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𝟐𝟓
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❝Personal problems
(Tyler's version)❞
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narrated by|
TYLER DAVIS
⇢▬▬▬▬▬▬▬▬▬ ✆ : 𝕿𝐎𝐃𝐎 𝐄𝐒𝐓𝐀 bien, siempre lo está.
¿Quién no quisiera tener lo que yo?.
Tengo 19 años y ya tengo un auto, estudio en una increíble universidad con mis amigos, soy el capitán del equipo de fútbol americano, mi hermana forma parte de la sociedad de alumnos, mi papá es un increíble y famoso detective de la policía y mi mamá es una increíble enfermera. Porque la chica que te gusta es la indicada por fin y te hace sentir bien.
¿Qué más podría pedir?.
Porque la gente está acostumbrada a ver una familia perfecta y junta sabe que la gente es feliz, no sufre, no llora.
Porque no existe la depresión en una vida así de sana.
Porque ¿Quién sufriría si es así de feliz?.
Porque nadie abre la puerta y sabe LIV podría irse en cualquier momento y si eso pasa me iría con ella. Porque nadie sabe que mi mamá trabaja dos turnos para pagar sus medicamentos. Porque nadie sabe que mi papá corre peligro día a día para salvar la vida de alguien más aunque no nos vea siempre. Porque el hermano mayor es el fuerte, feliz y animador. Porque la chica que te gusta tiene problemas que no te cuenta pero no la culpas, hago lo mismo entonces me alejo.
Los días cuando el día se nubla y te alejas lo notan pocas personas porque pasa rápido pero cuando el plazo de la tristeza se extiende todos se preocupan y dicen cosas como: "¿Estas bien?, todo estará bien, no tienes que preocuparte, eres joven, estas sano, hay gente que sufre más que tu y sus problemas son más grandes, exageras".
Y te lo crees.
Lo minimizas.
Entonces te quedas callado.
Porque Liv puede morir y yo estoy sano.
Porque mi mamá tiene que trabajar y yo solo entreno.
Porque mi papá arriesga su vida atrapando a la gente mala y yo solo estoy en mi habitación jugando algún videojuego con mis amigos.
Porque la chica que te gusta se puede ir y tu puedes estar bien solo.
Solo.
¿Lo estoy? No.
¿Me siento solo? Si. Me siento solo pero estoy bien, siempre pasa.
Liv una vez me dijo "Esta bien sentirte solo porque tienes que aprender a estar solo... pero recuerda que si estoy contigo jamás estarás solo".
Supongo que todo cambio porque eso fue hace años cuando el amor no era su interés.
De la escuela al entrenamiento, del entrenamiento al trabajo y del trabajo a la casa. Fin.
—¿Tyler oíste?.- mi viaje por mi mente algo desordenada es interrumpido por la vos de Andrew.
—Ah, ¿qué?.- lo miro y recuerdo que estamos en los vestidores pues el entrenamiento acabó.
—Estas un poco distraído, dije que si ¿querías ir con nosotros a la fiesta la noche?.
—¡Si! Kaily tiene casa sola y dejo la invitación a todos los de segundo y tercer grado.- le siguió Matt con emoción. Cerré mi casillero y los tres salimos.
—No creo, tengo tarea.- dije y medio sonreí.
—Hey, iremos solos.- dijo Andrew en queja.
—¿Qué hay de Miriam?.- fruncí el ceño.
—Peleamos de nuevo, la verdad no me interesa eso. Vamos, será divertido.- respondió Andrew con tranquilidad.
—¡Si! Los tres... solteros.- dijo Matt con un toque de tristeza fingida.
Andrew rio.-Tranquilo chico, no terminamos.- sonrió algo raro, no entendí si era bueno o malo.
—Enserio chicos, no puedo.- seguí caminando.
—Invita a Tara, se que es de primer año pero.- negué.
—No, no iré.- dije un poco más serio.
—Ty, ¿Qué te pasa?.- pregunto Matt y sentí su mirada en mi.
—Nada, estoy bien.- aclaré.
—En el entrenamiento te veías algo desconcertado.- siguió Andrew, apreté los puños sintiéndome presionado.— Tyler eres nuestro amigo, puedes contarnos.
—Dije que estoy bien Andrew.- me detuve y los mire a los dos.- no es de su interés.
Andrew y Matt se miraron entre sí, Matt asintió con la cabeza y se fue pero Andrew se quedo enfrente de mi a mitad de pasillo el cual estaba vacío, solo Andrew y yo.
—Tyler, esto lleva varios días ya... somos amigos y esta bien si no nos cuentas todo pero, tienes que hablar con alguien.- saco una tarjeta de su mochila.— es el número de mi papá, puedes ir... hablar.- trato de explicar.
