya que vestía de negro y digamos que no era la misma de siempre, y la segunda quien tenía una personalidad más malvada y vil.
── En serio ── Murmuro ── ¿De donde nuestra hermana sacó ese lado tan sádico? ── Se cuestionó el príncipe.
── Yo que se ── Responde Charlie con desdén.
── Matar, Matar, Matar ── Exclamo Marceline mientras trataba de apuñalar a un pobre muñeco.
── No Marceline ── Negó el príncipe ── Gracias por la ayuda hermana ── Dijo con sarcasmo mirando a su hermana mayor.
── Como sea ── Hablo con desdén antes de mirar su teléfono.
── Carajo ── Murmuro el príncipe.
Desde que Charlie entro en esa fase emo, el príncipe Fenix a tenido que encargarse de que sus dos hermanas no fueran a ser problemáticas, después de todo ahora Charlie era rebelde y por así decirlo una melancólica y ya no era una persona dulce y alegre como antes desde que entro en esa cosa llamada la pubertad.
Mientras que Marceline con cada paso del tiempo, ella se volvió cada vez más malvada y por así decirlo más agresiva, ya que en una de esas la princesa mordió a uno de los tantos sirvientes que cuidaba de ella, pero solo por que era un pecador.
Si por que Marceline parecía haber desarrollado un tipo de agresividad contra los pecadores, las almas condenadas de los que alguna vez habían sido humanos, también se mostro de que esta Marceline era inteligente a pesar de su edad, por que en una de esas hizo una trampa que mato a un pecador.
── Razzle, Dazzle.
Los dos cabritos aparecen tras ser llamados por el príncipe del infierno.
── Podrían ayudarme a quitarle el cuchillo a Marceline ── Ordeno Fenix mientras sujetaba a su hermana menor ── Y de paso guarden todas las cosas que Marceline pueda usar como arma.
Los dos cabritos asintiendo, Razzle se acerco a Marceline para quitarle el cuchillo, mientras que Dazzle se encargaba de guardar y esconder las cosas que podrían ser un arma o en considerarse como armas.
── Muy bien ── Murmuro satisfecho ── Creo que son todas las armas o cosas que podrían considerarse una ── Ve a los dos ── Los escondieron bien ── Les pregunto.
Razzle y Dazzle asienten ante la pregunta del príncipe.
── Bien ── Comento.
── Eso evita que Marceline se lastime accidentalmente
── Ve ambos lados
── Hay no... a donde fueron mis hermanas.
Razzle apunto a la izquierda, donde Charlie estaba ahí recargada en un sofa escuchando música deprimente que esto hizo que Fenix hiciera una pequeña mueca, realmente extrañaba la antigua actitud de su hermana.
── Como extraño la antigua actitud de Charlie ── Murmuro incomodo ── Tu que opinas Razzle.
El nombrado asintió con una sonrisa.
── Ya veo ── Murmuro ── Dazzle donde está mi hermana Marceline.
Fue entonces que Dazzle apunto a la derecha donde vieron a Marceline sujetando su muñeco vudo antes de prenderle fuego, y sonreír de forma más que malvada.
── Maldad ── Murmuro Marceline.
── Que gótico ── Dijo Charlie fascinada que tomo una foto.
── Suspiro cansado ── Esto va a ser más difícil de lo que pensaba ── Se dijo asimismo y con pesadez ── Al menos Minerva no es malvada, pero solamente espero que no entre en esa misma etapa que Charlie.
── Hermano ── Charlie llamo su atención ── Creo que Marceline se esta subiendo y ahora en el candelabro ── Comento con desinterés.
── Espera qu- ── Ve arribe y ahora ve a su hermana ahí.
── Soy la reina del mundo ── Exclamo.
── Carajo ── Maldijo ── Marceline, bájate de ahí o vas a salir herida.
── Nadie hiere a Marceline, yo soy invisible ── Exclamo.
── Se dice invencible y no lo eres, solo eres una niña ── Grito Fenix a su hermana menor ── Ya baja de ahí o te vas a lastimar.
── Que dices como se puede lastimar a un demonio ── Grito antes de saltar ── Jajaja
Y tras esa acción, Fenix, Charlie y los cabritos Razzle y Dazzle se lanzaron rápidamente para atrapar a Marceline para evitar que se lastimara.
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Mientras tanto con Minerva, la joven princesa se encontraba jugando en el jardín al lado de sus dos guardaespaldas Fazzle y Sazzle, hasta que en el momento vio una pequeño hoyo en una de las rejas del jardín, sonriendo se agachó y salió por ahí para el horror de los cabritos.
── Faz, Saz ── Llamo a sus cabritos ── Vengan a jugar conmigo aquí.
Los dos cabritos se miraron con una expresión de preocupación, su princesa había salido de los aposentos del jardín, recordando que Lucifer les había dicho que no debían dejar que Minerva saliera muy fuera del palacio y jardín real, pues sabían perfectamente acerca de que el infierno no era un lugar seguro para una niña como Minerva.
── No quieren venir ── Comento triste ── Vamos, de seguro que no hay nada malo afuera del palacio.
Sin más opinión, los dos cabritos salieron por el mismo lugar donde Minerva salió, aunque ellos dos estaban muy indecisos aun, pero tenían que estar muy cerca de su princesa para evitar que se lastimara o que alguien tratase de hacer daño, pues su función era servirle y proteger de todo peligro.
