❣◖𝗘𝗶𝗴𝗵𝘁◗
—Yunho— El más alto abrazo a la mayor— Y de ti no me han contado todavía— Jongho se avergonzó.
—Soy Jongho— La mayor le sonrió.
—Y yo Hyemin, es un placer conocerte y saber que le diste una oportunidad a este niño— El menor miro a Yunho y este simplemente se encogió de hombros sin que su abuela lo notará— ¿Por qué no me contaste de él?
—Es algo reciente, fue inesperado en realidad, un día trabajaba y al otro ya era mi novio— La mayor sólo lo tomo con gracia, aunque esa era la verdad.
—¿Lo conociste en el trabajo?— Ambos asintieron— Eso es bueno, me alegra que alguien si te acepte aun con tu trabajo— Yunho le sonrió— Y es muy lindo.
—G-gracias— Murmuró.
—¿Quieren comer?— Jongho quiso negar, por un motivo específico, pero eso sería una grosería así que sólo asintió.
Yunho claro que notó que pasaba algo con el castaño pero no hizo preguntas.
Comieron entre conversaciones que la mayor comenzaba, Jongho no lo negaba se sentía algo tranquilo con su presencia pero aún así su cabeza se llenaba de pensamientos negativo él había comido mucho antes de estar ahí, y sintió más culpa.
—¿Te sientes bien?— Preguntó Hyemin notando su extraño comportamiento.
—Y-yo... Si, si estoy bien, lo lamento— Le sonrió para que no se preocupará.
Quería llorar, quería no tener que terminar de comer pero aún así lo hizo comió todo y la culpa incremento, trato de mantenerlo bajo control, de verdad trato pero termino cediendo a la culpa y remordimiento de haber comido demasiado.
Pregunto por un baño y Hyemin amablemente le respondió que podía ir al que estaba arriba, camino normal porque de por sí su comportamiento ya era extraño, llegó al baño y se encerró ahí. Recordó lo que San dijo y como él lo había prometido, una vez más había roto su promesa, de nuevo estaba cayendo, otra vez su vida estaba siendo la misma como en su adolescencia.
—¿En verdad estás bien?– Preguntó Yunho cuando finalmente regreso, Jongho asintió lentamente.
—Estoy bien— El mayor no le creyó porque para empezar tenía los ojos llorosos y parecía como si hubiera llorado.
—No lo creo, te desapareciste más de media hora— Jongho lo miró con los ojos demasiado abieros— Si no te sentías bien para estar aquí, me hubieras dicho no pasaba nada, hay muchas excusas que pude darle a mi abuela— El castaño bajo su cabeza.
—Lo lamento— Murmuró— Enserio lo lamento, no debí hacerlo— El mayor lo miro atentamente, algo le decía que esas palabras no eran sólo para él.
—Le diré que debemos irnos— Jongho asintió.
No podía caer de nuevo y menos de esa forma, no quería preocupar de nuevo a sus amigos o a su familia, ellos lo querían tal y como era así que tenía que esforzarse por ellos y lo superaría de nuevo.
—Todo pasará— Musitó abrazándose a sí mismo.
—¿En verdad deben irse?— Jongho pensaba responder que quizás podrían quedarse un rato más, él podría soportarlo, pero Yunho respondió antes.
—Me temo que no, Jongho debe descansar un poco— La mayor lo miro comprensiva y le regaló una sonrisa.
—Bien, si no se siente bien entonces lo mejor es que descanse y no se sobreesfuerce— Se acercó para tomar las manos del menor— Me agradaste, eres justo el tipo de Yunho— El pelinegro más alto negó, no porque su abuela estuviera mitiendo no lo hacía, sino que esa era la única vez que lo vería— Su trabajo no define quien es, estoy segura de que tú lo sabrás muy bien, y si necesitas algo sin problemas puedes venir— Le sonrió y Jongho le devolvió la sonrisa.
—Lo tomaré en cuenta— Se apartó de la mayor para acercarse a Yunho e irse, solo que el mayor se despidió antes.
—Dale todo tú apoyo, creo que también lo notas ¿No?— Yunho asintió.
—Bien, debemos irnos, prometo venir otro día— Se despidió de su abuela y salió junto a Jongho.
El camino fue silencioso, ninguno mencionó nada, Jongho prefería estar en silencio tratando de evitar pensar lo que pasó y Yunho no hizo preguntas después de todo seguían siendo desconocidos, pero aún así le generaba curiosidad saber que le ocurriría, quizás sin querer podría ayudar.
—¿Está todo en orden?— El menor miro al pelinegro.
—Supongo— Murmuró— Tú abuela es muy linda.
—Lo es, se preocupó por ti cuando tardaste ¿Todo está bien?
No por supuesto que nada estaba bien, su autoestima estaba por los suelos, estaba herido porque de nuevo lo habían engañado, aunque él lo llevo a eso, sentía que estaba cayendo en problemas que ya había pasado. Y eso le daban unas inmensas ganas de llorar porque no quería hacer eso.