Reí incrédulo, su papá era psicólogo, lo sabía, hasta Sam la hermana de Tara va con él.
—No estoy loco.- tire la tarjeta al suelo.
—Oye no dije eso.- negó.
—¡Estoy bien Andrew!.- pase a su lado empujando un poco su hombro y seguí caminando.
—¡Tyler!.- Oí pero lo ignore.
Llegue hasta mi auto, Liv ya estaría en casa con Ethan, si, lo sé. Además yo tenia que trabajar.
Escuche mi teléfono sonar y mire mi pantalla.
Quite la notificación y conduje.
La tarde paso, volví a casa cansado, nadie estaba, de nuevo solo.
Me fui a mi habitación y mi teléfono sonó de nuevo.
De nuevo apague la pantalla y me acosté en mi cama tratando de dormir.
Tratando que mi paz mental volviera por un rato, pero en vano. Sobre pensar una y otra vez era algo inevitable, la cabeza dolía mientras apretaba mis ojos tratando de solo dormir.
La puerta de mi habitación sonó.
—¿Quién es?.- pregunté estirando mis brazos sobre la cama.
—Liv.- escuché la voz de mi hermana. Tome un gran suspiro antes de contestar.
—Pasa.- dije sentándome en la cama para disimula estar quitándome los zapatos.
Si cabeza se asomo por la puerta y entro completamente cerrando la tras ella, su cara tenía una preocupación enrome.
—¿Todo bien?.- pregunté tratando de escucharme relajado.
—Si....- hizo una pausa y se sentó junto a mi.
Presté atención y la mire.
—Hablé con Tara.- juntos sus manos mirando el suelo. Suspire y rodé los ojos sabiendo por donde iba la conversación.
—¿Ah si?.- abroche de nuevo las agujetas de mis tenis para irme de ahí lo más rápido posible.
—Ayer dijiste que estarías con ella por eso no saliste conmigo y hoy me dijo que no le contestas y que no se han visto desde hace mucho.- me miró pero me levante.
—Liv, son problemas míos. Ya hablaré con ella.- tome mi sudadera pero ella se levantó y bloqueo la puerta.— quítate.- negó enredando sus brazos.
—También hable con Andrew.- solté la sudadera a la cama bruzo con enojo.
—¿Ah también? Claro seguro te dijo lo de hoy. Eso no es de amigos, ¿no crees?.- me crucé de brazos.
—Tyler, a Andrew y a Matt le importas, a mi me importas y se que algo no está bien.
—¿Qué no estoy bien?.- reí sarcástico.— ¿Qué te hace creer eso?.- ella negó con la cabeza.
—Eres mi hermano Tyler, te conozco mejor que nadie. Mejor que mamá y papá, sé que no estas bien.- negué y me aleje.
—Qué raro que lo hayas notado, estas muy a gusto con tu nuevo novio secreto, ¿no?.- ella levantó las cejas.
—Eso no es justo.
—¿Ah no? Porque, tu puedes sufrir en un parque preocupándome toda la tarde cuando no te vi aquí pero si yo lo hago necesito un psicólogo.- me di la vuelta.
—Andrew solo quería ayudarte.- escuche como se acercó, me gire y la señale.
—Lo defiendes....- solté una risa incrédula.—¿Qué? ¿También es tu novio secreto? ¿Por eso las peleas qué Andrew a tenido con Miriam?.- ella frunció el ceño y abrió la boca un poco.
—Espera... ¿Qué?, no sabía que Andrew y Miriam habían peleado... además, ¿Qué insinúas? ¿Qué le soy infiel a Ethan?.
—No, ¿Cómo podrías? Ni siquiera son algo formal cierto.
—¡Basta!.- levanto las manos deteniendo la conversación.— voy a fingir que no dijiste eso, estábamos hablando sobre ti.
Negué con la cabeza y gire de nuevo mi cabeza.
—Tyler.- se acercó a mi y la mire.— ¿Qué pasa?.
—Dije que estoy bien Liv, demonios me tomo de los hombros.
—No soy una psicóloga, no soy la persona más estable del mundo para darte un consejo, pero soy la persona que más te aman en este mundo, te lo aseguro.- rápidamente sentí mi vista borrosa pues las lágrimas comenzaban a juntarse en mis ojos.— Tyler perdóname.- su voz se quebró, cerré los ojos dejando escapar una lagrima.—porque tal vez te hice sentir solo pero créeme que nunca lo estarás.
Me aleje sin aguantar y me senté en la cama poniendo mis codos sobre mis rodillas escondiendo mi cara con lágrimas.
Sentí como se agachó frente a mi y acarició mis brazos.
—Liv.- dije a penas pude.— tengo miedo.
La escuche sollozar y me abrazó.
—No quiero perder a nadie pero no dejo de arruinarlo.- quite mis manos de mis ojos y vi las lágrimas de ella.