── Bien, ahora vamos a explorar ── Sonreí muy emocionada ── Tener aventuras.
Tras ello los tres caminaron para ir a un lugar poco alejado del palacio, donde Minerva pudo ver cosas interesantes por así decirlo hasta llegar a un parque donde había muchas plantas y flores hermosas, pero un movimiento la hizo ver de que era solo para encontrarse con otro niño o más bien una niña.
Esta niña tenia tez parecida como las de un humano, tenía cabello largo y de color negro, ojos brillantes de color amarillo, sin embargo, también la niña tenia una pobre vestimenta ya que toda su ropa estaba desgastada y sucia, pero sin más Minerva decidió presentarse.
── Hola ── Saludo alegremente ── Me llamo Minerva Morningstar, Princesa del Infierno.
La niña indecisa ante ello, no pensaba responder ante la presentación de Minerva, pero como la demonio había sido algo amable decidió responder.
── M-Mi nombre es Ellie ── Se presento con dificultad.
── Mucho gusto Ellie ── Sonrió alegremente.
Ellie sólo sintió que tal vez podía confiar en esta niña, pero dudada ya que la mayoría de los demonios u otros la habían hecho dañado o humillado, pero si quería tener algo de comida o tener algún amigo, entonces ya no tenía opción.
── Minerva ── Grito Lucifer desde lejos.
Desde que Lucifer se dio cuenta que su hija no estaba y que no estaba en alguna parte del jardín, el Rey del Infierno solo pudo pensar que su hija salió de los aposentos del palacio para horror de el, ya que el infierno no era un lugar seguro para una niña especialmente si esa niña era una ser inocente.
Por lo que Lucifer se fue volando llevando una manta en brazos en caso de que encontrara a su hija lastima, para alivio de él encontró a su hija en un parque cercano al palacio, por lo cual lo primero que hizo fue abrazar a su hija, y luego se arrodilló para verla.
── Mindy, mi dulce de manzana ── Lucifer le miro con preocupación ── Estas bien, no te lastimaste o nada.
── Estoy bien, papá ── Responde la menor.
── Mi cielo no deberías estar aquí fuera de los aposentos del palacio, el infierno no es un lugar seguro ── Dijo Lucifer preocupado ── Pero me alegra de que no te pasara nada, y ahora ya vamos a casa, si.
── Espera papi.
── Eh ── Pronuncio confundido ── Que pasa mi amor.
── Puedo llevarme a mi nueva amiga a casa.
── ¿De cual amiga hablas?, mi amor ── Pregunto Lucifer.
Minerva miro a unos arbustos
── Fazzle, Sazzle pueden sacar a mi amiga.
Tras ello los dos cabritos salieron de los arbustos con Ellie, la niña se asustó un poco al ver a Lucifer, ya que pensó que él podría hacerle daño, sin embargo, Lucifer se sorprendió al ver a Ellie, ya que le recordaba al idiota de Adam y Eva, los primeros humanos de la humanidad, sin embargo, dejo de pensar en ello para presentarse.
── Hola pequeña, tranquila no te voy a hacer daño ── Alzo los brazos en señal de paz ── Mi nombre es Lucifer Morningstar, y tu como te llamas pequeña.
── Soy Ellie.
── Muy bien Ellie ── Dijo nervioso ── Que haces aquí tu sola, no deberías estar con tus padres.
── Creó que ellos me abandonan ── Murmuro Ellie.
── ¿Sabes cuales eran sus nombres?
Ellie asiente con timidez
── Mis padres son Adam y Eva, los primeros humanos de la humanidad ── Respondió Ellie con timidez.
Al escuchar eso, Lucifer queda en shock.
── Y por que estas aquí.
── Fui abandonada aquí en el infierno, por que mi padre y el cielo desprecian mis poderes ── Comento Ellie.
── ¿Tus poderes?
── Si ── Afirmo la menor.
── Podrías enseñármelos, por favor.
Sin más que decir, Ellie toma una posición y luego cierra los ojos, mientras unos pétalos rosados similares a los de pétalos de cerezo.
── Veinte fleur; Caléndula ── Exclamo Ellie antes de usar su poder.
Tras ello, Ellie hace brotar veinte brazos repartiendo diez en sus dos brazos para extenderlos regularmente y formando un tipo de escudo.
── Increíble ── Murmuro Minerva al ver eso.
Lucifer se quedo en shock, el ya había oído de ese poder antes uno que podría hacer "florecer" varias partes del cuerpo de la persona que tenga el poder, algo escalofriante y a su vez bastante fascinante, y de ahí Lucifer pudo entender del por que Adam y el cielo desterraron a Ellie.
Por que ellos temían y repudiaban su poder, algo que lo hizo recordar a el en el pasado, ya que el al haber creado el mal y el infierno así, lo hizo ser el ser más odiado de toda la creación, y el más que nada sabía lo que sentía eso.
Sin más con la cobija envolvió a Ellie, y luego la cargo junto con su hija, Minerva Morningstar, quien solo sonríe.
── Muy bien ── Exclamo sonriendo ── Nos vamos a casa ── Ve a Ellie ── Y tu, no te preocupes que ya estás a salvo.
Y tras decir eso, Lucifer voló devuelta al palacio junto con su hija y con una invitada sorpresa, ya que el no planeaba dejarla ahí sola.
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