Día 07: Primera conversación y referencias a IT.

La fiesta es aburrida.

Eric se pasea alrededor de los niños más pequeños disfrazados de superhéroes o princesas, tratando en vano de entablar conversación con alguno de ellos para poder saber dónde está el baño, ellos están aglomerados en pequeños grupos y parecen estar pasándola muy bien. Los que parecen ser de su edad solo le dan un encogimiento de hombros o lo ignoran por ver cualquier cosa más interesante que él.

Cartman refunfuña, harto de esperar a que su madre venga con lo que sea que compró para el cumpleañero, es que es tan ridículo, ¡él ni siquiera lo conoce! Solo sabe que se llama Stan, que le lleva dos años y que estudia en la academia de fútbol ubicada a dos cuadras de su escuela primaria.

Ah, y que le encanta organizar fiestas de disfraces para absolutamente todo.

A Eric le da pereza hacer la mayoría de cosas que su madre le ordena ahora que tiene diez años, y demostró su increíble evolución de enano gordito gruñón a niño medianamente alto que sigue siendo gordito y gruñón, desde las simples como ordenar su cuarto hasta la de haber elegido que personaje quería representar en la celebración.

Benjamín "Ben" Hanscom fue su elección final. Harto de que su madre lo siguiera molestando con la idea de que participara para hacer algunos amigos gritó lo primero que se le vino a la mente. Cuando su temperamento se calmó esa noche se dio cuenta que, de hecho, su elección no fue tan mala, aparte de que el vestuario fue fácil de conseguir, ¿qué mejor disfraz que el del mejor miembro del club de los perdedores?

Nunca fue su intención llamar la atención en la fiesta, pero la mirada que le dirigió Stan nada más verlo llegar casi lo hizo querer iniciar una pelea.

"¿Entonces decidiste disfrazarte de un niño gordo?" Le preguntó con un toque burlón antes de irse a hablar con sus otros amigos.

A veces Eric se pregunta si su madre está ciega o solo le gusta ignorar el porqué a su querido "calabacín" le disgusta tanto la idea de reunirse con sus vecinos.

Las risas de los invitados se escuchan a lo lejos, sus vítores y gritos acompañando ahora que decidieron iniciar un partido de fútbol, Stan destacando entre el resto, haciendo bailar a los otros jugadores y presumiendo para una muchacha con cabellos negros como el carbón y una boina rosada en la cabeza.

Cartman suspira desde lejos, sentado con la espalda apoyada en el único árbol del patio, observando a su madre aplaudir y divertirse luego de no haberlo podido convencer de participar. La sombra ubicada en esta zona es reconfortante, como si tratase de abrazarlo ahora que el sentimiento de soledad prevalece, sus mejillas se hinchan en un vano intento por aguantar las lágrimas, a la vez que oculta su redondo rostro entre sus rodillas, puede notar lo patético que se ve, a pesar de estar disfrazado del único personaje con el que se puede identificar tan bien. Ha sido un gran tonto.

-¿Disculpa? ¿Sabes dónde está Stan?

Al principio cree que quien le ha hablado es un producto de su imaginación, en un intento pobre por ayudarlo con su tristeza, mas cuando siente un toque suave en su hombro que trata de llamar su atención, levanta levemente la cabeza desde su escondite improvisado.

Un par de ojos jade lo saludan, acompañados del cabello con el color más bonito que ha visto en el tiempo que lleva viviendo en South Park, un tono rojizo que parece brillar con los rayos del sol que caen, que también ayudan a destacar las múltiples pecas que le bañan las mejillas, luciendo como estrellitas pintando el cielo en la noche.

-¿Me...Me estás hablando a mí?- pregunta, pasando saliva para así tratar de botar el nudo molesto en su garganta.

La muchacha le dirige una sonrisa antes de arrodillarse frente a él, de repente curiosa, pareciendo notar algo increíble en su persona.

-¿Te vestiste como Ben?- pregunta con emoción -¡No creí que alguien se vestiría como un miembro del club!

Los ojos de la chica brillan con alegría desbordante, con las manos juntas y una sonrisa ancha, se queda quieta, dejando que Eric la analice y este queda asombrado al notar la pequeña coleta baja que tiene, que combina con su vestido colorido manchado de flores, y la mochila vieja en su espalda.

-Beverly...- susurra, carraspeando para poder hablar más claro -¡Te vestiste como Beverly!

-¡Sí!- grita ella, aplaudiendo -La mamá de Stan creyó que vine con ropa casual y yo estaba como: "Señora Marsh, ¡pero sí me disfracé!"

Ambos ríen, centrándose en el ambiente tan cómodo que ha comenzado a invadirlos.

-¿Cómo te llamas?- cuestiona la pelirroja, jugando con uno de los mechones sueltos de su peinado -Hablo de tu nombre real, ya sabes- continúa con algo de vergüenza.

Eric siente que las mejillas le duelen de tanto sonreír. No creyó poder sentirse así tan rápido y mucho menos en una fiesta.

-Me llamo Eric Cartman.

-Un gusto, Eric- responde ella y el castaño nota como unos hoyuelos se marcan en sus mejillas al sonreírle mientras estira su mano derecha hacia él -, mi nombre es Kylie Broflovski.

Y sus manos se estrechan.

Venga, me dije, voy a hacer algo super "meh" para el día siete pero esta idea de la nada me golpeó, está cortita, sí, pero me gusta mucho cómo quedó.

Ahora sí, ¡quiero agradecer a todos los que leyeron esta week! Estoy tan feliz de haber podido por fin acabar una de las obras que publico a tiempo para variar, ha sido un experimento muy divertido para practicar el como escribo a estos tontuelos que me estremecen el corazón, ¡muchas gracias de nuevo por tomarse el tiempo de votar y comentar! Lo aprecio muchísimo, ¡nos vemos en una próxima historia! 😳✌💞💞.