—Nunca me vas a perder a mi.- cerró sus ojos arrepintiéndose de aquello.— o tal vez si pero no es porque quiera, Tyler ¿Cómo podría abandonar a mi mejor amigo? ¡a mi hermano!.- quitó una lagrima de mi mejilla.— te aseguro que no perderás a quien te quiere de verdad.
Se levantó y se sentó junto a mi abrazándome de nuevo mientras yo escondía mi cara en su cuello aún llorando. Eso comenzó a liberar una carga enrome qué tenía, mis brazos dejaron de sentirse tensos, mi espalda dejo ese gran peso que tenia y mi cabeza dolía un poco menos.
—Prometo hacerlo mejor por ti.- dije a penas pude y me separé, una sonrisa sincera y dulce apareció en sus labios.
—Más te vale.- me golpeó el brazo.
Sonreí entre lagrimas y mire el suelo de nuevo.
—Estoy muy cansado.- dije por fin y al decirlo era como despedirse de aquel sentimiento.
—Ven.- se levantó y se acostó de un lado de la cama poniendo una almohada en sus piernas.
Sonreí y me acosté en aquel lugar cerrando los ojos. Sentí como acarició mi cabello, eso me hacia sentir sueño, siempre funcionaba.
Poco a poco me quede dormido mientras ella seguía acariciando mi cabello.
Cuando desperté Liv no estaba en mi cama, supuse que ella había puesto la cobija qué tenía encima mío.
Era noche, mire mi teléfono, a penas las nueve. Salí de mi habitación tallando mis ojos despertando un poco más.
—¿Liv?.- hablé mientras cerraba la puerta atrás de mi y me asomaba por el pasillo.
Escuche voces abajo, baje las escaleras encontrándome con Liv en el teléfono.
—Si esta bien, nos vemos aquí en 30 minutos.- sonrió.— ¡bye!.- colgó y me miró.— justo a tiempo bello durmiente.
Se acercó a la mesa y tomo unas flores rojas y blancas en un ramo decorado.
—Tienes una cita con Tara en 30 minutos.- sonrió inocente y me las entregó.— estas son para ella, usa el mismo traje que llevaste en mi cumpleaños.
—¿Qué? ¿Cita?.- negué.
—Si y más te vale que la beses o serás un tonto más tonto. Se supone ella tiene entendido ira conmigo pero llegaras tu en cambio al restaurante de esta dirección.- sacó su teléfono y me la envió.
—No Liv, no, esto es... demasiado.- traté de detenerla pero ¿Quién puede detener a Olivia Davis?.
—Ella te quiere y se que te perdonará por ignorarla estas semanas.- dejo palmadas en mi brazo.
Asentí entendiendo. Si, lo haré.
—Bien, gracias Liv.- bese su frente y subí corriendo para arreglarme.
Cuando logre ponerme el traje (moría de calor) salí acomodando mi corbata con el ramo aún en una de mis manos.
Baje rápidamente las escaleras directo a la puerta.
—¿No olvidas algo?.- preguntó Liv sentada en el sofá con su teléfono.
—Ah si.- me acerque y dejé un beso en su mejilla.
De nuevo fui a la puerta y la abrí.
—Tyler.- volvió a hablar y la miré.— yo decía la llaves del auto.- rio.
Reí y las tome, salí de nuevo y cerré la puerta. Volví a entrar pero solo asome mi cabeza.
—Hay un poco de comida en el refrigerador y puedes comer helado pero no te lo acabes.- asomo su cabeza desde el sofá.
—Vete o llegaras tarde y no te va a perdonar tonto.- asentí y cerré la puerta.
Ahora si subí a mi auto y maneje con rapidez pero precaución hasta el restaurante.
Me estacione y bajé, me mire por última vez al espejo tratando de arreglar mi cabello y me acerque a la entrada.
Ahí estaba Tara, con su bolsa en sus manos frente a ella buscando con la mirada seguramente a mi hermana. Tenía un vestido rojo de falda suelta hasta las rodillas y sus Converse rojos igual.
Me acerque con nervios, era hermosa.
En cuanto me miró supe que estaba sorprendida pero en cuanto me acerque más su expresión cambio a enojo.
—Esto no fue tu idea.- aseguro mientras apretaba la mandíbula.
—No... no, no podría planear algo así.- rasque mi nuca tomando con fuerza el ramo.
—Si eso esta claro.- se cruzó de brazos.
Note cada vez más su enojo, le acerqué el ramo y ella lo miro.
—Son para ti.- trague saliva pero ella no los tomaba.
—Wow tu... no me contestas y luego vienes a darme flores como si nada.- me mira fijamente. Nuestra diferencia de altura me causa ternura.
—Lo sé fui un tonto, lo sé, solo que no estaba bien pero se que no debí ignorarte. Perdóname Tara.
—No, no debiste.- miró las flores de nuevo.— las tomaré porque son increíbles pero no te perdonó... aún.- arrebató más flores de mis manos y camino adentro de restaurante.
Rápidamente la seguí manteniéndome tras ella.
Ei restaurante era lindo, grande, había demasiada gente. Muchas parejas y algunas familias.
—Bienvenidos, síganme.- hablo una mesera sonriente y la seguimos.
Ambos nos sentamos en una mesa cerca de una ventana, como era noche la mesa tenía de decoración una linterna como faro pequeña que alumbraba bien la mesa.
—Aquí les dejo el menú, en un momento les tomo la orden.- sonrió la mesera y se alejo.
Trague de nuevo saliva y miré a Tara. De cerca era más hermosa aún.
Ella aún parecía molesta.
—Me darás una explicación o solo me miraras toda la noche esperando un milagro.- me miró dejando las flores sobre la mesa.
—No puedo evitar la segunda, te ves muy hermosa.- expliqué. Vi como trato de ocultar una sonrisa pero sus mejillas rojas la delataron.— Si, te daré una explicación.
Me miró atenta. Tome aire y hable.
—Yo... yo no estoy bien.- trate de sonreír.— creo que esta bien decirlo solo que es difícil cuando ves a personas valientes y fuertes superando cada obstáculo, mientras yo fracaso.- ella negó y tomo mi mano.
—Tu no eres un fracaso. Eres el chico más valiente y fuerte que eh conocido.- la mire y sonreí.— perdón si no te di la confianza pare decirme, se que no estabas obligado solo... Tyler no estas solo, me tienes a mi y no me iré a ningún lado.
Entrelace nuestros dedos y acaricie su mano con mi dedo pulgar.
—Eso significa mucho para mi. Te aseguro que confío en ti y jamás me alejare tampoco.
Sonrió.
—¿Por qué es tan difícil estar enojada contigo?.- reímos.
—Porque me amas.- levante una ceja y note como se puso nerviosa y quito su mano de la mía.
—Claro claro.- trató de disimular con sarcasmo.
Sonreí.
Nuestras cena siguió super, ordenamos, comimos, bromeamos, hablamos y fue la mejor cita de mi vida.
Cuando pague la cuenta salimos de ahí y subimos a mi auto, la llevaría a su departamento.
Arranque el auto y el camino era lleno de música, ambos cantamos como si estuviéramos en concierto, hacíamos buen dueto.
Cuando me estacione frente al edificio quite el seguro de la puerta.
—No es necesario que subas conmigo, si lo haces Sam te mata.- fruncí el ceño.
—¿Por qué?.- pregunté.
—Puede que le haya contado que dejaste de hablarme y ahora te odio.- apreté mis labios.
—Esta bien, ya lograré de convencerla qué no soy ese chico y que de verdad me gustas y te quiero.- genial señores, lo dije en voz alta.
Vi sus mejillas enrojecer mientras sus labios se entre abrían.
—¿Te gustó? ¿Me... me quieres?.- trague saliva y asentí.
—Si, me gustas... mucho Tara en serio y esa fue una de las razones por las que me alejé. No iba a abrumarte con mis problemas, no a la chica que me gusta.- una sonrisa grande apareció en sus labios y miro hacia enfrente tratando de disimular así que sonreí igual de nervioso y avergonzado.
—También me gustas.- nos miramos.
No podía con la emoción, era simplemente increíble que lo dijera en voz alta, ¿era un sueño?.
—¿En serio?.- asintió.
Desabroche mi cinturón y tome su cara con delicadeza con mis manos estampando mis labios con los suyos.
Simplemente fue una química especial, lo quería hacer ya hace tiempo y de verdad no me arrepiento de hacerlo ahora.
Cuando me separe miré sus ojos con brillo y sonreí.
—Prefiero pedir perdón a pedir permiso.- rio y me beso de nuevo, esta vez fue algo más largo y suave.
—Entonces pídeme perdón todo el tiempo Tyler.
Seguimos besándonos unos minutos más hasta que tuvo qué irse.
Arranque el auto cuando la vi desaparecer en el edificio y volví a mi casa con una sonrisa que claramente nadie me quitaría en muchos días.
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𝐀𝐔𝐓𝐇𝐎𝐑'𝐒 𝐍𝐎𝐓𝐄
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NUEVO CAAAP :)
Capítulo |25| listo <3
COMENTEN Y VOTEN
por favor!! 💞.
Un capítulo especial para nuestra pareja secundaria <3
Abrazos para Tyler aquí 💗.
Nos vemos prontooo, los tqm!!!
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by Eli_fanfic / Lizzie Arellano
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