—No— Murmuró— No estoy bien.
—¿Es por lo tu reciente ruptura? He pasado por varias te puedo ayudar en algo— El castaño negó y también asintió— Cuéntame soy experto en escuchar— Jongho suspiró ya le había contado sus propios estando ebrio ¿Que más daba contarle estando conciente?
—Mi mejor amigo, bueno el que era mi mejor amigo fue a decir que lo que pasó fue un error ¿Por qué tiene que ser un error cuando yo ya lo sé? Digo antes no lo fue— El mayor asintió lentamente— Y ayer Bomin estuvo ahí también diciendo que me amaba, pero antes había dicho que ya no.
—Debieron darse cuenta de todo lo que perdieron y tratan de recuperar lo perdido— Jongho negó— ¿Bomin es el osito?
—Era— Corrigió— Nunca he tenido la mejor autoestima, y lo admito a veces si odio no estar conforme conmigo mismo— El mayor no supo a dónde iba con eso pero sólo lo escucho con atención— Creo que sí tenía razones para cansarse de mi ¿Quien quiere estar con alguien que se la pasa siendo inseguro? Sin importar cuantas platicas, cuánto apoyo jamás cambio, yo lo ocasione.
—¿Qué? No, claro que no— Jongho asintió repitiendo que era su culpa— Tú no tienes la culpa de que ellos te engañarán, no fuiste quien los llevó a eso, el problema es de ellos... ¿Siempre ha sido así?— El castaño lo miro ligeramente confundido— Inseguro.
—Sí, supongo... Nunca he sido el más lindo, el mas delgado, no soy quien llama la atención a dónde va, esos son mis amigos, yo sólo los preocupó, los decepciono— Murmuró recordando que rompió su promesa en tan sólo una hora y media— Todos con los que he salido o me han interesado prefieren a alguien delgado, pero Bomin estuvo bien conmigo él fue mi primera relación formal y estable, pero lo arruiné con mis inseguridades, por eso se fue con él porque con él jamás escucharía una queja de su físico o peso, Daehwi es perfecto, su autoestima está en los cielos, es todo lo contrario a mí— Yunho lo miro un momento pues seguía conduciendo, sin duda el menor no la estaba pasando nada bien, de por sí ya tenía inseguridades que lo hayan engañado empeoraba todo— Pero siendo sincero lo entiendo, yo también me cambiaría por alguien mejor.
—Hay más cosas importantes en uno que ser delgado, lindo, alto o yo que sé, otras cosas pueden ser interesantes, sólo Miramar soy alto, delgado, y me considero muy lindo— Jongho no evito reír con lo último— Pero por mi trabajo no he tenido una relación estable en años, y estoy seguro de que a ti te iría mucho mejor que a mí, entiendo esa parte pero ¿Por qué te tardaste más de media hora en el baño?— El menor mordió el interior de su mejilla y negó.
—Por nada, ¿Escuchas muchas historias en tu trabajo?— Cambio de tema para no responder, pero eso sólo levantó sospechas en el mayor.
—Si, no todos piden privados sólo para verme más de cerca quitándome la ropa, algunos sólo quieren desahogarse— Pero aún así le respondió, tal vez no estaba listo para hablar de eso y él lo respetaría.
Jongho evadió el tema en todo el camino hasta que llegó a su casa, Yunho le agradeció por haberlo acompañado aunque no se sentía bien.
—Si necesitas hablar tienes tres formas de encontrarme— Le guiñó al menor— En mi trabajo, en mi departamento o llámame.
—Yo no vuelvo a ese lugar, y si necesitó hablar tengo a tres amigos mas— Yunho sonrió divertido.
—Nunca se sabe, pero bueno, adiós— Jongho salió del auto para entrar a su casa donde se suponía no debía haber nadie.
—Quiero saber cómo te fue— Salto en su lugar al escuchar a San.
—¿Que haces aquí?
—De todas formas iba a estar solo, Joong tenía una cita con Mingi, Sang trabaja y hoy tengo mi día libre, así que me quede aquí para saber cómo te fue— Sonrió y se regresó al sofá dónde se encontraba viendo televisión.
—Todo normal, su abuela es muy linda, cocina rico— Sonrio nervioso cuando San lo miro fijamente.
—¿Y todo estuvo bien, cierto?— El menor asintió— Siendo sincero pensé que te tardarias más.
—Tenias razón, no puedo fingir estar bien, Yunho lo notó y su abuela igual— Claro que se dió cuenta de que evitó hablar de lo que pasó cuando después de comer.
Se sentía culpable pero era incapaz de decirle y preocuparlo, estaba convencido de que sólo fue una pequeña recaída y que no pasaría más, lo superó una vez y podría volver a superarlo.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro